El psiquiátrico por Tiopisitha

El pelirosa se movió y un gemido salió de su boca al sentir como algo golpeaba su interior dando con algo que le provocó un delicioso placer, se removió un poco, solo por la inercia de ‘sacar aquello’ que le incomodaba; pero entonces abrió los ojos, encontrándose con la cara del pelinegro que parecía estar profundamente dormido. Jiyong se paralizó un momento  y entonces un intenso dolor de cabeza le invadió, se llevó las manos a los costados de su cráneo, apretando los ojos unos segundos y después de que el dolor pasara volvió a abrirlos, quitándose de encima del otro chico de una manera apresurada.

“¿Q-Qué hice?...” Susurró sin entender nada. Lo último que él recordaba era haber visto llegar a ese chico, no podía explicarse cómo había terminado en aquella situación, pero se vistió rápidamente tratando pensar que aquello no había ocurrido.

Seunghyun abrió lentamente los ojos entonces, movió su rostro un poco, pudo ver al pelirosa sentado en una esquina mirando al suelo. Y sin tomarle mucha importancia se levantó, se puso la ropa interior para seguidamente ponerse el resto de su ropa.

“Vámonos ya.” Dijo cuando estaba vestido. El menor alzó la vista.
“¿Eh? ¿A dónde?” Dijo un confundido Jiyong en el piso. El pelinegro soltó un suspiro.
“¿Acaso eres tonto o algo así?”Dijo de malas. “A casa. ¿ A dónde más? o ¿quieres quedarte a vivir aquí?”
“No pero...¿cómo pretendes salir?” Seunghyun rió comprendiendo el asunto.
“¿Que es tan gracioso?” Dijo haciendo una especie de mohín.
“Nada, nada, solo vamonos.” Dijo mientras se dirígia a la puerta.

Se asomó por la pequeña ventana que había y miró alrededor, al parecer nadie vigilaba. Seunghyun tomó el pomo y lo giró, rompiendo el seguro y abriendo de inmediato la puerta.

“Vámonos.” Dijo tomando de la muñeca al menor y jalandolo con él.

“E-Espera...nos veran...no quiero meterme en problemas..” Jiyong trató de zafar el agarre inútilmente .

“No pasara nada, no actúes como niña.”  Le dijo a sabiendas que esas palabras eran las que siempre molestaban a Jiyong.

“No actuo como niña, solo no quiero problemas.” Dijo con el ceño fruncido y sentándose en el suelo para no ser movido.

“Jiyong, levántate y camina o te llevare cargando.”

“No lo haré” Dijo actuando de forma berrinchuda. Seunghyun soltó la muñeca del menor en ese momento y se puso de cuclillas.

“Como quieras.” Replicó cerca de su rostro, haciéndole estremecer antes de ser alzado.

El mayor ahora cargaba a Jiyong en su hombro mientras este pataleaba un poco y le pegaba en la espalda.

“Bajame, caminaré, caminaré.” Se quejó y Seunghyun volvió a ponerlo en el suelo.

Ambos caminaban por los largos pasillos de aquel psiquiátrico, Seunghyun parecía muy tranquilo a diferencia del pelirosa que volteaba a todos lados esperando que nadie los viera.

“No hay nadie vigilando, tranquilízate un poco Ji Yong.” Le dijo el mayor.

“¿Cómo sabes mi nombre?” Dijo al darse cuenta de que no se había presentado y que él no sabía el nombre del pelinegro.

“Solo lo sé.” Rió un poco. “Me llamo Seunghyun.” Le dijo sabiendo que esa sería su próxima pregunta.

Jiyong se quedó callado y siguió caminando.

“ ¿A dónde se supone que creen que van?” Una voz bastante familiar para Ji se hizo presente haciéndole estremecer.

Seunghyun pudo notar aquello de inmediato, volteó para encontrarse con el guardia regordete y un par de sujetos de uniforme blanco con unas jeringas en la mano.

