Capitulo # 1 La Boda
Hay muchos misterios en este mundo… y uno de ellos es esta tienda. Una tienda en la que se conceden deseos. Una tienda repleta de todo tipo de secretos, cuyo dueño vive en un tiempo detenido. Esta tienda existe, aunque en ella no puede entrar cualquiera. Solo cuando un vinculo se establece, cuando llega el momento, aquel que lo necesite podrá ver la tienda y conocer a su dueño. En esta tienda cualquier deseo puede verse concedido… si se paga el precio adecuado.
~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.
–Arigato, – decía Haruka-san agradeciendo a Watanuki Kimihiro por haber cumplido su deseo.
Watanuki había transformado la pesadilla de Doumeki en un buen sueño, utilizando el globo que el comerciante de los sueños le había dado como pago por un deseo anteriormente.
–Haruka-san – decía Watanuki, – antes de conocerme, Doumeki… no tuvo ningún encuentro con este tipo de seres, ¿no es verdad? – preguntaba Watanuki refiriéndose al poderoso espíritu que se le había acercado en ese sueño, del cual Watanuki se encargo de transformar.
–Así es… al principio su aura era tan poderosa que ningún espíritu se acercaba a el. – respondió Haruka-san a la pregunta del Kimihiro.
Watanuki comprendió lo que el abuelo de Doumeki decía con sus palabras, el porque todos los espíritus que habían perseguido a Watanuki y a Doumeki durante todo este tiempo.
–No importa lo lejos que dos personas estén, sus destinos ya están irremediablemente entrelazados. Una vez se han conocido todo esta escrito. Así son las cosas, y el hecho de que ese vínculo se mantenga depende de tu propia voluntad. –
~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~
Watanuki despertó dentro de la barrera que había preparado de antemano con la ayuda de Maru y Moro, – bueno, parece que la persona con la que poseo un vínculo de este lado… ya ha llegado – dijo Watanuki al sentir a aquella persona dentro de su tienda.
Watanuki se dirigió hasta donde Doumeki se encontraba esperándole.
– ¿Ya has terminado con el encargo que te habían hecho?, – pregunto Doumeki mientras observaba a Kimihiro acercarse a el.
– Si– respondió Watanuki sentándose a su lado.
La noche era oscura, pero aun así el resplandor de la luna hacia de aquel lugar donde se encontraban, un lugar claro y agradable de estar.
Doumeki se encontraba en la tienda de Watanuki por una razón… – Valla, ¿ya están listas las invitaciones? – pregunta Watanuki al ver a Doumeki sacar de su portafolio una invitación y extendiendo su mano para entregársela a Watanuki.
–Si, esta es la tuya – dijo Doumeki entregándosela, con su rostro inexpresivo.
Aunque Watanuki se negó a tomarla en un principio, termino tomando la invitación que Doumeki le hacia.
Watanuki, tomo el sobre y lo observo, en el sobre decía: “Marido: Shizuka Doumeki y Esposa: Kohane Tsuyuri”. Era una invitación por el matrimonio de Doumeki, y Kohane-chan.
– ¿Están seguros tu y Kohane de lo que van a hace? – pregunto Watanuki mirando a Doumeki. En su mirada tal vez, esperaba una respuesta la cual no le iba a ser la deseada. – igual, Kohane-chan te ha escogido a ti, cuida bien de ella. – Dijo Watanuki, en si tono de advertencia hacia Doumeki.
–Lo hare, pero que sepas que la persona mas importante para Tsuyuri… eres tu – dijo Doumeki mirando a Watanuki.
La ultima pregunta de Watanuki fue, que si a Doumeki le importaba, que fuera el la persona mas importante para Kohane-chan, a lo cual Doumeki respondió que no le importaba, si Watanuki era lo mas importante para ella.
Seguían conversando un poco mas de la boda de Doumeki y Kohane, mientras mas hablaban del tema, Watanuki se sentía aun mas extraño, un vacío que no entendía, según el tal vez porque su querida Kohane-chan alguien a quien llego a querer mucho, se casaba con la persona que mas detestaba, según Watanuki, esa persona era Doumeki, “si, eso debe ser” se decía en su interior sin demostrar aquello que estaba sintiendo.
~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~
–Watanuki, Watanuki ¿tuviste un mal sueño? – Preguntaban Maru y moro que estaban a los lados de Watanuki quien se despertaba un poco agitado, que parece hubiese tenido una pesadilla.
– ¿He?, no – respondió sonriendo y besando las frentes de las niñas. “hoy beso a Maru primero, ayer beso a Moro primero, antes de ayer beso a Maru primero… “y así discutían traviesamente las niñas, mientras Watanuki se levantaba y cambiaba sus ropas.
–“¿Qué diablos fue eso?” – se preguntaba Watanuki, en sus pensamientos, aquel sueño que había tenido, hacia que su corazón latiera rápidamente y a la vez doliera.
