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at your fingertips. por Kiki__Nice

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Notas del fanfic:

DISCLAIMER: Este fanfic NO es mío, mi único crédito pertinente es la traducción. Asimismo, las personas mencionadas aquí tampoco me pertenecen.

Notas del capitulo:

Ok, lo siento, Jongyu es mi droga y no puedo alejarme de esta pareja por mucho tiempo. Disculpas por la tardanza en OW, lo actualizaré este fin<3

Sin más, a leer ~

La primera vez que sucede, Jinki lo deja pasar como un acto inofensivo de afecto. Después de todo, Jonghyun siempre había sido bastante orgulloso y abierto acerca de su necesidad de exteriorizar sus sentimientos. Que lo tomara de la mano casualmente, que lo abrazara en la camioneta, con los brazos alrededor de la cintura y todo – no era más que el paquete completo de ser amigos con lo que era, prácticamente, un pulpo humano.

Así que, cuando Jonghyun se inclina y le planta un beso en los labios durante el desayuno, todo lo que Jinki dice es "¿Buh?" en su estado semi-zombi.

"Pensé que eso te despertaría,” explica Jonghyun, como si fuera normal ir por ahí besando a los miembros de su grupo como si nada.

Jinki parpadea estúpidamente. "¿Bella Durmiente?"

La única respuesta que obtiene es un resoplido antes de que Jonghyun centre su atención en Minho, quién ronca plácidamente sobre su cereal.

Se pregunta brevemente por qué Minho no recibe el mismo trato cuando Jonghyun comienza a golpear al más joven con su cuchara.



Jonghyun se derrumba a su lado arrebatándole su botella de agua.

"Esas máquinas," Jinki gime, asintiendo con la cabeza en la dirección de los tres menores mientras practicaban su nueva rutina. "¿Qué tienen que nosotros no?"

El otro se toma un momento para recuperar el aliento. "La ventaja de ser más joven,” espetó, poniendo mala cara.


"Lo haces sonar como si fuéramos antiguos." El líder le dedica una sonrisa descarada.

" eres antiguo, yo solo estoy viejo,” bromea.

Con un esfuerzo sobrehumano, Jinki se las arregla para levantar el brazo y golpear a Jonghyun en la frente. Pero su victoria es corta cuando este se lanza sobre él y trata de frotar sus axilas sudorosas en su cabello.

"¡Eres un cavernícola!” grita todo el tiempo tratando de poner distancia entre Jonghyun y él, pero el otro chico, aunque fuera pequeño, no tenía nada de ligero. Así que decide jugar sucio y se va directamente al talón de Aquiles de su amigo. Hunde sus dedos en el abdomen del castaño, lanzando un ataque implacable y muy pronto el otro se convierte un lío de risas y jadeos.

"En serio, ¿por qué estos dos imbéciles son mayores que yo?" Kibum suena incrédulo y Jinki dirige su mirada a la voz, solo para ver el resto de los miembros observándolos. Sonríe sin arrepentirse.

Taemin se ríe, "Hyung, nos tomaremos un descanso. Quiero un poco de comida." Dice esto mientras le dedica a Key una sonrisa ansiosa, y predeciblemente, Kibum se derrite bajo su atención y se deja arrastrar fuera del salón de prácticas sin chistar.

Minho se encamina tras ellos, mirándolos divertido. "Hyung, ¿quieres algo?"

"No,  está bien. Me reuniré con ustedes en el comedor tan pronto y cuando me ocupe de este niño grosero," gruñe, sigue haciéndole cosquillas sin piedad, ignorando las súplicas de un Jonghyun indefenso. El alto se encoge de hombros, haciendo caso omiso de los gritos de ayuda provenientes del rubio y se va.

"Minho, traidor,” Jonghyun jadea.

"Se las está cobrando por lo del cereal en su cabello,” le informa Jinki serenamente.

Le toma completamente por sorpresa cuando el otro deja de reír abruptamente para darle un tirón por el pelo. Lo siguiente que sabe, labios gruesos son apretados contra los suyos con firmeza.

Su cerebro apenas comenzaba a procesar la situación antes de que Jonghyun lo empujara lejos, gritando en triunfo, "¡Ja! ¡Ahí tienes, hyung!" mientras sale rápidamente de la habitación.

Jinki se limpia la boca y espera que el hormigueo que siente sólo sea resultado de la estática.

El asunto no termina ahí.

Sigue sucediendo,  Jonghyun robándole besos cada vez que están solos. En el cuarto de baño, mientras se cepillan los dientes. En la sala de grabación, cuando son los últimos en terminar sus partes. Incluso detrás del escenario, donde Jonghyun lo embosca en el camerino vacío, mientras busca el teléfono perdido del maknae.

Cada vez,  lo lleva un poco más lejos -- la profundización y duración de los besos, con algo de lengua aquí y allá. Por lo general se retira antes de que Jinki pueda reaccionar y procede a actuar como si nada después del incidente.

Esto lo deja confundido y algo molesto, pero es renuente a abordar el tema.

No está seguro de que quiere analizar la forma en que estos besos hacen que su corazón se acelere y se desordene aún más su cabeza.



Están en el set de Hello Baby y la mayoría del personal está ocupado con el almuerzo. Los miembros están jugando con Yoogeun, mientras que Jinki mira desde la distancia. El niño es adorable y amable, y sin embargo, no se atreve a acercarse a él. Los accidentes ocurren, por lo general cuando él está cerca.

Una cabellera rubia no se encuentra en la habitación y Jinki se pregunta adonde podría haber desaparecido el otro chico. Curioso, sale de la habitación en busca de su vocalista y no se sorprende cuando lo encuentra dormitando en una habitación vacía.

El espectáculo lo llena de una extraña sensación, en algún lugar entre la admiración y la ternura completa. Es una sensación que ha llegado a asociar más y más con Jonghyun estas últimas semanas y con la cual no esta muy cómodo.

