Eeeh…. no sé cómo se supone debería empezar a hacer esto, los japoneses son muy raros, pero bueno, lo hare como lo hacen en mi país de origen….
Hola, me llamo Chocolate, nací en una fábrica de una muy buena marca, y ya que como esta es realmente muy famosa, pues entonces también exportan sus productos a otros países. Y bueno, resulto que fue de mi mala suerte al ser yo uno de los elegidos para salir
Al momento en que me entere, me lleve un gran susto, se supone que sería comido por un hombre galante y rico junto con una dama refinada y de buen gusto, para terminar, por alguien que realmente disfrutase del placer que doy al ser degustado, compartido con él ser amado, pero claro, no es que este diciendo que los japoneses sean unos barbaros que no saben cómo comer chocolate, o que no tienen idea de cómo dar buenos regalos, por supuesto que yo nunca diría o insinuaría algo tan desagradable, mi punto es que, como el país en donde se originó el chocolate, México definitivamente seria para mí el lugar en donde me hubiera gustado ser comido
Y ahora me encuentro aquí, mi amo, no contento con enviarme a este lugar muy desconocido por mí, me dejo abandonado en esta enorme tienda en donde descaradamente el dueño me ha revuelto con otros chocolates, que a pesar de proceder de tan buenas marcas como yo, no me gusta. No digo que me desagraden, de hecho son muy buenas personas y gracias a ellos podemos entendernos mutuamente…. pero sigo pensando lo mismo, no quiero estar aquí
—oe, Choco chan—me habla tomándome de la mano descaradamente, que se ha creído, ¿que no se supone que en este lugar es muy importante el espacio personal?—dime ¿te dolió mucho el camino hacia acá?
—¡¿Qué si me dolió?!—como se atrevía, yo soy un chocolate muy valioso, nadie se arriesgaría a que algo se saliera de lugar de este grandioso cuerpo que está hecho del más puro chocolate—claro que no, alguien como yo no puede ser rebajado al viajar en algo en lo que yo corra peligro—respondí finalmente, soy demasiado para responder como lo hice, solo espero que no se moleste
—¿he?—uno más de mis compañeros de la maravillosa caja en donde estamos siendo exhibidos, se acerca a mi
—que sucede, ¿tienes algo que preguntar?—no puedo evitarlo soy muy curioso
—etto, bueno yo—tartamudea, es gracioso, se ha acercado y ahora se queda callado, aparte de todo tartamudea, tal vez necesite ayuda
—anda, anda, nadie te comerá la lengua—sus mejillas se han sonrojado, ¿acaso hice algo mal y no me di cuenta?
—solo quería preguntarle…. etto…. —y otra vez tartamudeando, bueno, al menos ya dijo algo más coherente
—¿qué?—bien, este tipo abusa de mi paciencia
—¿Cómo y por quien te gustaría ser comido?—ok, es demasiado, ¿acaso también querrá detalles?
—pero con detalles Choco chan—me vuelve a hablar el que aún tiene mi mano entrelazada con la suya
—bien….—comienzo a relatar—por alguien que este realmente enamorado, que quera compartirme con su amada en un beso con mucho amor, quiero ser ese ingrediente que le ponga más sabor a ese acto—me gusto como lo había dicho, y ahora estoy realmente convencido
—oh, que romántico—hablo el que me había preguntado
—¿y si fuera lo contrario?—como siempre, aparte de invadir mi muy preciado espacio, sigue con las preguntas, pero está bien, no puedo ser descortés y no responderle
—mm, bueno pues, odiaría profundamente ser comido por alguien que se pasó de torpe y quiere pedir perdón con una caja de chocolates finos y caros, pero lo peor de todo sería que me compraran para pedir perdón a una novia desconsolada y triste solo porque su novio bobo se le ha olvidado su día de cumpleaños o la fecha de su aniversario, eso en definitiva sería nefasto—era la más simple realidad
—ooh, aspiras a mucho, ¿ne Choco chan?—ahora sí que se estaba pasando, oh por todos las personas que me hicieron, me está abrazando como si yo fuese una maldita almohada—hey, tranquilo Choco chan, si quieres te doy un besito para que te calmes—
—no gracias, no soy gay—pero a pesar de lo que dije, por extrañas circunstancias mis mejillas las siento calientes y mi corazón esta acelerado…. que es esto
—chicos, pongan atención, ahí viene alguien—advirtió uno más de mis compañeros
—waau, mira nada más, que tenemos aquí—pero que descarado, primero me coqueteaba a mí, y ahora hasta con un humano se mete
No era la gran cosa, el joven que estaba enfrente de la vitrina en donde estábamos siendo exhibidos, no estaba tan mal, algunos de sus cabellos castaños aún se movían lentamente por lo agitado que había entrado, incluso algunos de estos se pegaban a su frente, -cosa que aunque no lo quisiera admitir lo hacía ver lindo-, además de eso sus grandes ojos caramelo reflejaban demasiado bien la iluminación del lugar, su complexión delgada lo hacía parecer alguien que en definitiva no buscaría chocolates para pedir perdón a su novia, ya que en su caso sería la chica quien tendría que pedir perdón, él era demasiado =no sé qué= como para lastimar a su novia, o siquiera para tener una
¡¡¡¡¡¡De acuerdo lo admito, es muy lindo!!!!!!
