Narra Anna.
No podía evitar sentir esa preocupación, Elizabeth ya estaba descansando en su cama, la contemple con la luz levemente prendida, parecía tranquila…aun así yo no podía mantenerme con calma,…había algo que me lo impedía
-tienes razón, después de todo ustedes son las únicas que pueden criarle-
-Maribel…-me mordí los labios con frustración…¿fuimos un error?
-¿Anna, quieres comer?- oí la suave voz de Susan que provenía de la cocina, me acerque a ella y le dije que no tenia apetito, me miro dudosa.
-¿estas segura?...-
-si…no tengo apetito, lo siento-me acerque a la sala y tome una chaqueta y mi billetera.
-saldré un momento, por favor cuida a Eli…- le regrese la mirada y en ese mismo momento sentí sus labios sobre los míos a modo de despedida, al terminar el beso solo ladee el rostro, nunca estuve en lo correcto…la que cometió el error fui yo, hui por ti, Maribel.
-nos vemos-la esquive sin mirarle, solo quiero estar sola por un momento.
Al estar lejos fui a un parque, estaba hermosamente iluminado, varias parejas estaban caminando a esa hora, tomadas de la mano, haciéndose mimos, sonriendo…mi vista por unos leves segundos se perdió en una pareja que estaba en una banquita continua.
Eran un par de chicas…, se miraban con amor mientras reían, vi que una de ellas saco su celular y acerco a la menor a su lado para capturar el momento.
Mis ojos se abrieron sorprendidos, era casi igual a…, ¡ese gesto!, desvié la mirada, no quería recordar, ¡no debía!,sar seguí caminando pues ya no quería estar allí, tenia mi celular a mano, lo sacaba a cada momento…¿debo llamar a Maribel…?
Una tenue lluvia empezó a caer, deje que me cubría por largo rato, no fui feliz por mi mismo, por que en el fondo fue mi error, porque no supe decirle que la amaba en su momento…por que fui cobarde.
Me puse a revisar mi celular, debía concentrarme en otra cosa, abrí una carpeta de fotos que estaba ahí, tecleaba un poco y luego presione un botón mal…
Soy patética.
Mi mirada se perdió en la foto que estaba guardada y que ahora contemplaba bajo ese frio que llenaba mi cuerpo.
-Ma…Maribel-cubrí mi boca evitando soltar un llanto lastimero.
Aun puedo recordarlo con claridad.
La veía ahí…una Maribel de tan solo unos 16 años junto a una chica de su misma edad, Maribel sonreía luminosamente mientras estrechaba en sus brazos a…Anna, esta ultima miraba a Maribel con profundidad y un brillo delicado un sus ojos…
Un brillo que delataba amor puro.
-¡oye ten cuidado!-grite mientras era jalada por Maribel, parecía entusiasmada.
-¡ven a verlo es hermoso!-esquive varias cosas en mi trayecto mientras seguía sujeta de su cálida mano, mi corazón galopaba con fuerza y mis mejillas estaban un poco rosadas, bajaba la mirada para que no se notase.
Paramos de golpe y casi me fui de narices contra el piso, respire agitada al igual que ella, llegamos a un parque cercano a nuestras casas, era primavera por lo que las plantas empezaban a renacer.
-¡mira!-dijo alegre mientras se movía de un lugar a otro sin poder estar quieta.
Levante la mirada confundida y lo note…las flores de los arboles habían comenzado a salir, se veía realmente hermoso, los colores tan brillante de las flores doradas que estaban sobre nuestras cabezas eran simplemente hermoso, único, parecían lucirse, en otros arboles había otras flores, los colores anaranjados y rosados se hicieron presentes, parecía que iluminaban mas que el sol.
Las contemple por largo rato fascinada, una pocas de esas flores se desprendieron con el fuerte viendo, como aun estábamos con el uniforme me senté de golpe en el suelo para que no se me levantara la falta, Maribel me imito sonriendo, sus ojos reflejaban la emoción y alegría que sentía…lo único que pude pensar en aquel momento es que se veía mas encantadora con esa sonrisa.