Watanuki se sentó, en la sala principal donde suele recibir a quienes visitan la tienda. Tomo aquel cigarro largo el cual siempre fumaba, el mismo que utilizaba Yuuko.
–Yuuko-san… – dijeron sus labios soltando un poco de humo. Y recordaba y se preguntaba… – Yuuko-san, ¿Qué significado tiene mi sueño… Yuuko-san – dijo en voz baja, sin darse cuenta de la mirada de dolor que le observaba, Mokona con una mirada que mostraba preocupación por Watanuki.
Se acercaba lentamente con la orejitas medias gachas, – Nē Watanuki –decía Mokona acercándose a Watanuki quien se encontraba fumando.
– ¿Qué quieres Mokona? – dijo indiferentemente Watanuki mientras seguía fumando.
–Hoy es la boda de Doumeki– decía aun con cara preocupada.
–Lo se – Watanuki respondió indiferente al tema.
Mokona se quedo en silencio observándole sin quitar su preocupada mirada. –Y… –
–No pienso ir, no puedo salir de la tienda – dijo rápidamente Watanuki evadiendo todo lo que se le ocurriera decir a Mokona.
Mokona bajo aun mas sus orejas retirándose dejando a Watanuki solo… –no me refería a eso– dijo Mokona en un susurro ya estando lejos de Watanuki.
Watanuki se quedo ahí, sentado arre costado, fumando esperando que algún cliente llegara, pero parecía que el día de hoy no llegaría ninguno. El día transcurrió lentamente para Watanuki que aun no se podía sacar aquel sueño de la cabeza, y no dejaba de pensar en Yuuko. Ya estaba anocheciendo, Watanuki se movió de lugar sentándose frente al jardín, mirando las flores de cerezos que comenzaban a florecer.
–Ya deben estar casados – susurro, aun hilo del voz como si del viento se tratara. Se quedo en silencio por lo que quedaba de la noche, dejándose perder en su mirada.
Mokona lo observaba desde una esquina del jardín. –Watanuki… aun no te das cuenta– dijo Mokona perdiéndose por la parte trasera del jardín.
Watanuki seguía sentado, y la noche seguía cayendo, cada vez se tornaba más oscuro. Ya era bastante tarde, Maru y Moro se acercaron a él ya listas para ir a dormir, pero Watanuki planeaba quedarse un rato mas así que les pidió se durmiesen primero, obedeciendo Maru y Moro se fueron a dormir. Watanuki se quedo por más tiempo allí sentado mirando hacia el cielo el cual lucia estrellado. Después de un rato, decidió ya retirarse a dormir, se levanto, dando media vuelta para entrarse pero al primer paso se detuvo sintiendo como llegaba alguien a la tienda. – ¿Qué haces aquí… Doumeki? – dijo Watanuki cerrando sus ojos volteando y llegando a ver a Doumeki que estaba en la entrada de la tienda.
–Vine a verte – fue lo único que respondió Doumeki a la pregunta de Watanuki, lo cual le dejo sorprendido, Watanuki no pudo entender esas palabras.
Después de unos segundos de silencio habló. – ¿Qué se supone que significa esto… hoy fue tu boda con Kohane-chan, no deberías estar aquí – dijo algo desafiante Watanuki. Ya que se trataba de Kohane-chan el hecho de que la dejara sin ningún motivo en su noche de bodas le enfurecía… ¿Qué diablos hacia Doumeki aquí? Era lo que se preguntaba Watanuki sin obtener respuesta.
Hubo unos segundos de silencio, parecía que Doumeki no fuera a responder la pregunta antes dicha por Watanuki. Lo cual le enfureció aun más. –Bastardo. – dijo frunciendo el ceño.
– Tsuyuri fue quien me pidió que viniera – al fin hablo Doumeki. Ante lo dicho la cara de asombro de Watanuki era evidente, no entendía el hecho de que Kohane-chan haya enviado a Doumeki a la tienda.
–Dices… que… ¿Kohane-chan pidió que vinieras? – pregunto Watanuki algo desconcertado aun.
–Si – respondió secamente Doumeki. Ante esta reacción Watanuki recordó lo que anteriormente habían platicado. El hecho de que Watanuki siga siendo la persona más importante para Kohane-chan… tal vez eso realmente le importaba a Doumeki, aunque había dicho lo contrario.
–Me dijo que permaneciera a tu lado esta noche – respondió Doumeki, sin expresiones en su rostro. Sin embargo el rostro de Watanuki, expresaba asombro por lo que Doumeki le había dicho.
–Pero, se acaban de casar es su noche de bodas… – dijo Watanuki un poquito exaltado por la impresión. Se quedo en silencio recobrando su postura. – Vete – dijo después de unos segundos.
–No puedo hacerlo – dijo seriamente Doumeki. – ella sabia que te reusarías. Le prometí que no regresaría esta noche. – dijo seriamente.
Watanuki se quedo en silencio asimilando lo dicho por Doumeki, ya él que pasaría su noche de bodas con Watanuki.