POV TAEMIN
Me fui a la cocina a dejar el plato de sopa a medio comer. Aproveche de lavarlo mientras mi hyung descansaba, la casa estaba en total silencio, era algo escalofriante y paranoico el oír solo el sonido de la loza y el fregadero, una sensación absurda a decir verdad.
Una ves que acabé, fui nuevamente hasta la habitación del mayor, me acerqué lo suficiente hacia el, quería besarlo y así hice. Impregne mis labios en los de él con sutileza y cariño separándome a los segundos, para mi sorpresa el abrió los ojos en ese momento regalándome una calida sonrisa por ello. Al parecer su desmayo se transformo en sueño de un momento a otro.
-Cómo… ¿Cómo estás hyung? –pregunté bajito mientras desviaba mi mirada. Sentía mis mejillas arder por culpa del sonrojo que me provoco la citación.
-Mucho mejor ahora… -susurró a la ves que sentía una de sus manos sobre mi rostro haciendo que me girara a mirarlo- Taemin… -hizo una pausa. Me pareció eterna- ¿Por qué fingías ser una chica? –su mirada se torno ahora seria mientras su mano se alejaba de mi rostro y mi sonrojo desaparecía en mis mejillas.
Así que lo recordó…
-Pues… -baje mi mirada por inercia antes de seguir- es algo estúpido y divertido a la ves… -suspiré suave.
-Cuéntame… -su voz denotaba preocupación mucho mejor a como me trató cuando supo que yo era Taeyeon.
Me dispuse a contarle todo. Desde cuando llegué a mi nueva casa, de cómo reaccione por la noticia de tener que fingir ser una chica, de esa sensación de acoso que me hacía sentir el… A cada palabra que daba mis mejillas ardían y aun no era capaz de ver a mi hyung, solo podía oír una pequeña y ligera risa provenientes de sus labios. Era buena señal.
-Y yo que te juzgue mal… -confeso una ves que le conté todo e incluso la última desfachatez que me libre hace poco. El del certamen de belleza- Aunque admito que creía ciegamente que eras una chica, incluso tengo la seguridad de que si fueras a ese concurso en Seúl, ganarías, pero ahora no puedo dejar que te apartes de mi… -dijo todo eso con una sonrisa sobre sus labios, pude verlo ya que a penas lo oís mis ojos se clavaron en los de él mientras sus manos se posaban sobre las mías- Lamento haberte hecho daño cuando lo supe por primera vez... debí dejar que te explicaras, pero los impulsos me lo impidieron… -suspiro suave y yo no hacia más que sonreír como un idiota ante sus palabras.- Pero hay algo de lo que no me puedo arrepentir…
-¿Qué es hyung? –pregunté con algo de miedo. Temía la razón por la cual decía eso.
…l, antes recontestarme hizo un ligero movimiento de cabeza en ademán para que me acercara, yo así lo hice dejando a escasos centímetros mi oído de su boca.
-La magnifica noche que compartí contigo –susurró tan seductoramente que todo mi cuerpo sintió un suave estremecimiento separándome brevemente de él hasta que nuestros rostros quedaron muy próximos a la ves que nuestras respiraciones se acompasaban al pasar los segundos.
Puse mis manos a los costados de su rostro dispuesto a besar sus labios con mesura y lentitud a diferencia de la vez anterior hasta que un molesto sonido me impidió actuar haciendo que me alejara abruptamente de mi hyung.
Minho alzó su mano más cercana a la mesita de noche hasta tomar su celular, yo solo le miraba algo apenado mientras el me miraba sonriente y cómplice.
-Aló? Key… Si, estoy bien gracias por llamar... –rió bajito pero luego su expresión cambio a una totalmente diferente- ¿Tú qué?.... –hizo una pausa mirando la nada, me preocupé un poco- tu… ¿cómo estás?.... Hm… Key, yo, yo lo sabía, digo…. Lo de antes… -¿A que se refería? La curiosidad me estaba matando- Por favor no hagas nada estúpido, hablaremos mañana… -dicho esto Minho colgó manteniendo esa expresión de preocupación en el rostro.
-Que…. ¿Qué pasó? –solté de repente. Mi intuición me decía que algo andaba mal.
-Es Key… -murmuró mirándome esta vez- Terminó con Jonghyun –soltó una suave suspiro a lo que yo abrí de par en par mis ojos, no lo podía creer…. Hace unas horas ambos estaban de lo más bien y ahora… esto.
-Woah~ -no pude evitar exclamar por lo bajo- No lo creo…. –formé una suave mueca sobre mis labios.
