Boda blanca
Gérmenes. Enfermedades. Toxinas. Nuestros cuerpos se topan con amenazas constantes bajo la superficie. Escondidas. Aunque no te des cuenta, tu cuerpo está protegiéndose continuamente. Cada vez que parpadeas estás limpiando miles de microbios indeseados. Si respiras demasiado polen, estornudarás.
En casa de Neji y Rock Lee, seis personas cenaban alrededor de la mesa.
-Quiero proponer un brindis-un hombre en extremo parecido a Rock Lee se puso en pie-por dos hombres extraordinarios. Que vuestras vidas estén llenas de amor, felicidad y alegría-dijo emocionado alzando su copa-por Rocky y Neji, los padres de mi nieto.
-Salud-dijeron todos al unísono y chocaron sus copas.
Hizashi habló cuando el padre de Lee volvió a su asiento-bien dicho señor Gai.
-Llámame Maito consuegro-dijo y mostró una amplia sonrisa idéntica a la de su hijo.
De pronto el bebé comenzó a llorar en la habitación contigua.
-Voy yo-dijo Neji- ahora vengo.
-Rock Lee-dijo Hizashi llamando la atención del chico-hoy en el avión íbamos al lado de un joven encantador que nos contó que iba a ir con su pareja a ese desfile. Al del orgullo gay.
-Si...ahm...están muy bien.
Neji apareció con Sasori en brazos. Shizuka, la madre de Lee, se levantó-oh...-se le caía la baba-no puede ser más guapo ni queriéndolo-era una mujer muy agradable, de largos cabellos negros, pero flequillos similares a los del resto de su familia. Lo que más llamaba la atención, eran sus intensos ojos verdes.
-Mamá, aún no lo has cogido-dijo Neji a su madre. Una mujer de llamativa belleza y cabellos morados.
-No, no...gracias, aún estoy comiendo-dijo intentando ser amable. Se notaba que era una excusa y el joven de los Hyûga quedó desconcertado.
El cuerpo sabe cuando se ha topado con algo que no le pertenece. El cuerpo detecta al invasor, libera sus leucocitos y ataca.
A la mañana siguiente, en el hospital, Kiba había reunido a los especialistas y a sus compañeros para presentar a todos los niños a los que tendrían que ayudar. Sasuke, Hinata, Itachi y Gaara no le prestaban demasiada atención.
-Adorables niños de Kumogakure...-dijo Sasuke con mala cara-es más listo que el hambre. Inuzuka es un genio.
-Se las ha apañado para mangarnos el puesto de jefe y le estamos ayudando-dijo Itachi de brazos cruzados-¿cómo podríamos negarnos a tratar a unos niños enfermos sin quedar como unos monstruos?
-Es un genio-secundó Hinata.
-Tiene posibilidades porque estoy en el banquillo-aclaró el Uchiha menor-os invito a participar en igualdad de condiciones.
-Mi ensayo sobre el Alzheimer desbanca a los huérfanos-dijo Gaara- os desbanca a todos.
-¿Queréis bajar la voz ahí?-les pidió Jiraiya- estoy intentando escuchar al que va a ser próximo jefe de residentes.
Itachi está deprimido con el ensayo de Jiraiya de la diabetes, puesto que se pasa el tiempo vigilando a unos ratones y limpiando sus jaulas.
Naruto y Kiba se encargarán de una niña de seis meses llamada Miina.
Cuando el rubio, seguido del otro entraron a la habitación, la pequeña lloraba en brazos de su cuidadora.
-Hemos venido a ver a Miina- dijo el de ojos azules. La mujer se la entregó y cuando Uzumaki la cogió en brazos, dejó de llorar-a veces los bebés con espina bífida tienen la malformación de Chiari.
-Se acumula fluido en el cerebro-aclaró Kiba- puede ser molesto. Pero a veces si se cambia la postura de la cabeza...
-Disminuye la presión...-terminó la frase Naruto mirando embelesado a la pequeña que posaba una de sus manitas en su mejilla. Era una niña preciosa, de un llamativo cabello rojo purpúreo y ojos del mismo color.
