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Cold por Nosaeg_nun

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Notas del fanfic:

Un fanfic sencillo y sin muchas vueltas.

 

Situado en la adolescencia de los brillositos, donde los sentimientos están a flor de piel y la confusión es la mejor amiga. Un poquito de drama (? , celos, sexualidad reprimida, problemas familiares ...

AU; Romántico; Lemón -a futuro-

 

Taemin x Key

- como siempre -   <3

Notas del capitulo:

Ustedes ya saben que los primeros capítulos son algo fomes .

Y no tengo mucho que agregar, solo que es un poquito raro escribir con menos de 1500 palabras .

Uh! Viva el TaexKey <3

 

" Él no reía con nada. Él no hablaba con nadie.

Pero, yo estaba seguro que tras esa máscara de chico duro y antisocial, debía, tenía que haber un chico dulce y de buenas intenciones"

 

Su casa estaba a unos veinte minutos del instituto. Kibum solía caminar con rapidez como si siempre estuviera atrasado pero ese día la neblina estaba muy espesa y el viejo pavimento de la vereda estaba mojado. Después de estar a punto de caer sobre sus nalgas un par de veces, el muchacho delgado se dio por vencido y comenzó a dar pasos firmes pero lentos. El clima era algo raro para la estación en la que se encontraban. Recién se había ido el verano y sin embargo, el sol se sabía escondido de pronto como sabiendo que el primer día de clases era algo aburrido que ningún estudiante disfrutaba. Cuando por fin atravesó el portón del instituto, la nostalgia lo embargó. Todo estaba muy ruidoso y de ese modo, las vacaciones en casa de su abuela eran un paraíso.

A lo lejos divisó un cuerpo alto con una mochila de un solo tirante atravesando una espalda ancha y bien conocida. El chico se giró y le sonrió con cariño, acercándose a él gritando un sonoro ‘Hyun’ que a cualquiera lo hubiera asombrado.

-        Pareces tonto- reclamó zafándose del agarre de Minho- bueno, en realidad lo eres- rió

-        Kibum, ¿Cuándo aprenderás? Deberías sentirte afortunado de recibir mi atención- reflexionó el alto

Pronto se pusieron en marcha hasta el salón de su curso y entonces, vio frente a sus ojos esa imagen que se repetía una y otra vez, sin cesar: las chicas amontonadas conversando al final del salón; los chicos malos escribiendo barbaridades en el pizarrón; los gemelos hablando animados entre sí; sus amigos viéndolo con enormes sonrisas y el chico callado junto al ventanal.

“El chico callado junto al ventanal” repitió mentalmente luego de darle un vistazo rápido -que DEBÍA pasar desapercibido- para el que era su compañero por segundo año consecutivo.

-        ¿Ustedes, juntos otra vez?- preguntó Jonghyun, fingiendo estar dolido por la cercanía del deportista con el chiquillo inteligente

-        No es que realmente te enojes, ¿verdad?- habló preocupado el deportista. A cambio recibió una sonrisa que lo dejaba libre de culpas

-        Los extrañé a todos- declaró por fin Key- los días junto a mi abuela son hermosos pero había un vacío en mí que sólo ustedes pueden llenar- dijo abrazando en círculo a sus compañeros

Con cada uno de ellos, Kibum tenía una relación especial. A Jinki siempre lo admiró por ser paciente y buen consejero de sus problemas; Jonghyun era quien más se preocupaba de él, era una especie de sombra que con su energía amenazaba no dejarlo solo jamás; Minho era el chico lindo que todo el mundo deseaba pero que para él era un buen compañero de juegos, el moreno siempre lo trataba con cariño exagerado, presumiéndole al mundo que el mejor deportista podía ser el mejor amigo de un chico tan inteligente como él y que ambos, eran aún más geniales juntos. A Key le hubiera gustado agregar un cuarto a su lista de amigos pero ese chico que le llamaba tanto la atención era un completo desconocido.

