El día comenzaba, era igual a otros pero había algo diferente. En esos momentos un lindo rubio se encontraba sentado en la sala, muy callado y al parecer pensando en algo muy detenidamente. Todo el día anterior a ese había estado de igual forma, casi sin pronunciar palabra, y eso era algo muy raro en él ya que le encantaba hablar.
Jonghyun que estaba tan sumido en sus pensamientos no se percato de la llegada de su mejor amigo Key hasta que el mencionado se sentó a su lado y toco su hombro. El rubio se giro y le sonrió un poco.
—¿Qué sucede? —pregunto Key mirándole con una pequeña sonrisa, a lo que el otro suspiro…
…
Después de que le contara todo lo que tenía en la cabeza el castaño simplemente sonrió y salió corriendo a la habitación en donde aun dormían los otros tres brillositos. Al entrar sonrió viendo como se miraban tan tranquilos durmiendo.
Sin hacer ruido comenzó a tomar en una pequeña maleta algunas cosas de Minho y Onew, ropa y otras cosas necesarias. Una vez tuvo todo lo necesario salió de la habitación llevando las cosas consigo. Jonghyun le miro extrañado pero el otro simplemente salió de la casa para regresar de nuevo.
Jonghyun vio como el castaño regresaba de nueva cuenta a la habitación. Y suspiro pensando en que de nuevo el otro se había puesto raro y estaba metido en sus cosas. Se recostó en el sillón y prefirió dormir un poco, pero antes de que se quedara dormido escucho un ruido que venía desde la habitación; se levanto un poco mirando como Key salía de la habitación con Minho y Onew algo adormilados y aun en pijama siguiéndole.
—Jonghyun, tenemos que salir. Te quedaras con Taemin, lo cuidas. Nos vemos después —dijo guiñándole un ojo y yendo directo a la puerta antes de que le rubio le pudiera decir algo.
Se quedo algo extrañado ¿Era por lo que le había contado? Suspiro mirando hacía a la habitación, seguramente el pelirrojo seguía dormido o eso es lo que pensaba Jonghyun ya que no se escuchaba ningún ruido.
Taemin era el menor del grupo, y era muy lindo al igual que una buena persona. Cuidaba de él tanto como podía pero últimamente estaba algo confundido en cuanto al menor, incomodo y triste a la vez, era como se sentía cuando el otro estaba a su lado.
Hace tiempo había notado como Taemin trataba de provocarle o tal vez solo era parte de su imaginación. El pelirrojo era lindo e inocente, no podía creer algo como eso pero a su vez siempre había un ‘puede ser’ en su cabeza. Aunque quizás solo era su mente pervertida.
Aunque como había dicho lo que pasaba con Taemin, también pensaba que el menor no pasaba mucho tiempo con él y le entristecía pensar que no le quería tanto como a los demás, quizás estaba exagerando pero así se sentía ¿Qué podía hacer? Suspiro y se volvió a recostar tratando de relajarse. Sin poder evitarlo se quedo completamente dormido.
No pareció que paso nada de tiempo, apenas unos segundos, cuando casi le da un infarto al sentir algo que tocaba completamente su entrepierna; abrió los ojos completamente encontrándose con el pequeño pelirrojo al lado de él.
Se le quedo mirando unos segundos incrédulo, viendo como el otro sonreía ampliamente mirándole. Desvió un poco su mirada a donde sentía aquel peso en su entrepierna y se sorprendió al ver que era la mano de Taemin la que se encontraba ahí, pero al parecer el menor no lo notaba.
—Jongie —Le hablo Taemin dulcemente— Hay que hacer algo, estoy aburrido —dijo haciendo un lindo puchero.
—Ahora no Taeminnie —Le dijo dedicándole una pequeña sonrisa y seguido alejando la mano del menor de aquel lugar tan sensible. Volvió cerrar los ojos, dormir era una buena opción en esos momentos, tal vez era su mente pervertida de nuevo.
—Por favor Jongie, solo un ratito —Escucho la voz del pelirrojo pero no se movió ni un centímetro o eso intento hasta que sintió como Taemin se sentaba sobre él quedando su trasero sobre su entrepierna, no paso ni un minuto cuando el menor comenzó a dar pequeños saltitos sobre el rubio a lo que este tuvo que reprimir un pequeño gemido que quería escapar.
