Fue un poco inusual la situación, Hyde había recibido una invitación a manos de su representante y quien firmaba era nada mas ni nada menos que ‘Gackt’… Hacía un tanto que no se encontraban, y los hecho recientes por tratar de ocultar lo que aquella vez paso en la fiesta de cumpleaños de ese gran vocalista estaban de por medio para que su encuentro fuera… de ese modo, la presa hablaba de ellos… pero aquella vez. Esas sensaciones, ese encuentro magnifico de aquellos labios sobre los ajenos, la única y ardiente sensación de un beso desesperado por otro que tomaba más fuerza, se quedo viendo el papel, observando las letras que conformaban ese nombre la pregunta era, ¿Podría asistir y verle a los ojos?, quizá, quizá, no. Entonces el trance lo hizo saltar a la realidad.
-Hyde ¿Qué dices?, es del gran, Gackt, sabes perfectamente que los sucesos pasados están cubiertos y destruidos no hay evidencia, sino asistes, seguro pensaran, que las cosas pasaron, ya sabes como son los demás – hablo aquel representante, a lo que el vocalista solo hizo un mohín, uno que denotaba sus ganas intensas de negarse, ¿Porqué?
-Esta bien, iré, solo para disipar los rumores alrededor de lo anterior, pero no…- el muchacho no completo la oración, porque estaba apunto de soltar alguna sandez que le costaría la reputación.
Más tarde le llevaron a las grandes tiendas de prestigio para escoger un atuendo adecuado, no formal pero que denotara presencia alguna, examino de pies a cabeza todo, estaba incomodo por la situación, las cosas habían tomado rumbos extraños, desde la última vez que se encontró con aquel hombre, irrefutable y erudito pero con un tremendo don de la seducción y mientras se absortaba en sus pensamientos, toco levemente sus propios labios, recordando el beso, pero la sacudida del representante le saco de trance.
Esa misma noche su nerviosismo creció, mañana después de un mes vería a ‘Gackt’, fue a la cama, tratando de ausentarse del mundo y de sus pensamientos, quería estar en blanco, solo dejarse llevar por el placentero sueño, y entonces se encontró con la silueta del mayor (en estatura), recordó una y otra ves, pero paso por alto un detalle, estaban ambos ebrios, sin embargo Hyde consiente, Gackt quizá no lo recordaría, lo que le dio más ánimos a Hyde.
Pero la sensación de calor se fue directa al vientre de este, cuando de nuevo sintió los labios, estaba recordando, de un mes para acá se la pasaba recordando cuyo beso no podía borrar por nada del mundo. Por fin después de mucho concilio sueño, sin olvidar el rostro de aquel ser que invadía y ponía su mundo de cabeza.
Se despertó un ‘poco mejor’, trato de ir a la ducha, de verse presentable, tanto como podría permitirse pero sin proyectar que había puesto empeño en ello, el chofer paso por él, a su departamento, para llevarle donde se haría la fiesta en la plaza de un hotel, no era tan malo, no sería el único ahí, le saludaría se tomarían fotos y aquel atendería a los demás invitados, no había riesgo de que Gackt descifrara lo que sus pupilas reflejaban.
Llego al edificio con una seriedad nunca antes vista, poso para las cámaras, sin ninguna sonrisa, no estaba contento con esos mosquitos, y entro, sin más, ni menos, suspirando bajo, de la mano con el nerviosismo, llevo una mano a sus cabellos tratando de calmar sus ideas y entonces entre otras celebridades apareció él.
Trago saliva, y le llamo, desde lejos, saludándole, Hyde quedo varado, sus piernas no le respondían, estaba agonizando por dentro, se mordió el labio inferior y avanzo entre la gente para verle, Gackt le tomo y le dio un abrazo como ‘de costumbre’, Hyde apenas sonrió, casi no se notaba, no traía entusiasmo.
-Es un placer tenerte aquí, pensé que no vendrías –Musito bajito Gackt mientras algunas fotos eras tomadas.
-¿Por qué has pensado, eso?, ¿Qué motivos me harían no venir? - ¿Sería que aquel hombre se acordaba de lo sucedido?, saludaron a los demás, mientras intercambiaban palabras.
-No, nada – fue algo seco, pero Hyde se lo tomo como una negación a sus preguntas, ‘Gackt no se acordaba’ que evidente.
