Caminando sobre el agua
En la ciencia se dan las desapariciones. Las enfermedades se desvanecen. Los tumores huyen. Abrimos a alguien y descubrimos que ya no tiene cáncer. No tiene explicación, ocurre pocas veces, pero sucede. Lo llamamos diagnóstico erróneo. Decíamos que no lo habíamos detectado. Cualquier explicación menos la verdad.
Gaara estaba solo en su cuarto de baño. Sentado dentro de la bañera llena de agua. Hasta que decidió hundirse del todo y quedarse así.
La vida está llena de desapariciones. Si algo que no sabíamos que teníamos desaparece ¿ya no existe?
Abrió los ojos bajo el agua.
Naruto entró.
-¿Gaara?-preguntó y se asomó a la bañera. Tras unos segundos lo sacó por los hombros-¿qué haces?
El pelirrojo tosió-solo estaba bañándome-dijo y salió de la bañera. Cogió una toalla y se envolvió con ella.
-Eso no era un baño.
-Déjame.
-Oye, tu madre...
-Olvídalo.
-Tu madre estaba lúcida. Dijo cosas y ahora ha vuelto...
-A irse, todo vuelve a la normalidad. Se acabó.
-No. Hoy van a operarla- Naruto le rodeó con sus brazos, comprensivo-¿quieres que hable con el jefe?, sé que tienes mucho trabajo, pero te dará el día libre.
-Basta, no necesito que tú me rescates.
-Te habrías ahogado si no hubiera entrado-dijo el rubio cuando el otro se fue a vestir.
-Soy cirujano, soy yo quien rescata. Tu no eres mi caballero andante ¿sabes Naruto?
-¿Vamos a pelearnos porque te he rescatado?
-Tienes casa. Duerme allí-estaba visiblemente molesto mientras se ponía la ropa-no tienes que sacarme de la bañera. Estás en todas partes diciéndome cosas.
-Esto es parte de la relación. La parte de felices para siempre en la que el chico le dice cosas a su chico y a su chico le encantan.
-Ve a trabajar. Te veo allí.
Naruto sonrió-para tu información, soy tu caballero andante ¿sabes?-concluyó y le besó en los labios antes de marcharse.
Sakura apareció-el desayuno está servido.
-No he intentado suicidarme en la bañera-dijo Gaara en cuanto la vio por si había estado escuchando la conversación.
-Oye, me he comido todo lo que había en la nevera. Todo. Incluyendo un trozo de mantequilla. No voy a juzgarte.
-¿Alguna vez has querido desaparecer?-preguntó serio el chico.
-Muchas veces.
-¿Por qué no puedo creer en eso del felices para siempre?¿por qué no me lo trago?
-Yo ya no sé ni en que creer.
Sasuke y Kakashi salían juntos de la cafetería del hospital.
-No vamos a contar lo de que somos novios a todo el mundo-dijo el azabache manteniendo las distancias mientras caminaba junto al otro.
-Yo no lo he dicho.
-Lo sé, pero no lo hagas.
-No voy a contarlo...aún.
-Primero tengo que contárselo a mis amigos...
-Yo también tengo amigos. Naruto por ejemplo.
-No puedes contárselo a Uzumaki, no al menos hasta que yo se lo cuente a Gaara. Se cabrearía.
-Pues date prisa. La cara de Naruto será graciosa cuando se entere de que tengo una relación estable-rió sonoramente-no quiero esperar mucho para verla...debería sacarle una foto con el teléfono móvil-dijo y sacó el teléfono del bolsillo de su bata.
-Se lo contaré hoy. Tú espera.
-Rápido...me gusta eso de tontear en los pasillos...y no podré hacerlo si nadie lo sabe-concluyó y se fue.
En los vestuarios, Sasuke no dejaba de mirar a Gaara.
-¿Qué?-preguntó el pelirrojo mosqueado.
-Nada-escondió la cabeza de nuevo tras la puerta de su taquilla, pero segundos después, volvió a mirar a su mejor amigo.
-¡¿Qué?!
-Oye, no seas curioso ¿vale?
-¿Soy el único que piensa que estamos perdiendo el tiempo?-preguntó Kiba refiriéndose a un maratón que les habían organizado y en el que debían participar-hay una platismoplastia en el tablón. Hatake quiere que le ayude- Sasuke carraspeó cuando escuchó ese apellido, pero nadie se percató-¿es excesivo pedir operaciones de verdad?, somos cirujanos de verdad.
El maratón comenzó. Tenían que examinar falsos pacientes y según sus síntomas, averiguar lo que les ocurre. Todo cronometrado. Pero en mitad del proceso, llega Jiraiya con malas noticias. Un accidente de ferry con muchas víctimas.
Todos deben ir al lugar del accidente. Mientras se preparaban para salir, Sasuke se acercó a su mejor amigo.
-Gaara, quiero contarte una novedad.
-No estarás embarazado...no aguantaré más meses de mala leche.
-Vamos a la ambulancia-interrumpió Tsunade.
