La fría ciudad se encontraba un tanto desolada, era de noche pero aún así las nubes grises adornaban el cielo nocturno, desde ellas caían grandes gotas de agua. Las pocas personas que transitaban corrían en busca de un refugio, solo un chico caminaba por la calle sin importarle la condición climática que lo arremetía, estaba completamente mojado de pie a cabeza, pero eso lo ayudaba a ocultar que de sus ojos caían lagrimas, hace tan solo una hora atrás se encontraba en un hospital recibiendo la peor noticia que había tenido en toda su vida.
Llegó a la gran casa, entrando directo a su habitación evitando a cualquiera, y, sin quitarse ninguna prenda se dejó caer sobre su cama, abrazó su almohada con fuerza mientras soltaba pequeños sollozos, solo se giró un poco cuando escucho el chirrido de la puerta al abrirse, por ella entro un chico a paso lento sentándose en la cama y poniendo su mano en la cabeza del que estaba acostado.
-Chanyeol, deberías quitarte esta ropa mojada y darte una ducha, no es bueno que te enfermes –dijo con voz suave intentando alentarlo aunque el mismo estuviera destrozado- ¿Si? Por favor – le suplico esta vez, quería cuidar su salud por lo menos le restaría un dolor menos, suficiente con el que sentía en su corazón para encima sumarle uno a causa de una gripe o fiebre.
Chanyeol se incorporó en la cama quedando así sentado en ella mirando a JunMyeon y sin decir nada lo abrazó fuerte, desahogándose más, dejando que sus pequeños ojos expulsaran lágrimas transmitiéndole esos sentimientos a SuHo que para nada le importó que el otro le empapara con su ropa mojada, más bien lo acercó más a él, apretándolo en el abrazo y, acariciando su espalda, lloro también.
-¿Por qué a BaekHyun-hyung?- su cuerpo tembló en el abrazo, al mencionar ese nombre regresaban a su mente las imágenes que tan solo unas horas antes divisaba de su amigo a través del cristal, entubado y con varios doctores a su alrededor intentando salvarle la vida, muchos moretones y raspones en su rostro, su ropa llena de sangre, sus otros compañeros estaban igual de angustiados que él, se abrazaban entre sí o caminaban de un lugar a otro desesperados para que le informaran como estaba la salud del herido, hasta que escucharon el alarmante 'bip' continuo y acto seguido unas planchas, las cuales le pegaban al pecho pasándole corrientes eléctricas, una, dos, tres veces, cada vez que oía el “despejen” cerraba los ojos con más fuerza y luego de varios largos intentos de la habitación salió un señor quitándose los guantes manchados del liquido rojo diciéndoles que no pudieron hacer nada, como ese accidente automovilístico había causado severos daños internos los cuales era imposible arreglar.
Noticia devastadora para todos, pero por algún motivo a él le afecto más, sí, la simple razón de que amaba como ninguno de los demás a su amigo.
Luego de que ChanYeol liberara todo el llanto hasta que no quedará lágrimas más que expulsar se separó del abrazo y pasaba sus manos por los ojos secándoselos.
-Gracias hyung, pero ahora déjame solo ¿sí? Me cambiaré de ropa, tu mejor ve donde los chicos que de seguro te necesitan –no quiso sonar mal agradecido, pero realmente lo que necesitaba en esos momentos era estar solo en la habitación de ellos dos, le mostró esa sonrisa que siempre adornaba su rostro, claro, esta vez forzada pero intentado que el mayor no se preocupara más de lo que debía.
-Primero quiero ver que hagas lo que te dije – el menor asintió y con pesadez se dirigió hasta el baño, una vez dentro se despojó con mucha lentitud de la ropa y se metió debajo de la pequeña lluvia, pero esta vez de agua tibia, y tan solo en ese instante sintió mucho arrepentimiento.
“Si solo lo hubiera hecho reír una vez más”
“Si solo hubiera estado con el”
“Si solo hubiera ido a la presentación”
“Si solo le hubiera demostrado más cuanto lo quiero”
“Si solo hubiera probado sus labios”
“Si solo le hubiera dicho cuanto lo amo”
Y ahí se hubiera quedado enumerando los “sí solo” que pasaban por su mente de no ser porque SuHo tocó la puerta del baño
-No tardes mucho y deja la ropa ahí, yo la recojo luego –su voz salía entrecortada con pequeños sonidos de hipo.
Caminó hacia la gran sala principal a encontrarse con los demás amigos de ellos que se estaban dando palabras de apoyo, JunMyeon les dijo que lo mejor para Chanyeol era estar solo en estos momentos, el menor de todos ellos, SeHun, estaba en una esquina alejada abrazando sus piernas y siendo consolado por su amigo LuHan, quien le ofrecía de beber una taza de té.
Tao era uno de los que más lloraba, su siempre personalidad sensible esta vez no la podía controlar, además de que consideraba a BaekHyun como uno de sus más grandes amigo, aún entre en lagrimas discutía con Kris y XiuMin, debido a que no le dejaban subir a la habitación para ver a ChanYeol.
