-¿Qué haces aquí?- me pregunto
-¿No es obvio?-le dije, aparentando seguridad- Tengo una cita con el doctor
-¡Yo no te hice ninguna cita!! ( y espero que mi secretaria tampoco)
-¿Ah, No? Mmm… entonces- me rasque la cabeza- Me abre equivocado, pero ya que estoy aquí entremos y hablemos ¿sí?
-Ni creas que estaré solo en algún lugar contigo, si quieres hablar que sea aquí, donde todos puedan vernos
Estuvimos en silencio observándonos por un momento, los ojos del delegado era desafiantes- … En ese caso- me arrodille- Cásate conmigo
-¡ N-na-nanni!!- se sonrojo como un tomate- ¡¿Qué demonios dices!?- Pregunto- Además, porque te inclinas!! no tienes que hacerlo- su cara expresaba aquel sentimiento de querer salir corriendo del lugar.
-Inchou- proseguí- Confieso que siempre he estado enamorado de ti, de hecho tú fuiste mi primer amor desde la escuela secundaria, cuando me salvaste y..
-¡Cállate!!-dijo alarmado- Deja de decir semejantes mentiras justo en este lugar donde todos pueden vernos y oírnos
-Pero fuiste tú quien dijo que no podíamos hablar adentro
-Mgffffklfff!!, está bien, hablaremos adentro ¿de acuerdo?-su expresión era una mescla de agitación, remordimiento y vergüenza, casi quería abrazarlo y besarlo en ese momento, pero algo me decía que el no me lo permitiría- Dame un momento, abriré la puerta..-introdujo su mano nuevamente en el bolsillo de la chaqueta color crema que llevaba, cuando finalmente la encontró, la hizo girar rápidamente por la cerradura y la puerta se deslizo fácilmente,, entramos y nos dirigimos a su despacho, en silencio, mientras lo observaba al caminar, y el parecía estar muy consciente de que lo observaba.
Llegamos, abrió la puerta, dejo sus cosas y se sentó en su escritorio, después me hizo un ademan para que yo también me sentara en una de las sillas frente a su escritorio, así lo hice, después el entrelazo sus manos y las coloco debajo de su barbilla en un gento que me pareció meramente encantador.
-Te escucho-me dijo, y yo proseguí
-La verdad, es que me he dado cuenta de lo mucho que te amo, y si lo he hecho hasta ahora es que soy algo lento aparentemente- dije esto último mas para mi mismo que para el
-No te preocupes, siempre he sabido que eres lento-se cruzo de brazos- me di cuenta de eso hace mucho-contesto, fríamente.
-… El punto es que estuve hablando con Ousho hace un rato y él me dijo que tu aun me amas- no lo pronuncio, pero en su expresión pude verlo, un grito ahogado que no salió a la superficie, y su cara ruborizándose rápidamente, me alentaba a creer que estaba yo en lo cierto.
-Así que pensé, que en ese caso, tu y yo aun podemos tener una oportunidad ¿Qué piensas?
-…Pienso que tienes una extraña manera de hacer las cosas- me miro- No nos hemos visto desde hace muchos años, y ¿ahora me dices esto? ¿Acaso crees que las cosas no han cambiado desde aquella vez? además ¿qué te hace pensar que yo aun me siento de esa forma? Que Ousho te haya dicho semejante cosa no significa que sea cierto, el pudo haber sacado esa conclusión de las muchas veces que lo rechace, pero Madarame, las cosas no son tan simples.
Quedamos en silencio por un momento. Al contemplar la forma tan tranquila y fría en que lo había dicho me había hecho recordar uno de esos regaños que la propietario me daba cuando era niño, no te traumaba tanto el hecho del regaño, sino la forma en que lo hacía.
-Entonces-le dije- ¿qué propones tu?
-¿Yo? ¿quieres que te dé una solución?
-Tú eres el experto aquí ¿no?
-Una cosa y la otra son diferentes, yo soy médico, el tema de que hablamos es totalmente diferente
-Pero inchou ¿que acaso tu no recuerdas lo que era amarme? Como en aquellos tiempos, eres tú quien se enamoro prime-
-¡En primer lugar!, no me llames Inchou, eso fue hace mucho tiempo, tengo un nombre ¿sabes?, en segunda, solo dices eso para que parezca que yo soy el culpable, y en tercera, te tengo una “solución” si es que tanto la quieres,
-¿Qué es?- dije esperanzado, tristemente me di cuenta de mi acción, lo que me hizo sentir como un idiota
- Finjamos que nada a pasado…-dijo tajantemente -Lo de hace unos días nunca paso, lo de habernos reencontrado de nuevo tampoco ocurrió, es más, nosotros nunca nos hemos visto, somos unos completos desconocidos. Esa es mi solución.