Frunciendo el ceño, vuelve a salir, pero su amigo se mueve y abre los ojos. “¿Hyung? ¿Es hora ya?"

"No, lo siento, no quise despertarte,” dice Jinki sintiéndose culpable. "Vuelve a dormir. Volveré para despertarte."

Pero Jonghyun tiene otras ideas, al sentarse y extender sus extremidades lánguidamente. Jinki siente un rubor cálido subirle por el cuello cuando alcanza a verle el ombligo. Su vergüenza es inesperada y desconcertante, ya que él ya había visto al otro chico en varios estados de desnudez muchas veces antes.

Cuando rápidamente sacude su mirada, le sorprende la insinuación de una sonrisa en el rostro de Jonghyun.

"Quédate y hazme compañía." Jonghyun acaricia el suelo junto a él. Sonríe de forma deslumbrante y los conceptos erróneos que Jinki pudo haber tenido sobre el joven desaparecen en un instante.

"Buena idea,” exclama, acostándose junto a su amigo. "¿Por qué no se me habrá ocurrido antes? Me vendría bien una siesta."

Jonghyun se ríe y se inclina sobre él. "Soy un genio por una razón, hyung."

Rodando los ojos, Jinki se retuerce para tratar de encontrar una posición cómoda. "Si tú eres un genio, entonces yo soy Kim Yuna.”

Se pone rígido cuando Jonghyun planta sus brazos a ambos lados de su cabeza. "¿Jonghyun?"

"Hmm, ¿recuerdas ese día? Serías una muchacha bonita, hyung," es la respuesta que recibe mientras Jonghyun inclina la cabeza y se acerca más.

Casi instintivamente, contiene la respiración y cierra los ojos, esperando que lo inevitable suceda. Un momento pasa y no sucede nada. Cuando se echa una ojeada,  el nerviosismo lo come al ver que Jonghyun lo miraba con una diversión brillante en sus ojos que sabía distinguir muy bien.

"¿Qué?" gruñe en irritación, empujando a Jonghyun cuándo comienza a reír. No le gusta ser objeto de burlas.

Jonhgyun simplemente se ríe, pero no se mueve. "Jinki, ¿quieres que te bese?"

"¡N-no!" balbucea, le ardía la cara. Por lo general, disfrutaba de las bromas entre ellos, pero ahora mismo lo único que quiere es pegarle un manotazo al idiota que tiene enfrente. "¡Nunca he querido, pero siempre lo haces, sin mi permiso o aviso alguno!"

Sus ojos se ablandan, Jonghyun coloca una expresión seria y llega a darle un apretón a sus manos a forma de disculpa. "Está bien. Ya que quieres que lo haga, preguntaré," murmura y por un momento, Jinki se pierde. "Voy a besarte ahora. ¿Puedo?"

Si el latido fuerte de su corazón era algo para guiarse, Jinki ciertamente quería este beso. Una parte de él está dispuesto a admitir que incluso lo disfrutaría, y mucho. Sin embargo, el lado racional gana y sin más él niega con la cabeza rápidamente.

Estuvo a punto de cambiar de opinión al ver la expresión en el rostro abatido de Jonghyun. "No te entiendo. ¿No es esto tomar tus muestras de afecto demasiado lejos?"

"¿Qué tiene de malo?" Jonghyun dice con el ceño fruncido. "Es una manera de demostrar mi aprecio. Inofensivo, de verdad."

Suspira Jinki, exasperado. "Debes hacer estas cosas con tu novia, no tus amigos. ¿Por qué tengo que explicarte esto, idiota?"

Jonghyun hace pucheros, pero se aleja de él. Jinki da un suspiro de alivio a pesar de que su amigo sigue apoyado en su entrepierna, lo cuál es más que incómodo.

"En caso de que no lo hayas notado, no tengo novia. Ya que no tenemos tiempo para conocer a alguien, ¿cómo se supone que voy a encontrar una?" Gruñe. "Estoy al final de mis fuerzas aquí, hyung . Estoy a punto de acostarme con cualquier cosa que se mueva,” Frunce el ceño, arrastrando sus dedos fuertemente por su flequillo a causa de la frustración. "Creí - creí que me entenderías.”

Ahora Jinki sólo se siente mal, como si hubiera fallado en su papel como líder. A pesar de que nada de esto es realmente su culpa. Claro, ha experimentado su parte justa de frustración sexual, pero es algo que viene con la carrera elegida. Siempre es el trabajo primero. Se supone que debe dejar ir todo lo que pueda obstruir su camino y por lo tanto, la fuerte limitación que la empresa tiene sobre ellos. Por lo menos, hasta que se les considere lo suficientemente exitosos como para sobrevivir a un escándalo.

"Entiendo,” le asegura, "pero este no es la forma de actuar al respecto.”

"Hyung, si intento algo con cualquiera de nuestro staff femenino, las cosas se pondrán feas."

"¡Eso no es lo que quise decir!" Jinki se apresura a aclarar, temblando ante la idea. "¡Ni siquiera te atrevas a mirarlas de esa manera! No, lo que quise decir fue, tal vez... ya sabes," le da Jonghyun una mirada significativa.

Jonghyun le da una escéptica a cambio. "Por mucho que me gustaría, no puedo leer tu mente."

Dejó caer los hombros ante la derrota, Jinki maldice su suerte. Se centra en otra cosa que no el rostro expectante del otro, continúa. "Me estaba refiriendo a las películas para adultos y sitios web. Pueden ser, ya sabes, muy útiles cuando estás tratando con esta clases de, erm, necesidades..."