—Por favor, por favor —Decía el menor mientras seguía brincando. Jonghyun le detuvo, ya no podían seguir así. “¿Porqué me haces esto mente pervertida?” pensó el rubio, se sentía algo mal de estar pensando en cosas no muy buenas. Miro al pelirrojo que le miraba suplicante y suspiro.
—Está bien —Accedió.
Taemin sonrió triunfante, se levanto y tomo al rubio de la mano para que se levantara para guiarle no muy lejos de ahí al suelo en donde se encontraba un juego de mesa.
—¿Turista? —Jonghyun levanto una ceja y el otro asintió con una sonrisa.
—Key escondió los otros —Se encogió de hombros, su umma los había escondido en algún lugar desconocido para el ya que después quería jugar todos los días y el castaño no tenía tiempo y si lo tenía era cansino jugar hasta que el otro se hartara.
Ambos se sentaron acomodando algunas piezas del juego, aunque al parecer el pelirrojo ya había acomodado casi todo antes de hablarle. Una vez estuvo todo listo el rubio suspiro.
—¿No quieres jugar a otra cosa? En esto se tarda mucho para ganar —Hizo una mueca a lo que el pelirrojo se quedo pensándolo un poco. En promedio el juego duraba una hora y si es que era que tenían suerte.
—¿Porqué no lo hacemos más interesante? —pregunto el pelirrojo acercándose como un gatito hacía Jonghyun, que ante eso el mencionado no pudo evitar tragar saliva nervioso ¿Ese era su pequeño Maknae? En esos momentos no parecía él, de nuevo su mente le jugaba bromas.
—¿Cómo? —Fue lo único que pudo salir de sus labios.
—Si yo gano te hago mío y si tú ganas pues al revés —dijo con una sonrisa bastante picara.
Jonghyun se le quedo mirando con los ojos totalmente abiertos, en eso el menor aprovecho para darle un pequeño lametón en los labios.
—¿Te refieres a tener relaciones…? —pregunto sin poder terminar la frase ¿se lo estaba imaginando? Poco después el pelirrojo asintió.
—A menos que no quieras —dijo Taemin un poco desanimado.
—Mmm… Hacerle el amor a nuestro dulce y pequeño Maknae —Hablo el rubio pensándolo un poco.
Taemin se le quedo mirando y el otro aprovecho para regresarle aquel lametón en los labios. Ante eso el pelirrojo se sonrojo un poco bajando la mirada avergonzado, y Jonghyun no pudo evitar soltar una pequeña carcajada.
—¿Te avergüenzas de eso pero no por hacer esa propuesta? —pregunto irónicamente— ¿Quién diría que nuestro lindo y tierno Maknae diría esas cosas? —Sonrió a lo que el otro le dio un pequeño golpe.
—Si soy inocente —dijo con un puchero a lo que el rubio levanto una ceja— si no quieres como sea —Desvió un poco la mirada.
—Está bien —Accedió; pudo ver como el pelirrojo le volteaba a ver sorprendido.
Jonghyun le seguiría el juego, no perdían nada, tan solo era un juego. Aparte no podía negar que el pelirrojo le atraía y esa era una buena oportunidad.
—Juguemos pues —Hablo el pelirrojo tirando los dados.
El juego comenzó y ambos parecían entretenerse en el juego, o quizás lo que importaba era el premio que ganaría la persona triunfadora. Ese juego era entretenido, aunque en esos momentos ambos jugaban lo mejor que podían.
Tardaron un par de horas jugando, el juego era largo. Ambos miraron los resultados sin decir ninguna palabra ¿Qué decir?
—Parece que ganaste —Hablo Taemin rompiendo el silencio después de unos incómodos segundos de silencio.
Jonghyun asintió aun sin dejar de mirar el juego ¿Ahora qué? ¿Qué debía decir?
Taemin por su parte estaba algo sorprendido y un poco nervioso, hacerle esa propuesta al rubio no había estado planeada, tan solo había salido así de la nada y no pensaba que el otro fuera a aceptar.
—Y ahora… —Jonghyun comenzó a hablar pero antes de poder decir algo más el pelirrojo se lanzo sobre el acallándolo con un beso.