—di-discupe—pero qué demonios, su vos…. porque está tartamudeando
—¿sí?, ¿en qué le puedo servir?—
—etto…. —
….
¿Cómo?, ¿Por qué?, y de nuevo ¿CÓMO, ES QUE LLEGUE A ESTO?, no, esto me puede estar pasando, después de todo lo que me ha ocurrido, en verdad, yo no creo merecer esto….
En estos momentos, estoy siendo cruelmente trasladado en una pequeña cajita muy adornada y transparente acompañado con el tipo que alucina ser cosas que no, estamos demasiado juntos, el movimiento al que somos sometidos por el joven castaño, me tiene mareado además hace que, para no andar de aquí para allá por toda la caja, el tipo desesperante me abrase rodeándome completamente con sus brazos mientras sus piernas se enredan con las mías, y nuevamente, esa sensación extraña vuelve a acudirme
—estúpido Miyagi—y ahí estaba otra vez, ¿de verdad ese tal Miyagi tenía la culpa de su enorme enojo?, tenía todo el camino hasta donde estamos quejándose y quejándose de ese Miyagi, incluso yo ya estoy pensando que de verdad es molesto—todo por su culpa…. —su mirada ha cambiado, es como…. algo de tristeza combinada con…. mmm…. ¿melancolía?, definitivamente, es muy extraño—…. Nowaki…. —dijo al aire, cambiando su semblante a uno triste, es que acaso el….
—porque te ves tan sorprendido, era muy obvio que él es gay, y que se ha olvidado de algo importante—una vez más, mis preguntas son respondidas con una velocidad innecesaria, ese tipo que por alguna razón aún no se despegaba de mí, a pesar de que ya nos habían puesto en una mesa, no entiende que debe ser suave y sensible para decirme ese tipo de cosas, que él ya sabe a mí no me gustan, y no estoy hablando de que sea gay
—y así es como mi sueño se derrumba—digo en voz baja, obteniendo como resultado algo realmente extraño
—no te preocupes, yo estoy aquí, veras que no es tan malo, el realmente lo ama, observa bien—no puede ser, su voz en mi oído, las tranquilizadoras palabras, la cálida sensación de su cuerpo pegado al mío….
Pensando en todo eso omití completamente lo que pasaba afuera de este pequeño espacio
….
—Hiro san, buenas noches—saludo, estaba triste, el día anterior su amado había pasado la noche en la universidad, obteniendo como resultado el haber pasado su cumpleaños completamente solo, y ahora su caramelo estaba ahí, agitado, sonrojado y muy nervioso, ya esperaba eso, esa era siempre la reacción del profesor cuando se le olvidaba algo
—No-Nowaki yo…. —estaba nervoso, aunque tal vez por el momento, nervioso sea algo demasiado poco para como en realidad se sentía—ve-veras, ayer—sabía que por más que intentara explicar no serviría de nada
—estas aquí, eso es lo que importa ahora, ¿ne?—abrazo tiernamente a su novio, el entendía lo que el castaño trataba inútilmente de decir, y agradecía mucho que tratara de explicar las cosas, eso demostraba que el caramelo realmente se sentía mal, y eso le gustaba, además de que sabía que en estos momentos podría aprovecharse de la situación y hacer cualquier cosa sin que obtuviera queja alguna
—es-espera—lo alejo un poco al sentir como su trasero era acariciado por las golosas manos de su amante oji azul—aun no te he dado tu regalo—sin ser soltado completamente, corrió a la cocina en donde había dejado el caro chocolate exportado que había comprado
—bien, lo tomare ahora—sin más, volteo al castaño y lo sentó sobre la mesa, lentamente comenzó a besarlo por todo el largo de su cuello, haciendo que el profesor gimiera….
….
¡¡¡¡¡No puede ser!!!!! Están teniendo sexo en la mesa en donde al parecer comen sus alimentos, pero que clase de humanos son, pero está bien, lo bueno es que el parecer ya se reconciliaron, sin embargo…. los gemidos que lanza el lindo castaño están haciendo que yo mismo me excite…. estoy en problemas
—¿Qué sucede Choco chan?—me cuestiona, hablando nuevamente muy cerca de mi oído—no tienes por qué espantarte, eso es lo que hacen los humanos cuando se aman mucho—¿por qué empiezo a creer que él piensa que soy un niño?
—se lo que hacen—rezongo, esto sigue sin gustarme
—oye Choco chan—me giro para verlo a la cara, por el tono de su vos parase que es algo importante
Pacientemente eleva una de sus manos y toma mi mentón, acerca su rostro y hace que sus labios se aprisionen con los míos, sin saber porque, yo también empujo mi boca…. después de un rato su lengua empieza a abrirse paso en mi cavidad, y sin que pudiera evitarlo nuestras lenguas ya están danzando en un majestuoso y sensual baile….
….
Sin saber cómo, ahora nosotros formamos parte de un bello adorno….
Sin saber porque, la bella pareja conformada por el castaño y el oji azul nos observa detenidamente, mientras se abrazan felices….
Yo y el, estamos….
*¨*¨*¨*___FIN___*¨*¨*¨*