No caben todos en la ambulancia y Sasuke debe quedarse en el hospital. Antes de subir al vehículo Gaara habló con el azabache-eh, ¿cuál es la novedad?
-Déjalo...
Todo era un caos en el muelle. Muchos heridos. Muertos. Autoridades y médicos. Tsunade no tiene más remedio que encargarles ayudar a la gente en general, por lo que se separan los unos de los otros y van por libre.
Gaara se encuentra una niña perdida que no se separa de el. Kiba descubre una embarazada bajo unos escombros que milagrosamente aún está con vida, pero en muy mal estado, sobretodo su rostro desfigurado. Sakura se encarga de un hombre atrapado entre dos coches dentro del mismo ferry. Sasori promete a una mujer herida que encontrará a su hijo y no deja de buscarlo.
En el hospital, Naruto rellena informes en un mostrador junto a Kakashi.
-El día ha empezado raro-dijo el rubio-a Gaara le pasa algo. Le he preguntado y no dice nada. Intentó ahogarse en la bañera...no quería suicidarse, pero algo va mal y no quiere hablar. Estábamos bien y de pronto...vivo con un fantasma.
-Me estás contando algo importante...-dijo Kakashi serio.
-Si.
El peliblanco sacó el teléfono móvil y con la cámara apuntó a la cara de su amigo- Sasuke y yo somos novios-dijo y se escuchó el clic de la fotografía realizada.
-¿No es coña?
-No.
-Tú...¿enserio?
-Si.
-Es un gran paso para ti.
-Lo sé.
-Enhorabuena, supongo.
-No puedes decir ni una palabra. Culi...Sasuke tiene que hablar con Gaara antes...ya sabes como son esos dos.
-Si. Son extraños. Quizá nunca lleguemos a entenderlos. Y tu ahora que tienes novio tendrás que esforzarte más...nada de picotear de aquí y de allá-reprendió el rubio.
-Eso se acabó Naru. Tengo una relación con un tío estupendo...creo que esto saldrá bien.
-¿Tienes una relación?-la voz de Iruka resonó a su espalda.
Kakashi tragó saliva asustado-ha habido un accidente con muchas víctimas ¿sabes?-dijo y se escabulló.
-¡Seguro que habrá muchos quemados!¡prepárate!-le gritó Naruto.
El de Sakura está muy grave, tanto, que la chica pide ayuda a los amigos del propio herido. Naruto va al muelle. Entre el tumulto, se encuentra con Gaara, que no suelta la mano de la niña.
-¿Estás bien?-preguntó el rubio mientras se ocupaba de un hombre en una camilla.
-Hay tantos heridos...
-¿Quieres casarte?¿no me lo has dicho y yo no te lo he preguntado?
-¿Qué?, no claro que no ¿quieres casarte?
-No...bien si no es eso ¿qué es?
-No es nada. ¿Puedes solo?, tengo que ocuparme de esta niña.
-Puedo, llévatela ¿está bien?
-Si, solo está perdida.
Iruka borra del tablón a los pacientes menos graves, porque tendrán que atender a los accidentados.
Kiba se va en la ambulancia con la embarazada. Mientras Gaara buscaba a alguien con quien dejar a la niña, vio a un hombre herido subiendo por uno de los bordes del muelle. Así que fue a atenderle. Tsunade debe irse y le encarga sus internos a Naruto. Sasori vuelve al hospital y sigue intentando encontrar al niño. Kiba deja la embarazada de identidad desconocida en manos de Sasuke por intervención de Jiraiya y a el le encargan ir a urgencias a informar a los familiares.
Rato después, en los vestuarios, Sasuke hablaba con Kiba.
-Oye ¿cómo era aquello?¿era gore?¿el paraíso traumático?...ya sé que es terrible.
-No hablo con ladrones-dijo el castaño mientras se cambiaba de ropa por una más limpia.
-¿Qué?
-Me robaste mi paciente delante de mis narices.
-No soy un ladrón. Tú eres un indeciso.
-Estaba pensando.
-Oye, yo no tengo la culpa de que pensar te lleve tanto tiempo.
-La rescaté. Le quité toneladas de escombros de encima. Le salvé la vida.
-¿Había escombros sobre la gente?
-Que más da...has conseguido que me tengan aquí de canguro, mientras tú operas.
-Bueno...no voy a operar. Estoy suturando en urgencias...
-¿Si?¿a quién has cabreado?
-Estoy cosiendo los trozos de piel que cuelgan de los pacientes- Kiba se partía de risa.
-Estás a un paso de hacerle un jersey a tu abuela.
-Lo mío es médico.
-Coses...yo he liberado a personas-se chuleó Inuzuka antes de irse.
-Maldito Deidara...
Gaara seguía atendiendo al hombre, que estaba herido en una pierna y sangraba mucho. La niña continuaba a su lado así que la usó como ayudante. Mientras el pelirrojo cose la herida, el hombre, adolorido se revuelve y empuja a Gaara, haciendo que caiga al mar.
Continuará...