Me atreví a sonreír mirándola bobamente, ella extendió su mano para tomar una pequeña flor que había caído a nuestros pies, no decíamos nada y para ese momento el ambiente era sobrecogedor, me sentía en paz estando así, junto a ella.
-Anna…-murmuro con un silbido, la mire con atención pues no quería perder detalle de lo que hiciera.
-¿si?-
-¿te dijo un secreto?-menee la cabeza.
-no…-
-¿eh?...¿por que no?...-suspiro de soslayo mirándome rogante.
-si me lo dices ya no seria secreto-mencione sonriéndole.
-…bueno, seria un secreto de las dos-me miro con cierta picardía y travesura, no le entendí por lo que calle para que me explicara.
-bueno…yo, yo creo que esta flor…es igual que tu-levante una ceja confundida, ella se coloco mas cerca de mi, acariciaba los pétalos de esa hermosa flor dorada, con dulzura en sus actos se acerco a mi y beso mi mejilla mientras colocaba sobre mi cabeza a la delicada flor.
-eres igual de linda que…ella-sonrió con tanto cariño que solo pude enrojecer mientras cerraba mis ojos.
Te amo, Maribel.
-¡no digas esas cosas, es vergonzoso!-ella rio felinamente, mientras yo la separaba de golpe.
-¡no te enojes, sabes que no lo hago con mala intención!, ¡eres mi amiga!-tuve el honor de serlo mientras me lo concediste.
-¡tonta…!-suspire rendida para luego tomar la flor y verla, era realmente bonita.
-gracias por traerme…aquí-dije y la abrace con rapidez para luego pararme, ella extendió su mano y la ayude.
-quería que fueras la primera en verla-me miro con esa vivacidad tan suya.
Su alegría era contagiosa, era una chica del amor, era firme y la vez tan bella y gentil, no pude evitar enamorarme de ella, ni de sus acciones, ni de sus atenciones que era lo que más amaba de ella junto con su sonrisa.
-¡espera!-iba caminando delante de ella hasta que me abrazo por atrás y nos pusimos enfrente de uno de esos arboles, ella acomodo la flor sobre mi cabello.
-una flor…para otra flor…-la mire un poco reprochante y luego solo reí.
-ha haha…es una frase usada..haha..-mencione, ella asintió.
-¡pero muy bella y poética!-dijo cantando en esa ultima frase, deje que me abrazara contra su cuerpo mientras le extendía mi celular para que tomara la foto, su sonrisa fue como un rayo de sol, mis ojos solo brillaron con ese sentimiento que cada vez crecía mas en mi pecho…mi amor.
-¡di gato!-
-¿no era queso?-le contradije divertida, ella se quedo pensativa por un momento.
-creo…que si era pero, de todos modos, ¡di gato!-1…2…3…
-¡miau!-maullé.
-¡gato!-al terminar la foto nos reímos a carcajadas…
Maribel imprimió esa foto y yo hice lo mismo, era un dulce recuerdo de ambas, no podía creer que aun tenia esa foto en mi… celular.
Permanecí en casa arreglando varias maletas que deje olvidadas, llevaba el sexto mes de embarazo, la hermosa pancita que tenia mostraba a la pequeña que pronto tendría, Susan había salido hace varias horas, últimamente mi mente volaba, sentí un dolor en mi espalda baja y decidí sentarme, acomodaba una ropa que deje olvidada, entre las prendas encontré algo que no era mío.
-esto es de…-una chaqueta antigua estaba entre mis manos, la reconocí era de-Maribel-seguramente me la trague en alguna confusión.
Las yemas de mis dedos recorrían esa tela, me pregunto…¿y si ella hubiera estado aquí conmigo?, ¿con nosotras…?, su olor quedo impregnado…como una vez ella lo hizo en mi piel.
