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Entre tu y mil mares por hikari no renkinjutsushi

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Notas del capitulo:

...

 

++++++++++

 

El concierto había transcurrido de manera intensa, los fans cantaban las canciones una tras otra, la voz de Shuichi dejaba ver todas sus emociones, se había esforzado al máximo, estaba agotado pero feliz. En algún momento le pareció ver una conocida cabellera rubia; su corazón se había acelerado notablemente y los ojos le habían brillado por un momento con lo que parecían un par de lágrimas, sin embargo ya no lograba encontrar aquellos cabellos rubios entre la multitud. El sudor hacía que el cabello se le pegara al rostro y al mismo tiempo le daba un aire de sensualidad aunado a la ropa ajustada que traía encima.

 

Detrás del escenario cierto rubio se encontraba con Key, su rostro no reflejaba nada pero abría y cerraba las manos con impaciencia cosa que Hiwatari notó.

 

-          Calma Uesugi, todo va a salir bien – Yuki lo miró pero no dijo nada, casi enseguida volvió su mirada hacia el pelirrosa y “sin querer” tuvo un par de pensamientos no muy inocentes, sacudió un poco su cabeza para despejarse.

 

La música se detuvo y Shuichi comenzó a despedirse del público

 

-          Vamos es hora – Yuki solo asintió a esas palabras y en cuanto las luces bajaron de intensidad salió al escenario seguido de Key y Ryuichi

 

Los fans se quedaron mudos al ver quienes entraban a escena; Shuichi se volvió sorprendiéndose de ver al escritor junto a él, y más aún cuando este le pidió el micrófono. Key traía su guitarra, Sakuma tomó un micrófono también. El vocalista de BL se volvió hacia Hiro y Suguru en cuanto la música comenzó a sonar. Estaba confundido pero cuando el escritor lo tomó de la mano y lo miró a los ojos todo lo demás desapareció.

 

Lo sintió temblar ¿acaso el mayor tenía miedo? – ¿Yuki? – La voz de Yuki inundó de inmediato sus sentidos…

 

 

Kizutsuita toki wa sotto tsutsumikonde kuretara ureshii (Cuando estoy herido me haría muy feliz si pudieras abrazarme gentilmente)

Koronde tatenai toki wa sukoshi no yuuki wo kudasai (cuando tropiezo y no me puedo levantar, por favor dame algo de tu valentía)

Omoi wa zutto todokanai mama kyou mo tsumetai machi de hitori (mis pensamientos aún no pueden alcanzarte; todavía estoy vagando solo en esta fría calle)

Koko ga doko kamo omoidasenai (ni siquiera puedo recordar donde está este lugar)

 

Owaranai yoru ni negai wa hitotsu "Hoshi no nai sora ni kagayaku hikari wo" (en esta noche sin fin solo tengo un deseo “que se haga la luz brillante en el cielo sin estrellas”)

Modorenai basho ni suteta mono de sae (incluso las cosas que tiré en lugares sin retorno)

Umare kawatte ashita wo kitto terasu (eventualmente irradiarán e iluminarán mañana)

Hoshikuzu no naka de anata ni deaeta (Fui capaz de conocerte en el polvo de estrellas)

Itsuka no kimochi no mama aetara yokatta (hubiera sido genial si mis sentimientos hubieran permanecieran intactos)

Modoranai kako ni naita koto de sae (lloré a mi pasado sin retorno pero mis lágrimas)

Umare kawatte ashita wo kitto terashite kureru (eventualmente irradiarían e iluminarán el mañana para mí)

 

 

La voz de Yuki se quebró en algún momento recuperándose casi de inmediato sin embargo sus lágrimas comenzaron a fluir. Shu solo lo miró, lo sintió temblar de nuevo, realmente estaba siendo sincero; y ¿él? Él se sentía como cobarde por no estar seguro antes de los sentimientos del escritor, se le hizo un nudo en la garganta, apretó con más fuerza la mano del rubio.

