Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Como el rocío de la madrugada. por Sombra96

[Reviews - 24]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Título: Como el rocío de la madrugada.
Autora: Sombra96
Géneros: Drama, Romance y Tragedia. 
Clasificación: NC-17
Disclaimer: Naruto pertenece a Masashi Kishimoto. Esto es sin fines de lucro y para simplemente entrenerme y entrenerlos.

Notas del capitulo:

Esta es la primera vez que publico algo en Amor-Yaoi y es que, técnicamente, soy nueva en la página en todo sentido... Pero espero ya he empezado a leer una que otra caso y a ver de qué va el cuento.

Espero les guste mi humilde fic y me dejen un comentario diciendo que tal.

“Corría a todo lo que daban sus piernas. Sentía su corazón golpear contra su pecho y que el aire no alcazaba a llegar a sus pulmones más no podía detenerse.

Los gritos retumbaban contras las blancas paredes. La voz de su madre, los gritos de ira de su padre. Y de un momento a otro, silencio.

Se detuvo frente a la puerta de roble de la sala, lo único que llegaba a sus oídos era el latido acelerado de su corazón y su casi inexistente respiración.

Tomo el pomo y lo giro un poco bruco. Sus ojos se abrieron cuando sus zapatos se empaparon de la sangre espesa y caliente.

La cabeza de su padre estaba a unos pocos metros mientras su cuerpo permanecía sentado en el sillón. El cuerpo de su madre estaba a sus pies. Sus ojos abiertos y sin vida, mirándolo. “

 

Abrió los ojos asustado mientras se sentaba de un impulso en la cama, sentía el sudor resbalar por su cuerpo mientras su pecho subía y baja descontrolado. Otra pesadilla. La misma imagen de siempre. Ladeo la cabeza y fijo sus oscuros ojos en las letras rojas del reloj. “2 a.m.” murmuro resignado, sabía que no podría dormir más luego de aquel sueño perturbador, así que tanteo en su mesa de noche y tomo con su mano temblorosa su celular.

Marco el número uno y poso el teléfono contra su oído derecho. Lo único que podía oír era el tono de espera mientras contestaban.

.- ¿Sasuke? – el tono adormilado de su hermano broto del otro lado y por un momento no pudo evitar sentirse mal de despertar a su hermano a tales horas. Cuando sabía que debía estar cansado por la universidad y demás.

.- Si, soy yo – fue todo lo que dijo mientras se terminaba de acomodar en su cama y fijaba su vista en la ventana donde la luna adornaba la oscura noche. Una noche como aquella.

.- ¿Otra pesadilla, hermanito? – la voz de su hermano sonaba más despierta ya - ¿Qué ha sido esta vez?

Sasuke nos respondió mientras rememoraba la pesadilla de nuevo. Había parecido tan real aquel sueño y no pudo evitar patearse mentalmente por aquello. Era real. Era el recuerdo de la noche en la que perdió a sus padres. Un recuerdo que lo había atormentado durante casi diez años.

.- No… No ha sido una pesadilla – mintió con voz fría aunque sabía que era inútil, su hermano era el único que lo conocía a la perfección – Solo quería saludarte.

 

.- ¿A las dos de la mañana, Sasuke? – río su hermana a través de la línea y el solo pudo virar los ojos ante el comentario – Mejor cuenta una de vaqueros, tonto hermano menor.

.- Y tu eres el que se queja cuando no te llamo, Itachi – gruño molesto – Te he dicho ya que no ha sido por una pesadilla... No he tenido una en semanas – mintió.

.- No me molesta que me llames, Sasuke – de pronto el tono de su hermano paso a uno más serio – Me molesta que no seas sincero y sigas mintieron respecto a tus pesadillas. Podrás engañar a mamá, papá, a Ino y a tu loca psiquiatra… Pero a mí no puedes mentirme respecto a eso.

.- No miento – fue la escueta respuesta que pudo brotar de sus labios. No quería mentirle a nadie respecto a sus pesadillas pero se había terminado por acostumbrar a ellas y ya no esperaba ni siquiera un milagro para que desapareciesen. Nunca se irían. – Solo omito cierta información que no es tan necesaria.

.- Como sea – de pronto la línea se quedo en silencio y Sasuke se pregunto si su hermano estaría molesto con él o si se habría quedado dormido esperando a que fuese el primero en decir algo.