El asfixiante silencio que sigue después de la sugerencia de Jinki  le hace fervientemente desear excavar un hoyo profundo en el suelo y esconderse por un tiempo muy largo. Jonghyun hace un extraño ruido estrangulado antes de tirar la cabeza hacia atrás y reírse histéricamente. Si es posible, se le oscurece la vista a Jinki y arruga sus ojos, cerrándolos, esperando a que el hueco se abra por debajo de él.

"¿Porno? ¿Me estás diciendo que vea porno?" estaba que graznaba en medio de sus carcajadas. "Hyung,  no tengo diez. ¡Claro que sé lo que es!"

Jinki, incorporándose. "Entonces empieza a actuar como un adulto.”

"Lo veo," Jonghyun le interrumpe, mirándolo por debajo de su flequillo rubio. "Cada vez que puedo. Digamos que mi mano es mi mejor compañera, ya sabes."

Su cabeza le bombardea imágenes de lo prohibido y Jinki mira hacia otro lado, ignorando el escalofrío que se arrastra por su columna vertebral cuando Jonghyun se lame los labios. Lascivamente y a propósito.

"Pero no hace nada para mí. Yo quiero algo un poco más tangible," susurra y Jinki se sorprende al sentir su aliento cálido en su mejilla. El joven sonríe, entrecerrando los ojos al ver como Jinki se lame los labios con nerviosismo.

"Jonghyun-"

"¿Qué están haciendo?"

Jonghyun regresa a su puesto anterior y se vuelve hacia la voz. Taemin está de pie en la puerta, la confusión evidente en su rostro. Jinki está en blanco, empujando a Jonghyun con el pie aún más lejos de lo que estaba. Debió haber sido todo un espectáculo, Jonghyun en su regazo, y casi respirándole en la nuca.

Se puso de pie a toda prisa, Jinki ensartando la primera excusa que le viene a la cabeza. "Jugábamos a un juego. Tratábamos de ver quién podría quedarse sin pestañear durante más tiempo. ¿Verdad, Jjong?"

La forma de encoger los hombros de Jonghyun es a medias y de mala gana,  pero igual distrae a Taemin. "¿Es hora de filmar?"

Taemin les lanza una mirada sospechosa, pero asiente con la cabeza en respuesta."Jinki-hung, Yoonduk-hyung quiere discutir algo con usted antes de empezar."

Asintiendo con la cabeza, casi sale corriendo de la habitación, dejando a Taemin y Jonghyun en un incómodo silencio.



No pasa nada más en las próximas semanas y Jinki baja la guardia cuando Jonghyun no intenta nada las pocas veces en que se les deja solos por sus miembros y el personal. Se relaja lo suficiente como para empezar a bromear con él y dejar de evitar sus toques.

Pues resulta, que era sólo una falsa sensación de seguridad y Jonghyun sólo estaba esperando su momento.

Jinki está tratando de atrapar algunos minutos de sueño mientras que los demás están lejos, Kibum y Jonghyun visitando sus respectivos hogares y los más jóvenes con diferentes agendas que atender. Está en medio de un sueño increíble en el que está rodeado de paredes y muros interminables de pollo frito cuando la puerta se cierra de golpe, despertándolo brevemente. Desorientado y más que un poco molesto por haber sido interrumpido, Jinki mira alrededor, tratando de averiguar quién había regresado temprano. En poco tiempo, la puerta de su dormitorio se abre y entra Jonghyun, caminando de puntillas hasta darse cuenta de que Jinki está sentado en la cama y mirándolo.

"¡Oh! Ey, hyung." Dice con una pequeña sonrisa. "Espero no haberte despertado."

Jinki lo mira de nuevo, su mal genio apoderándose de él. “¿Qué haces aquí? ¿No se supone que estarías en lo de tus padres hasta mañana?"

Jonghyun vuelca su mochila en el suelo y se extiende en la cama de Taemin. "Caramba, gracias, hyung. Me siento muy a gusto en mi propia habitación."

Sacándole la lengua al otro chico, Jinki  se deja caer en la cama. "Sí, me despertaste. Perdona si estoy un poco irritable."

"Lo siento.” Esta vez su disculpa parecía real y Jinki ríe antes de regresar a su sueño.

La próxima vez que despierta, tiene que estar en cama durante unos pocos minutos antes de lograr identificar la causa.

"Oh sí, nena. Así, así, allí mismo," una voz masculina jadeaba, dejando salir un inconfundible gemido.

Atónito, se retuerce en la cama hasta estar frente a Jonghyun, quién todavía está en la cama de Taemin, apoyado en una almohada con su ordenador portátil entre sus piernas. Un vistazo a la pantalla muestra una mujer desnuda con sus labios estirados a través de un miembro grueso.

Ahogando un chillido, Jinki aprieta los ojos cerrándolos y encogiéndose más debajo de su manta. Está indeciso entre la vergüenza y la ira. ¿Cómo pudo Jonghyun pensar que era apropiado ver porno con él en la misma habitación?

Por desgracia, cerrar los ojos no bloqueaba el sonido y podía escuchar cada fuerte respiración del otro, podía oír los suaves gemidos que se derramaban fuera de la boca de su amigo, podía escuchar el sonido de la piel sobre la piel-

Contra su mejor juicio, echa una mirada y la visión que tiene frente a él lo deja con la sangre helada y ardiendo al mismo tiempo. Jonghyun tiene su mano alrededor de sí mismo, moviéndola a un ritmo constante y rápido, la espalda arqueada y los ojos cerrados con fuerza. Es una escena que empieza un fuego lento en su ingle y envía tics nerviosos a su propia zona íntima, para su horror. Incapaz de apartar su mirada, ve como el chico más joven desliza la otra mano entre sus piernas y lo que sea que hace, lo lleva al borde.