Después de eso, cada quien fue arrastrado por conocidos a lugares paralelos, Hyde trato de poner su mejor cara para los demás, pero por dentro un hueco enorme crecía, ese hombre no recordaba y él le había besado con pasión.
Que triste, en un descuido de soledad, observo como una mujer felicitaba al cantante, Hyde bebía un poco de vodka, mientras su mirada se clavaba en esos dos, ella era atractiva, pero vestía atrevida para la ocasión. Ella de pronto susurro algo, algo que Hyde quería escuchar, parecía que habían quedado, ella beso la mejilla de Gackt y se alejó, Hyde apretó su vaso, lo más fuerte la quería romper, sí, estaba celoso, porque estaba enamorado.
Salió del salón con furia, se dirigió hacia los baños que estaba arriba donde las habitaciones, estaba furioso, apretaba los puños para no golpear las paredes, todo lo que sentía de nada servía, no cuando a quien amaba no le dirigía siquiera una sonrisa como a aquella mujer.
Se encerró en uno de los baños, y golpeo las paredes, pateo la puerta, no había nadie, quería, llorar, sí ¡Llorar!, de impotencia, rabia y lo que viniera, pero detuvo el sollozo que empezaba a salir gracias a el sonido de unos pasos, trago saliva y se sentó sobre la tapa del inodoro, como fingiendo.
-¿Hyde? – musito aquella voz, era Gackt quien le buscaba, - Hyde, por favor sal, ¿o es que, si estas ocupado? –camino por entre los baños buscando donde estaba él-
-Podemos hablar, luego, creo que este no…- corto la frase por un nudo en su garganta. – creo…que…
-¿Es por el beso? – Finalmente encontró la puerta, los pequeños pies de Hyde se veían, Gackt se recargo, suspiro y comenzó a notar el sollozo – Hyde quiero que sepas que…
-¡FUE UN MALDITO ERROR! – grito con fuerzas, interrumpiendo, estaba llorando, el llanto le gano, su cuerpo temblaba.
-Eso fue para ti, pero quiero que sepas, que para mí, no, no lo fue, ábreme, Hyde… - El aludido escucho, ¿no era un error?, eso era un sueño, quito el pastillo de la puerta, buscando a Gackt, pero le dio la espalda, porque no quería que le viera, así, el mayor le envolvió con los brazos. –No llores –murmuro Gackt aspirando el aroma de Hyde.
-No me veas- pero el mayor le obligo, aunque Hyde llevo las manos a su rostro, le obligo a salir, lo cargo entre sus brazos acunándole, dirigiéndose a esa habitación que se había preparado para él… llevándole directamente a la cama.
-¿Hyde?... Mírame, por favor, hazme saber con tu simple mirada que soy yo él único al que piensas, déjame fundirme en tus lindo ojos – entonces el aludido obedeció, lentamente observándole encima de él. – Me gustas y ese beso… Aquellos besos me dejaron con ganas de ti…-murmuro al acercarse al oído del menor.
-de…de…verdad- estaba nervioso, busco su rostro para acariciarle cada una de las facciones, dejándose sumir por esos orbes maravilloso, el mundo de Hyde llevaba el nombre de Gackt y pronto esos labios comenzaron a hacerse cercanos, fundiéndose en un maravilloso beso, lento, pasional, que comenzó a demandar más…. –Hazme tuyo- murmuro contra los labios ajenos, ese beso prendió más que las mejillas de Hyde, le daban ganas de sentir a Gackt en su interior.
Gackt respondió con una juguetona sonrisa, mientras Hyde, deslizaba las manos por el miembro de Gackt – Quiero sentirte- musito, de nueva cuenta, estaba igual o peor de desesperado, el mayor por supuesto comenzó a besarle el mentón, bajando por ese cuello, a lo que el menor gimió con fuerza, provocándole, sus manos quedaron estimulando al mayor.
Torpemente y con nerviosismo Gackt desabotono la camisa de su amado, para besar y lamer su torso, con lentitud, Hyde podía sentir su piel arder cuando la lengua se deslizaba por sus tetillas, se movió provocadoramente sobre el miembro de Gackt alzando las caderas, haciendo que ambas zonas rozaran.