 

 

Nemurenai toki wa sotto te wo tsunaide kuretara ureshii (cuando no puedo dormir, me haría muy feliz si pudieras gentilmente tomar mi mano)

Yoake wa kuru yo to sasayaite ite uso demo ii kara (por favor dime silenciosamente que el mañana llegará, incluso si es una mentira)

Negai wa zutto kanawanai mama kon'ya seiza wo tsuresatte (mi sueño aún no se cumple, esta noche he tomado las constelaciones conmigo)

Kiete shimatta mou modorenai (y desaparecido completamente, ya es imposible para mi volver atrás)

 

Owaranai yoru ni negai wa hitotsu "Hoshi no nai sora ni kagayaku hikari wo" (en esta noche sin fin solo tengo un deseo “que se haga la luz brillante en el cielo sin estrellas”)

Ima wa toosugite hakanai hoshi demo (incluso una estrella demasiado lejos para ser visualizada claramente)

Umarekawatte yozora wo kitto terasu (irradiará e iluminará mañana)

Hoshikuzu no naka de deaeta kiseki ga (nuestro milagroso encuentro en el polvo estelar)

Hitogomi no naka ni mata mienaku Naru (será borrado otra vez por la multitud de gente)

Modoranai kako ni naita yorutachi ni (me despido de mi pasado sin retorno y de mis noches de llanto)

Tsugeru sayonara ashita wa kitto kagayakeru you ni (así que mañana seré capaz de brillar)

 

Konna chiisana seiza na no ni (te agradezco por haberme encontrado)

Koko ni ita koto kizuite kurete Arigatou (aunque soy como una pequeña constelación)

 

 

 

Sus lágrimas fluyeron también, que idiota se sentía ahora, eso, claramente eran los sentimientos del rubio… sin saber en qué momento comenzó a temblar también.

 

 

Owaranai yoru ni negai wa hitotsu "Hoshi no nai sora ni kagayaku hikari wo" (en esta noche sin fin solo tengo un deseo “que se haga la luz brillante en el cielo sin estrellas”)

Modorenai basho ni suteta mono de sae (incluso las cosas que tiré en lugares sin retorno)

Umare kawatte ashita wo kitto terasu (eventualmente irradiarán e iluminarán el mañana)

Hoshikuzu no naka de anata ni deaeta (fui capaz de conocerte en el polvo de estrellas)

Itsuka no kimochi no mama aetara yokatta (hubiera sido genial si mis sentimientos hubieran permanecido intactos)

Modoranai kako ni naita koto de sae (lloré a mi pasado sin retorno pero mis lágrimas)

Umare kawatte ashita wo kitto terashite kureru (irradiarán e iluminarán el mañana para mí)

 

 

Todo estaba en silencio de nuevo, la multitud estaba muda; el vocalista limpió las lágrimas del rostro blanco de su amado y sin soltarlo se despidió del público con la otra mano. Salieron del escenario dejando que el resto de Bad Luck despidiera a la audiencia.

 

En cuanto se encontraron solos detrás del escenario el menor tomó con delicadeza en rostro del escritor, se puso en puntas y besó sus labios. El rubio que hasta ese momento había estado como en trance después de terminar la canción correspondió el beso, su respiración se normalizó pero aún temblaban. Se abrazaron sin dejar de besarse, sintiendo alivio de tener a la persona más importante junto a ellos.

 

-          Gracias Yuki, eso fue… muy hermoso

-          Shuichi yo…

-          Te amo Yuki – los ojos violetas se encontraron con los dorados, lo miraban con intensidad haciendo que el mayor se sonrojara  un poco, no había si quiera un poco de duda en esa palabras.

-          Yo también te amo – el pelirrosa sonrió y abrazó con fuerza al escritor permaneciendo así un poco más.

 

Vieron salir al resto de los chicos del escenario, ninguno se acercó. El pelinegro desvió la mirada para no ver aquella imagen, soltó un gran suspiro, le dolía. Pronto Ryuichi se acercó a él colocando una mano en su hombro.

 

-          Vamos Hiwatari, debemos dejarlos solos – el de ojos azules asintió siguiendo al mayor

 

 

 

-          Shuichi – el pelirrosa se separó un poco para mirar al rubio – vayamos a otro lado

-          Ok, solo iré a cambiarme de ropa

 

++++++++++

 

 

Salieron de aquel auditorio, la noche era fresca y el viento acarició las sonrojadas mejillas del más joven haciendo que el de ojos dorados se perdiera en esa imagen por unos segundos.

 

-          ¿A dónde iremos?

-          Al parque, vamos – lo tomó de la mano haciendo que el menor sonriera de nuevo; caminaron en silencio solo sintiendo una corriente fluir por su cuerpo, qué extraño, sorprendente y confortante era saber que ese simple contacto podía unirlos de esa manera.