“¡Y-Yo no quise hacerlo! ¡Lo siento!” Jiyong estaba aterrado, los sujetos comenzaban a  acercarseles pero Seung parecía aún muy tranquilo.

“Fue él, ¿cierto?” Pronunció el mayor y Ji volteó a mirarle.

“¿Eh?” Ji no sabía a qué se refería.

“Él fue quién te forzó.” Dijo rechinando los dientes.

Jiyong no supo qué decir y tragó saliva.El mayor tomó al pelirosa poniéndolo detrás de él.

“Te sugiero que cierres los ojos si eres sensible.” Le advirtió caminando un poco mientras los de uniforme blanco se le acercaban.

No bastaron más que un par de segundos para que Seunghyun destrozara los cuerpos de aquellos sujetos ante los ojos de Jiyong que se habían abierto de par en par y se había dejado caer al suelo de rodillas aún más asustado.

El guardia estaba a punto de salir corriendo cuando Seunghyun lo sujetó, sacando sus afilados colmillos ante la vista del hombre, se acercó lentamente a su cuello para arrancar un pedazo de carne. Después soltar al guardia y escupir la piel al suelo mientras aquel hombre se retorcía en el suelo mientras se desangraba. Seung se dio la vuelta.

“Vámonos ya.” Dijo pasando su brazo por su boca ensangrentada. El cuerpo de Ji temblaba.

“Te dije que cerraras los ojos.”

“¿Q-Qué eres?” Ji aún seguía asustado.

“Lo mismo que tú.” Contestó.

“No, claro que no. Yo soy un humano..tú eres..eres..”

“¿Un vampiro? Tú también lo eres.” Jiyong no le podía creer al pelinegro. “Ya lo
recordarás...ahora vámonos.” Dijo alzándolo del suelo  y arrastrándolo a la salida.

“N-No..no quiero ir contigo...sueltame.” Seunghyun se vio molesto y lo empujó contra una pared.

“Escuchame bien. Eres mío, ¿entendido? Si yo digo algo tienes que hacerlo, ahora cállate y vámonos.” Gruñó.

“N-No...” Entonces recibió una bofetada y Seunghyun lo tumbó en el suelo.

“Tsk..te demostraré que eres mío.” Dijo sacando la ropa del menor en menos de un segundo.

“N-No..no...por favor..” Seunghyun hizo caso omiso a las palabras del menor, llevó su mano hasta el miembro dormido de Ji, quien se estremeció al toque. “No..” Repitió.

El pelinegro abrió su cierre para sacar su palpitante polla semi-erecta.

“Esta vez no bebere tu sangre porque se que estas cansado, pero solo será esta vez.” Le dijo mientras separaba las piernas del menor quien estaba en shock al ver los colmillos del mayor, tanto que no notó que Seung estaba a punto de penetrarle.

“¡Ahh!” Gimió de puro placer Jiyong cuando Seunghyun le embistió de una y chocó contra su próstata. “N-No..mmm...” El cuerpo del pelirosa no podía evitar sentir placer ante los movimientos de Seunghyun.

“¿No que?” Dijo el mayor.

“De-Detente..hmm..” Replicó tratando de contener sus gemidos.

“Lo estas disfrutando, ¿por qué debería detenerme?.” Dijo aumentando el ritmo con el que embestía el pequeño cuerpo del pelirosa.

“Ahn..” Jiyong se aferró a la espalda del mayor sin poder contener el placer. “N-No..t-tú...hmm...”

El pelirosa no podía hablar coherentemente debido que Seung había llevado su mano hasta la entrepierna del menor comenzando a masturbarle. Seunghyun estaba a punto de correrse y realmente tenía unas terribles ansias de morder el cuello del menor, pero sabía que en el estado de ‘inconsciencia’ de Ji aquello podía ser mortal para él por lo que se contuvo y terminó corriéndose a la par del menor quien le apretó la polla con sus calientes paredes. El cuerpo de Jiyong se estremecía en el suelo por el post-orgasmo mientras Seunghyun lamia su cuello recordando el sabor de su sangre.

“Eres mío, ¿lo ves?” Le susurró.