Yong Gook se acababa de largar a su casa, Zelo había conseguido meterse en la cama pero estaba realmente triste y débil, solo quería llorar y volver a ver al hombre de su vida. Llorando comenzó a recordar momentos de cuando empezaron su relación, la manera en la que se veían a escondidas en los baños de la empresa besándose fogosamente mientras se despeinaban; lo especial que se había convertido la moto del mayor, esa moto en la que estaban tan juntos que se pasarían la visa viajando allí montados por no separarse; su besito de despedida en el ascensor de la casa de Zelo antes de que el menor se fuera a su casa; las noches que chateaban después de verse para decirse de nuevo lo mucho que se amaban; el escondite secreto que tenían para verse y poder abrazarse y besarse libremente sin peligro de que nadie los descubriera… pero lo que más le dolía recordar era el cumpleaños, aquel día que comenzaron a salir, ese día que su amor le preparó la casa para que pudieran estar juntos a solas teniendo una noche especial, la noche en la que perdió la vergüenza y en la que le regaló aquel collar que aun llevaba puesto y que jamás se había quitado porque era como su tesoro más preciado del universo, un tesoro al que se aferraba para sentirse cerca de aquel hombre que ahora ya no estaba junto a él.
JongUp estaba realmente enfadado y se fue a correr para descargar energías, aunque acabó en la sala de ensayos haciendo taekwondo para que todo lo malo que llevaba dentro saliera de él en forma de patadas y puñetazos. Yong Gook estaba ciego, es cierto que una infidelidad no se puede perdonar así como así, pero no es justo tampoco que trate así a una persona que llora por él y se arrepiente pidiéndole perdón sin importarle el perder el orgullo. Zelo había sido su amigo y le jodía verlo así y mas sabiendo que él era el causante de todo, le dolía que el menor no quisiera verlo ni en pintura porque el realmente quería ayudar tras lo ocurrido, pero saber que no podía hacer nada lo volvía impotente y le deprimía aun más.
Daehyun se puso a chatear con sus amigos para desconectar y que le contasen las cosas que habían ocurrido últimamente por Busan mientras que YoungJae y Him Chan se quedaron solos hablando dentro de una habitación para que ninguno más les escuchase lo que debían hablar.
-No podemos dejar que lo deje todo así porque sí, no se puede acabar esto por unos cuernos y porque él lo diga –se quejó YoungJae mirando al suelo.
-Él también está cansado de todo, aunque parezca que todo le da igual en realidad es el que peor lo pasa de todos los que estamos aquí, Zelo puede llorar y patalear todo lo que quiera, pero conozco a Yong y sé perfectamente que sufre más que el mocoso ese –dijo Him Chan con desprecio hacia el maknae y saliendo en defensa de su amigo.
-Bueno, el caso es que estamos sin líder… ahora tú eres el líder Him Chan –dijo YoungJae mirando al mayor para que pensase una solución rápido para el problema que cada vez se hacía más grande.
-Líder solo hay uno –dijo el comandante comenzando a sentirse molesto con los comentarios del menor.
-Him Chan abre los ojos, Yong Gook no está por mucho que te pese y ahora tú eres quien manda, di qué debemos hacer para que vuelva –insistió el menor.
-No lo sé, se acaba de ir, déjame pensar tranquilo más tarde, ahora no estoy de humor como para pensar en cosas como esa… tan solo quiero que me explote la cabeza de una vez por todas –dijo el comandante cerrando los ojos y echando hacia atrás la cabeza.
-¿Sabes? A mí no me parece bien lo que ha hecho Zelo, no sabes cuánto me… jode, quizá más que a ti, pero yo en vez de estar dando por culo me duermo en el mismo cuarto que él, escuchándole llorar las noches enteras porque realmente ama al chico que se acaba de largar por la puerta dejándonos a todos, puede que seas un cabezón pero ahora el líder tenía su parte de razón, aprende a perdonarte con los demás. No estoy de lado de Yong ni tampoco de Zelo, no me gusta como lo hacen ninguno de los dos y no defiendo a ninguno, pero intento ver las cosas como las ven ellos –dijo YoungJae dándole una pequeña lección al comandante.
-Zelo debe saber que no lo quiero –dijo Him chan fríamente.
-¿Qué no quieres a Zelo? Zelo se ha acostado con tu ex y le ha puesto los cuernos a Yong, le tienes rencor, pero recuerda lo que has pasado con él, perdónalo como he hecho yo, a mí también me dolió mucho lo que hizo, de verdad, pero es un niñito pequeño y está solo porque no tiene ni a su familia junto a él –dijo YoungJae tratando de hacer entrar en razón al comandante. A él también le dolió mucho ver a la persona que amaba revolcándose con el maknae en la cama, pero sabía hasta donde debía llegar su odio y su rencor y sabía que Zelo no se merecía pasar más por aquella situación.