Allá, apoyando su mentón contra sus manos y con los ojos clavados en el escritorio del profesor, un chico de piel más clara que Minho pero más oscura que la suya, parecía perdido tras una muralla impenetrable contra el mundo. Sus ojos pestañeaban de vez en cuando, su voz sonaba entera al responder ‘presente’ a la lista, el misterio que lo rodeaba era embriagador. Desde que Taemin había llegado al instituto dos años atrás, nadie había conseguido sacarle una sonrisa. Cuando los trabajos eran grupales, él escogía hacerlos solo. Sus notas no eran las mejores; su actitud con los profesores pasaba de calma a agresiva. Key siempre se preguntaba porqué Taemin tenía que ser así pero nunca había encontrado una respuesta válida. No podía quitarle los ojos de encima cuando tenía que leer algo en voz alta porque parecía estar hipnotizado por sus labios y las pocas veces que le dedicaba una palabra a alguien, el curso se paralizaba como esperando la reacción de un loco con un cuchillo. A Key siempre le llamó la atención Taemin, siempre deseó que de un momento a otro Lee se hallara hablando con él, que todas sus inquietudes fueran aclaradas con palabras nacidas de sus propios labios.

-        Oye, ¿puedes juntar un poco la cortina?- le dijo un día, intentando entablar una conversación. Más, el muchacho callado sólo lo vio por unos segundos con el rostro fruncido y luego se levantó a juntar las telas del salón.

-        Es una mañana muy fría- le dijo en otra ocasión cuando se hallaron solos en el salón. Sin amargo, otra vez Taemin se guardó las palabras y Key pareció hablarle a una pared.

Fue en una clase con el profesor Yoochun que cruzó palabras reales con él. El maestro sorteó parejas para un trabajo de historia y a Key le tocó con Taemin. El sentimiento de incomodidad se hizo presente al poco y ante la nula reacción del Lee, Kim tuvo que otra vez mendigar un poco de diálogo.

-        No pretendes hablar, ¿verdad? Yo podría comprender que fueras un muchacho tímido al que le cuesta relacionarse pero esa apatía que tienes es extraña. Dime, ¿no te enseñaron lo que es ser cortés?- inquirió Kim viéndolo fijo

-        No- respondió seco Taemin

-        Lo supuse. Es fácil para mí pedirle a uno de mis compañeros que sean mi pareja para el trabajo pero me designaron hacerlo contigo, así que eso pretendo hacer, ¿entiendes?- le habló gesticulando con gracia

-        Hazlo con ellos. Yo puedo solo- respondió altanero. Y Key antes de sulfurarse fue sorprendido por un meloso Minho que lo agarró de la cintura y lo hizo sentarse a su lado

-        ¿Problemas con el chico emo?- preguntó el deportista

-        No son problemas y él no es emo- se apresuró en aclarar, como si lo conociera de sobra- sólo es un niño mañoso que no sabe cómo relacionarse

-        Un niño que te sacará canas. ¡Inocente Kibummie!- medio gritó- tú estás obsesionado con ese niño y él lo único que hace es hacer que el mundo se enfade. Contra más atención le prestas, más grande es su ego- reflexionó el moreno

-        No hables así Minho- suspiró vencido- tras esa cara de chico malo y esa actitud despreocupada debe haber un niño carente de cariño que sólo desea llamar la atención

Pero en ese salón el único que pensaba así era el Kim de ojos gatunos. Cada vez que alguien llevaba un rumor de Taemin, comentaban que era un chico problema y que no valía la pena intentar, siquiera, acercarse a entablar una conversación. Los chicos del salón estaban seguros que el muchacho callado pertenecía a una secta o a algo parecido, que sus actitudes se apoyaban en sus malos deseos para el mundo y que esa actitud más bien retraída, era una ventaja para todos.

Y el único que pensaba distinto era Key. Siempre se había caracterizado por llevarse bien con todo el mundo y por tener una especie de radar para encontrar nuevos ‘amigos’. La filosofía de su vida era hacer todo lo posible para alcanzar la felicidad y se sentía amarrado de manos al ver que el otro muchacho era todo lo opuesto a él.

Si todo el mundo decía que los opuestos se atraen, entonces él estaba siendo seducido –directa o indirectamente- por todo lo que el otro hacía. Estaba pendiente de todos los movimientos que hacía así como muchas veces haciendo un paneo por el salón se había encontrado a Taemin mirándole con tanta seguridad que parecía quemarle los ojos. Key estaba seguro que tras esa cara inexpresiva y a esa forma de ser tan antisocial, se escondía un dulce niño que sólo estaba llamando por un poco de atención.

 

 

Notas finales:

Me perdonan si hay incoherencias y faltas de ortografía.

Es corto, muy corto. Hasta yo estoy sorprendida!!!

Pero díganme, vale la pena seguirlo???

 

Espero sus comentarios O:

o en unos días lo borro :z

 

Saludos a todos!!!


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