La mujer miraba a Naruto alucinada-lleva en el orfanato desde los dos meses, y es la primera vez que ha dejado de llorar que yo recuerde...
-Le haremos una resonancia para ver si tiene la malformación de Chiari o hidrocefalia. Si es así, le pondremos una derivación. De ese modo drenaremos el líquido-informó Naruto sonriente con la niña en brazos.
-Le caes bien-apreció el castaño.
Temari, Kankurô y Sasuke se ocupan de otro de los niños de Kumogakure, uno con Pentalogía de Cantrell, una malformación congénita por la que la piel ha crecido directamente sobre el músculo del corazón del paciente. Shikamaru e Hinata, con una niña que tiene VIH.
Sasuke entró en el ascensor, pero se formó una tensión en el ambiente, dado que Temari estaba dentro.
-Doctora Temari...-dijo el azabache-me gustaría disculparme. Lamento mucho haberme saltado tu autoridad y ponerte en una situación difícil en la operación de Rock Lee. Lo lamento mucho. Te pido perdón.
-¿Dices eso porque lo piensas o porque quieres volver a mi servicio?
-¿Importa eso?
-Si, importa-dijo molesta y se bajó en cuanto las puertas se abrieron.
En casa de Neji y Rock Lee, las cosas seguían como por la noche, con los suegros presentes.
Neji acunaba a Sasori y Gai le entregó unos papeles.
-He elaborado un programa para ayudaros estos dos días-dijo orgulloso el padre de Lee repartiendo papeles a los presentes.
-Todo con precisión-dijo Hizashi- gracias.
-Y yo le he comprado una cosita a Sasori...-dijo entusiasmada Shizuka sacando una pequeña ropita de bebé color verde manzana-mira que cosa más mona.
-Bien mamá, la ropita luego, ahora a ensayar-dijo Lee.
-A ver, la mesa es el altar y la lámpara es el juez-dijo Neji.
-¿Cómo?-Guren, la madre del ortopeda se mostró escandalizada.
-Un juez mamá...no es un cura, lo siento.
-Bien, señora Hyûga, estará en primera fila, aquí-Rock Lee la situó amablemente.
-Y yo me colocaré aquí para llevar a mi pequeño al altar-dijo Hizashi colaborador.
-Si, yo iré al altar primero-comentó Neji.
-Y luego voy yo con mi madre-dijo Rock Lee.
-Mamá, ¿coges a Sasori?-Guren parecía asustada de pronto y miró a su hijo como si no supiera que decir durante unos segundos-¿puedo dártelo?
-Es que...tengo que ir al servicio...-dijo y se marchó del salón.
-Cogeré yo a mi nieto si no te importa-dijo encantado Hizashi- lo he cogido muy poquito.
Temari abordó a Kakashi en un pasillo.
-Oye, necesito veinte buenas razones para no readmitir a Sasuke en mi servicio-dijo la rubia-porque estoy a punto de flaquear. Tengo un caso muy complicado y está muy capacitado. Dame veinte razones por favor.
-No tengo ni una. Creo que deberías readmitirlo.
-¡No!, no, eso sería lo peor que podría hacer, porque así no aprendería nada.
-Pasó por encima de ti y estuvo mal, pero ¿no estás siendo un poco dura?
-¿Dura?, Sasuke es peligroso ahora. Tuvo suerte, Lee superó la operación, pero del mismo modo pudo ser un desastre. Sasuke tuvo suerte-recalcó-él no lo ve así. Cree que tiene razón. Siempre cree que la tiene y eso no es ser un buen médico. Es peligroso.
-Díselo, en lugar de relegarlo, dile eso.
-No se le puede decir nada a Sasuke Uchiha, debe aprender. Hasta entonces, no me importa ser la mala. Puedo aceptar que esté...cabreado conmigo. ¿Pero crees que habría encajado algo como la muerte de Lee?
Miina tiene hidrocefalia, pero no la malformación de Chiari. Deben operarla. Operan a la niña de VIH y resulta que tiene tuberculosis intestinal.
