Hazme el entrenador
Los cirujanos no pueden ser vagos. Los riesgos son muy grandes. Si nos dormimos en los laureles ocurre una fatalidad, algo que no vemos venir.
Primera hora de la mañana. Sasuke y Gaara estaban tumbados sobre el césped, boca arriba mirando al cielo.
-Esa parece una célula de islote-dijo el pelirrojo.
-¿Cuál de ellas?
-Esa-señaló-podría producir insulina.
-Es una nube.
-Parece una célula de islote...o un búfalo.
-No tengo imaginación Gaara. Temari me la ha anulado.
-No pensemos en eso, mejor confiemos en que todo saldrá bien. Tengamos fe.
-Si...aunque dice que hoy me dará algo grande. ¿Y tú qué?
-Con la cigüeña.
-¿Todavía sigues con eso?, olvídalo.
-¿Por qué?, Tsunade me hace la cama en los quirófanos. Además me tranquiliza, puedo dedicarme a los ensayos.
-Tsunade te dijo que no te metieras en eso.
-Lo sé, pero no puedo evitarlo, presiento que estoy a esto de...-¡zas!, una pelota cayó en medio de ambos, pillándoles por sorpresa y obligándoles a sentarse.
Kiba llegó y la cogió-que partido...-dijo el chico. Resulta que estaban tumbados en el campo de béisbol del parque. Todos estaban jugando. Jiraiya y Kankurô observaban desde las gradas. Naruto era el encargado de lanzar la pelota y los demás bateaban o estaban en las bases. Todo era genial y apacible hasta que los buscas empezaron a sonar y tuvieron que ir al hospital.
Sasuke con un paciente de Temari, al que tiene que hacerle una angioplastia, una intervención de primero. Hinata con Shikamaru y Neji, un hombre atropellado por un coche que podría perder varios dedos de la mano. Kiba con Rock Lee. Kankurô continúa con Naruto, operarán a una chica con tumores en el hipotálamo.
Neji, empatiza con su paciente y decide reconstruirle la mano. Naruto y Kankurô practican para la extracción de los tumores. Shikamaru y su afán por competir, le hacen organizar un partido de béisbol entre sus médicos y los del Sunagakure.
En un mostrador, Gaara se acercó a Jiraiya.
-Necesito los diario de mi madre.
-¿Por qué?¿qué pasa?
-Bueno...necesito ver su hipótesis, si quiero averiguar qué ocurre debo empezar por donde ella empezó.
-¡Ja!, sabía que no podrías abandonarlo-eso hizo feliz al mayor.
-Déjalo, ¿dónde están?
En una sala de juntas, Shikamaru se dedicaba a repartir las camisas de uniforme para el partido. Todas eran azules con las letras KB en el pecho.
-Hatake, a primera-dijo y le tendió una camiseta- Tsunade, tú al exterior.
-Tal vez no vaya al partido-dijo la rubia, pero cogió una camiseta-tengo cuarenta y nueve pacientes a los que debo dar las malas noticias del ensayo.
-Eso cambia todo...necesitaré un sustituto...Uzumaki, lanzarás.
-No va a ir-aclaró Kakashi- su operación puede ser un maratón.
Temari, ansiosa, levantó la mano- ponme a mi.
Shikamaru se dio por vencido- Temari lanzará...
-¡Si!
-Hatake sigues en primera. Uzumaki puede batear.
Kankurô rebuscaba en la caja de las camisetas-necesito una grande...-dijo mirando su barriga abultada.
-¿Nos hemos quedado sin grandes?-Hinata miró en la caja preocupada-les dije que necesitábamos de todas las tallas. Se lo dije por teléfono...
-Preciosa...voy a estar fantástico- Kakashi miraba su camiseta- y cuando estás bien, juegas bien, ¿tengo razón?-preguntó a Itachi que estaba a su lado.
-La tienes-y ambos chocaron las palmas.
-¿Qué ha sido eso?-preguntó Hinata a su amigo azabache en cuanto el peliblanco se hubo marchado.
-Kakashi está muy contento. Está tan feliz que estoy haciendo más operaciones y, lo más importante, pasamos mucho tiempo juntos. Es amable conmigo. Somos amigos. Y de la amistad al amor...
-Es el marido de tu hermano...-reprendió ella.
