Pov Taemin
Y ahí estábamos los dos, tomados de la mano observando a dos de mis hermanas. Ambas nos examinaban con su extraña mirada, el ceño fruncido y los labios entreabiertos, listas para hablar.
Pase saliva. ¿Qué iba a decir? Era demasiado obvio que entre hyung y yo pasaba algo, y el se negaba rotundamente a soltar mi mano que había resguardado entre la suya, entrelazando sus dedos con los míos de manera casi posesiva.
-Responde… ¿Quién es él? –La voz de Suzy sonó seca, y casi molesta. En cambio Sulli no dejaba de mirar a Minho, casi comiéndoselo con la mirada.
¿Qué mierda le pasa? Minho es mío… ¡mío!
Ignoré rotundamente la mirada amenazante de Su, para pegar la vista en mi hermana menor.
-Sulli… No lo mires así.. es … es mío… -esta vez fui yo quién frunció el ceño al hablar. ¡No pude evitarlo! Aunque sea mi hermana pequeña, no puedo dejar que mire a su a mi novio.
-¿Es tu novio, oppa? –le oí susurrar a Sulli mientras me miraba con una pequeña sonrisa sobre sus labios.
-Si lo soy… -habló Minho jalándome hacía el para abrazarme y besar fugazmente mis labios, cosa que hizo sonrojarme por completo.
La pequeña Sulli casi chilló de alegría…
Esperen… ¿Estaba feliz?
-¿Novio?… Oppa, mamá te va a matar… -dramatizó Suzy posando ambas manos en su cabello- Aigoo… -resopló tomando a Sulli de la mano.
-Por favor no le digas… -forme un puchero casi suplicante.
-Oppa, hay que decirle a mamá…. A ella le gustará saber… -rió Sulli dando pequeños brincos en su lugar.
-¡Noooooooo! –dramaticé abrazando con fuerza a Minho, quién solo se dignaba a reírse.
Si mamá se entera ¡me mata!, pero debe aceptarlo… fingir ser una chica es mucho peor que… que ser homosexual… ¿no?
-Sulli cállate ¿Qué no sabes como es mamá? Solo contigo es comprensiva por que eres la menor… Aish… -Al parecer Suzy se había calmado y trataba de ayudarme- Llamaré a las chicas
-¿¡QUÉ!?
~~
Tarde…
Estábamos todos en un parque cerca del hotel, la peluca comenzaba a picarme y a hacer que mi cabeza sudara debido al sol. Todos estábamos sentados sobre el pasto, y las miradas de mis hermanas se paseaban de mi a Minho, casi incrédulas de la situación.
Todas con sus preguntas y comentarios, pero no dejaban que respondiéramos. Era un caos y yo ya comenzaba a enojar con sus comentarios como “Oppa eres muy lindo para nuestro Taeminnie”, “¿Por qué te gustan los chicos?” “Aigoo. Minho oppa sal conmigo no con Tae” ¡Me estaba hartando!
-¡Yah! –grité un poco enojado. Minho no para de carcajearse al verme, apretándome más contra su cuerpo.
-Ya bebe, tranquilo que yo solo te quiero a ti… -besó lentamente mi cuello, causando que me sonrojara nuevamente.
-¡Kyaaaah! Se ven muy lindos… -dijo apresuradamente Minzy- Yo me opongo a que Omma lo sepa…-asintió con decisión como buena hermana mayor que es. Su palabra es como una orden para todos nosotros.
Me safé del agarre de Minho y fue directamente a los brazos de Minzy para abrazarla
-¡Gracias Noona!
-De nada Taeminnie, pero ahora eres una chica y debes decirme Unnie… -rió divertida.
-¡Gracias Unnie! –solo por tratarse de ella acepté.
Ninguna de las chicas se opuso, pero a cambio tuve que dejar que me tomaran fotos con hyung aún vestido como una chica. Era algo así como un fanservice.
-Espero que me envíen las fotos, eh? –Minho comentó mientras caminábamos nuevamente hasta el hotel. Todas asintieron mientras yo negaba apresuradamente con la cabeza, pero a mi nadie me hace caso.
~~
La tarde pasó rápida, y el show de talentos fue más rápido de lo que supuse. Mis nervios no me jugaron en contra y tuve excelentes críticas en relación a mi baile.
Decidí bailar algo de popping femenino, es mi fuerte, pero debo admitir que me costó hacer aquellos pasos tan marcados un poco femeninos, pero todo salió estupendo.