Guren permanecía sentada sobre la cama del dormitorio esperando a que apareciera su hijo. Cuando este hizo acto de presencia, llevaba un sencillo traje blanco. Corbata y zapatos incluidos.
-¿Qué tal?-dijo mostrándole su aspecto-voy de blanco, ¿te gusta?-la mujer permanecía en silencio-dime mamá...creo que no te gusta.
-No que va...te queda bien...-se notaba ansiosa.
-Bien...¿es todo?
-¿Qué más quieres que diga?
-No sé, algo. Me he estado desviviendo desde que llegaste para que estuvieras a gusto.
-No te pedí que hicieras nada por mi-dijo Guren.
-Me caso de blanco por ti.
-No te atrevas a insinuar que te casas con un hombre o que tuviste...un bebé fuera del matrimonio por mi-dijo ella molesta.
-Vaya...muy bien...entonces, ¿qué llevas peor?¿mi hijo bastardo o mi novio gay?. Eres abogada, una mujer de mundo, conoces homosexuales, tu secretario es gay-le dio la mano dolido-soy tu hijo.
-¿Tu sabes lo horroroso que es criar a un hijo, quererlo y saber que no va a ir al cielo?
-Mamá...
-No eres un novio. Ni yo soy la madre de un novio y esto...-soltó su mano-esto no es tu boda. No está bien. Lo siento, no puedo hacerlo. No puedo-se puso en pie y se marchó.
Rato después, Neji hablaba con su padre en el salón. Rock Lee estaba sentado a su lado.
-He intentado razonar con ella-confesó Hizashi- no me escucha. Se ha quedado dentro del coche y no...no sé que decir. Lo siento muchísimo.
-Papá mejor vete-dijo Neji, le estaba muy agradecido por su apoyo y eso que creyó que era el más difícil de sus progenitores-¿vale?
-¿Irme?, no puedo, no...
-Tienes que irte porque sino empezaré a llorar como cuando era pequeño y ya no lo soy. Haré que te sientas mal y yo me sentiré peor. Márchate, ¿vale?-le abrazó.
Día de la boda. Primera hora de la mañana.
Cuando Kakashi entró en la casa de Neji se lo encontró cubierto con una toalla, recién salido de la ducha y con el pelo suelto y mojado pegado a la espalda.
-¿No podrías prestarme algo?, puede ser cualquier cosa, un pañuelo, un condón, dinero...-dijo el ortopeda al verlo- tengo algo viejo, nuevo y azul. Falta lo prestado.
-Me acaba de llamar el juez...-dijo el peliblanco-no puede ir a la boda.
Neji le miró incrédulo-no es cierto. Dime que no es verdad. ¿Sabes lo que nos ha costado encontrar un juez que nos casara hoy?
-Me ha dado algunos números, podemos buscar un sustituto.
-No, no, no, ¿sabes?, no les llames. No quiero a nadie. Olvídalo. No voy a casarme-miró su pulcra ropa blanca que reposaba sobre una silla, se dio media vuelta y desapareció en otra habitación.
Naruto estaba en la habitación de Miina con la pequeña en brazos. Gaara llegó.
-Hola, ¿me has llamado?-preguntó el pelirrojo.
-Si, Miina, ése es Gaara- dijo a la niña- Gaara, ésta es Miina. ¿La coges un momento?
-Claro-se la pasó.
-Miina, ¿cómo te ríes?-la niña sonrió-si, los nervios faciales están bien. Ahora mira aquí-se movió a la derecha-¿lo ves?, me está siguiendo. Está bien, pese a la derivación.
-Oye, ¿pasa algo?¿por qué me has llamado?-dijo el pelirrojo con la criatura en brazos.
-Tengo que preguntarte algo.
-Vale.
-Quiero que seas totalmente sincero conmigo. ¿Por qué no la adoptamos?-Naruto parecía muy seguro.
-¿Qué?¿es enserio?