.- No quiero hacerlo, ¿sabes? – se aventuro a murmurar mientras esperaba sentir aunque sea la tenue respiración de su hermano mayor – Siento que aún no estoy listo... Que no lo estaré nunca. Mi vida está aquí, en las calles de París… No en Tokio.

.- Te entiendo… Pero es algo que debes hacer – Sasuke había esperado esa respuesta pues era la misma que todos le había dado durante las últimas semanas, sus padres, su hermana, incluso su psiquiatra… Sabía que su hermano no sería distinto – Es hora de cerrar el capítulo y seguir adelante.

.- ¿Esperas que los olvide? ¿Pretendes que haga como si nada? – Gruño ahora con enojo mientras baja sus ojos con lágrimas contenidas - ¿Como lo hiciste tú? Porque eso es lo que parece. A ti no parece importante ni su recuerdo ni nada, Itachi.

.- Por supuesto que no – y de nuevo el silencio y esta vez Sasuke ya estaba seguro que había herido a su hermano con sus palabras, no había pensado al decirlas, solo se había dejado llevar por la rabia contenida – Solo espero que seas lo suficientemente consciente para valorar el esfuerzo que todos hacemos por esto y que entiendas que hay personas que te queremos y esperamos que te recuperes, Sasuke. No los he olvidado ni lo hare nunca pero me di cuenta que debía permanecer fuerte por ti… Eres mi familia, eres mi hermano, Sasuke. Y si es necesario… Doy mi vida por ti – y luego no escucho nada más que el tono estridente del teléfono. Su hermano le había colgado y sabía que lo merecía.

Todos se habían esforzado durante años para hacerlo sentir a gusto con el mundo, con la vida… Con ellos. Y él parecía empeñarse en permanecer atado a esos recuerdos trágicos de su niñez. Se aferraba a Fugaku y Mikoto Uchiha, los padres que había perdido a los seis años.

Inoichi y Takara Yamanaka le habían dado a él y a Itachi un hogar, les habían recibido con los brazos abiertos y les habían dado como si compartieran su misma sangre. Ino Yamanaka se había convertido en su hermana menor… Ellos eran su familia y el aún no era capaz de ver más allá de la pesadilla que se repetía una y otra vez.

Poso sus ojos sobre el reloj… Aún faltaba mucho para la mañana y sabía que no podría volver a dormir.

 

Dos semanas más tarde.

 

La salida estaba atestada de gente esperando por sus personas queridas, los nombres resonaban por todo el lugar mientras salían en fila, tal y como se habían bajado del avión. Suspiro mientras subía el volumen a la música en su Ipod y se colocaba los auriculares dispuesto a alejarse del mundo y la triste realidad. Nadie los esperaba en su regreso, así como nadie los había despedido en su partido al salir de París.

Ino saltaba emocionada a su lado mientras pasaba una y otra vez su mano por su rubio y pálido cabello, su risa incluso traspasaba la canción que en ese momento escuchaba a todo volumen. La chica realmente parecía emocionada con volver a pisar suelo japonés y reencontrarse con la vida que había dejado congelada al irse.

Un poco más adelante sus padres terminaban de ordenas los papeles que necesitaban y recogían su equipaje… Ahora estaban oficialmente en tierra japonesa, en la tierra en la que habían nacido y a la que, se supone, pertenecían.

El problema es que él sentía que dejaba todo en Francia, en su pequeña habitación. Su vida, quien era… Ahora estaba regresando a lo que había dejado atrás de niño. A lo que se suponía jamás debía recordar.

 

(…)

Notas finales:

Espero les haya gustado y esperen la continuación. Estaré actualizando a penas pueda. Acepto criticas, comentarios, sugerencias y demás.

Un comentario hará mi día un poco más feliz.

Sombra96

Avance del  próximo capítulo.

"Minato Namikaze sonrió mientras observaba a su hijo devorar la comida. Sus ojos se fijaron entonces en el pequeño marco que se encontraba tras la espalda de su hijo. El rostro serio de quien fue su mejor amigo le saludo mientras la sonrisa cándida de una de las mujeres más bellas que había visto iluminaba la imagen. Entre ellos habían dos niños: El mayor, su ahijado y el menor, quien había tenido la desgracia de encontrar sus cuerpos.

Los Uchiha habían regresado y no sabía si eso era bueno o malo."


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).