Estaba cansado por los ensayos recientes que había tenido que soportar junto a boyfriend, quería llegar a casa luego solo para poder tirarse en la cama y así poder dormir hasta que se le diera la gana; de cualquier modo.. Mañana sería sábado, y lo tenían libre.
Fue a las duchas acompañado por sus compañeros de banda, se ducharon y ya estaba Dong Hyun apresurándolos para que se fueran ya a la furgoneta, se estaba acabando el tiempo según el. Suspiró e hizo caso, fue a vestirse con algo ligero, ya no estaba tan cansado, lo que lo ponía feliz, ¡pero había un problema!
¡Todo el jodido día habían pasado una canción en todos lados!, lo cual lo estresaba, pero no podía evitar tararearla cuando la escuchaba, y no es qué el quisiera aprendérsela, es solo que, ¡las circunstancias de la vida lo ponían así!
Iban en la furgoneta, cuando de repente en la radio comenzó aquella melodía tan familiar y detestada para el rubio.
-Oppan Gangnam Style~ -Tarareó Min Woo y Young Min lo miró mal, lo que hizo que este hiciera un puchero y bajara la cabeza dejando de tararear… Al menos en voz alta.
Pero luego ya de unos segundos de canción Kwang Min tampoco pudo evitar tararear aquella canción, y Young Min, quien se encontraba a su lado, lo vio con mirada asesina por unos segundos, a quién engañaba ¡Le molestaba la jodida canción! .. Pero es inevitable no amarla, o al menos eso creía él. Suspiró rendido.
Ya estando en la casa, fue él junto a su hermano y Jeong Min quienes fueron a preparar la cena, hablaron de trivialidades y todo eso, encendieron la televisión y adivinen que video estaban pasando en la tele. ¿Ya se lo imaginan?
-No le encuentro el chiste a esa boba canción… -Comentó Young Min mirando de reojo la pantalla- No baila bien y es muy monótona…
-Quizá… pero es muy pegajosa –Rio Dong Hyun.
Young Min suspiró y lo miró –Eso es lo que no me gusta –Comentó y al ver como Kwang Min hacía tal característico paso en la mesa dio un gruñido- ¿He!? ¿¡Tu también!? –Se levantó y comenzó a caminar en dirección a su habitación, pero antes de que eso pudiera suceder Kwang Min fue con el.
El rubio ya del todo estresado se tiró en su cama abrazando un cojín, luego entró Kwang Min y se sentó en el borde de la cama, acariciándole levemente la espalda
-Estás estresado Hyun…
-¿Y lo preguntas?
-Pero vamos… solo es una canción~
-¡Lo sé!... Pero ahh, es molesto que todos anden con ella y bailándola… y esas cosas –Puso un puchero que hizo que el castaño se enterneciera.
-Si no puedes contra el…
-Únetele –completó Young Min con una sonrisa levemente. Kwang Min tenía razón después de todo.
-¿Ves que no es tan difícil?... –Le miró Kwang Min con una sonrisa victoriosa.
-Tienes razón, pero sigue siendo algo molesto verlos a todos bailar cuando la ponen en cualquier lado
-Pero eso tiene una solución –Rio Kwang Min y se levantó tomando al rubio de la mano para que también lo hiciera- Cuando la escuches, ¡tienes que bailar también!
Young Min abrió los ojos como plato y luego negó reiteradas veces
-¡No bailaré eso!
-¡Es la única manera de que no te estrese!
-Pe-pero, no, ¡No quiero!
-Vamos, solo inténtalo una vez, ¿Si? –Le miró Kwang Min haciendo ojitos.
-¿…Y si no me gusta?
-Prometo que te dejaré en paz y trataré de no tararearla en voz alta cuando estés cerca –Asintió con una sonrisa.
-Suena tentador… ¿Cumplirás tu palabra? –Le miró entrecerrando los ojos y Kwang Min imitó el gesto asintiendo- bien, enséñame…
-Bien mira, ponte así~
Kwang min le iba explicando paso a paso como era aquel baile tan cómico y Young Min extrañamente iba aprendiendo y se estaba divirtiendo, ya que le parecía cómico ver a su hermano bailar de esa manera.
-Ya no te rías de mí –Puso un puchero.