 

Al llegar, el escritor llevó a su amado hasta el lugar exacto donde se habían conocido, el menor se acercó al mirador observando las luces de la ciudad a lo lejos, Yuki se aproximó hasta él abrazándolo por la espalda.

 

-          Yo… quería venir a este lugar antes de irme, pensé que no tendría oportunidad de hacerlo, gracias.

-          Shuichi – el pelirosado le hizo saber que lo escuchaba – perdóname

-          Pero si ya… no debes preocuparte por nada, entiendo, por fin entiendo cómo te sientes Yuki, lamento haber tardado en darme cuenta

-          Perdóname por todo, también por comportarme como un maldito egoísta al querer retenerte aquí, pero sabes, me cuesta dejar ir las cosas que quiero. No quería darme cuenta de que tan importante es tu presencia en mi vida, yo… me sentí algo perdido solo de pensar perderte, no creí poder con eso

-          Yuki…

-          Shu, no soy perfecto, tengo muchos defectos y traumas que no superaré tan fácilmente, intentaré hacerlo, intentaré cambiar las cosas, pero hay algo que no va a cambiar y eso son mis sentimientos por ti – el pelirrosa se volvió para encontrarse de frente con los ojos dorados que lo miraban con intensidad  - voy a esperarte, esperaré a que vuelvas y si tú aún quieres me gustaría que te quedaras a mi lado. Si en cambio decides que no, prometo no… - fue callado por los labios del menor, cuando se separaron los ojos violeras estaban algo llorosos

-          Será responsabilidad tuya llevar mis cosas a casa para cuando vuelva ¿de acuerdo? – recibió una sonrisa y un asentimiento como respuesta.

-          El rubio miró su reloj – tengo algo para ti, pero está en mi departamento, ¿quieres venir?

-          Sí – siguieron caminando por el parque con sus manos unidas

 

+++++++++

 

 

Llegaron a la puerta del departamento y antes de abrir el escritor se dirigió al cantante

 

-          Espero que te guste

 

Quedó a la vista el interior; apenas iluminado por unas cuantas luces amarillas y rojas muy tenues colocadas en redes alrededor del comedor, rosas color rojo, sobre la mesa había un par de copas, una botella de Champagne y algunos contenedores plateados de donde se percibía la deliciosa comida recién preparada.

 

-          Yuki…

-          Vamos siéntate- abrió la botella y sirviendo dos copas se acercó al pelirrosa – Realmente espero que todo marche como tú quieres Shu

-          Yo espero que todo marche bien, para ambos

 

Chocaron sus copas y bebieron sintiendo las burbujas de aquella bebida bajar por su garganta. La cena transcurrió tranquila, solo platicas triviales sobre los planes de ambos. Pasando un rato Shuichi se levantó de su silla y se acercó a Yuki, lo miró sonrojándose al instante, se sentía acalorado por el alcohol y deseaba sentir sus labios nuevamente.

 

-          ¿Pasa algo? – el pelirrosa solo negó con la cabeza y se sentó sobre las piernas del escritor quedando de frente a él con una pierna a cada lado

 

Tomó una de las fresas del postre, la puso sobre sus labios y acercó la boca a la del rubio que entendió de inmediato y mordió la mitad de la fruta que le ofrecían. Se besaron, primero de manera lenta moviendo un poco sus labios, Shuichi colocó sus manos en los hombros del rubio y este tomó al menor de la nuca profundizando el beso, sintiendo sus lenguas acariciarse.

 

Se separaron por falta de aire, ambos algo agitados sintiendo la cercanía del cuerpo del otro, los ojos violetas lo miraron nublados de deseo acercándose rosando sus mejillas, sintió un suave beso. El pelirrosa hundió su cabeza en el blanco cuello ocasionando que la piel del mayor se erizara, después acercó sus labios al oído del escritor.

 

-          Yuki, hazme el amor – lamió el lóbulo de su oreja

-          Ahhh – sintió que su pequeño lo abrazaba con más fuerza

-          Por favor Yuki – en respuesta le acarició la espalda, luego la cadera y las piernas

 

Fue el escritor quien ahora tomó con pasión los labios del cantante mientras este le desabotonaba la camisa que cayó al suelo unos segundos después. Yuki coló sus manos por debajo de la playera que llevaba el pelirrosa haciendo que se estremeciera por el tacto frio de la piel del mayor; dejó los labios para besar el cuello y pellizcar los rosados pezones haciendo que al menor se le escapara un jadeo, la ropa comenzaba a incomodarles. Por fin quitó la playera besando los hombros bronceados, sintió la necesidad de detenerse un poco, se apartó unos centímetros de su amante para observarlo.