Jinki traga fuerte al mirar como Jonghyun se viene a borbotones de espesor, la voz de un profundo gemido que viene desde lo alto de su clímax. Sus ojos siguen las manos de Jonghyun, como trazaban un camino sobre su pecho desnudo hasta sus labios, donde su lengua se deslizaba hacia fuera para lamer sus dedos juguetonamente y dejarlos impecables.

Y la triste verdad es, que Jinki se encuentra deseando que fuera su semen el que Jonghyun estaba lamiendo su mano. Tenía una erección horrible, estaba más excitado de lo que había estado alguna vez en su vida y no sabe cómo lidiar con esta la realidad. Para empeorar las cosas, cuando enfoca la vista, Jonhgyun está mirándole. Una sonrisa se extiende lentamente a través de su rostro mientras se lamía los labios sugestivamente.

"¿Disfrutaste del show?"

"Vete a la mierda,” gruñe, humillado.

Con una mirada que podría matar de ser posible, estaba en proceso salir de la habitación y cuidar de su problema en el aislamiento del cuarto de baño cuando se abalanza sobre él Jonghyun. Sus cabezas chocan  dolorosamente y en medio de una pequeña lucha, Jonghyun logra tomar sus muñecas y posicionarlas sobre su cabeza con un agarre de hierro. Jinki está momentáneamente distraído pensando en dónde habían estado esas manos hace unos minutos antes de poder procesar realmente la situación, hasta que Jonghyun audazmente palmea su entrepierna.

Un temblor de su cuerpo y Jinki deja salir un gemido involuntario.

"¿Qué estás haciendo?" se las arregla para decir con los dientes apretados mientras Jonghyun continúa amasando su erección. Una pequeña parte de su cerebro está gritándole que empuje al otro chico fuera de él y que salga corriendo. Él es fuerte, pero su cuerpo se niega a cooperar con él y se sigue arqueando ante el contacto.

"Sólo quiero echarte una mano," Jonghyun canta, su voz profundizándose con la excitación y el sonido de murmuros de su nombre lo  llevaban cada vez mucho más cerca del borde. "Simplemente acuéstate y déjame hacer esto. No te arrepentirás, te lo prometo."

Y con eso, Jinki decide dejar que suceda. "Si lo odio, te patearé el trasero después,” dice casi a regañadientes. Jonghyun sonríe suavemente y captura sus labios en un casto beso, que rápidamente se torna apasionante y se complica, cuando Jonghyun le comienza a sacar los boxers por sus caderas y apretar su cuerpo con el suyo.

Más tarde, se enorgullece del hecho de no haber perdido la cordura tan rápido como pensaba.



No hablaban de ello. Sólo se convirtió en lo suyo. Su asunto personal. Nadie más tenía que saberlo.

Después de esa primera alucinante experiencia, no hizo falta mucha persuasión para convencer a Jinki de que se trataba de un arreglo mutuamente beneficioso. En cada oportunidad, se escabullían para alimentar el apetito sexual de ambos. Besos robados en los pasillos vacíos, pajas en el baño, incluso mamadas cuando nadie estaba en casa - es algo que Jinki empieza a anhelar al final de sus días ocupados. Y como explicó Jonghyun en un tono más bien engreído, la ventaja del acuerdo era cómo ambos eran conscientes y aceptaban el hecho de que era puramente físico. Sin ninguna clase de enredo ni atadura emocional, porque eran amigos cercanos que se estaban ayudando.

"Amigos con beneficios,” Jonghyun murmulló, satisfacción presente en su voz mientras el mayor se lo tragaba, centímetro a centímetro.

Y por un tiempo, Jinki estuvo conforme con esta etiqueta.



Como dice el refrán, todas las cosas buenas deben llegar a su fin.

Comienza con Minho acorralándolo en la cocina una noche. Los demás estaban más o menos desparramados en el sofá del salón, listos para comenzar su noche de películas. Onew había ido a la cocina a buscar las palomitas de maíz y nadie cuestionó porqué Minho lo siguió.

"Hyung, lo sé," Minho dice en voz baja justo cuando Jinki coloca las palomitas en el microondas.

"¿Hmm?" tararea distraídamente, ocupado en la búsqueda del tazón de palomitas de maíz en la esquina de la alacena. "¿Qué, Minho?"

"Lo sé," repite, los ojos fijos en Jinki. "Sé sobre tí y Jonghyun hyung."

El tazón en su mano se desliza, y se hubiera desplomado en el suelo (como su corazón) de no ser por lo rápidos reflejos del rapero.

Con la boca seca y el corazón en la garganta, trata de recobrar la compostura antes de elevar la mirada hacia el otro. "No sé de lo que estás hablando."

Minho se ve frustrado y un poco enojado. Jinki se estremece cuando el joven entierra sus dedos en su largo cabello. "No me hagas decirlo, hyung. Los vi juntos en el vestuario la semana pasada." Aparta su mirada y Jinki aturdido toma nota de los adorables puntos de color rosa en sus mejillas.

Jinki sabe que Minho dice la verdad, porque aún recuerda el torrente de adrenalina de ese día. El miedo y la emoción de ser descubierto mientras Jonghyun y él se disfrutaban en medio de su vestuario vacío. Había sido duro y sucio y perfecto.

Pero, por supuesto, alguien si vio. Jinki no sabe si sentirse aliviado o mortificado que se tratara de Minho.

"Por favor, no le digas a nadie," le susurra, sintiendo como los pilares de su mundo comenzaban a tambalearse.

Él sabe lo que sucederá. Expulsado del grupo y de la empresa, degradado y humillado, rechazado por los mismos fans que aclamaban amarlo. Pero la única cosa que más teme es el dolor que causará a sus padres – quienes lo habían criado con grandes expectativas. La idea de avergonzarlos casi lo lleva al borde del llanto.

Minho parpadea al ver como una sola lágrima solitaria se le escapa por el rabillo del ojo del mayor, desconcertado y sin habla.