-Son cosas que ocurren, la verdad… era de esperarse, todo es culpa de ese Perro –resopló algo molesto para luego sacudir la cabeza suavemente curvando una sonrisa sobre sus labios. Yo la respondí de igual manera, después de todo no era asunto nuestro- Espero que no nos pase a nosotros… -murmuró aún más sonriente que antes.
¿Qué quiere decir?
Sentí mis mejillas arder, y con eso el aumento de los latidos de mi corazón, era una sensación inexplicable, sentía que en cualquier momento comenzaría a hipar.
-¿Qué?…hip -¡Rayos! El hipo se hizo presente en mi organismo- ¿Qué quieres decir? Hip… -di un pequeño brinco en mi lugar, cerré mis ojos con fuerza tratando de contenerlos, pero fue inútil. Lo único que logré fue hacer que Minho se riera de mi
-Me refiero a tu y yo…. –murmuró bajo manteniendo una calida sonrisa sobre sus labios. Juré haber visto un pequeño sonrojo invadir sus mejillas-. Somos algo, ¿no?
Algo… algo ¡somos algo! ¿Lo somos? asdfkahsjhasd. Literalmente mi mente me estaba comenzando a fastidiar y ya no funcionaba como debía.
Una torpe y amplia sonrisa se formó en mis labios al oír las palabras del mayor, aunque me daba algo de risa en saber que no podía pronunciar la palabra “novio”, ¿era necesario? La verdad es algo raro, y más aún si ambos somos unos chicos.
-omo… -pronuncie muy bajito, la verdad no sabía que decir con exactitud- ¿Es una propuesta? –terminé por preguntar con la mirada baja al igual que mi tono de voz, por suerte el hipo había desaparecido.
Mi hyung soltó una ligera risa acomodándose con algo de dificultad en la cama, trate de ayudarlo, pero el negó mi ofrecimiento, quedando sentado rectamente sobre esta- Taemin-ah –murmuró con algo de ternura-, ¿Te gustaría ser novio de este idiota que no hace más que causar problemas? –pronuncio pausadamente atrapando entre sus manos mi diestra, acariciando el dorso de esta con sumo cuidado.
A cada palabra escuchada yo ocultaba con el dorso de mi mano libre la boba sonrisa que estaba sobre mis labios mirándolo con ternura y afecto asintiendo con la cabeza una vez que sus palabras acabaron.
-Si quiero…. –agregué a un suave susurró. Moría de pena por esa situación, nunca antes había tenido novia y mucho menos un novio.
POV MINHO
El oír dos simples palabras salir por la boca de Taemin me dieron la fuerza suficiente para poder rodear su cuerpo con mis brazos atrayéndolo de esa manera a mi cuerpo hasta que se levantó de esa silla, me hice a un lado separándome unos instantes de él dándole a entender que se recostara a mi lado, y así lo hizo.
Lo abracé, aprovechando que nuestros rostros estaban lo suficientemente cerca para robarle uno que otro pequeño beso en los labios, los cuales el respondió con una tímida y tierna sonrisa impregnada en sus labios.
-Minho-hyung…. –dijo cuando dí por terminado aquellos besos para dar inició a uno más intenso, por lo que tuve que detenerme.
-¿Si, Taemin?
-Yo…. ¿puedo quedarme a dormir aquí? –preguntó muy bajito. No sé por que, pero al decir esas simples palabras en ese bajo tono de voz, las mejillas de mi dongsaen se veían muchos más exquisitas que de costumbre, habían tomado un color rosa, como el de unas fresas a lo que sus labios lucían brillantes y todo eso se acompasaba con el aroma de su aliento al hablar, algo acaramelado y refrescante- Quiero cuidar de ti hyung, creo que todo esto es por mi culpa… -sus ojos se cerraron con lentitud mientras un suave y adorable pucherito se dibujaba en sus labios. No me contuve ni un segundo y le besé, un beso fugaz pero con sentimiento.
-Me encantaría –dije después. El cambio su semblante a uno más sonriente pero igual de adorable-. Pero con la condición de que no te sientas culpable, estas cosas pasan…. –agregué rápidamente.
El solo asintió con la cabeza levantándose de la cama. Yo solo le miré expectante.
-Llamaré a casa para avisar que me quedaré con hyung… -rió un poco pero luego puso una cara algo seria- Oh… será mejor decir que estoy con Amber –una traviesa sonrisa se formo en sus labios a la ves que salía de mi cuarto sacando su celular del bolsillo.
Yo aproveche ese momento para salir de la cama. No tengo idea cuanto debo descansar, pero la verdad ya me sentía mejor, solo me dolía la cabeza, una pierna y un brazo.