Si había prometido aquello ahora lo cumpliría. Y no porque estuviera obligado a ello pero si quería estar con Jonghyun en esos momentos.
Se separo un poco para subirse sobre el rubio comenzando a besarle de nuevo. Jonghyun al principio parecía algo indeciso de que hacer aunque después comenzó a pasear sus manos por el cuerpo de Taemin comenzando a acariciarle.
—¿Estás seguro? —Le pregunto al pelirrojo. Si el otro no quería no le obligaría solo por una apuesta o esa proposición aunque a la vez por su cabeza paso la idea de que el pelirrojo le quería tener, o eso dio a entender con lo que dijo.
Taemin asintió bastante seguro y el rubio le sonrió un poco para comenzar a besarle de nuevo.
Sus cuerpos comenzaron a frotarse buscando más contacto. Jonghyun se separo un poco y se levanto alzando al pelirrojo en brazos y llevándolo hacía la habitación.
Antes de entrar Jonghyun le sonrió siendo correspondido al instante.
El rubio entro cerrando la puerta tras él. Por la silenciosa casa tan solo se podía escuchar aquellos gemidos y jadeos que salían de aquella habitación, siendo acompañados de palabras que salían también de los labios de los otros dos.
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Los demás brillositos llegaron a la casa cuando ya había oscurecido. Onew y Minho se sentaron en el sofá cansados del largo día que habían pasado con Key, tan solo le habían estado siguiendo toda la tarde.
El castaño suspiro viendo el juego de mesa sobre el suelo, al parecer habían estado jugando un buen rato. “Eso no era lo que esperaba pero es un avance” pensó. Le parecía extraño que no estuviera ninguno de los dos ahí.
—Tan solo tiran los juegos y no los recogen —dijo pensando en que después haría que lo juntaran.
Camino directo a la habitación, seguro se habían ido a dormir o estaban viendo una película o eso fue lo que pensó Key pero al entrar la habitación estaba silenciosa, le pareció extraño y se adentro un poco más viendo ambos cuerpos sobre la cama.
—Taemin-ah —Susurro— Jonghyun —dijo y se acerco viendo más de cerca. Casi le da un infarto al percatarse que no estaban vestidos— ¡¿Qué es esto?! —Grito al verles así.
Y no estaban nada dormidos ya que pudo ver que Jonghyun acariciaba al pelirrojo por debajo de las sabanas. Los otros dos parecieron espantarse un poco ya que ambos le voltearon a ver con los ojos muy abiertos.
—Umma… —Taemin se sonrojo un poco mirándole.
—Los dejo solos y… —Se quedo callado y negó con la cabeza.
—Pero tú me mandaste un mensaje para que pasara el día con Jonghyun —Hizo un puchero.
—Pero era para convivir más —Ambos se le quedaron mirando.
—Pensé que te ibas por lo que te dije —Hablo el rubio— aparte si convivimos —Le sonrió.
Key ante eso salió cerrando la puerta tras él. Se había hecho para dejarles solos, era verdad. Jonghyun le había contado que quería pasar más tiempo con Taemin y unas cuantas cosas más. Y en parte sabía que el pelirrojo también quería pasar más tiempo con el rubio; fue tan buena persona que se llevo a los otros dos para que pasaran un día, solos en la casa.
Incluso antes de irse le había mandado un mensaje a Taemin diciéndole que le dedicara el día a Jonghyun. Estaba bien que se quisieran o lo que fuera pero no esperaba que su mejor amigo le hiciera el amor a su hijo. Pero en fin, estaba bien si querían.
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—Creo que Key se enojo —Hablo Taemin mirando a Jonghyun.
—Déjalo, no era lo que se esperaba —Le sonrió— pero… ¿Querías estar conmigo de verdad? —pregunto no sabiendo bien como preguntarlo.
—Jonghyun… —Le llamo Taemin sin dejar de mirarle— yo quería que ganaras —Le sonrió.
—No le digas a Key pero pienso jugar más veces —Le dijo despacio para besarle.
—Me gusta jugar —dijo Taemin separándose un poco.
Jonghyun le sonrió y le volvió a besar, comenzando a acariciarle de nuevo. Quizás después de todo, su mente no era la pervertida y no estaba del todo equivocado…