-Esa relación tiene fecha de caducidad-sacó una camisa de la caja, se la colgó del hombro y se marchó.
Neji e Hinata intervienen al paciente para reconstruirle la mano, pero durante la operación sufre un taponamiento cardíaco. Sasuke aparece y guía a Hinata para que realice la operación. Eso impresiona a Temari.
Al terminar la operación, Temari fue a hablar con Sasuke.
-¿Por qué no le has puesto el injerto?¿a qué esperabas?-preguntó la rubia.
-¿Es una pregunta trampa?
-No, una pregunta.
-Vamos, ¿he hecho mal esperándote?, me habrías echado la bronca si no lo hubiera hecho.
-Hace dos meses habrías placado a Hyûga para meterte en un tórax ¿y ahora dejas que lo haga ella?, ni siquiera te cae bien.
-Podría haberlo hecho, pero ella ya estaba.
-Exacto.
-Me rindo...no sé lo que estás haciendo-estaba airado y no podía disimularlo-hago mal si corto y también si no. Estoy en quinto y hago trabajos de interno. ¿Qué quieres?
-Que hagas una lista.
-Bien...¿dónde?¿en una pizarra?, no haré ninguna operación sin casco de seguridad.
-Que hagas una lista con las operaciones que llevas soñando hacer toda tu vida. Apunta alto e intentaré que hagas alguna-la cara de Sasuke cambió-porque ya está. Te has graduado. Este es tu regalo.
-Me estás vacilando.
-Verás, a principios de año estuviste a punto de matar a Inuzuka en el quirófano porque tenías que hacerlo tu. Tenías que ser el mejor y ser el primero. Pero hoy, hoy he visto otro cirujano. Con la misma calidad, con la misma superioridad, pero dispuesto a trabajar en equipo-dijo ella orgullosa-hoy has antepuesto el paciente a ti mismo. Y eso es lo que buscaba así que ya está. Haz la lista.
Naruto y Kankurô extraen los tumores con éxito.
Tsunade abrió la puerta de su laboratorio y dentro vio a Gaara.
-¿Qué leches haces tú aquí?
-Un segundo-el chico miraba por un microscopio.
-Un segundo es lo que vas a tardar en irte.
-Quiero ver si la célula ha sobrevivido...si, si, ha sobrevivido.
-¿De qué estás hablando?
-Mamá se equivocaba. Es el oxígeno, a las células no les llega bastante. Extrapoló la cantidad generada basándose en test hechos a ratones, la estructura interna de la célula de islote de ratón no es como una humana. Su hipótesis era incorrecta. Por eso sus células de islote mueren. Le he marcado la página-salió corriendo y Tsunade se acercó al diario.
Día del partido.
Todos estaban en el campo de béisbol con sus camisetas azules. Las del otro equipo eran de color amarillo. Iba ganando el Sunagakure.
-¡Inuzuka a segunda!¡todos a fuera!¡a jugar!-Shikamaru era el organizador y el que daba las órdenes.
Antes de salir al campo, Gaara se quejó-no hay nada que hacer.
-¡Vaya mierda!¡que pite el final!-gritó Kiba.
Sasuke se acercó a Gaara- el jefe quiere lucirse...¿te queda...?
-Si-dijo el pelirrojo y sacó una petaca con alcohol.
-Genial.
Temari era la lanzadora, pero era patética.
Sasuke se dedicaba a beber junto a Gaara- oh, un bypass quíntuple, ¿tienes un boli?
-¿Qué vas a hacer?-el pelirrojo se tambaleaba un poco debido a la borrachera.
-Una lista. Temari quiere que haga mi última voluntad de operaciones. Tenía fe Gaara- el otro bebía- ha merecido la pena.
-A mi no me ha servido. Mi fe ahora está de vacaciones...tal vez cure la diabetes.
-Tu madre estaría orgullosa-soltó, pero al momento empezó a carcajearse como su amigo.
-No es cierto.
Fueron interrumpidos porque la pelota iba hacia ellos, pero la cogió Tsunade.
-Me la ha quitado...-se quejó Sasuke.
-Era mía- Gaara también.
-¿De verdad?¿o ibas a dejar que cayera otra vez?-dijo la mujer.
-¿Qué problema tiene conmigo?-preguntó el pelirrojo.
-Perdona, ¿cómo has dicho?
