Desarmar
Hasta cierto punto, la medicina es una ciencia.
Naruto y Gaara estaban recostados en la cama. Era por la mañana, y la cálida luz del sol bañaba la habitación a través de la ventana.
-Pasasteis seis horas en la barca-dijo el pelirrojo.
-Si.
-Y hablasteis de pesca.
-Si.
-Durante seis horas.
-Fundamentalmente.
-Naruto...
-¿Qué quieres que diga?, fuimos a pescar, hablamos de pesca.
-Quiero que me lo cuentes...-dijo apenado.
-Eso es todo.
-Pescó un pez y lloró no es todo.
-Te digo que eso fue todo. Fue todo lo que ocurrió.
Gaara suspiró-estoy cachondo.
-Oh, dios-empezó a desnudarse con premura, y el pelirrojo le imitó.
-Me has robado a mi mejor amigo, eso no está bien. No está bien que salgas con él como si yo no existiera.
-¡Que no salgo con él!¡sólo intento ayudarle!-dijo quitándose la ropa interior.
-¡Llevándotelo por ahí!
-¿Lo hacemos o no?-el pelirrojo ya desnudo, contemplaba el techo.
-Estoy enfadado, no quiero mirarte.
-Pues date la vuelta-respondió el otro bastante excitado.
Yo diría que también es un arte. Los médicos que ven la medicina solo como una ciencia no te convienen cuando tengas una hemorragia o cuando tu hijo grite de dolor.
Unos desnudos Kakashi y Sasuke se acariciaban y besaban en la cama.
-Estás muy diferente, te veo mejor-dijo el peliblanco acariciando los cabellos carbón. El menor sonreía.
-Me encuentro mejor.
-¿Enserio?
-Si.
Le besó en la frente-¿tienes planes?
-Creo que hoy voy a explorar la ciudad.
-¿De verdad?
-¿Sabes?, antes no tenía tiempo...ni interés.
Los clínicos se guían por las normas. Los artistas por su instinto. Los artistas siente tu dolor y se desviven por detenerlo.
Kiba y Kankurô, desnudos, se besaban apasionadamente en la cama. Hasta que Inuzuka hizo ademán de levantarse. El otro le detuvo sujetándole de un brazo.
-No-dijo, le atrajo hacia si y le besó de nuevo.
-Llegaremos tarde...
-Vale-detuvo el beso-vete.
Kiba le miró durante unos segundos y le besó otra vez.
En las medidas extremas acaba la ciencia y empieza el arte.
Sasuke paseaba por la ciudad con un mapa en la mano. Iba tranquilamente hasta que varias ambulancias en dirección contraria le hicieron voltear la cabeza. Sin pensarlo demasiado, las siguió.
Kakashi salió de los vestuarios, anduvo un poco y al llegar a una sala de espera se encontró a muchos de sus compañeros. Varias enfermeras lloraban y algunos médicos, incluida Hinata. Todos contemplaban un televisor, las noticias informaban de un tiroteo en un instituto de la ciudad.
Con premura todos salieron a la entrada de ambulancias. Hinata seguía llorando y los demás estaban cabizbajos. Kankurô temblaba y se rodeaba con sus propios brazos. Shikamaru les habló.
-Hay quince ambulancias en camino, tal vez vengan más. La primera llegará en tres minutos.
-Chicos...-Jiraiya les contempló-el tiroteo está reciente y aflorarán sentimientos. No hay porque avergonzarse. Quiero decir que lo que nos pasó hace seis meses les pasa a ellos ahora. Ellos son nuestros hermanos. Nuestros compañeros de viaje. Son como nosotros. Vamos a esforzarnos al máximo y hacer nuestro trabajo primero. Dejad los sentimientos a un lado.
Kiba miró a su prometido- Kankurô...
-Estoy bien-mintió-muy bien.
-Ve a urgencias a comprobar las reservas de sangre-pidió Kakashi.
-Estoy bien-repitió el chico.
-Llama al banco de sangre-ordenó esta vez el cirujano plástico-que nos den todo el cero negativo que haya.
Hinata y Jiraiya se ocupan de un policía que recibió varios disparos. Naruto y Gaara de un profesor que se cayó desde un cuarto piso. Rock Lee y Kiba de una adolescente. Temari de un adolescente y cuando abren las puertas de la ambulancia, dentro se topa con Sasuke que taponaba la herida del paciente con una de sus manos. Sasuke entra en el quirófano y además contarán con la colaboración de Itachi.
En las noticias informan de que hay más víctimas por lo que esperan recibir doce heridos más. Pero en el hospital no dan a basto y los quirófanos están todos ocupados. Caos.