-Tu madre siempre fue una inconsciente-le mencione a mi pequeña que me dio una patadita como protesta, sonreí y regrese la mirada a la maleta, encontré el marco de una foto…mis ojos repentinamente se llenaron de lagrimas.
-sabes…era inconsciente…hermosa…dulce…y nunca fue nada mío…a pesar de ello siempre me hizo reír, ¡era una real payasa!...- apreté la tela contra mi pecho, sostuve la chaqueta entre mis brazos, y aunque tenia a Susan que me apoyaba no dejaba de sentirme sola, quería verte Maribel, quería saber de tu vida, ¡quería verte reír!, deseaba tan solo tener tu presencia a mi lado, quería mirar tus ojos y saber que todo estaría bien, tan solo necesitaba verte…
-yo..nm..-
-sabes..nmm-apretaba mis labios para humedecerlos…aun me hiere tu recuerdo, aun no quiero dejarte ir…
-de un día a otro me di cuenta que amaba a tu mamá…-la imagen de Maribel traspaso mis sentidos, mi ser-…ella siempre se refugiaba en mi de quienes le hirieran y eso…en cierto modo me molesto-tome aire.
-por que era egoísta y quería que me viera…solo a mi-y aun así-nunca pude decírselo a tiempo…perdóname bebé-me aferraba a esa tela mientras mi llanto solo exploto, me ahogue en sollozos y las lagrimas solo cubrieron mi rostro, sentí otra suave patadita a medida que recordaba los gestos de Maribel, su sonrisa, su mirada tan profunda que me congelaba en el alma, su respirar tan tenue que quise atrapar tantas veces en mis labios.
La soledad me encuentra
y tu no estas aquí
el silencio aprieta
y tu no estas aquí
por que será que amo lo que ya no tengo hoy
me olvide de conquistarte cada noche y así me aleje
con los detalles que tu me pedias y que me guarde.
-si…ella es tu mama…se llama Maribel…-sentí otra fuerte patadita y ahogue mi aliento.
-no tan fuerte…-pedí.
-sabes…la..la extraño mucho-mi garganta tenia un nudo fuerte que me impedía respirar, mis ojos estaban completamente rojos.
-quiero ver a tu mamá…yo…me siento sola…la quiero…-quería sentir que te abrazaba a ti, quería creer que estabas junto a mi confortándome con tu abrazo…pero no, eso nunca sucedería.
-perdón por no darte a tu mamá-yo creí..creí que ese día realmente me amabas, creí que cuando ella me acaricio lo hizo con verdad, lo hizo con amor
Y te perdí
estuve cerca y tan lejos de ti
y no te vi
se me apago a fuego lento tu luz.
y para dos dividí
una historia, un final
que jure que era eterno
pero te perdí.
-no debí aprovecharme de ella…- no debí hacerlo sabiendo que no me amaría, debía entenderlo
Me pare aun con dolor y camine hacia la cama, las manos me temblaban y trataba de respirar bien para no seguir llorando, acaricie mi vientre con sutileza.
-tu eres una bebé inocente…te voy a querer mucho…te lo prometo, te cuídare por ella y por mi…-
Si congele mi espacio
por que lo quise así
ohhh ohhh
y tu no estas aquí
por que será que amo lo que ya no tengo hoy
invente si luche lo suficiente si valió la pena
inventarnos un amor que no supimos descubrir
Y te perdí
estuve cerca y tan lejos de ti
y no te vi
(hoy perdóname yo quiero verte)
se me apago a fuego lento tu luz.
y para dos dividí
una historia, un final
que jure que era eterno
pero te perdí.
-te extraño…Maribel..Te amo-me acosté en la cama mientras suspiraba a corta voz y tenia en mi mente presente siempre tu sublime recuerdo.
Si te perdí
estuve cerca y tan lejos de ti
y no te vi
(hoy perdóname yo quiero verte)
se me apago a fuego lento tu luz.
y para dos dividí
una historia, un final
que jure que era eterno
pero te perdí.