Me dirigí al baño dejando todo mi cuerpo descubierto retirando incluso las vendas que cubrían mis heridas. Inspeccione las zonas en las que sentía mayor dolor. Tenía muchas partes de mi anatomía en un color violeta, otras casi azul y las menos dolorosas en un tono rojizo.
Suspiré suave y me metí a la bañera, deje correr el agua caliente. Mi cuerpo se relajo mientras el agua comenzaba a elevarse, una ves que cerré la llave del fregadero vertí un poco de líquido para baño de burbujas. Se sentía realmente fantastico….
-Ah~… -suspiré bajo echando mi cabeza hacia atrás.
-¡Hyung! … ¿Hyung? –oí la voz de Taemin proveniente de mi habitación.
-Estoy en el baño dongsaen…. –grité desde dentro.
-Ow~ Hyung ya avisé, y hable con Amber para que si mi omma la llama mienta por mi… -le oí reír tras la puerta y al parecer se recargo demasiado por que esta se abrió lentamente. Yo tampoco la había cerrando como se debía.
POV TAEMIN
Fui a la sala de estar a llamar a mi mamá, no quería que Minho oyera aquellas estúpidas e incoherentes charlas con ella, ¿Qué tal si oía lo del certamen? Ni hablar, que vergüenza.
Luego de convencer a mi mamá de que estaría con Amber, llamé a mi amiga, quien aceptó de inmediato con ayudarme en aquella mentirilla.
Como no hacerlo si ella me ayudó en todo momento con el tema de Minho. A su manera, pero lo hizo.
Volví a la habitación del mayor, pero no estaba….
¿Acaso desapareció? ¡Se lo llevaron los ovnis! Waa me quede sin novio~
¡Yah! Taemin que cosas piensas ~
-¡Hyung! ¿Hyung? –dije en un tono algo alto para saber si andaba por allí.
-Estoy en el baño dongsaen…. –gritó tras de una puerta que había en su habitación.
Mis mejillas se ruborizaron por completo al oír esa palabra, había oído el sonido de la ducha pero le reste importancia.
¿Se estará duchando? Esa pregunta resonó en mi mente una y otra vez.
Me acerqué hasta la puerta recargándome un poco para hablar y que el me escuchara. No me gustaba la idea de gritarle.
-Ow~ Hyung ya avisé, y hable con Amber para que si mi omma la llama mienta por mi… -hable mientras sentía que mi cuerpo se deslizaba hacia adelante, estaba mal parado por lo que causé que me recargara un poco más a la puerta, a lo que esta se abrió lentamente.
¡Minho la había dejado mal cerrada! Y para colmo lo ví allí, en la bañera y sus cortinas estaban recogidas hacia un costado.
Baje mi mirada por inercia aunque no pudiera ver nada, solo parte de sus hombros y sus rodillas, aún así me daba pena. Estaba por marcharme hasta que su voz me detuvo.
-¿No quieres darte un baño conmigo? –le oí decir con claridad y picardía a la vez, le quede mirando, paseando mi mirada de su vista hasta la bañera, la verdad, lucía espaciosa y era una buena propuesta. Pero….
-Aigoo…. Hyung…. usted…. Usted debe descansar, lo incomodaré si me baño con usted –murmuré bajo. Me sentía tan sumiso, tan débil, era la imagen viva de mis hermanas. ¡Como odio haber pasado toda mi niñez pegado a ellas, con suerte tuve un par de autos cuando niño, ya que gran parte del día debía ser el muñeco de mis hermanas. ¡No ya no más! Soy un hombre, rudo, tanto como Minho-hyung….
Ya bueno, no lo soy, pero lo intento…
Minho sonrió de lado a la vez que se paraba de la bañera dejando ver todo su anatomía frente a mi. Las gotas de agua y restos de burbujas estaban pegados a su piel, no podía dejar de verlo, mi mirada se paseaba nerviosamente sobre él.
-¿Seguro que no quieres? –¡AL CARAJO! Comencé a deshacerme rápidamente de mi ropa, sentía calor, mucho calor y la torpeza de mis manos me impedía hacerlo como debía hasta que Minho vino a mi ayuda.
En un dos por tres ya estaba sin camisa y Minho se disponía a rodear con sus húmedos brazos mi cintura, me quedo mirando unos segundos como dudando.
-Solo será un baño… -murmuró cerca de mis labios a lo que me decepcione un poco. Podía ver que el sentía lo mismo pero lo entendía, después de todo el recién comenzaba a recuperarse, no podíamos a abusar de su estado.