-Si, ¿sabes?, la cogí en brazos ayer, estaba llorando y paró. He cogido a muchos bebés y he curado a muchos, pero al ver a Miina, no sé porque no...no pude imaginármela con otros padres ni con otra familia. Estamos deseando formar una familia-en ese momento, la niña puso su manita en la barbilla de Gaara y le hizo sonreír-y ella necesita una. Adoptemosla.
En casa de Neji alguien llamó a la puerta, pero el pelinegro estaba tumbado en el sofá con el pijama puesto. Como nadie respondía, la puerta se abrió y por ella entró Tsunade.
-¿Sabes que la puerta está abierta?, podría ser cualquiera. Podría ser un ladrón que viene a robar-se acercó al chico-¿y el bebé?
-Con Rock Lee en casa de Kiba.
-Podría ser una secuestradora de bebés que viene a secuestraros.
-Sé porque te mandan, me da igual lo que digas-dijo con mala cara el azabache-no voy a casarme. Mi madre tiene razón, es un chiste no una boda. No habrá boda.
Tsunade se sentó delante de el, sobre la mesita de café.
-Neji...
-No puedo traer un juez, no tengo quien la celebre, no me va a entregar mi padre...no es nada, solo un par de chicos disfrazándose. No es real.
-Primero, tu no necesitas al juez, ni a tu madre para que tu boda sea real. Tu madre es probable que nunca lo acepte, pero no pasa nada. No importa. Si tu estás decidido a ponerte delante de tus amigos, de tu familia...para comprometerte con otro ser humano, a entregarte a ti mismo a esa otra persona en lo malo, en la salud y en la enfermedad...cielo, eso es el matrimonio. Eso es real y es lo que importa.
Temari opera al niño de la Pentalogía de Cantrell y Sasuke solo puede observar mientras Kankurô es el que ayuda a la rubia. Kakashi cede a Shikamaru lo de decidir el jefe de residentes. Itachi y Jiraiya avanzan en su investigación con ratones.
En una sala, Naruto y Gaara ojeaban un montón de papeles.
-Ya está listo. Salud. Situación económica. ¿Tienen alarmas de incendio?...-el pelirrojo leía en voz alta los documentos-y todo esto para ver si el servicio de inmigración nos considera aptos para adoptar.
-Si no quieres hacerlo...
-Si que quiero. Puede ser nuestra pequeña...-dijo sonriendo.
-Va a serlo. Oye, no te agobies ¿vale?, vamos a completar esta lista paso a paso y día a día.
Antes de caer la tarde, ya todo estaba listo para la boda. Sería al aire libre. Tsunade vestía un precioso vestido violeta y caminaba por la alfombra que llevaba al altar.
-La culpa es mía...-se decía a si misma-si no me hubiera entrometido...la boda se habría anulado y estaría en casa viendo la tele-se frotaba las manos nerviosa.
Kakashi se le acercó. Vestía de azul, camisa blanca y rosa blanca en el ojal-lo harás muy bien-animó el hombre y la acompañó al altar.
-Vale.
-Eso es, aquí-iba a dejarla, pero ella se enganchó con fuerza de su brazo-ya puedes soltarme-lo hizo reticente y el peliblanco salió corriendo para aparecer de nuevo con Neji.
Detrás llegaron Rock Lee, también de blanco, con su madre, que llevaba un largo vestido negro. Los sollozos de Gai se escuchaban a kilómetros.
Cuando ya estuvieron frente a Tsunade, la rubia empezó a hablar-estamos aquí reunidos para celebrar el amor y la felicidad y la fidelidad y...en mi opinión, un poco de magia. Para unir a dos, excepcionales y hermosos seres humanos. Ahora cogeos de las manos.
Al terminar la ceremonia los bañaron en aplausos y arroz. Lo que siguió al caer la noche, fue una maravillosa fiesta en un local perfectamente adornado.
Todos estaban allí. Hinata llevaba un vestido hasta las rodillas de colores varios que le sentaba muy bien y correteaba de un lado a otro con la cámara para sacar fotos.
-El primer baile-dijo contenta y fue a sacar una foto a los novios.