Él, por su parte, había salido del baño entrando a su habitación y dándose cuenta que SuHo había cambiado las sabanas, era lógico, las había mojado, tomó una muda de ropa y se la colocó; sentía que el short pesaba tanto que tardó más de lo normal. Se iba a arrojar de nuevo en su cama hasta que se quedo estático viendo fijamente la de su compañero, le haría falta verlo en ese lugar “si solo pudiera oír los sonidos de cachorro que emitía antes de quedarse dormido una vez más” caminó a paso lento y se acostó esta vez en la cama contraria, enterró su cabeza en la almohada y metió las manos debajo de ella para poder abrazarla cuando sintió algo duró, lo tomó, dio media vuelta y vio claramente que se trataba de una no muy grande libreta, dudó unos segundos si abrirlo pero a la final decidió hojearlo leyendo así unas líneas de lo que tenía escrito.
-“(I can’t explain what I feel) … Si tu sólo me aceptaras, todo estaría bien … Yo perdí la cabeza en el momento que te vi (I lost my mind) … Todo alrededor se pone en cámara lenta, excepto tú” –ChanYeol no pudo evitar embozar una mínima sonrisa al leer esas líneas- “Compartiendo y aprendiendo todos los días incontables emociones contigo. Peleando, llorando y abrazándonos, por favor dime si esto no es amor” Hyung, con que escribías una canción y no me comentaste –decía para sí mismo en voz baja, pasando las hojas que continuaban llegando hasta una cuyo tema le pareció interesante leyendo así su contenido “Cosas que quiero hacer” se titulaba, leyó lo que continuaba en un tono un poco más alto –
Uno: ver un elefante frente a frente –tan solo la primera hizo que soltara un suspiro de negación-
Dos: Salir con todos los chicos y divertirnos.
Tres: Terminar de escribir la canción.
Cuatro: No faltar a la presentación –se detuvo al leer esta cuarta, queriendo tacharla, formó un puño aún sosteniendo la libreta y antes de que se alterara de nuevo, la ultima capto su atención –
Cinco: Decirle a ChanYeol… -era lo único que decía, sin completar la quinta la cual le dejo una gran duda ¿Decirle que?-
Cerró el libro y lo abrazó con fuerza acostándose en la cama casi en posición fetal.
-“Si solo pudiera ayudarte a cumplir algunas de ellas” – y luego de unas muy largas horas con los ojos cerrados intentando conciliar el sueño, se durmió.
A la mañana siguiente, solo tres horas después de que lo venciera el sueño y “descansar” un poco, los rayos del sol dieron en su rostro, haciendo que se encandilara y apretara los ojos para luego abrirlos de a poco, los tenía solo un poco hinchados, su cabeza dolía horriblemente y sentía su nariz un tanto griposa, ya no quedaba rastro en el cielo de esas nubes oscuras que la noche anterior descargaron toda el agua posible, aún en sus manos se encontraban el libro con el que había quedado dormido apretándolo contra su pecho como si fuera un peluche. Sus ojos se iba a cerrar de nuevo hasta que escucho la voz de KyungSoo gritándole a todos que bajaran y fueran a desayunar, ese sonido lejano le provoco una punzada más fuerte, soltó un leve quejido, el no quería desayunar, no tenía ánimos de hacer nada ese día, solo se quedaría allí aspirando el aroma que desprendían las sabanas de su hyung, por lo menos hasta que tuviera que hacer los preparativos para el funeral.
Su corazón aún dolía, sentía las inmensas ganas de llorar de nuevo, quería sacar esos pensamientos de su mente, los recuerdos de lo sucedido ayer, aunque fuera algo imposible, así que simplemente se dio vuelta y decidió cerrar los ojos nuevamente hasta que una voz se lo impidió.
-Primero haces que tenga que dormir en otro lugar que no es mi cama solo para no interrumpirte de tu sueño, agarras el cuaderno y lo abrazas como si fuera tu novia, que te advierto, si lo leíste te mataré ¿y ahora te niegas a salirte de la cama? –ChanYeol reconoció esa voz, abrió sus ojos enormemente encontrándose con la figura de su compañero de cuarto sentado en la otra cama mirándolo fijamente, cuando se dio cuenta lo que veía hizo un intento por levantarse, estaba sumamente asustado que sus brazos le fallaron por lo que perdió el equilibrio y terminó cayendo de espaldas por el otro extremo y dio de lleno en el suelo. -¡Ey! ¿Estás bien? –dijo subiéndose a su cama y mirando al alto, sin poderlo evitar en sus labios se dibujo una sonrisa divertida –Parece que has visto un fantasma.
Chanyeol no pudo articular palabras, su boca se movía y solo emitía sonidos de confusión, no sabía que decir, ¿Estaba viendo bien? El otro ladeaba la cabeza esperando respuesta, pero en vez de una recibió fue una pregunta.
-Ba..BaekHyun-hyung?