Suspire bajito y retiré el resto de mis ropas cuando Minho volvió a la bañera. Puse mis manos sobre mi entrepierna tratando de ocultarla cuando empecé a introducirme en el agua, a mi hyung le parecía divertido por que no hacía más que reír con ligereza. Se estaba divirtiendo.
-¡Yah! No te rías…. –le reproche formando un puchero, por suerte ya estaba sobre el agua y ahora no podía verme. Le saqué la lengua por ello.
-No me estaba riendo, son alucinaciones tuyas…. –me sonrió de una manera especial mientras con sus manos alcanzaba mis piernas y comenzaba a acariciarlas. Estábamos uno frente del otro.
El tenerlo así de esa manera, tocando mis piernas con tanta delicadeza y dedicación me estaba sacando de quicio, no sabía que hacer con exactitud. Cerré mis ojos unos segundos aclarando todas mis ideas.
….
¡Eureka! Me felicité mentalmenteal encontrar la solución perfecta. Si Hyung no puede hacer mucho por su estado, yo, su ahora novio, puedo hacerle disfrutar sin que el se esfuerce demasiado….
-Hyung…. –me removí de mi lugar, quedando de tal manera que mis rodillas quedaran apoyadas sobre la bañera al igual que mis manos, una pose cómoda para acercarme a él. Así lo hice.
El solo me miraba con esos grandes ojos abiertos, con una media sonrisa dibujada en sus esponjosos labios.
Puse mis manos sobre sus rodillas, las cuales estaban algo contraídas, podían salir desde el agua. Las deslicé de forma descendiente por sus muslos hasta detenerme en un lugar específico. Su miembro, que al solo tocar mis manos comenzó a sufrir un cambio rotundo que demostraba la excitación de mi hyung gracias a mi accionar.
-Taemin~…. –suspiró de una manera tan sensual que una de mis manos no dudo en comenzar a tocarle, masturbándolo bajo el agua.
Me acerqué un poco más dejando mi mano libre tras su nuca, bese sus labios despacio. De un momento a otro su cuerpo se relajó haciendo más fácil mi tarea. Sus manos se posaron sobre mi trasero, apretaba a gusto suyo; nuestros labios se conocían como antes, de manera fogosa y adictiva, el no dudo en asomar su lengua, pero yo no me quede atrás. Ambos exploramos nuestras bocas haciendo un beso más pasional y rápido lleno de deseo reprimido.
Primero la salud, luego el placer…. Me dije a mi mismo tratando de contener las ganas que tenía de que fuera el mayor quien me tocara y me hiciera delirar de placer, pero debo admitir que me gusta llevar en ciertos momentos, el control.
Sentía sus manos pasearse libremente por mi trasero y a veces podía sentir algunos dedos traviesos se hacían paso entre mis nalgas hasta golpear sutilmente mi cavidad. Mi miembro rogaba por atención en ese momento por lo que tuve que dejar de tocar a mi hyung acercándome lo suficiente para que nuestras erecciones se tocaran.
-A-Ah~ Minho….-gemí sobre sus labios sintiendo algo de mayor presión en mi entrada pero Minho al oírme quitó de inmediato aquel travieso intruso, le miré con cara de reproche a lo que el solo mordió mis labios y sus manos ahora se dirigían a miembro.
-No debiste…. –susurró besando mi mentón y descendiendo por mi cuello mientras me masturbaba a un ritmo rápido, apretando y contrayendo mi miembro- incitarme… -acabó por decir.
-Ah…. Hyung…. Per-perdón, s-soy… Ah~ Hm… -relamí mis labios sintiendo esas oleadas de placer en mi cuerpo junto con el movimiento del agua sobre nuestros cuerpos- Soy un chico malo… -suspiré mirando a través de mis pestañas y mi flequillo desordenado- Castígueme…. –murmuré con aire de suplica y placer esperando cualquier cosa de mi hyung…
-Lo haré… -dijo con algo de autoridad y toda la autoconfianza del mundo. Su rostro no reflejaba dolor, solo sus moretones lo delataban, pero su expresión, su tono de voz, decían todo lo contrario. Que se sentía fantástico.
-Eres increíble Minho….-no dude en decir mientras el me sonreía con algo de orgullo y malicia.
-Tu haces que el dolor físico desaparezca –me acercó más a su cuerpo causando una tortuosa fricción de nuestros miembros.
-Ah~… -gemí por inercia.
-Incluso esos gemidos me dan mucha mayor fuerza para continuar….
-Entonces gemiré para hyung… –moví mis caderas sobre las de él haciendo mayor fricción, delirante, excitante, placentera.