Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Alguien quién solía conocer. por Naoko-san

[Reviews - 15]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Todos los personajes de Naruto pertenecen a Masashi Kishimoto.

Excepto Jintane, creación mía c:

Espero les guste.

 

Notas del capitulo:

¡Espero les guste!

 

Estaba decidido, hoy le encararía. Caminé firme por los pasillos, los demás me miraban con la típica sonrisa de esperanza, de que algún día valla y les hable. Lástima que no pasará. No tengo ni la mínima intención de averiguar el nombre de alguno.

Paso de largo de todas aquellas miradas embobadas, y llego a mi casillero. Al lado de la pared, y me recargo en éste.

Esperando que él llegue.

Pasan tal vez cinco minutos cuando escucho a lo lejos su estrepitosa risa, es tan fácil de percibir. Es tan burlesca y chillona, pero a la vez tan irritante.  Cuando me ve tendido sobre la pared, conecta su mirada con la mía un par de segundos y luego la aparta.

Se acerca a mí, pero no para hablarme. No, es lo que menos quiere hacer. No desde que está en su mundo. Va acompañado de su novia, su ‘linda’ novia. En fin, se acerca pero para ir a su casillero, que está justo al lado mio, ¿por qué? Nosotros lo habíamos pedido al ingresar a clases hace unos años, ya no podíamos hacer nada contra aquello. No tomarían en cuenta nuestra solicitud de cambio.

Nos dirían, “¿Qué? ¿Por qué? Si siempre han sido los mejores amigos” y cosas así. Realmente es exasperante.

Lo miro por el rabillo del ojo, y veo como saca sus cosas. Su novia, la cual es bastante tímida sonríe sonrojada y yo arrugo el ceño ante aquello. ¿Cómo puede estar feliz con ella?

Antes de alejarse con esa sonrisa de bobo, le tome de la solapa de su camisa. Se quedo parado mirándome buscando alguna respuesta. Me miro algo, ¿molesto? Tenía tiempo que no veía aquella mirada. Siempre me la dirigía cuando bueno, mejor omito aquello.

Le mire con la misma molestia impregnada en mis ojos, y creo que percibió el dolor que siento al mirarle, por que suavizo enseguida la mirada.

Nuestras miradas se conectaron por unos segundos y creo que él está sufriendo igual que yo.

Pero… ¿sería posible? Digo, el que no demuestra no quiere.

Con una voz que sonó algo quebrada para mí-un Uchiha perfecto, cabe mencionar-dije: —Necesitamos hablar.

Aquello no fue ni una petición ni un por favor, fue una orden y él lo percibió. Dio una pequeña risita nasal y asintió, se rasco la cabeza para sonreírme de manera rara, no quería ver falsas sonrisas en él.

Un carraspeo nos interrumpió, la mire y era ella.

Creo que la intimide con mi mirada por que se alejó un paso hacia atrás. Me dio risa aquello, pero no deje mi mirada intimidante.

—¿P-podríamos irnos Naruto? —tartamudeó nerviosa.

Él asintió y le tomo la mano. Antes de irse me tiro un papel en la frente.

Lo tome a regañadientes y lo leí “nos vemos en el receso, en la azotea”

¿Había aceptado conversar conmigo, después de todo? ¿Tan fácilmente?

¿Cuando lo escribió? Quizá mientras yo me entretenía intimidando a su novia. Quizá lo tenía preparado de antes. Quién sabe.

Suspire y tome mi bolso entre mis manos, y camine por el pasillo buscando el salón donde me tocaba mi próxima clase.

—No puedo creer que lo sigas intentando—escuche una voz femenina a mis espaldas. Mire y era Jintane, que me miraba molesta con sus ojos café.

—Eso es mi problema—le respondí molesto. ¿Quién se cree para meterse en mi vida? Sé que es mi prima pero no tiene por qué andar interfiriendo en mi vida.

—No entiendo tu lógica, Sasuke—musitó fastidiada—, digo. Si uno se corta y se abre una herida, enseguida quiere curarla. Pero tú… dejas expuesta esa herida. No, ¡la sigues ampliando! Realmente no te entiendo.