 

-          ¿Yuki? – sus ojos se conectaron no había necesidad de decir nada pero aun así sus sentimientos salieron

-          Te amo Shu – lo atrajo de nuevo hacia sí, abrazándolo con fuerza, sintiendo ambos el calor que emanaba de su compañero – Te amo Shu – repitió y el ojilila sonrió respondiendo al abrazo

-          Yo también te amo Yuki, con toda mi existencia

 

Se besaron de nuevo con esa necesidad terrible de no sentirse desde hace tiempo, el escritor se levantó de la silla sin soltar al menor; lo sostuvo de las nalgas haciendo que este enredara sus brazos en el cuello y sus piernas en torno a su cadera, así lo llevó hasta la habitación que al igual que el comedor era iluminada por tenues luces. Con cuidado depositó su preciada carga sobre la cama colocándose sobre él.

 

Acarició con adoración su pecho y de nuevo los pezones, besó su estómago y bajó lentamente hasta la cinturilla del pantalón que desató y fue descendiendo hasta que lo dejó en ropa interior sobre la cual era ya muy notoria la erección. El menor estaba sonrojado, observó con algo de nervios como Yuki lo dejaba desnudo usando sus dientes para arrebatarle el bóxer, a la vista quedó el rosado miembro erecto.

 

-          Eso no es justo ¿no crees? – se incorporó un poco  y sin dejar de mirar los ojos dorados Shuichi desbrochó el cinturón y pantalón del rubio, acercó el rostro a esa altura, bajó las prendas delicadamente mordiendo las caderas del mayor que solo entrecerró los ojos.

 

Cuando por fin quedaron en igualdad de condiciones el menor acercó el rostro a la entrepierna del mayor haciendo que el pene de este diera un tirón anticipando lo que vendría. Aspiró el aroma masculino mientras acariciaba las piernas blancas y sin poder contenerse  introdujo el falo a su boca haciendo que su lengua lo recorriera por completo en cada movimiento.

 

-          Aahh shuichi – el rubio estaba excitado, su respiración se fue haciendo irregular, las caricias que le daba su pequeño lo estaban llevando al éxtasis, se miraron a los ojos, la mirada violeta estaba cargada de deseo lo que hizo estremecer al rubio, acarició el cabello rosado, si no lo detenía en ese momento…- Espera… espera Shuichi… - el menor apartó su boca pero siguió masturbándolo lentamente

-          ¿acaso no te gusta?

-          Me gusta, pero quiero que me dejes sentirte también – besó los suaves labios de su amante, bajó por su cuello lamiendo, besando, siguió su camino hasta el pecho y abdomen del vocalista, lamió uno de los costados haciendo que el más joven se retorciera un poco; llegó al estómago, introdujo su lengua en el ombligo y acarició los huesos de la cadera.

-          Ahh, eso… se siente extraño – el escritor sonrió y continuó su camino hasta la ingle, separó las piernas de su amante y presionó con sus labios y lengua la punta de su miembro – ahh yuki

 

Lamió toda la extensión y por fin lo metió a su boca haciendo que el pelirrosa arqueara la espalda

 

-          ngggh ahhh aaaahhh

 

después de unos minutos se apartó del miembro llevándose una protesta por parte de su amante, tomó una de las almohadas y le indicó a Shu que levantara la cadera para colocarla debajo de él. Hizo  que el menor llevara sus rodillas al pecho dándole la vista completa de sus nalgas abiertas, su erección se hizo dolorosa; acercó su rostro y comenzó a lamer la pequeña entrada haciendo un poco de presión, después empujó simulando penetraciones

 

-          aaaahh ahhhh Yu…ki ahhh

 

una vez estuvo lo suficientemente húmedo introdujo un par de sus dedos, sintió al menor tensarse un poco, acarició sus piernas para relajarlo, después volvió a jadear y gemir, el escritor sentía que no podría aguantar las punzadas en su propio miembro durante mucho tiempo más, la forma en que Shuichi se movía contra sus dedos era demasiado provocativa y sensual, deseó por un momento tenerlo así, montado, moviendo sus caderas de esa manera frenética sobre él. Lo miró, estaba completamente sonrojado y una ligera capa de sudor cubría su piel; tragó en seco al verlo de esa forma. Sin dejar de penetrarlo con los dedos introdujo el duro miembro del menor de nuevo a su boca; logró tocar el punto de placer del menor. Shuichi estaba llegando a su límite, tenía la boca abierta, gemía fuerte al sentir los dedos del escritor moviéndose dentro de él y su lengua recorrer su miembro, sabía que no aguantaría mucho, comenzó a gemir más y más fuerte.

