Ya era de noche otra vez, ultimamente el tiempo se le estaba pasando muya rapido, en especial cuando estaba cerca de ese dobe , no sabia lo que le pasaba, pero no podia evitar sentirse cohibido ante la simple presencia del chico escandaloso.
-tsk- cada vez estaba mas furico, y mas por que no podia olvidar la sonrisa que le habia dedicado el rubio antes de despedirse, no eara una de sus tipicas sonrisas felices, mas bien parecia triste, como si el chico que la diera no pudiese soportar mas su vida, y eso aunque no lo quisiera admitir lo preocupaba en sobre manera.
- espero que no hagas nada tonto dobe- dijo antes de caer rendido.
--------------- en otra parte.
Se encontraba sentado en su lugar favorito, el viento movia suavemente sus rubios cabellos, que se encontraban despeinados como siempre, miraba a el cielo, esperando que este le diera la respuesta, y en sus ojos azules se comenzaban a aformar lagrimas, que no queria dejar caer, no queria darse por vencido tan facil, demo, cada vez era mas dificil mantener esa mascara de felicidad, de que estaba bien pasara lo que pasara.
Habia logrado que Sasuke volviera a la aldea, y ademas que los aldeanos no lo vieran de mala forma, eso era mucho, y aunque era considerado el heroe de konoha no podia hacer otra cosa mas que sentirse vacada vez mas vacio, mas solo. Ya no sabia lo que pasaba, ahora todos lo estimaban, lo apreciaban, demo, èl no queria eso, necesitaba algo mas, algo mas fuerte, que lo hiciera sentir especial. Y por eso cada vez se sentia mas derrotado, con menos ganas de vivir, cada vez que se sentaba en ese lugar recordaba las perdidas que se habian dado en esa guerra, a sus amigos, a su maestro, como casi estuvo a punto de perder a una persona muy apreciada para èl.
-Aveces desearia que todo esto acabara pronto- dijo al aire mientras se levantaba de ese lugar.- y que si no acaba pudiera simplemente desaparecer- termino para desaparecer en la noche.
------------------------------------------- en la casa de un pelinegro.
Aun se necontraba dormido, y lo sabia, demo, parecia como si estuviera despierto, se sorprendio al ver como en su sueño aparecia el escandaloso rubio que le estaba robando el sueño, mas se sorprendio mas al verle decaido, casi cinsumido por la obscuridad… como el habia estado tanto timepo atrás.
-Naruto- dijo en un susurro, y al ver que el chico no volteaba a verlo comenzo a llarlo con mas fuerza.
-NARUTO, NARUTOOOOOOOOOO, DOBE, HAZME CASO, DOBE, NARU- y cad vez estaba mas desesperado, en especial por que cada vez estaba mas lejos de esa cabellera rubia.
- teme- escucho a lo lejos.
-DOBEEEEEEEE- y no dudo en volver a gritar, para que esa persona lo escuchara, no le importaba lo que pasara lo unico que queria era ver a ese chico, que le volviera a dedicar la sonrisa que le robaba el aliento.
Y … desperto, total y completamente agitado, con el corazòn latiendole acelerado, como si se le fuera a salir.
-no se que hacer- dijo al leventarse de su cama – estoy desesperado, no encuentro una solucion para estos suños, y mucho menos para lo que tengo atorado en el pecho- dijo mientras grandes lagrimas comenzaban a surcar por sus mejillas.
--------------------------- con el rubio.
-Naruto, es hora de que pagues lo que le hiciste a la aldea- un gombre de mirada afilada se encontraba delante del chico rubio, con las manos en su garganta.
- creo que ya pague mas que lo suficiente- dijo el chico soltandose.
- claro que no, tu deberias de morir, nadie te quiere aquí- escupio aquel hombre saliendo rapidamente de la habitacion, ya que habia oido pasos.
- eso ya lo se, no tiene por que repetirmelo- el ojiazul se sento en la orilla de la cama, y comenzo a derramar silenciosas lagrimas, exppresando así como se sentia, él nunca lloraba, demo en ese momento lo que mas necesitaba era desahogarse, y por eso lloro como nunca lo habia hecho.
- es verdad, ya nadie me necesita, así que para que molestarlos mas con mi presencia- se levanto de donde estaba, y se dirigio al monte hokage.
---------------------------------- con el pelinegro.
Rayos, no estaba en casa, me pregunto donde se abra metido, el no es de los que desaparecen asi como así, tengo un mal presentimiento, necesito encontrarlo, y pronto.
El chico corria como loco por las calles de la aldea preguntandolo a cada persona que se encontraba si habian visto a el ojiazul.
-en donde estas- susurro mientras segia corriendo como loco. En ese momento volteo su mirada encontrandose con el imponente monte hokage, y sin pensarlo se dirigio alli, esperando que ehí se encontrara él.
--------------------------------------------- con el ojiazul.
-ya nadie me necesita, terminaron de usarme, así que para que estoy mas tiempo aquí- el rubio cada vez estaba mas cerca de la orilla, sus ojos habian perdido su habitual brillo, y ahora se veian obscuros, inclusive su habitual piel canela ahora se veia palida.
---------------------------------------------------- con el ojinegro.
Era él, no podia creerlo, pero que hacia tan cerca de la orilla, no era posible uqe estuviera pensando en acabar así, verdad, no, era Uzumaki Naruto, el inja numero uno en sorprender a la gente, era imposible que siquiera pensara en hacer algo como eso.
No, no iba adejar que lo hiciera, era demasiado importante para que simplemente terminara asi, su cuerpo se movio por si solo, y en menos de un minuto ya tenia al bijou en sus brazos.
-maldito usuratoncachi, que planeabas hacer, me asustaste- dijo estrujando mas fuerte ese cuerpo casi tan alto como el.
- Sasuke- fue lo unico que oyo antes de que el chico comensara a llorar.
- no te preocupe, estoy aquí, no me separare de ti- y asi, los dos abrazados, soltaron todod el dolor que llevaban dentro desde mucho tiempo atrás.
ya mas tranquilo el rubio volteo a ver esos ojo azabache que lo tenian atrapado, parecia como si no, lo dejaran escapar, y la verdad es que no queria escapar, se sentia tan bien siendo observado con aquella expresion de preocupacion en los ojos negros que se dio cuenta de algo que siempre nego, creyendolo imposible.
- me gustas- dijo el rubio, ya mas recuperado, por fin pudo ver directamente a los ojos del pelinegro y decirle aquello.
en cuanto el zabache escucho eso su corazon se detuvo, por fin, por fin habia alguien que deberdad podia sanarlo, y no se habia dadio cuenta de que lo tenia enfrente, que baka habia sido, pero eso ya no importaba .el otro sonrio y lo beso tiernemente.
- y tu ami dobe-
Y asi los dos fueron a la mansion Uchiha, la cual apartir de ese momento seria el nuevo hogar de Naruto, por que ahora ya tenia una razon de vivir, y esa era simple, amar a Sasuke.
fin