—Si no duele, no sirve—contesté. Ella tenía razón, pero… de alguna manera ella no lo entiende.

—Eso es lo que decía él—suspiró ella.

—Lo sé—contesté sin ganas de hablar. Me despedí con la mano y camine hacia mi salón.

Llegue y el profesor aun no llegaba.

Me senté en mi asiento habitual, y otra vez la risa boba inundo el lugar. Me golpee la frente, olvidé que nos tocaba historia juntos. Mierda.

Sentí un golpe en mi nuca, era una bola de papel. Voltee y la tome, a regañadientes la abrí.

“Uchiha Sasuke, marica”

Me pare enojado, y lo fui a botar al basurero. Les di una mirada fulminante y enseguida se quedaron callados. Meterse con un Uchiha era como un suicidio.

Camine a mi asiento nuevamente y me senté.

Como faltan algunas cinco horas, tal vez sea interesante explicarles de que va todo esto. O tal vez no, ¿me importa?

Mis pensamientos fueron interrumpidos por alguien que me jalaba la chaqueta para que le prestara atención.

Alcé la visa y fruncí el ceño.

—¿Puedo sentarme a tu lado? —pregunto él con una voz ansiosa.

—¿A qué juegas? —le pregunté, pareció no entender— como sea, si quieres. Siéntate.

—No, yo me sentaré con Sasuke —la voz de Jintane sorprendió a Naruto—. Claro, si no te importa. Quiero copiarle la tarea, por favor—rogó.

El parecía desilusionado.

—Claro—respondió con un tono de voz algo bajo para ser él.

Se alejó y se sentó a su novia, que le miraba con una sonrisa. No sé si puedo odiarla más de lo que ya lo hago.

—Gracias—le susurré a Jintane. Ella me hizo un gesto con la mano con una sonrisa de oreja a oreja y se sentó a mi lado.

La verdad es que le mentí, no me hubiera matado sentarme con Naruto.

Como decía, em. Tengo dieciséis años y voy en segundo medio*.

Tengo una buena reputación, la mayoría de los hombres me odian por mi personalidad algo… neurótica. Pero la mayoría de la población —para mi desagrado—me ama.

Me manda cartas, flores, etcétera. Un montón de cursilerías para que les hiciera caso.

Los hombres se han esforzado en expandir el rumor de que soy gay, tanto se han esmerado que ya hay gente que lo cree. Pero soy un Uchiha y no caeré tan bajo como para discutir con ellos. Que crean lo que quieran.

Ah sí, soy algo bajo. Mido 1,62 y creo que es bajo para mi edad. Es algo molesto, piensan que con mi altura no puedo devolverles los golpes. Cosa que hago, les gano siempre. Y con ayuda de Naruto les dábamos una paliza.

Ah, con Naruto.

Éramos los mejores amigos desde que teníamos diez años, o sea desde quinto básico, o cuarto. En fin, no recuerdo con exactitud aquello.

Comenzamos a salir más o menos a las mitades de octubre del año pasado, me declaré en el día de su cumpleaños. Fue algo paradójico, bueno. Fue raro.

Para resumirlo, digamos que me enteré de mala manera que se iría de viaje por su cumpleaños, pero… me cambiaron la información. Él se iba sólo por dos días, pero me habían comentado que no volvería a la ciudad de nuevo. Yo quede mal, ¿cómo se supone que tenía que reaccionar? Partirían el mismo día de su cumpleaños. Obviamente él no me mencionó nada, luego me explico que era para que no me preocupara.

En fin, ese día salí apurado ya que me había por lo menos decidido declararme antes de que se fuera. Es lo menos que podía hacer.

Corrí por una calle, como iba apurado y jadeante no vi como casi me atropellan. Casi, sí. Caí en una posa llena de lodo, fue asqueroso. Como tenía poco tiempo, ya que se irían al aéreo puerto a las once y quedaban quince minutos, no reparé en aquello y sucio, con el orgullo herido corrí.