-¿Por qué te duele tanto? Se acostaba con mi ex –replicó Him Chan molesto.
-No responderé a eso, no ahora, pero ten por seguro que me dolió y mucho, tu por lo menos no los viste, pero yo tengo esa imagen grabada a fuego en mi mente, yo era quien los vio gimiendo y follándose, Yong y yo fuimos quienes los vimos… además lo tuyo con él ya había acabado, deja de decir que te dolió poniendo de excusa que era tu ex como si hubierais cortado después de que te engañara, deja de creerte que tu relación con él era como la de Yong y Zelo –le espetó YoungJae cada vez más molesto.
-No sé qué mierda de mosca te ha picado, pero deja de creerte guay, yo a Jong lo amaba mucho –dijo Him Chan a la defensiva.
-Vale no digo que no pero –dijo YoungJae siendo cortado por un Zelo que abrió la puerta de la habitación.
-Me voy –dijo Zelo con los ojos rojos e hinchados, lleno de dolor y tristeza.
-¿Cómo que te vas? Si te vas él nunca volverá –dijo Him Chan molesto por la imprudencia de Zelo.
-¡Es que no aguanto más! ¡¡Llevo un mes soportando que me odiéis todos!! Quiero descansar de todo esto… él volverá si yo no estoy, soy quien le hago daño… ya no quiero seguir aquí, no puedo vivir así… Quiero volver a mi casa… allí por lo menos me quiere alguien… -dijo Zelo realmente afectado. Los mayores tan solo pudieron asentir, sabían que por mucho que le dijeran ni lo retendrían ni le harían sentir mejor.
-Zelo… antes de marcharte… -dijo Him Chan un poco más amable.
-¿Qué…? –preguntó Zelo deseando largarse de allí.
-Vuelve… cuando estés mejor… -pidió Him Chan agachando la cabeza.
-Lo dudo –dijo Zelo dándose media vuelta.
-¡Jun Hong! –gritó de nuevo Him Chan, haciendo que al menor le diera un escalofrió, solo dejaba que Yong Gook lo llamase así.
-Que… -dijo al maknae triste y un poco molesto.
-Yo te llevaré a tu casa… -dijo el comandante sorprendiendo, no solo a Zelo, sino también a YoungJae.
-N-no te molestes… -dijo Zelo saliendo de la habitación. Him Chan aun estaba en pijama pero lo siguió y le hizo entrar en el coche a pesar de la insistencia del menor en irse en autobús.
Durante el trayecto, que Him Chan hizo más largo porque tenía algunas cosas que hablar con Zelo, el mayor estuvo amable pero diciéndole casi todo lo que pensaba al menor, cosa que al maknae le hicieron sentir peor de lo que ya estaba.
-Yo conozco a Yong desde hace muchos años… ha sido mi amigo y siempre hemos estado juntos para todo y sé que nadie le ha hecho sufrir como tú lo estás haciendo desde aquella noche que te vio fallándote a JongUp –dijo Him Chan a los 5 minutos de estar ambos en silencio en el coche.
-Me arrepiento cada día… yo me di cuenta antes de que… terminásemos aquello y obligué a JongUp a parar –dijo Zelo tratando de explicarse.
-No deberías haberlo empezado –espetó el comandante.
-Si volviera atrás jamás lo habría hecho… Yo amo a Yong con todo mi ser –dijo el menor tratando de contener sus lágrimas.
-Sí a él lo amas… cómo será cuando odies a alguien –dijo Him Chan irónicamente.
-Sé que a ti te jode que fuera con JongUp más que lo que ocurrió –dijo Zelo burlonamente haciéndole bastante daño al mayor con ese comentario, que a su vez era muy cierto.
-A mi me jode que un puto crío haya jodido al grupo entero –dijo Him chan molesto y haciéndolo callar.
-Yo no llegué a casa después de JongUp magullado después de pelear y sin dar explicaciones de lo que ocurrió, porque desde aquello tu ex no es igual, desde entoces el que era mi mejor amigo se a convertido en una persona que me da asco –dijo Zelo molesto también y hundiendo los dedos en la llaga que más le dolía al comandante.
-Tú cállate, no quiero que te vuelvas a ver con Yong hasta que yo me cerciore de que esté bien ¿te queda claro? –dijo Him Chan amenazante.
-Cristalino, otra cosa es que me apetezca hacerte caso. Vivo aquí, para el coche –dijo el menor como última frase de despedida antes de que Him Chan parase el coche y lo dejara en su casa.