Eso le ponía, le gustaba, finalmente Gackt estuvo frente a los pantaloncillos de Hyde, acaricio las piernas de este y paso los labios sobre el bulto prominente de Hyde, aunque fuera sobre la tela, hizo un ademan de estarle simulando una felación.
Hyde comenzó a musitar su nombre con gemidos ahogados apenas audibles, eso le enloquecía, que comenzó a bajar la cremallera de su pantalón, Gackt sonrío, desprendiéndose de la ropa inferior del pequeño, encontrándose con la gran erección de este e introduciéndola a su boca chupando la punta como comiendo un dulce, saboreando de los fluidos que eran miel para su paladar, haciendo que el otro arqueara la espalda al sentir aquello, incluso se atrevió a morderle, mientras el otro se arrancaba el labio inferior para evitar gemir cosa que le resulto imposible.
Comenzó a hacer movimientos con la boca simulando embestidas, una felación acelerada, e incluso profunda, cuando Gackt se llenaba la boca de aquella virilidad…Hyde suplico, arañaba las sabanas, se aferraba a ellas, empezó a gemir más fuerte incluso a acompasar sus caderas con la boca de Gackt para tener mayor placer.
Finalmente un grito de tan sonora voz salió, junto a las mieles que Gackt se empeño a probar e incluso sostener en la boca, para dárselas a probar al otro, cuando volvieron para encontrarse con un beso. – Acuéstate bocabajo- ordeno Gackt a Hyde, quien obedeció.
Estaba desnudo y a su merced, lo veía de reojo por encima del hombro, pues su vista se nublaba, Gackt tomo las caderas del menos y lamia aquellos glúteos que quedaron a la altura de su boca, cuando Hyde puso sus rodillas sosteniendo el peso de esa parte de su cuerpo, mientras el otro se deshizo de sus ropas, Hyde llevo las manos a sus nalgas, abriéndolas a aquella cavidad, a lo que la lengua de Gackt se deslizo, lamiéndole aquella zona, el otro gemía como loco, pues no era para menos disfrutaba de la húmeda lengua sobre su ano. –Penétrame-susurro demandando el miembro de Gackt en su interior…
Y este sin mas recato, preparo su virilidad entre sus manos, empujadora hacia esa cavidad, que placentero sentía al estar dentro de Hyde, poco a poco, el otro se aferro con fuerzas a lo que pudo, y finalmente gimió de placer y dolor al tenerlo por completo en su interior. El mayor respondió embistiéndolo con fuerzas, con vértigo, con un atropellado remolineo de sensaciones y como pudo, mientras Hyde disfrutaba de tener el pene de Gackt en sus adentros. – Más fuerte…Más…-no supo si lo dijo, si lo deseo, pero sentía cada vez más placer, uno enorme, cuando el otro se movía propinándole placer a esas paredes que pronto empezaron a contraerse sobre el miembro de Gackt.
Haciendo que el fluido de ambos corriera por esa cavidad, pero eso no les detuvo puesto que el otro seguía moviéndose, sintió sus piernas temblar, cayendo de nuevo a la posición original y dejando que la llama de ese calor se extinguiera con Gackt dentro suyo, escucho el gruñido ajeno, cuando ambos quedaron saciados al llegar al clímax, sintiendo un éxtasis mayor sobre sus cuerpos.
Gackt se recostó sobre Hyde, quedando fundidos, en uno solo, durmiendo y dejándose llevar por lo que ansiaban. Beso el cuello de Hyde antes de sumirse al sueño, entonces los rayos del sol llegaron, fue un lapso rápido.
Y Hyde busco esa silueta, a ese hombre pero solo se encontró con su nombre sobre un papel…
Lamentablemente no podemos estar juntos, tengo una reputación que cuidar. Y tú también espero lo entiendas, pero he de confesarte que la pase muy bien anoche, te deseaba desde hace mucho tiempo, es lo mejor, ojala podamos repetirlo en otra ocasión, por ahora me despido, cuídate, me has dado el mayor placer… Nos vemos…
Gackt
Eso dejo destrozado a Hyde, estrujo la nota entre sus dedos, mientras unas tristes y saladas lagrimas le recorrían el rostro y su cuerpo débil caía en las sabanas dejándose llevar por la tristeza y amarga soledad, el perfume de Gackt inundaba su ser y la habitación, maldita sea la hora en la que se enamoro de semejante patán.
Fin…