 

-          Yuki.. ahhh.. yuki… yo voy ahhh AHHHH, ESPE…AHHH AAHHH AAAAHHH – arqueó su espalda en una curva casi imposible llegando al climax, sus ojos se nublaron por completo, aún dentro de su orgasmo sintió al rubio seguir lamiéndolo ocasionándole más espasmos.

 

En cuanto las contracciones en su cuerpo se detuvieron el rubio se colocó sobre él nuevamente, lo besó, continuaba acariciándolo, la sensibilidad de su piel había aumentado, una nueva erección apreció

 

-          ¿Estás bien? – el pelirrosa solo afirmó sintiendo aún el escalofrió postorgásmico y se restregó descaradamente contra el cuerpo del rubio, abrió más las piernas y las enroscó en las caderas del mayor haciendo que este jadeara – Shuu ahh ¿quieres..?

-          Yuki, te necesito

 

 

Llevó  las delgadas piernas a sus hombros, colocó su miembro en la ya dilatada entrada de su amante y comenzó a empujar lentamente, sintiendo como el calor lo envolvía, lo hizo despacio disfrutando de la deliciosa succión. Cuando entró por completo besó a su amado comenzando a moverse.

 

-          Ahh ahh ahh… Yuki… se siente … muy bien – las embestidas eran lentas, no aguantaría mucho, cambió un poco de ángulo un par de veces buscando de nuevo el punto de éxtasis del menor

-          Eres… delicioso Shu…, nnnggh ahh

-          Yuuki yukiii ahhh, te amoo

-          Ahh aahh

-          AAHHHH YU..KI AHÍ, ….MÁS YUKI – el escritor dio en el blanco y comenzó a moverse más rápido  rozando ese punto recién encontrado en cada estocada, haciendo que el  menor moviera sus caderas con desesperación y enredara más fuerte sus piernas en las caderas del rubio si es que eso era posible

-          Ahh Shu..ichi ahhh

 

La erección del menor estaba en su máximo, el presemen salía haciendo que la punta brillara, el ojidorado lo tomó con cuidado sin dejar de moverse frenéticamente y comenzó a masturbarlo al ritmo de las embestidas, Shuichi sintió que moriría de placer, no podía mantener sus ojos abiertos, clavó sus talones en la cama y su rostro iba de un lado a otro.

 

-          AHHH AHHH AHHH YU…KI…AAAHH – Sujetó con fuerza la colcha debajo de él, un ligero hilo de saliva salía de su boca – AAAAHHH YUUUKIIII – el orgasmo llegó al menor por segunda vez, salpicando semen en su abdomen y la mano que lo acariciaba, las fuertes contracciones llevaron al climax al rubio unos segundos después derramándose dentro del menor

-          AHHHHH AAAAHH SHUICHI - dejó caer su peso sobre su amante

 

Se abrazaron aun estando unidos y permanecieron en esa posición unos minutos más, sus respiraciones antes agitadas volvieron a la normalidad, el cantante acariciaba el cabello rubio. Ambos tenían una sonrisa de satisfacción en su rostro.

 

El mayor se incorporó un poco, miró a su amante a los ojos, se sonrieron y volvió a recostar su cabeza en el pecho del menor

 

-          Te amo

-          Yo también te amo Yuki

 

+++++++++

 

 

La cálida luz de la mañana se filtraba a través de la cortina, apretó sus ojos en un intento de apartar la molesta sensación que aquello le ocasionaba, se removió un poco y justo en ese momento recordó todo lo ocurrido el día anterior. Abrió sus ojos perezosamente encontrándose con una cabellera rosada frente a él, sonrió para sí; el menor se encontraba a su lado dormido todavía; enredado en su cuerpo, las piernas entrelazadas y la cabeza recargada en él hicieron que un ligero calorcito se instalara en su pecho.

