Cita
Ya estaba listo con un conjunto totalmente nuevo y un inútilmente engominado cabello. El consuelo para Naruto era saber que su acompañante le conocía de casi toda la vida y al menos podría pasarle ese detalle por alto. Pero debía admitir que se veía muy bien ( el gimnasio y el kick boxing bien habían valido la pena).
La tarde pasada se habían despedido arrancándose los labios a la fuerza (los besos de Sasuke eran cada vez más adictivos) Se le había ocurrido sugerir un simple : te veo a las 5 en la plaza central. No por que no gustara de quedarse encerrado con Sasuke en su departamento ni se hubiera vuelto adicto a cada centímetro de su piel hasta lo indecente. Pero el quería a Sasuke más allá de eso así que, también tendrían que salir a compartir su tiempo divirtiéndose como en realidad siempre lo habían hecho
Y lo vio llegar, tan perfecto como siempre y cuando lo tubo enfrente tuvo que reprimirse para no echársele encima –estaban en vía publica- claro que eso jamás le había importado, así que ni bien lo tuvo cerca solo se limitó a susurrarle a una distancia apenas prudente de su oído: Si sigues vistiéndote así me va a costar mucho no lanzarme encima de ti no importa donde estemos.
Bingo!
Solo al idiota de Naruto se le ocurría como avergonzarlo en menos de 5 segundosy por la pequeña risa que se le había escapado al rubio supo que el ligero cosquilleo en su cara no era otra cosa sino un sonrojo. Aunque ya a esas alturas el no podía quedarse atrás y en el mismo tono empleado por el rubio le susurró – No eres el único – dijo a la vez que se acercaba para arrancar la etiqueta que aun colgaba de su playera nueva. Y Naruto no pudo mas: le beso. No fue por mucho rato, al menos eso creía. Pero de algo si eran consiente: estaban a media plaza.
- Naruto – reclamo enojado – no ves que…
- Ah no para tu carro – respondió intuyendo a lo que iba el pelinegro – soy tu pareja y que te quede claro que no me avergüenzo de ti por lo que espero lo mismo para conmigo, así como no pienso andarme escondiendo ¿entendido?
Tocado y Hundido.
Lo que mas le gustaba de Naruto era lo que siempre le metía en aprietos también. Siempre decía las cosas sin pensar, pero era por que en realidad no lo necesitaba, una vez se fijaba en algo nada lo haría cambiar de opinión: si algo le molestaba atacaba el problema de inmediato, y si algo le gustaba no lo soltaba jamás. Justo ahora no sabía si saltar de felicidad (su novio antiguamente heterosexual declarado, no tenia ningún miedo de su relación) o ponerse a pensar en todos los problemas que esto podría acarrearles.
Aquello era complicado.
Aunque , después de semejante declaración ¿quién podría dudar más? Cerró los ojos soltando un suspiró. El rubio entonces pudo sentir como su maro era tomada fuertemente.
- No sé como haces para que parezca que todo es fácil –"tarado" –
Su respuesta fue una radiante sonrisa.
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