En la casa YoungJae había estado de nuevo chateando con sus amigos con el ordenador, le ayudaron a distraerse mientras le explicaban la manera en la que dos de sus amigos habían construido una especie de vehículo con cajas de madera y los ruedines de las bicicletas. Le enseñaron fotos y el conejito amarillo estuvo bastante atento a ellos, sin prestar atención a lo que sus ex mejores amigos hacían o dejaban de hacer, le importaba una mierda o eso quería creer, aunque se mintiera así mismo, porque la verdad es que por muy enfadado y decepcionado que estuviera, ellos le seguían importando muchísimo.
Daehyun y JongUp estaban en el sofá acurrucados, hacía frío y ambos compartían una mantita que mucho frío no quitaba, pero les servía de algo. El mayor tenía entres sus brazos al bailarín que a su vez también lo abrazaba, estaban tristes y preocupados, querían que Yong Gook no dejase el grupo y sabían que Zelo se había largado y no volvería a no ser que el líder se lo pidiera. Estaban planeando por su cuenta cada uno en la manera de hacerlos volver a los dos, de unir al grupo de nuevo, aunque JongUp sabía que hiciera lo que hiciera nadie le haría caso porque todos menos Daehyun lo repudiaban. En ese momento de reflexión y entretenimiento llegó el comandante a la casa mas cabreado que una mona en celo sin ser preñada, estaba que echaba humo por las orejas del mal humor que le había puesto el maknae con sus comentarios de niño malcriado e infantil, aunque para lo poco que hablaron, el menor había dado perfectamente en el punto de dolor del comandante y no le importaba seguir hurgando en la heridita para reabrirla.
-Tenemos que hablar los cuatro –dijo Him Chan en voz alta poniéndose una sudadera del frío que traía de la calle.
Los cuatro chicos se sentaron en la mesa del salón, que era cuadrada y con la base de cristal, las patas eran metalizadas y las sillas eran igual que las patas. Se sentaron Daehyun y JongUp frente a Him Chan y YoungJae para poder mirarse todos a la cara.
-Creo que deben pasar unos días separados –dijo Him Chan refiriéndose a su mejor amigo y al maknae del grupo.
-¿Y después cómo piensas hacerlos volver? –preguntó Daehyun curioso y burlón.
-Zelo, tenemos que hacer que él vuelva, podríamos grabar un video de todos felices haciéndole volver diciendo que lo echamos de menos –dijo Him Chan respondiendo la pregunta de Daehyun.
-Sí claro, y cuando vea que todo sigue igual ¿qué? –preguntó YoungJae jodiéndole el plan al comandante, el único plan que se le había ocurrido.
-Pues se finge –dijo impulsivamente a Him Chan tratando de no quedar más mal.
-La otra solución es perdonarnos todos –dijo Daehyun mirando a YoungJae, la frase iba dirigida a él, porque el menor le había dejado de hablar tan sólo porque se juntaba con JongUp.
-Yo no quiero perdonar a Him Chan –dijo JongUp dolido recordando aquella horrible noche.
-Yo tampoco a vosotros –dijo YoungJae de medio lado mirando más a Daehyun.
-Tú plan es una mierda –dijo el comandante de nuevo en tono burlón.
-¿Para esto quería hablar? –preguntó JongUp mirando a Him Chan con ojos acusatorios.
-Con vosotros es imposible –respondió Him Chan al menor, llevaban mucho tiempo sin dirigirse la palabra fuera de las cámaras y lo cierto es que les dolía.
-Cuando alguno haya pensado algo que venga y lo cuente –dijo Daehyun levantándose de la mesa y tirando de la mano de JongUp para llevárselo de allí.
Pasaron dos días más en los que nadie sabía nada acerca de Yong Gook y Zelo, en casa se hablaban entre parejas, Daehyun con JongUp y Him Chan con YoungJae, pero no le dirigían la palabra al resto, ni si quiera se miraban, trataban de no coincidir para las duchas, las comidas y las habitaciones, que era donde más tiempo pasaban a lo largo del día, encerrados para no ver a los otros dos ni un solo segundo para que no saltase ninguna chispa peligrosa.