"¡Hyung! Por supuesto, no diré nada," se apresura a decir, tirando a Jinki en sus brazos en un abrazo incómodo. "Por favor, no llores. En serio no le diré a nadie.”

Avergonzado, se seca los ojos con furia y se aleja.

"Pero todavía necesito que me digas qué está pasando,” insiste Minho, tomándole de la mano.

Antes de que pueda decir nada,  Jonghyun se aparece en la cocina. "¿Dónde están la maldita palomitas de maíz, hyung? No te las estas comiendo todas, ¿verdad?"

Se detiene abruptamente, preocupación desfigurando su rostro cuando se fija en los ojos enrojecidos de Jinki y del agarre controlador de Minho en su mano. "¿Qué está pasando?"

A toda prisa, el mayor se aleja de Minho y agarra las palomitas del microondas antes de empujarle el tazón a los brazos extendidos de Jonghyun. "Aquí, ten esto y vete. Estaré allí en un minuto. Tú también, Minho".

"¿Has estado llorando?" Jonghyun no le hace caso y se acerca. "Minho, ¿qué pasó?"

"Nada que necesites saber, hyung,” responde Minho, tono cortante y frío. Jonghyun retrocede minuciosamente, lanzándole una mirada inquisitiva a Jinki. Cuando no añade más a la conversación, resopla y comienza a retroceder. "Y tú, me gustaría compartir unas palabras contigo más tarde." asiente con la cabeza hacia Jinki antes de salir de la cocina, disgustado.

"Vamos, los demás están esperando,” murmura Jinki, rápidamente tratando de escapar de cualquier interrogatorio.

Minho asiente con la cabeza lentamente, pero también añade: "Claro, pero tendremos esta discusión más tarde, te guste o no.”



Más tarde, no llega hasta mucho más tarde. Jinki es muy bueno en el arte de evitar cuando tiene que hacerlo. Sus apretadas agendas ayudaban, con Minho pasando la mayoría de su tiempo filmando Dream Team y el resto del tiempo ocupado por la grabación y los ensayos para su regreso tan esperado.

Esto no los detiene a Jonghyun y a él, ambos deseosos de deshacerse de las capas de tensión y simplemente disfrutar uno del otro como una vía de escape. Se convierte en un juego para ellos, quién puede durar más tiempo, quién lo puede hacer mejor, quién puede dominar al otro. Es divertido, emocionante y liberador. También pronto se hace evidente que Jonghyun quiere ir más lejos, pero no presiona a Jinki. Se le hace frustrante y entrañable la forma en que Jonghyun se contiene, porque a pesar de que esta preocupado, él también lo desea. Se convence de que es sana curiosidad y no la necesidad de estar más cerca de Jonghyun.

También se dice que es preocupación lo que nubla su mente al ver como Jonghyun se arregla delante del espejo, preparándose para una reunión organizada por algunos de sus amigos. Él sabe lo optimista que está Jonghyun por esta noche, que confía en conocer a alguien especial. La idea no exactamente lo llena de alegría y razona que es porque simplemente no quiere que Jonghyun tenga tantas expectativas antes de irse.

"Jinki, ¿estás celoso?" Jonghyun le sonríe, peinándose el pelo hacia atrás por enésima vez en los últimos diez minutos.

"¡No!"  espeta cortante, la molestia remplazando a  la preocupación. "Estoy preocupado, es todo.”

Jonghyun ríe, arrugando los ojos de una forma adorable y Jinki tiene que aspirar una bocanada de aire por lo guapo que su amigo es en realidad. "En serio, hyung. Creo que tengo el encanto suficiente para atraer a algunas chicas. Y ahora por fin estoy teniendo la oportunidad adecuada. Así que deja de preocuparte y comparte mi emoción."

"Está bien, sólo no me vengas llorando a mí cuando una chica te rompa el corazón,” murmura, rodando lejos de Jonghyun y cubriéndose la cara enrojecida con la almohada de Minho.

Hay silencio en el otro extremo por un largo tiempo, lo suficiente para que Jinki comienze a preguntarse si Jonghyun se había ido. Hasta que un peso cae de la cama y la se le es arrastrada lejos de él.

"Hyung, gracias por preocuparte por mí." La voz de Jonghyun era suave y sonaba contento. "Pero en serio, puedo cuidar de mí mismo."

Jinki fuerza una sonrisa en su rostro. "Vete, eres molesto," se ríe, golpeándole el brazo a Jonghyun.

"No esperes por mí.” Jonghyun guiña antes de plantarle un húmedo beso en los labios y la risa su manera de salir de la habitación cuando Jinki tira la almohada a él.



Una mano lo sacude y lo despierta de golpe para terminar con un irritado Jinki.

"Hyung, despierta. Estás en mi cama."

Después de haber sido sacudido por cuarta vez, el líder se da por vencido en tomar los últimos vestigios de sueño. Poniendo mala cara, parpadea en la dirección de la forma humanoide vagamente sentada junto a él. "¿Qué hora es?"

"Dos de la madrugada," es la respuesta y finalmente reconoce timbre profundo de la voz de Minho.

"Oh. ¿Llegó Jonghyun?" murmura, frotándose el sueño de sus ojos.

Minho sacude la cabeza, inclinando la cabeza hacia la cama vacía de al lado. "Es por eso que estás aquí? ¿Estabas esperándolo?”

Hay algo en la voz del otro que lo sacude de su estupor adormilado. "No, sólo me quedé dormido aquí. Lo siento, Minho, me iré."

"No", dice con firmeza, anclándolo a la cama. "¿Podemos hablar?"



Mira con desgano a la taza de chocolate caliente, preguntándose si sería posible ahogarse en ella. Ciertamente, eso sería preferible a la conversación que está a punto de tener. A su lado, Minho toma un pequeño sorbo de su bebida y se aclara la garganta ruidosamente.