-No quiero trabajar en su ensayo, quería resolver la incógnita.
-Oye, ¿estás borracho?
-Lo está-dijo Sasuke pasando el brazo por encima del hombro de su amigo-lo estamos.
-¿Cuál es su problema?- Gaara se encaró con Tsunade, quedando poca distancia entre ambos.
-¿Qué cual es mi problema?-ella no se achantaba-te contaré mi problema. Mi problema eres tú. Has metido las narices en mi ensayo. Entras en mi laboratorio sin pedir permiso. Eres un imprudente, un irresponsable.
-Métase en sus puñeteros asuntos. ¡Usted no manda en mi!-Sasuke les miraba alucinado y sin evitar una risa floja.
-¡Gracias a Dios que no!
Jiraiya se les acercó-¡callaos!¡los dos!. Tu ensayo fracasa-dijo a la rubia-te guste o no lo necesitas. Y tu-ahora al pelirrojo-hasta tu madre la gran Karura Sabaku No se equivocaba. Quítate ese pijama rosa y vuelve al trabajo para el que naciste- Sasuke asintió-poneos de acuerdo y trabajad juntos. Pero no lo hagáis en el campo, en el laboratorio el lunes, ¿está claro?
-Si-dijo Gaara.
-Vale-dijo Tsunade.
Shikamaru decidió reunirlos a todos a corro.
-Quiero deciros lo orgulloso que estoy de vosotros. Sois un equipo increíble.
-También ha bebido-dijo Sasuke a Kakashi cerca de su oído. Lo que hizo sonreír al peliblanco al ver que era cierto.
-Ya lo veo.
-Os he visto trabajar juntos y resolver problemas. He visto como os enseñáis y aprendéis mutuamente. Tomáis las riendas cuando es necesario. Y hacéis más de lo que os piden. Sois el mejor equipo que he visto.
-¡Venga hombre!-gritó Kakashi riéndose.
-¿Tú qué te has tomado?-soltó Naruto.
-No me jodas...-musitó Kiba.
-¿No creerás que podemos ganar?-preguntó Neji incrédulo.
-¿Qué?¿esto?, esto no. Estamos jodidos-admitió el Nara- sois horribles. Pero como médicos, sois grandes. Es un honor ser vuestro jefe y como estáis todos, quería decíroslo. Pero ahora nos van a machacar, así que ¿qué os parece si perdemos peleando?-concluyó y todos agruparon las manos al centro del círculo que formaban.
-¡Si!
Perdieron claramente.
Puede que no siempre ganemos, pero no somos vagos. Arriesgamos. Nos volcamos. Intentamos lanzarla fuera. Y a veces, si, nos eliminan.
Cayó la noche y todos estaban sentados en las gradas. Las parejitas se abrazaban para darse calor y todos se iban pasando alguna que otra botella de alcohol los unos a los otros.
-Mi corazón está hablando...-dijo Hinata a Tsunade-¿lo oye?
-Estás borracha. Te llevaré a casa-dijo. Se puso en pie y miró a Gaara que apoyaba la cabeza en el hombro de Naruto-¡te veo en el laboratorio por la mañana!
-A la orden-dijo sonriente viendo como la mujer se marchaba.
-Buen trabajo jefe-dijo Jiraiya a Shikamaru- aguantamos cuatro entradas. Dos más de las que yo conseguí-ambos se fueron juntos.
Sasuke miró a Kakashi-¿puedo hacer un trasplante heterotópico?
-¿Esta noche?, no.
-Bien dicho...tu deberías ser el jefe-el peliblanco le besó.
-Vamos a casa.
Kiba le tendió la petaca a Naruto- no, no quiero. Y tú no deberías-dijo y su teléfono sonó.
-Yo tendré que conducir-dijo Kankurô colocándose el abrigo.
-Nos han machacado-dijo Inuzuka algo borracho.
-No hemos estado tan mal-dijo Gaara divertido.
-Un mensaje de la asistente social-dijo el rubio-el juez la habrá llamado...está revisando el expediente. Nos han citado-sonreía.
-¿Puede que Miina sea nuestra definitivamente?-a Gaara le brillaron los ojos.
-Puede-dijo Naruto y se abrazaron felices.
-Seremos padres de verdad-dijo el pelirrojo y besó a Kiba en la frente.
Pero a veces anotas una carrera.
Continuará...