Habían pasado unos meses desde que se lo propuso y lo rechazó, desde entonces las provocaciones no habían parado ni iban a parar si no hacia algo, ¿a que estaba jugando?
Cuando el mayor salía de la ducha se paseaba por toda la casa semidesnudo asegurándose de que lo había visto, en los ensayos no paraba de fijarse en él y cuando Donghae se daba cuenta bailaba de la manera más sensual que pudiera, aquello lo excitaba de una manera sobre humana, muchas veces había tenido que irse por tener un problema entre las piernas alegando que se encontraba mal. Todo lo veía de manera sexual, realmente creía que era un pervertido, pero después de ver ese cuerpo y las miradas que le lanzaba sabia que todo era intencionadamente.
Esa tarde Eunhyuk, Shindong, Leeteuk y Heechul tenían una presentación de Super Junior-T, era su oportunidad, toda la tarde durante horas el piso vacío. Paso una hora y cuarto hasta que todos se habían duchado y arreglado. Se encerró en su cuarto a esperar hasta que se marcharan, cuando escucho a lo lejos que la puerta se cerraba de un fuerte golpe, ese momento que tanto había esperado había llegado.
Se dirigió al salón, allí estaba el pez, pasando canales en la televisión sin ver nada concreto, estaba realmente aburrido. El maknae se acercó, lo agarró de la muñeca y lo arrastró hasta su cuarto, cerrando y echando el pestillo después de entrar.
-Suéltame!- grito forcejeando.
-Demasiado tarde- lo estampo contra la pared poniendo su cuerpo como barrera para que no pudiera escapar, se acerco lentamente a su cara, Donghae podía sentir su respiración sobre sus labios- te deseo tanto hyung…- lo besó con brusquedad y ansia, había deseado tanto ese momento. El pez lo empujó pero no pudo con él. Se negó a corresponder ese beso, no se lo iba a poner fácil.
Kyuhyun acercó su cadera a él para evitar que forcejeara más, sus entrepiernas se rozaron y notó que Donghae también empezaba a excitarse, aquello lo lleno de orgullo pero también lo excitó aun más si era posible. Volvió a besarlo, el fishy dejó que la lengua del maknae entrara y profundizara en beso, saboreando, mordiendo los labios del otro, succionándolos, lamiéndolos…
-No!- intento gritar Donghae, pero aquello parecía más un gemido debido al roce constante de sus miembros. Lo agarró y lo tiró a en la cama dejándolo tumbado. Kyu se puso encima de él, lamiendo su cuello de arriba abajo, recorriendo con la punta de su lengua toda la oreja, mordiendo el lóbulo, succionándolo, poco a poco se fue deslizando hacia abajo, lamiendo y besando toda la extensión de piel hasta el cuello de la camisa. La desató, por no decir arrancó, y siguió bajando, parándose en su pezón izquierdo, delineándolo con su lengua, chupando para que quedara bien erguido. Después se centro en el derecho en el que aplicó las mismas acciones. Deslizó su lengua hasta el ombligo mientras iba desatando el cinturón. Acarició el miembro ya muy erecto por encima del pantalón lo que hizo gemir a Hae, estaba realmente excitado, lo necesitaba ya.
Se acerco a sus labios sin dejar de masajear su miembro, se acerco a sus labios jadeantes y los atrapó de nuevo en un beso voraz.
-Sé que tu también quieres esto…-susurro muy cerca de su oído rozándolo con sus labios- pídemelo.- Donghae cerró los ojos y giro su rostro, quería que lo hiciera, no aguataba más, no le quedó otra que tragarse su orgullo y pronunciar aquellas palabras que nunca pensó que saldrían de su boca.
- haz-hazlo por favor Kyu- se ruborizo, giro el rostro para verle en rostro al maknae el cual tenía una sonrisa que no traía nada bueno. Kyuhyun volvió a bajar hasta encontrarse con ese bulto aprisionado en el pantalón, se los quitó y de un golpe se lo metió todo en su boca- aaaaaahh…- gimió sonoramente, se sentía tan bien.
El menor engullía con gula el miembro que tenía entre sus labios, recorrió toda su extensión con la lengua, parándose en ese orificio de la punta dejándola ahí. Alzó la vista y vio un Donghae jadeante, retorciéndose de placer y su cuerpo empapado en sudor, aquello era la escena más erótica que había visto en tiempo y con la que tantas veces había soñado.
Estaba por correrse pero tenía la respiración tan entrecortada que apenas puedo pronunciar palabra antes de venirse dentro de la boca del maknae, el cual degustaba sin menor asco toda su esencia.
Kyuhyun dirigió tres de sus dedos a los labios de Donghae – chupa- ordenó. Hae acató la orden como un niño obediente. Chupó y lamió los dedos hasta que salieron de su boca al estar ya bien lubricados. El menor le separo las piernas con brusquedad y de una vez metió dos dedos en el interior del mayor.
-AAAHHhhh… duele… PARA!- grito hae, el dolor lo estaba matando.
- No- comenzó a mover los dedos con rapidez dilatando la entrada del mayor- aquí el que mando soy yo, y yo digo que así, a mas… se que te encanta- soltó una risa que sonó un tanto malvada y introdujo un tercer dedo acompañado de un cuarto sin lubricar.
Donghae se retorcía de dolor, pero poco a poco empezó a mover sus caderas en busca de más contacto. Kyu sacó sus dedos dejándolo vació por solo un par de segundos pues introdujo su miembro de una estocada, abriéndose paso en esa estrechez tan deliciosa. Dos lagrimas caían por las mejillas del pez que fueron secadas por uno labios antes de que volvieran a salir de él.
Kyuhyun fue aumentando el ritmo, un par de veces lento y cuando Hae dejó de llorar empezó un ritmo frenético de embestidas, un ritmo que parecía inaguantable para un simple humano. Tocó esa zona, ese punto que el que curvó la espalda acercando mas su pecho al menor, arrancando con sus puños las sabanas y gimiendo más fuerte, si se podía, hasta quedarse afónico.
Se vendría en poco, no aguantaría mucho más, empezó a masturbarlo mucho más rápido de lo que lo embestía, apuntando siempre a ese punto que le hacía enloquecer, Donghae solo gritaba, gemía su nombre, estaba extasiado. Lo penetró una vez más y se vino en su mano, contrayendo sus músculos y haciendo que Kyu se viniera dentro de él.
Se dejo caer sobre el pecho del pez, agotado. Fue saliendo del interior de su hyung para dejarle otra vez esa sensación de vació, se tumbo a su lado. Sintió que unos brazos lo rodeaban, simplemente se dejo abrazar y se acurruco en su pecho. Cuando estaba a punto de quedarse dormido oyó como todos entraban por la puerta y un susurro:
-Kyuhyun, esto hay que repetirlo- no pudo evitar sonreír antes de quedar plácidamente dormido al lado de su ahora amante.