"¿Y?" 

Jinki se encoge de hombros y cae más abajo en su asiento. "¿Y?"

Minho lanza un profundo suspiro. "¿Qué estás haciendo, hyung?"

"Yo no creo que  esto sea de tu incumbencia,” replica rápidamente, molesto por estar siendo interrogado en una hora tan alta de la noche por su dongsaeng. Es aún más irritante cuando Minho roda sus ojos.

"Sí, lo es," insiste Minho.

Jinki aprieta los dientes y piensa en lo poco profesional que sería golpear a un miembro de su grupo, como líder.


"¿Sí? Ilumíname, entonces."

El rostro del alto cambia de expresión, mostrándose un poco nerviosos por la mueca en el rostro de su líder, la cuál nunca es así de intensa. Jinki toma nota de este hecho con cierta satisfacción.

"No creo que entiendas completamente las consecuencias de lo que estás haciendo", dice finalmente Minho. Ofendido, está a punto de hacer un comentario, pero se muerde la lengua cuando el menor habla antes de él. "No creo  puedas entender porque estás demasiado dedicado a esta relación.”

La declaración le asusta durante unos buenos minutos. "Pero no es una relación,” es lo que finalmente logra articular, haciendo eco de la explicación de Jonghyun sin pensar, "es un arreglo mutuamente beneficioso. Ya sabes, amigos con beneficios.”

Se siente tonto, tan pronto como las palabras están fuera de su boca y a juzgar por la mirada de incredulidad en el rostro de Minho, también suena tonto.

"Esto es lo que no entiendo,” suspira. "Jinki-hyung, ¿por qué arriesgar todo lo que hemos logrado por una razón tan estúpida? No te das cuenta de lo que sucederá si la gente fuera a enterarse?"

"Yo", murmura Jinki miserablemente, sintiéndose más estúpido cada minuto.

Minho entrelaza sus dedos, dándole a su mano un apretón tranquilizador. "Es por eso que necesito saber. ¿Es porque estás enamorado de él?"

Su reacción inmediata es reírse en la cara de Minho y negarlo, porque la sola idea de estar enamorado de Jonghyun es ridícula, más aun teniendo en cuenta que es un hombre. Pero antes de poder hacerle cara a Minho, la puerta se abre y dicha persona se tropieza en el apartamento. A juzgar por el alto color en sus mejillas, ha tenido su parte justa de las bebidas en la reunión. Ven divertidos al chico recién llegado mientras contemplaba los cordones de sus zapatos antes de tratar quitárselas con mucho esfuerzo.

Riendo, Jinki hace su camino al hombre y se escabulle a su lado.

"¡Hyung!" El rostro de Jonghyun se ilumina inmediatamente, lanzándose a Jinki feliz. "Me esperaste,” murmura en el cuello del mayor, presionando besos a lo largo de su clavícula.

Se sonroja, y evitando la horrible mirada que Minho está dándole, lanza a Jonghyun al sofá."Minho, ven a ayudarme."

Minho hace una mueca, pero avanza a regañadientes para quitarle las botas al vocalista. "Será mejor que no vomites en nuestra habitación, porque no limpiaré por ti.” Minho frunce el ceño mientras Jonghyun en cambio le sonríe de forma brillante. "Minho-yah, no tenías que esperarme, también."

"No lo hice y tampoco Jinki-hyung," Minho se queja y Jinki sonríe débilmente, pero Jonghyun no está escuchándole. En su lugar, toma la parte posterior del cuello de Jinki y lo arrastra lo suficientemente cerca hasta que sus labios rozan su oreja .A continuación, le susurra, o más bien trata, porqué habla demasiado alto: "Shin Sekyung me dio su número, hyung. Creo que le gusto."

Se congela. ¿Qué?

"Oh, eso suena fantástico, Jjong," murmura, sintiéndose como si le hubieran dado un puñetazo en el estómago.

Ignora la mirada de lástima que Minho le dedica. No sabe que es peor - admitir que Minho había estado en lo cierto o darse cuenta de que acaba de tener su corazón roto por alguien que ni siquiera sabía que había estado enamorado.



Las consecuencias no son agradables.

Jonghyun pasa cada momento libre enviándole mensajes de texto o bien hablando por teléfono con Sekyung. Ciertamente no es nada nuevo para sus miembros, quienes sabían que pondría al tanto de las conversaciones sin sentido que tenía con la joven actriz a quien escuchara. Llega al punto donde Yoonduk tiene que intervenir y recordarle el tener cuidado, teniendo en cuenta que su regreso está a sólo unas pocas semanas.

Jinki se aísla del grupo, quedándose en su habitación cada vez que están en casa o fuera con sus amigos si se les da la oportunidad. Empieza a evitar a Jonghyun activamente, lo cual se vuelve dolorosamente obvio cuando sale de cualquier habitación tan pronto como los pasos del otro hombre se escuchan. Jonghyun finalmente toma nota de la conducta fría de su líder y Taemin trata de salir con él, de acompañarlo, pero Jinki lo  rechaza con educación, mascullando la excusa de estar cansado.

Como la única persona que sabía de todo, Minho intenta hablar con su líder. Pero Jinki sólo aumenta sus defensas y se muestra molesto cada vez que Minho se encontraba a menos de cinco metros de él. Y como si se alimentara de la energía negativa, Kibum se vuelve cada vez más y más prepotente.

Todo esto se torna aún más insoportable cuando Minho se lesiona tan sólo unas semanas antes de su regreso.



Yoonduk masajeaba sus sienes y miraba alrededor de la mesa de comedor hacia el grupo de jóvenes malhumorados.

"Muchachos, lo que necesitamos es trabajar en equipo,” dice con paciencia. "La compañía cuenta con que den lo mejor de sí para el regreso. Y por eso exijo un poco más de ustedes cuatro, teniendo en cuenta las lesiones de Minho."