Yong Gook estuvo en su casa, le dijo a sus padres que les habían dado días libres y les mintió acerca de la situación del grupo, no quería que sus padres supieran que el grupo apenas existía y mucho menos su relación con la gran mayoría de los miembros, en especial con Zelo. Su madre conocía bien al maknae y a veces le preguntaba por él, cosa que a Yong Gook le dolía bastante, pero respondía son una sonrisa que todo estaba bien con él. Lo extrañaba mucho, se preguntaba constantemente como se encontraría su ex solo en aquella casa sin hablarse con nadie, sabía que no se hablaba con ninguno, pero no aguantaba allí un día más a pesar de las súplicas del menor arrodillado y llorando en aquel frío suelo de la cocina antes de largarse del departamento. Aquella imagen no se borraba de su mente, recordar a Zelo llorando de una manera tan dolorosa como si estuviera muriendo le hacía llorar por las noches, deseaba coger su móvil y decirle que lo amaba, que volvieran a estar juntos… pero entoces recordaba las palabras de Zelo en la cama con JongUp “métemela”, y todas las ganas de llamar a su pequeño se le desvanecían… Estaba tan jodidamente confuso… “¿debería perdonarlo o no?” se preguntaba así mismo todo el tiempo. Por un lado jamás le perdonaría eso, lo engañó con otro cuando después se acostaba en la cama con él y le miraba a los ojos diciéndole “Te amo”, se sentía engañado, sentía que el maknae se había burlado de él y de su confianza, o peor aún, de su amor. Pero por otro lado recordaba todos los momentos que pasaron felices juntos y la manera en que Zelo se disculpaba todos los días desde lo ocurrido, el beso que le daba todas las noches cuando se hacía el dormido, la manera en la que el mismo menor decidió esclavizarse haciendo todas las labores de la casa él solo para tener contento a su líder, la manera en que lo escuchaba llorar a veces en el baño cuando se duchaba o simplemente necesitaba estallar sin ser visto, la manera en que lo miraba lleno de tristeza y arrepentimiento cada vez que se cruzaban levemente sus miradas por segundos, la forma en la que casi se asfixia llorando antes de largarse… Aquello le hacía darse cuenta de lo mucho que en realidad lo amaba Zelo… todo era tan confuso, perdonar algo como aquello no era fácil, pero no podía vivir sin su pequeño, o peor aún, no podía vivir viendo como su pequeño se arrastraba y sufría de aquella manera por conseguir su perdón. A Yong Gook se le vino a la mente algo que había dicho Zelo una noche mientras se pensaba que el mayor estaba dormido, pero en realidad el líder lo había escuchado todo.
“-Hyung… Amor… Cielo… Mi vida… Sé que me costará, pero te recuperaré… sea como pareja o no… quiero recuperarte, quiero que dejes de sentir ese odio hacia mí aun sabiendo que me lo merezco, soy odioso, soy lo peor del mundo… pero con todo eso yo te amo… te necesito a mi lado, necesito un abrazo que me haga sentir protegido, necesito una sonrisa tuya para no derrumbarme, necesito ver que lo nuestro tiene una mínima solución… No sé lo que me pasó, no sé por qué me dejé llevar por él… ni si quiera me imaginaba que era él… pero cuando estaba con él en la cama mi mente me mostró un recuerdo, eras tú, aquella noche abrazándome por detrás el día en que empezamos a salir y no pude seguir, lo empujé para que parase, no podía hacerte algo así, me siento fatal, realmente haría cualquier cosa por conseguir que me creyeras cuando te digo que te amo, se que lo que hice estuvo mal, muy mal, que me merezco un castigo, pero llevas 24 días tratándome de esa manera en la que me estás matando, pero prefiero esto a vivir sin ti… Te amo Bang Yong Gook… solo te amo a ti y siempre serás el único al que ame…” –dijo Zelo aquella noche, para luego depositar un suave beso en la mano de su ex. Aquella noche el líder no pudo dormir dándole vueltas a la cabeza, deseando echarse a llorar, deseando que alguien le diera un mísero abrazo para poder sentirse levemente reconfortado.
Alguien llamó a la puerta de su habitación, era muy tarde y no imaginó quien podría ser porque sus padres ya deberían estar dormidos… En algún momento de imaginación llegó a pensar que el que estaba tocando a su puerta era el mismo Zelo, a las tres de la mañana llamando a su habitación porque lo echaba de menos, porque había ido a buscarle… pero no, eso era algo imposible del todo. El chico del pelo lila y negro abrió cuidadosamente la puerta de su habitación, y para su disgusto no era Zelo, algo que ya imaginó que era improbable, era su hermano Yong Nam, que había estado escuchando durante esos dos días los falsos relatos de su hermano acerca de lo feliz que era en su grupo pero lo conocía lo suficientemente bién como para saber que su hermano estaba mintiendo.
-Hyung… ¿qué haces aquí a las tres…? –preguntó Yong Gook en un tono de voz muy bajo.
-¿Qué haces despierto? –preguntó su hermano con el mismo tono de voz.
-Tú has llamado –respondió el menor. Se llevaban segundos, pero Yong Nam era unos segundos mayor que él.
-Bueno, no estabas dormido, supongo que no puedes dormir, por eso vengo, tenemos que hablar de ti, quiero que me cuentes la verdad sobre lo qué pasó… No tienes días libres porque nos habrías avisado con tiempo… Quiero que me cuentes realmente lo que te ha hecho volver a casa y dejar el grupo, mentir a papá y mamá y… que no duermas por las noches, y no me pongas excusas porque te conozco –dijo el hermano mayor.
-Entra… -dijo Yong Gook en un suspiro dejando pasar a su hermano.