Kakashi y Sasuke estaban abrazados y se movían lentamente al ritmo de la melodía.
-¿Qué ha pasado con Temari?-preguntó el peliblanco a su marido-¿habéis hablado?
Kiba se les acercó, llevaba una cerveza en la mano-mi acompañante no puede venir porque está en un atasco.
Itachi también-me equivocaba con los ratones. Inuzuka, ten cuidado porque me han puesto en la carrera a jefe.
-No sois los únicos candidatos ¿sabéis?, mis fuentes dicen que Hinata podría venceros-dijo Kakashi que ya había parado de bailar.
-Por dios...-dijo Sasuke molesto y se alejó.
Itachi tendió la mano a Kakashi para que bailara con él, pero el peliblanco solo sonrió y negó con la cabeza.
Sasuke estaba en la barra, deprimido y enfadado. Jiraiya se puso a su lado.
-¿Sabes cuando cortan la tarta?-preguntó el jefe.
-No tengo ni idea.
-Hay que ver como son las cosas-dijo mirando al gentío- Inuzuka es responsable, tu hermano empieza a brillar, están Hyûga, Sabaku No...siempre pensé que serías el favorito para el puesto de jefe Uchiha, sin embargo, ya has visto, hay muchos más. Voy a buscar la tarta-y se alejó.
Nada más irse, se acercó Temari a coger una copa de champán.
-¿Quieres una disculpa?-le preguntó el azabache con rabia contenida en la voz.
-¿No puedes aguardar a mañana?-la rubia llevaba un vestido azul con motas blancas.
-¿Sabes?, perdona, siento ser tan excepcional que sea una amenaza. Siento que mi procedimiento quirúrgico salvara a Lee y no el tuyo. Siento que tu ego sea tan frágil que he tenido que quedarme mirando una operación que debería haber hecho contigo. Como he tenido que hacer con tantas estos tres meses quedándome sin opciones para ser jefe. ¿Querías sinceridad?, no puedo ser más sincero.
-Aún sigues sin entenderlo-dijo y le dejó solo.
Justo cuando creemos que lo tenemos todo claro, el universo nos desafía.
Alguien cogió el micrófono y habló a los presentes.
-Llegó la hora de despejar la pista para el baile de madres e hijos.
Rock Lee miró a Neji con tristeza-olvidé quitarlo del programa...lo siento...
-Tienes que bailar con tu madre. No pasa nada-dijo comprensivo-me quedaré mirando.
Shizuka se acercó a su hijo y ambos salieron a la pista.
Kakashi se acercó a Neji.
-No te lo perderás-dijo y le cogió las manos al azabache-soy el padrino. Sé bailar y soy tu amigo.
Tenemos que improvisar.
No había pasado ni un minuto, cuando Kakashi sintió una mano en el hombro-¿puedo interrumpir?-Hizashi estaba a su espalda.
-Todo suyo-dijo el peliblanco y se lo cedió.
-Iba de camino al aeropuerto con tu madre y me acordé. Deseaba estar contigo en tu boda desde que te cogí por primera vez en brazos. Así que di la vuelta y volví. Bien, aquí estoy. Para bailar con mi hijo- Neji sonrió y le abrazó conmovido.
Encontramos la felicidad en lugares inesperados. Nos damos cuenta de las cosas que nos importan.
Naruto estaba en la habitación de Miina con la niña en brazos. Estaba vestido elegantemente. Gaara apareció con un traje completamente negro.
-Tenemos que irnos ya si queremos llegar a tiempo-dijo el pelirrojo.
-Vamos...un minutito más.
-Eso dijiste hace veinte minutos.
El rubio estaba radiante de felicidad y acunaba a la niña en sus brazos-fíjate, fíjate, mírala-ella hacía ruiditos y sacaba la lengua-vamos, escúchala.
-No tienes intención de ir a la boda-dijo Gaara sonriente.
-Lo entenderán, les haremos un buen regalo-la niña sonrió-mira que cara...mira que carita.
El universo es así de extraño, a veces, sabe ponernos exactamente donde tenemos que estar.
Continuará...