Minzy también bailó, algo de Michael Jackson, realmente le salió estupendo, ella y yo somos los mejores bailarines de la familia. Suzy cantó una canción muy romántica y suave con su tono de voz que me encanta. Todas estuvieron muy bien, al igual que el resto de las chicas.
Creo que la competencia esta difícil, pero yo no debería estar allí.
Luego de eso no pude ver más a mi hyung, tuvimos una cena y en todo el día tuve que actuar como una chica. Comenzaba a creer que así era.
No, no Taemin.. no eres una chica, tu no tienes los mismo atributos… ¡Claro que no!
Cuando ya se hizo de noche, y yo me encontraba vestido con mi ropa normal y masculina, recibí un mensaje de texto de Minho.
“Minnie... estaré en el parque que estuvimos en la tarde… por favor ven.
Te extraña… Minho.”
Por suerte mi mamá se durmió temprano, y como mis hermanas sabían de mi relación con Minho me dejaron salir sin ningún problema, es más me ayudaron a escoger ropa para verme mucho mejor para su encuentro.
-¡Ponte esto… esto y esto! –dijeron todas casi a coro, pasándome unos pantalones rasgados en los muslos y una polera blanca sin mangas junto a una chaqueta de cuerpo también negra.
Me veía muy rudo y masculino. Eso me encantaba.
Salí del hotel sin prisa para ir al encuentro de mi hyung.
Lo reconocí de inmediato. Estaba sentado en una banca donde un faro justo iluminaba, vestía de unos entallados pantalones azules y una chaqueta de jeans de un tono azul marino, abierta para dejar ver una playera gris. Lucía tan bien.
-Minho-hyung…. –murmuré una vez estando frente a él regalándole una de mis amplias sonrisas.
El solo atinó a sonreírme de igual manera, lucía tan tranquilo y relajado, que me hacia sentir realmente a gusto estando a su lado.
-Minnie… -rió suave-, quería felicitarte por tu presentación. Estoy más que seguro que puedes llegar a ganar el certamen…. –volvió a reír. Esta vez me senté a su lado, mientras el revolvía mis cabellos de manera lenta y suave.
-No quiero ganar… -hice un mohín con los labios cruzándome de brazos-, no sería justo que yo ganara…. Pero pensándolo bien, el premio es muy tentador… -relajé mi expresión y comencé a carcajearme.
-¡A puesto a que ganas!… ¿Te parece si hacemos una apuesta? Sería interesante –exclamó entusiasmado. Estoy seguro que yo no ganaré y me puedo aprovechar de mi hyung si gano la apuesta.
-Acepto… si yo gano tendrás que hacer lo que yo pida por una semana, ¡Todo lo que yo quiera!
-Ok, ok… Pero si yo gano la apuesta, tendrás que vivir en mi casa durante una semana y también hacer ¡TODO! –Enfatizó la palabra- lo que yo quiera, cumplir todos mis deseos… -sonrió de medio lado y me acercó de la cintura hacia él. Estaba claro que el quería que entendiera a que se refería con ese “Todo”. Sentía un poco de nervios por eso.
-Pides demasiado –forme un pronunciado puchero-, entonces agregaré más cosas si es que gano, pero es sorpresa… Merong –le enseñé la lengua, pero al parecer fue una mala idea puesto que en menos de un segundo la había atrapado entre sus labios. Podía sentir como succionaba para luego comenzar a besarme. Yo claro no me resistí; me abracé a él desde su cuello cerrando mis ojos lentamente para ir correspondiendo su beso, sentía mis mejillas arder, como costumbre, mientras sus labios se movían lentamente sobre los míos y su lengua se abría paso entre estos.
Nuestras lenguas danzaron con suavidad haciéndome suspirar un par de veces en su boca. Podía sentir como una de sus manos acariciaba mis piernas, directamente mis muslos donde, gracias a los rasgados que tenía el pantalón, sus dedos daban directamente con mi fría piel. Todo era tan agradable… el beso, las caricias… todo él.
Cuando mi respiración comenzó a agitarse, sentí que ya debíamos sepáranos por lo que mis labios se movieron lentamente al hacerlo, no sin antes dar una suave mordida a su labio inferior, soltando una suave risilla por eso.
-Entonces… es un hecho, la apuesta va… -comentó sonriéndome, muy cerca de mi rostro. Yo solo asentí, para luego quedarme entre sus brazos a contemplar la noche. No hacía falta nada más que eso.