-No me rio de ti, me rio de tus sensuales movimientos
El castaño puso una mueca afligida –Y yo que me esfuerzo por enseñarte –Se sentó en el borde de la cama.
El rubio negó rodando los ojos divertidos y se sentó a su lado abrazando su cintura –Gracias…
Kwang Min se hizo el afligido por un momento y luego le miró con su sonrisa tierna. Young Min se perdió en aquella sonrisa y sonrió de la misma manera. Se fueron acercando el uno al otro y a pocos centímetros de sus labios el castaño miró de reojo los labios de este y terminó por acortar la poca y nada distancia que había ahí, besando sus labios con ternura. Luego de unos segundos se separó de sus labios y lo miró.
-¿Entonces… bailo bonito? –Preguntó infantil a lo que Young Min sonrió y volvió a acercarse para besarle más veces.
Los besos que hasta ese momento eran “inocentes” Fueron tomando fuerza y llenándose de pasión. Kwang Min acercó su lengua hasta los labios del rubio, quién ni lento ni perezoso tardó en entre abrir los labios para dar paso a la lengua del castaño. Estas se saludaron con varios y cortos toques antes de comenzar a jugar entre sí.
Kwang Min se iba recostando sobre su gemelo. Guio sus manos hasta donde estaba la cintura del menor, comenzó a acariciar esta con precaución, levantó la playera que llevaba el mayor con un fin claro, quitarla. Cuando lo logró admiró su pecho con una sonrisa suave.
-Deja de mirarme…
-¿Por qué? –Puso un puchero- Si eres tan lindo
-Porque yo también quiero mirarte… -Comentó divertido antes de comenzar a despojar al menor de su playera, quedando iguales.
Cuando ya estaban en bóxer los besos bajaron de los labios hacia el cuello, Kwang Min besaba cada pequeño espacio que el rubio le podía ofrecer. Guio su mano hasta el miembro del mayor, comenzando a acariciarlo por sobre la tela, Young Min reprimió un suspiro al ser besado de improviso en los labios.
-Es mi turno
Comentó el rubio antes de cambiar de posición y comenzar a quitarle el bóxer al menor, al ver su miembro sonrió relamiéndose los labios y comenzó a dar besos sutiles en este, terminando luego por lamidas y finalmente engulléndolo.
Kwang Min gemía por el placer que esa boca era capaz de causarle en aquel momento, tomó su cabello y comenzó a hacer presión como vaivén con la cabeza del mayor.
-Me… ¡Ahh me vengo!
Gimió antes de correrse en el interior de la boca del mayor, este se separó luego de tragar todo lo que el castaño había dejado en su boca, le miró con una sonrisa tierna y fue a besarlo
Después de despojar al rubio de su última prenda; su ropa interior, Kwang Min llevó su mano a la boca del rubio para que este humedeciera sus dedos con su saliva. Así lo hizo, luego guio sus dedos hasta el anillito rosado que su hermano le ofrecía en aquella posición, comenzando a dilatarle.
-¿Duele?
-No… solo es raro
Kwang Min hizo entrar uno, dos y tres dedos en la entrada del menor para así comenzar a hacer movimientos con estos, simulando estocadas.
-… Ya estoy listo
Habló Young Min y el castaño le miró asintiendo, guiando su erguido miembro hasta la entrada de este, sujetándose en sus caderas comenzó a penetrarlo de apoco.
-¡Ah-ahh!
Gimió Young Min con algo de dolor, pero este fue calmándose al ver que el castaño estaba quieto en su interior. Comenzó a mover sus caderas en contra Kwang Min para decirle que ya estaba listo.
Las embestidas que eran lentas y pausadas comenzaron a tornarse fuertes y rápidas. Los gemidos de ameran acallados por la puerta de la habitación –o eso esperaban-
El castaño llevó una de sus manos a masturbar al mayor de manera rápida.
-Me-me… vengo… ¡A-ahh!
Gimió este antes de estrecharse y por ende contraer su entrada, provocando que Kwang Min se corriera en su interior. Se recargó sobre el mayor, salió de su interior y le abrazó acurrucándose.
-Esa canción… no es tan mala después de todo
Comentó el rubio divertido y Kwang min le robó un dulce beso antes de entrelazar los dedos de sus manos.
-Te amo
-Yo te amo más
Fin