Llegue y al parecer la chiquilla esa de Hinata había tenido al misma idea que yo. ¿Le habrán cambiado la información igual qué a mí?

La cosa es que llegue, salte la reja del patio trasero y la vi a ella, sonrojada. Agachada haciendo una reverencia. Se había declarado antes que yo.

Recuerdo que carraspee interrumpiendo el momento, como Naruto no respondió y me vio todo lleno de lodo, se vino a ayudarme.

Ella tal vez tuvo esperanzas por un minuto. Yo sabía que ella lo quería, pero dudo que de la misma manera que yo lo hacía. Digo, hago.

Me apresure y le grité enfrente de ella que lo quería. Que no permitiría que se fuera y él sólo dio una—boba—carcajada.

Obviamente Hinata quedo sorprendida, me dio una mirada un tanto rara y yo le intimidé con mi mirada.

Naruto como es impulsivo y no reparo que la chica aún esperaba una respuesta, se acercó a mí sonriente. Me limpio la boca llena de lodo y me estampo un—doloroso—beso.

Yo con los ojos abiertos vi como la chica se afligía y retenía las lágrimas. Yo cerré los ojos y disfrute obviamente el contacto.

Luego de eso comenzamos a salir, ah sí. La persona dedicada a cambiar la información había sido Ino. No volveré a quedarme sólo con las palabras de ella.

Estuvimos juntos unos seis meses. La verdad es que yo no cambié mi actitud con él, y como éramos novios él se puso más sensible a cada palabra que yo decía. No cuide mi forma de hablarle, no me mantuve y simplemente actué sin pensar. Lo herí demasiado.

La verdad es que ni cuenta me di cuando me comunicó que ya lo nuestro no tenía sentido, yo me derrumbé. No se lo demostré, asentí y el sugirió que siguiésemos siendo amigos. La verdad yo… no lo pude superar. No es fácil, tuve yo la mayoría de la culpa, aunque él tampoco quiso escucharme. Acepté sobre volver a ser mejores amigos, pero debo admitir que muy por dentro, me quite un peso de encima.

Él era tan feliz que decía que podía morir, ¿para qué negarlo? Yo me sentí absolutamente igual.

Paso la clase muy rápido para mi agrado.

Tome una bocanada de aire, y recogí mis cosas. Me despedí nuevamente de Jintane y le comenté que tenía que hacer, lo que tenía que hacer. Ella entendió y me dio una sonrisa para animarme.

Camine algo inseguro. Tengo que hacerle frente. Tengo. No puedo aguantar más vivir así, estos dos meses han sido un asco.

Al final del extenso pasillo están las escaleras que dan a los tres pisos. Luego de subir llego a la azotea. La puerta como siempre está cerrada con llave, pero sé donde está escondida la llave. Al lado de la puerta hay una planta muy grande, allí siempre dejan la llave por emergencias. La tomo, abro la puerta y la dejo donde estaba.

Sólo yo y Naruto sabemos que existe aquella llave en la planta. No debe tardar en llegar.

Abrí y para mi sorpresa ya estaba allí, esperándome.

Me hubiera gustado decir que estaba solo, pero no. Estaba con ella, aferrada a su brazo.

Arrugue el ceño.

¡Sólo yo y él conocíamos la llave a la azotea!

De alguna forma me hizo sentir decepcionado y triste que era tuviera ese derecho, uno que habíamos dicho no romper. Parece que percibió el dolor en mi mirada por que esquivo la mirada. Mordí mi lengua, dolía estar en el mismo lugar.

Camine y me puse a unos dos metros de ellos. Naruto volvió a mirarme. Quería gritarle, quería gritarle lo mal que me sentía y todo lo que siento, todo el enojo y frustración que me hacía sentir estar cerca de él y en especial de ella.

—Sobre lo que querías hablar—Naruto rompió el silencio.

—Sí… —tome aire, ¿por qué tenía que traerla? Sería más fácil hablar con él a solas. Pero eso a la vez me hace incrementar mi rabia. De alguna manera podré ser más directo—. Mira, no me interesa si está tu noviecita escuchando todo, diré todo conciso y claro. Escúchame y no te dejaré hablar hasta que yo termine, ¿entendiste, Uzumaki?