 

Desde hacía mucho tiempo deseaba estar con su amante de esa manera, podía sentir el calor de su compañero envolviéndolo, dándole una sensación de tranquilidad que pocas veces tenía un domingo por la mañana. Intentó no moverse mucho para no despertar a su acompañante y sin embargo la necesidad de estrecharlo en sus brazos fue mayor. Besó su frente y lo abrazó atrayéndolo más.

 

El menor despertó casi enseguida sintiendo las manos del escritor acariciando su espalda y su cabello, solo se dejó hacer dejando su rostro en el cuello del rubio. Respondió el abrazo unos segundos después.

 

-          Hola

-          Hola - se apartó un poco - ¿hace mucho que despertaste?

-          No realmente – acarició el rostro de su amante, con una delicadeza que el mismo no creía capaz, lo vio cerrar sus ojos violetas  e instintivamente se acercó a besarlo.

 

Las caricias iban en aumento, las respiraciones eran algo agitadas nuevamente y seguramente hubieran continuado de no ser porque el teléfono inalámbrico junto a la cama comenzó a sonar, Yuki gruño en protesta y se apartó para contestar

 

-          //diga, si está bien // - dio la bocina a su amante que lo miró con curiosidad – Es tu manager, deberías contestar – el menor enrojeció como un tomate, si Mr K lo llamó ahí era obvio que sabía que había pasado la noche con Yuki

-          //¿Hola?//

-          //Good Morning my pink boy!//

-          //Bu… Buenos días Mr K, ¿pasa algo?//

-          //no, solo quería asegurarme de que estabas bien, imaginé que no estarías en tu departamento así que preferí llamarte donde Mr Yuki//

-          //ah, ya veo, pues sí, todo bien// - sonrió para sí intrigando a su amante - //¿hay alguna cosa que tenga pendiente por hacer?//

-          //Well, solo poner en orden tus documentos, recuerda que mañana nos vamos, pero no te preocupes ya me ocuparé de eso. Disfruta tu día libre, lamento si interrumpí tu sesión de sexo mañanero//

-          //WAAAAAA//- el menor se levantó corriendo apenas envuelto en una sábana mirando hacia la ventana desconcertando al rubio - //nos estás espiando acaso?//

-          // JAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJA no, solo lo intuía pero ya me lo has confirmado// – El pelirrosa enrojeció todavía más- //pasaré por ti mañana temprano para ir al aeropuerto//

 

La bocina le fue arrebatada al menor en un instante tomándolo por sorpresa

 

-          //si no hay problema con ello prefiero llevarlo yo mismo//

-          // Ok Mr Yuki, asegúrese de tenerlo allá a las 10 de la mañana, el equipaje y todo lo demás lo tendré listo así que no se preocupe por eso//

-          // Ok, por cierto, gracias por su ayuda//

-          //no hay porqué//

 

Cuando cortaron la comunicación se dio cuenta de que su joven amante seguía mirando con insistencia hacia afuera

 

-          ¿Qué tanto buscas?

-          Mr K, me dijo que...

-          Solo intuyó que estábamos haciéndolo, fuiste tú quien se lo confirmó gritando como loco en la bocina

-          ... -_-u

-          Sí que eres un baka – se acercó al menor acariciando su cabeza sonriendo de medio lado lo que hizo que el cantante también sonriera

-          Por cierto ¿Qué era eso por lo que le diste las gracias hace nada?

-          Fue él quien decoró y trajo la cena de anoche

-          ¿eh?

-          Lo sé, no es como si me agradaran mucho pero tenía poco tiempo así que tuve ayuda. Tu manager arreglo lo de la cena, Hiwatari tuvo la idea de la canción a mitad del concierto de BL, Nakano y Fujisaki compusieron la música, yo escribí la letra, y fue el loco del conejo quien consiguió el permiso de Thoma y nos prestó la casa para planear todo.

-          Yuki...

-          Así que tienes el día libre, ¿qué te gustaría que hiciéramos, quieres ir a algún lado? – el menor lo miró sonriendo, lo miraba con deseo haciendo que al escritor lo recorriera un escalofrío, al parecer se quedarían en la cama todo el día.

 

+++++++++++

 

No quería irse y al mismo tiempo quería hacerlo, demasiado tarde para decidirlo tal vez, ahora mismo estaba dándose una ducha rápida antes de ser llevado por su amante directamente al aeropuerto. El agua caliente caía delicadamente por su espalda, el líquido que se deslizaba por sus piernas era la prueba de la agitada agenda de pasión de las últimas horas.