Kibum resopla con rabia: "Sí, muchas gracias, Minho.”

"Kibum," Yoonduk advierte sólo para ser interrumpido por Minho. "Gracias por tu preocupación, Kibum. Ando desgarrándome los músculos sólo por el placer de hacerlo," articula con sarcasmo.

"Muérdeme," Kibum gruñe de nuevo.

"Suficiente, los dos," Yoonduk golpea una mano sobre la mesa. "Jinki-yah, será mejor que pongas a tu grupo en marcha para el momento en que yo vuelva mañana.”

Se sientan en silencio hasta la puerta principal se cierra con un clic.

"Esto no habría sucedido si pudieras admitir la derrota de vez en cuando,” Kibum comienza con amargura, apuntando su mirada asesina al alto. "Gracias a tí, vamos a tener que cambiar nuestra rutina completa."

"Por última vez, esto está fuera de mi control,” Minho frunce el ceño de nuevo. "Y no estaba sobrepasando mis límites."

"¿Pueden callarse los dos ya? Esto nos esta poniendo los nervios de punta a todos,” se queja Jonghyun irritado. "Lo ocurrido está en el pasado. Tenemos que trabajar un poco más y dominaremos la nueva rutina en cualquier momento."

"Prefiero que gente como tú no me diga que hacer,” Minho replica.

El chillido que hace una silla sobre el piso los hace mirar al frente. Taemin deja la mesa en silencio y cierra la puerta de su dormitorio refugiándose en la habitación que comparte con Kibum y Jinki.

"Bien, ahora ya incluso alteraste al maknae." Jonghyun dice antes de volver su atención a su líder, que está aún por decir una sola palabra. "Hyung, haz algo. ¿O sólo ignorarás esto también?"

"Déjalo en paz," Minho casi gruñe.

"Wow, ¿quién murió y te hizo  su perro guardián?" Kibum se burla.

Jinki finalmente mira hacia arriba, ojos cansados y labios apretados en una línea firme. "Ya. Detengamos esto.” les susurra suavemente. "No podemos meter la pata otra vez, por el bien de nuestros fans. Lo siento por estar tan extraño recientemente. Tengo muchas cosas en mi mente. Pero creo que es hora de que dejemos de pelear, por favor."

El tono exhausto que usa al hablar los calla a todos.



El día de su primera victoria durante las promociones de Lucifer es el mejor antídoto para la tensión entre los miembros. Así que no es realmente sorprendente cuando la vista de sus miembros abrazándose y felicitándose unos a otros en medio de los vítores de sus fans le hace llorar. Tampoco es sorprendente cuando Minho envuelve sus brazos alrededor de él protectoramente, dejando que las lágrimas empaparan la camisa del muchacho más joven. Su corazón se siente lleno.

Las celebraciones duran hasta tarde en la noche y el momento en que llegan a su dormitorio están listos para dormir hasta el Año Nuevo. Jinki permite a los más jóvenes usar el cuarto de baño primero y se desploma en el sofá. No hace más que cerrar los ojos cuando la escucha a Jonghyun entrar en la habitación, rostro arrugado en concentración mientras teclea con fervor en su BlackBerry. Sekyung, piensa y hace caso omiso al dolor en su pecho. Jinki rueda los ojos al contemplar la sonrisa tonta en la cara del otro.

Su herida está todavía fresca, pero duele menos en estos días. Y realmente, no tiene a nadie a quien culpar sino a sí mismo por su situación. Jonghyun siempre lo dejó claro - "sin ataduras, sólo por diversión.” No es su culpa que fuera alguien de quien es muy fácil enamorarse. Y ahora que ha encontrado a alguien, Jinki realmente tiene que dejar de ser tan tonto y dejarlo ir.

"¿Sekyung?" se pregunta, sonriéndole a Jonghyun.

Jonghyun mira hacia arriba, sorpresa coloreándole su rostro.

"Oh, ¿me hablas otra vez?" El dolor es evidente en su voz y en su silencio Jinki carga con su culpa de ignorar a Jonghyun tan descaradamente.

"Lo siento, Jjong. Dejé que el estrés me comiera." Jinki suspira. "Pero tu también estabas siendo un idiota," añade en el último momento.

Jonghyun lo observa en silencio por un rato, hasta que el mayor empieza a retorcerse en su asiento. "Lo siento mucho, hyung. Realmente no sé cómo solucionar esto, pero me gustaría que me lo hubieras dicho antes."

"¿Decirte qué?"

"Minho tuvo una charla conmigo." Jonghyun elabora y Jinki casi se ahoga con su propia saliva. "Me dijo que él sabía y que no estaba muy cómodo con nuestro acuerdo."

"¿Qué?" Está bastante seguro de que él nunca había sugerido nada por el estilo.

"Sólo seguí con nuestro plan porque no parecías tener ningún problema con él. Yo nunca quise forzarte, hyung.”Su voz de desvanece, incierta. "Para ser honesto, me siento herido  al haber tenido que escuchar esto de Minho. Quiero decir, pensé que éramos lo suficientemente cercanos como para discutir estas cosas."

"Claro, Minho," Jinki hace una nota mental de decirle a Minho que mantenga su absurdamente larga nariz fuera de los asuntos de otras personas.

De repente, Jonghyun estaba una vez más, invadiendo su espacio personal. "Pero en serio, hyung. Dime la verdad."

Jinki apenas puede oír los latidos de su corazón. Por costumbre, sus ojos trazan las curvas de los labios de Jonghyun, extrañando la sensación de tenerlos contra los suyos. Está tan cerca. Sería tan fácil inclinarse hacia delante y sólo-

"Para lo que duró, ¿fui bueno?"

Rojo de furia, el mayor empuja a Jonghyun lejos algo violentamente y lo patea de una buena vez, como dentro de sí, siempre quiso. "¡Eres imposible!"