—Entendí… Uchiha—se sorprendió por mi tono de voz. Habían pasado meses desde que nos dirigíamos la palabra. ¿Viva el orgullo? Véase el sarcasmo.

—Estoy harto de tu actitud, estoy harto de todo. ¿Crees que no duele? —Comencé—, tú decidiste terminar esto. De alguna manera fue un peso menos, ¡pero aun así! Tu mismo dijiste que podíamos seguir siendo amigos—mi voz había adquirido un tono un poco más prepotente—. No tenías que apartarme así de tu vida, ignorarme por todos estos meses y hacer que entre nosotros no paso nada. No hacía falta fingir que sólo somos extraños, me tratas como un desconocido y se siente tan mal.

—Sasuke…—Musitó. Le mire de manera agresiva para indicarle que no hablara aún.

—Y ni si quiera necesito tu amor, lo superaré—sonreí de manera orgullosa—, No era necesario caer tan bajo. Borrar todas mis fotos y cambiar tu número. Sinceramente eres tú el cobarde, no yo. Yo me abrí, yo fui sincero, sé que sufrimos juntos y todo ese atado. Pero si estoy atado a alguien más que no seas tú sinceramente no siento absolutamente nada—me acerque un poco más—, no es necesario que resista. Porque ahora eres alguien a quién solía conocer.

Me aleje y trate de irme caminando, pero me retuvo una mano en mi brazo.

—Sasuke—se había soltado de Hinata. Me removí tratando de soltarme, él obviamente tenía más fuerza que yo, midiendo 1,75 y aquí uno mirando desde abajo, que hostigoso.

—Dime, Uzumaki—sonreí de manera falsa.

—Esto no se quedará así. Volveremos a ser lo de antes—sonrió de manera sincera. ¿Pero qué dice? ¿Acaso quiere seguir intentándolo?

—La primera por amor, ¿No? —comencé, el pareció no entender—, la segunda por que parecía que el destino estaba de nuestro lado. ¿La tercera, por qué? Pregúntatelo, tienes una hermosa novia que es lo que siempre quisiste—mire a Hinata para luego volver a mirarlo—. No me digas que te acabas de dar cuenta el error que cometimos al salir juntos—me solté de su agarre.

—La tercera por que ambos sentimos lo mismo—dijo impulsivamente. ¿No se da cuenta el daño qué le hace a las personas? Digo, me hace sentir fatal escuchar aquello. Y supongo que a la chica igual.

—Piensa lo que dices—conteste tajante—, es lo que siempre me decías. No era necesario apartarme así de tu vida, fuimos mucho tiempo amigos y tenemos más recuerdos de los que tendrás con tu novia como para que me ignores así. Aférrate a las consecuencias, Uzumaki.

—Ya verás, arreglaré todo.

—Sólo eres alguien a quién solía conocer, aléjate de mí—me di la vuelta. Sentí un sollozo, no me interesa si ella está llorando. Se lo tiene por interferir—, lo que más me jode Uzumaki... es que olvides todo lo que pasamos—dije antes de irme.

Sentí que me gritaba pero baje la escalera mordiéndome la lengua. Soy un Uchiha, no lloraré por alguien tan insignificante.

—¡Volveré a entrar en tu vida! —sentí un grito.

Me quede parado a mitad de las escaleras, sonreí con prepotencia y seguí bajando.

No tendrías la misma suerte dos veces, Uzumaki.

Notas finales:

¿Review?

Por cierto, enseñanza media. Es la segunda etapa de como se rige la escuela en Chile. Parte de primero básico (6 años apróximadamente), luego segundo básico (Siete años), tercero y así. Hasta octavo básico (apróximadamente trece años), luego empieza la enseñanza media. Que va de primero medio a cuarto medio (O sea hasta los dieciocho más o menos), luego la Universidad. Etcétera.

¡No resistí narrar un AU escolar! ñau xd

Espero les haya gustado.

 

Adiós <3


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).