 

Salió de la ducha y vio su reflejo, apenas se notaba algo de lo que había sido semanas antes, sonrió, sus ojos brillaban de nuevo y las marcas en su cuello y pecho lo hicieron sonrojarse, ¿cómo había sobrevivido esos meses sin su amado Yuki? Daba igual, ahora estaban juntos de nuevo, sabía que no se verían en una buena temporada pero aun así, el saber que la mente y los sentimientos de rubio estaban con él lo dejaba en un estado de paz.

 

En la cama de la habitación había una muda de ropa limpia, no era suya, si no del rubio que por algún motivo había accedido a “prestarle” una de sus camisas y uno de sus jeans aunque sabía que le quedarían algo grandes. Se puso la ropa interior y el pantalón, acercó la camisa aspirando el aroma del escritor en ella a pesar de que se encontraba limpia y terminó de vestirse.

 

-          ¿Estás listo?

-          Si – sonrió volviéndose a su amante

-          Vamos entonces, antes de que tu manager mande al ejército a buscarte.

 

El viaje fue corto, y algo silencioso, ¿qué podrían decirse? No era un adiós, solo una despedida momentánea. Al llegar al aeropuerto el mayor tomó su mano, y caminaron por los pasillos hasta encontrarse con el resto de Bad Luck y Nittle Grasper que solo los saludaron de lejos sin querer interrumpir.

 

-          Hello boy, Mr Yuki – El escritor solo asintió

-          Hola Mr K.

-          Llegas a tiempo, las maletas ya fueron registradas en un rato más nos marcharemos

 

El tiempo pasó rápidamente hasta que el anuncio del vuelo fue anunciado, debía marcharse, el rubio lo estrechó en sus brazos, Shuichi correspondió, después se puso en las puntas de sus pies y tomó el rostro de su amado dándole un beso en los labios.

 

-          Debo irme Yuki – unas lagrimitas traicioneras luchaban por no ser derramadas

-          Lo sé, no llores, no será tanto tiempo, además te llamaré a tu celular y puedes llamarme siempre que quieras. Además hay una probabilidad de que pueda visitarte en unos meses si la editorial se presta.

-          ¡¿De verdad?! – los ojos violetas se iluminaron

-          Si, de verdad, solo procura no perder el teléfono

-          No lo perderé

-          Y otra cosa – el rubio sacó un mp3 color rosa chicle de la bolsa de su saco y se lo entregó al menor – esto es para ti, escúchalo cuando vayas en el vuelo

-          Gracias Yuki *w*  Te amo

-           

-          También te amo baka – el pelirosa le dio otro beso y sintiendo sus emociones encontradas fue a la sala donde los demás lo esperaban

                                                                       

Soltó un suspiro al verlo marcharse, sonrió con algo de melancolía, apenas se había ido y ya lo extrañaba, y eso era claro, algo que no iba a admitir abiertamente

 

-          Wow, sí que lo vas a estrañar ¿no Eiri? – el aludido dio un bote en su sito

-          ¿No deberías ya estar de ese lado también Thoma?

-          Sip, pero quería darte un pequeño obsequio antes de irme, toma – extendió un sobre amarillo hacia el rubio – esto es de parte de Ryuichi y mío, nos veremos pronto Eiri – se alejó dejándolo solo

 

++++++++++

 

Subieron al avión, tenía el asiento de la ventana y sentado junto a él estaba su mejor amigo.

 

-          ¿Estás bien Shu?

-          Sí, todo en orden – le sonrió a su amigo acomodándose mejor en el asiento y asegurando su cinturón, saco de su bolsillo el obsequio que le había dado Yuki hace nada

 

La lista de reproducción tenía apenas dos archivos de sonido, lo que se le hizo extraño al ojilila hasta que puso “play” y distinguió una voz muy familiar para él.