Jonghyun le hace pucheros desde el suelo y sin arrepentimiento. "Voy a tomar eso como un sí, entonces,” se ríe, sentándose. "Ah, y hyung. En serio te extraño tus labios. Son los más sexys par de labios que he tenido alrededor de mi p-¡ay!"

Jinki decide que está es más bien contento de que no están destinados uno para el otro. Es probable que terminara matando a Jonghyun unos días después de comenzar su relación.



Ellos no hablan de ello otra vez. Termina tan bruscamente como comenzó, con un entendimiento mutuo de ambas partes de olvidar y seguir adelante.

Tal vez sea Jinki siendo amargo, pero piensa que él es el único que queda con cicatrices de batalla. Hay días en que se resiente al otro chico, cuando está agotado y solo en casa, mientras Jonghyun está con Sekyung. Otros días ansía tocar a Jonghyun, quiere romper la barrera que los separa y presionar sus labios en la longitud perfecta de su cuello, entrelazando sus dedos en los suyos. En esos días, deliberadamente pone una distancia entre ellos, y Jonghyun, como presintiendo su malestar, no trata de tocarlo - ni siquiera por casualidad.

Aunque fue un proceso lento, al fin obtiene una paz amarga el día que la SM decide hacer pública la relación de Jonghyun con Sekyung.

Que finalmente es capaz de desearles felicidad y tener esas intenciones.



"¿Bueno, hyung?"

Jinki mira hacia arriba de donde está hojeando una revista en la cama de Jonghyun.

“Kibum me ha estado manteniendo al tanto." Mueve sus cejas como si fuera un pervertido o algo.

"Lo sé", dice Jinki lentamente, preguntándose qué había provocado ese movimiento tan extraño. "Él nos mantiene actualizado acerca de ti, también."

Jonghyun hace una mueca y se acuesta al lado de Jinki, arrebatándole la revista. "Él me habló de ti y de Minho."

Tuvo que colocar la expresión más vacía que pudo. "No es nada."

Con un fuerte resoplido, Jonghyun le toma de la cintura. "Los dos sabemos que eso no es cierto, pero si no me quieres decir, puedo entenderlo. No es que ande mucho por aquí de todos modos." Los pucheros en su rostro cuentan una historia diferente.

Sí, trata de hacerme sentir mal, cabrón escurridizo, Jinki piensa malhumorado.

"No hay nada entre nosotros. A Minho le gusta vigilarme porque he estado muy ocupado,” dice, que es el caso, pero no toda la verdad.

Conoce los sentimientos de Minho (Minho, a quién no le gusta pretender y se había confesado con valentía), y al mismo tiempo que aprecia el sentimiento, no está seguro si quiere llevarlo más lejos. Pero al mismo tiempo, está interesado. Así que ahora, ambos están atrapados en una especie de limbo, lo cual ha creado una tensión extraña entre ellos. Y por lo que Jonghyun dijo, los otros lo han notado también.

Un vistazo a Jonghyun lo muestra con el ceño fruncido profundamente. Jinki sonríe. "A Kibum le gusta exagerar. Ya lo sabes."

"Lo sé." Jonghyun ríe, jugando con la férula en su tobillo. "Pero también eres un poco denso en lo que respecta a los asuntos del corazón, hyung."

"¡Yah!"

"No puedes pegarme,” Jonghyun advierte, apuntando a su pierna herida. Jinki frunce el ceño y le pega en la frente en su lugar.

"Por cierto." Jonghyun dice tras un largo silencio con Jinki casi en el borde del sueño. "Sabes, yo estuve enamorado de ti por mucho tiempo." Él se ríe cuando Jinki se sienta de golpe, con los ojos abiertos. "Apuesto a que no tenías ni idea."

Jinki se pregunta si el destino ha estado jugándole una broma cruel todo este tiempo.

"¿Por qué no dijiste nada?" finalmente pregunta tragándose el ya familiar sabor amargo en la boca.

Jonghyun se ríe. "Tenía miedo, supongo. Yo no soy valiente como Minho.” Se encoge de hombros, sonriendo suavemente. "Pero todo está en el pasado, así que no empecemos a actuar extraño por esto, ¿de acuerdo? Estoy con Sekyung ahora, la quiero, y mucho."

Jinki asiente, aturdido, sintiéndose como el mayor idiota del mundo. Hay un leve burbujeo de histeria dentro de él y quiere sacudir Jonghyun por los hombros, gritando: "¡Pero yo también te amaba!" Piensa en todas las oportunidades perdidas y le entran ganas de llorar por lo estúpido que había sido.

Se despierta de su tristeza cuando Jonghyun tira de su franela. "Hey, ¿estás escuchando?"

Jinki intenta una sonrisa tímida.

El muchacho más joven le sonríe con cariño. "Así que, ¿qué es lo que realmente está pasando entre tú y Minho?"

"Algo,” responde Jinki, después de pensarlo un poco.



Esta vez, se asegurará de que el amor no se deslice entre sus dedos.

 

Notas finales:

*Cuándo Jjong menciona lo de 'Serías una muchacha bonita, hyung' se refieren a el programa de School of Rock, ese donde se vistieron de chicas. No sé, lo menciono porque fueron unos 4 párrafos después que caí en cuenta lol.

*traducción de título: en la punta de tus dedos.

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Siempre que termino de leer este fic tengo un sentimiento de vacío, y recuerdo que la primera vez que lo leí, lloré e__e

No sé si es el hecho de que soy una sensible o porque es Jongyu<3

Es que es que es que Jongyu<3<3

ok xd

Gracias por leer y espero que lo hayan disfrutado! 

No olviden enviar cualquier comentario, duda o crítica constructiva C:

nos leemos,

bye!

 

-Kiki


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