Estábamos mi mejor amigo, su novia y yo sentados en el sofá de mi casa cuando de repente él se desmayo y cayó encima de mí. Me puse de lo más nervioso posible. Mi amigo siempre me había gustado, pero como sabía que a él le gustaban las chicas no le había dicho nunca nada. Y ahora aún que fuera por culpa de un desmayo lo tenía encima de mí. De golpe me sentía extrañamente feliz. Puede que sea egoísta pero no sé qué más puedo hacer, aparte de sentir ansiedad y preocupación por mi amigo.
-Cariño, ¿estás bien? -gritó la novia de mi mejor amigo.
De mientras le acaricie ese pelo naranja tan bonito. Me encantaba ese color de pelo, en verdad me gustaba todo de él. Sus hermosos ojos verdes, sus labios rosados y carnosos, su cuerpo delgado y bien formado, aun que pequeñito para su edad, esa mente tan privilegiada que tenia, sus cualidades para el deporte… Lo tenía todo, era perfecto; i obviamente tenía mucho éxito, entre las chicas e incluso entre algunos chicos, yo incluido.
Cuando me dijo que tenía novia y que quería presentármela un poco más y me muero. Pero yo quería estar cerca de él ni que fuera como amigo, así que me prometí aguantar cualquier cosa. Al ser su mejor amigo, tenía el privilegio de saberlo todo de él, intentaría conformarme con esto.
Él volvió en si. Lo primero que vio fue mi cara y unos mechones de mi pelo rosado caerle sobre su cara. Luego de sonreírme, se giró en busca de su novia así que yo me aparté un poco para que la viera mejor. Ella se le tiró encima y lo besó.
-Por fin despertaste. Estaba muy preocupada por ti. ¿Estás bien? ¿Qué te ha pasado?
-Nada. Ha sido un simple mareo. A veces me pasa. Tengo la presión sanguínea baja y a veces me desmayo.
-Pero esto se avisa. Tonto, pensé que era algo más grave.
-Esto es bastante grave -dije interviniendo en la conversa- Y llevo tiempo diciéndole que esto se lo tendría que intentar curar. Pero no me hace caso.
-Porqué esto no se cura -me respondió.
-Pero puedes intentar que no se te bajé demasiado tomando determinados alimentos. ¿No te acuerdas que lo dijo el doctor?
-Sí, pero no me gustan esos alimentos.
-Eso no importa te los tienes que comer, ni que sea escondidos dentro de otras comidas.
-No quiero -dijo haciendo un puchero.
-Díselo tú, Kei. Puede que a ti te escuche -le dije a su novia.
Ella se acercó a él y luego de besarlo y mirarlo a los ojos un poco enfadada se apartó un poco.
-A casa hablamos sobre el tema.
Así que después de todo, la tarde siguió igual. Yo conocí cosas de la novia de Hiro y ella de mí. Si los dos íbamos a estar cerca de Hiro necesitábamos llevarnos bien. Como mínimo para no molestarlo a él con nuestras peleas y en parte por qué tenía miedo de que ella, lo separara de mí si no le caía bien. Porque si lo separaban de mi entonces sí que yo me moriría.
Porque si yo vivo solo es por ti, por estar cerca de ti y ser tu apoyo. Porqué al quererte todo mi ser y todas mi acciones son solo para ti, aunque sea en secreto.