Gracias a la descripción de un policía, descubren que el paciente al que ayudó Sasuke es el que disparó en el instituto. Aún así deben seguir operándole y Sasuke, sorpresivamente, parece estar bien. Itachi abandona, no quiere salvar la vida a alguien así, se va seguido de varias enfermeras.
Naruto operaba al profesor con la ayuda de Gaara, pero el pelirrojo decidió ir a hablar con la mujer del paciente para tranquilizarla y contarle como iba la operación.
-¿Desde cuándo te interesa más informar a la mujer que hacer esto?-preguntó Naruto antes de que su marido abandonara la sala.
-Desde que yo fui el de la sala de espera-dijo como si fuera lo más obvio del mundo-¿crees que Sasuke y tú fuisteis los únicos que sufristeis un trauma?
-No vuelvas a meter a Sasuke en esto, no puedes comportarte como un mocoso mimado-mientras hablaba, sus manos seguían en el cerebro del paciente.
-¿Por qué Sasuke puede hacer lo que le de la gana pero yo no?¿porque no me escondo bajo las mesas ni atiendo barras?
-Gaara...
-Enserio, Sasuke y tú estáis tan ocupados apoyándoos que no sois conscientes de que también sufrí un trauma. Yo era el marido de la sala de espera y es muy difícil ser esa persona. Tanto que entré en el quirófano mientras ese hombre te apuntaba y le dije que me disparara a mi. Eso es ser el de la sala de espera. Disculpa, pero voy a informarle-concluyó molesto y se marchó dejando a su marido sin habla.
Montan quirófanos de emergencia en la clínica gratuita.
Kakashi ayuda a Kankurô con un paciente crítico. Kiba atendía a un chico e Itachi se le unió.
-No puedes elegir a quien salvas...-dijo el castaño mientras reparaba la arteria de su paciente.
-Veo que es la línea del partido.
-El agresor está enfermo. Nadie dispara contra tanta gente estando sano.
-¿Por qué lo dices?
-Mi hermana tuvo un brote psicótico y quiso matar a una vecina. Si le pasara algo, aunque hiciera daño a otros, me gustaría que sus médicos hicieran lo posible por salvarla. Sigue siendo mi hermana mayor.
Sasuke continuaba en quirófano con Temari.
-Gracias por quedarte Sasuke...-dijo la rubia mientras seguía operando-no debió de ser una decisión fácil.
-¿Sabes una cosa?...lo fue.
El paciente de Naruto se salva y el rubio fue a buscar a su marido. Lo encontró apoyado en una barandilla, mirando a la planta baja. Se colocó a su lado.
-Hola...-dijo con un hilo de voz y acarició la espalda del pelirrojo-has dado ánimos a todos a pesar de que...me impresionas-le besó en los labios con cariño-estás enfadado por llevarme a Sasuke a pescar. Sé que crees que no funcionó. Pero está en el quirófano uno.
Las orbes turquesa le miraron con avidez-¿cómo?-no pudo evitar sonreír.
-Está aquí-le besó de nuevo.
Como ya todos los pacientes están estables, poco a poco, empezando por Gaara, los compañeros fueron sentándose en la galería a ver la operación que Sasuke y Temari realizaban.
Shikamaru entró-mi chico está en una habitación, era el último-informó a Jiraiya.
-Aparte de él-dijo el mayor señalando al paciente que Temari y Sasuke operaban.
-Si, aparte de él.
El paciente se estabiliza y está fuera de peligro. El grupo seguía en la galería.
-Atendimos a veintiséis pacientes-dijo Jiraiya llamando la atención de todos-a veintiséis víctimas- Hinata empezó a llorar emocionada y los demás parecían conmovidos también-y no ha habido bajas. Nadie ha muerto.
Tras unos instantes emocionados, se empezaron a mirar unos a otros y a reírse a carcajadas.
La cirugía es extrema. Te abrimos el cuerpo, le sacamos partes y volvemos a meter lo que queda. Está bien que la vida no venga con un bisturí, porque si así fuera, y nos doliera algo, cortaríamos, cortaríamos y cortaríamos.
Sasuke y Gaara se encontraron frente a frente en un pasillo y se miraron durante unos segundos. Ninguno decía nada. Ninguno hacía nada.
La cuestión es...que lo que quitamos con un bisturí, ya no vuelve.
En silencio se acercaron el uno al otro.
-¿Quieres una copa?-preguntó el azabache algo dubitativo.
-Si, claro-respondió sonriente el de ojos aqua. Comenzaron a andar juntos por el pasillo y el pelirrojo le dio la mano a su amigo-aunque...una copa no, intento quedarme embarazado y al parecer el alcohol hará que mi bebé tenga tres cabeza y dieciséis dedos.
-Mmm, ¿vamos a por crack?-el comentario hizo reír al otro.
Así que, como decía, eso es bueno.
Continuará...