 

-          “Si estas escuchando esto es porque ya debes ir en el avión, sé que debí decírtelo personalmente pero no sabía cómo así que mientras que tú dormías como si no hubiera un mañana durante la madrugada me tomé la libertad de grabarte esto. Espero que tu viaje sea bueno y aprendas, veas y experimentes todas esas cosas que esperas. Estaré esperándote cuando regreses, cuídate del par se zopilotes que tienes cerca; y sí hablo del loco del conejo y el imbécil de Hiwatari que aunque me aseguraron que los rechazaste no me dan confianza” – el menor rio ante esto último – “cuídate y ten un buen viaje, te amo baka”

 

El segundo archivo de la lista de reproducción se inició casi enseguida, Shu ahogó un sollozo al darse cuenta de que se trataba, era la canción que le cantó Yuki el día del concierto. Rápidamente sacó su celular y envió un mensaje de texto

 

-          “yo también te amo Yuki”

 

 

++++++++++

 

 

EPÍLOGO

 

Habían pasado ya 2 meses de iniciada la gira se encontraban en alguna parte del sur de japón, todos estaban muy entusiasmados por las reacciones del público a las canciones nuevas, incluyendo las cantadas en dueto con Hiwatari. Era un día como cualquier otro en el que ellos fingían trabajar y su manager fingía tenerles paciencia no matándolos con su magnum. Seguchi Thoma entró a la sala de reuniones que Hiwatari Nahomi dispuso para ellos en esa zona y los vio al punto de colapso, se acercó a Mr K

 

-          K ¿Qué es lo que pasa?

-          Shuichi ha perdido la inspiración y Fijusaki ya se exasperó, tal vez debería volarle los sesos al pink boy pero es más divertido ver como lo tortura tu primo

-          ¿por qué ha perdido la inspiración? – observó a lo lejos a un lloroso Shu que sostenía su teléfono celular en las manos maldiciendolo

-          Well, parece que hoy Mr Yuki ha estado lo suficientemente ocupado como para no contestar sus llamadas, ya le dije que podría estar trabajando o en una entrevista pero no entiende razones

-          Ya veo – sonrió – Shindou, ¿qué sucede? – la atención del menor se centró en su jefe

-          Es que... es que... Yuki no me contesta el teléfono – se tiró haciendo uno de sus clásicos berrinches

-          Tal vez esté ocupado trabajando o en una entrevista

-          ¿y si le pasó algo malo?

-          Si eso fuera ya lo sabríamos ¿no crees? Te diré un pequeño secreto  - le guiñó el ojo al menor en complicidad – Mika está vigilándolo así que no te preocupes por él

-          ¿De verdad Seguchi?

-          De verdad – se incorporó mirando a K y el resto del grupo – ya es tarde, ¿por qué no se retiran al hotel por hoy?

-          Pero...

-          Solo por hoy Suguru, de todas maneras en este estado Shindou es más inútil que Nobita* debemos dejarlo descansar y  mañana vendrá a trabajar con todas las ganas del mundo o le decomisaremos su teléfono – miró al pelichicle dándole una de sus clásicas sonrisas - ¿Estás de acuerdo verdad Shindou?

-          S... si  ^_^U

 

 

Caminaron hacia su hospedaje, el vocalista intentaba comunicarse con el escritor de nuevo pero nada, soltó un sonoro suspiro, saliendo del ascensor se dirigió a su habitación separándose de Suguru y Hiro, ellos compartían cuarto mientras que él tenía uno propio.

 

Justo antes de abrir la puerta de su habitación escuchó un sonido, era el sonido de teclas de una laptop, una laptop que él conocía muy bien, se apresuró a entrar llevándose la mejor sorpresa del día

 

-          Tardaste demasiado en volver baka – levantó su vista hacia el recién llegado

-          Yuki...YUKIIII!!! – se arrojó a él recibiendo un coscorrón

-          Cálmate o tirarás mi computadora – ambos se sentaron en la cama

-          Pe... perdón ¿Cómo es que...? ¿Cuándo llegaste?

-          Hace como dos horas, Thoma me aseguró que estarías aquí hace ya un buen rato pero me has tenido esperando

-          ¿Seguchi sabía que venías?

-          Si, el día que salieron me dio un sobre con todas las paradas de su gira, y los lugares donde se hospedarían, ha hecho reservaciones para mí también pero no pude viajar antes, hablé con mi editora en cuanto acabamos lo de la publicación anterior y ella aceptó viajar a verme cada que fuera necesario. – el menor lo miró como no comprendiendo – lo que quiero decir es que un año y medio es demasiado tiempo para esperarte así que viajaré contigo el resto de tu dichosa gira.

-          YUKIIII!!! – se arrojó emocionado sobre el mayor tirándolo sobre el colchón, con el rubio junto a él sentía que cualquier lugar era su hogar – Te amo

-          Yo también te amo baka

-          estoy en casa...

-          bienvenido Shu...

 

 

 

Notas finales:

Gracias por leer :)

*Nobita de Doremon


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