Y aquí estoy yo en esta sala de espera, aguardando por mi persona amada si yo hubiera sabido que las cosas Iban a ser así nunca te hubiera dejado solo, nunca me hubiera ido ni me hubiera hartado de esto pero es que ya no podía más, aún recuerdo ese día, aquel día tan preciado para mí y ojalá, no, estoy seguro que también lo fue para ti aunque a veces no lo recuerdes, aquel día en el que te conocí....
Flash back....
Ese, el día del cumpleaños de mi mama iba a comprar un hermoso ramo de flores para ella, en donde mis padres vivían, mi pueblo natal, era muy conocido por sus campos de flores así que decidí ir al mejor que quedaba en el pueblo podría haber sido muy caro pero siempre quiero lo mejor para ella, ese día un hermoso día de primavera con sus flores al máximo esplendor, rosas por acá tulipanes por haya, todo tipo de flores; entre era un invernadero tan lindo y al lado una casa donde atendía una señora, la señora Kim, era muy amable, ella me conocía desde que era pequeño ya que mis padres eran muy cercanos a ella pero en fin.
estaba buscando las flores que más le gustaran hasta que se me hizo muy curioso, vi a un hermoso chico jugando entre los girasoles llevaba un gorro para taparse del sol ya que su piel se veía tan suave blanca y delicada, también me pude dar cuenta llevaba un overol de jean como los de los granjeros y unas botas curiosas rosadas, se veía tan feliz como si nada más en esta vida importara como si el mundo solo fuera un campo de girasoles bañado de un hermoso sol de primavera, como un niño tan inocente.
-humm jjong que estás viendo-la señora Kim me saco de mi concentración hacia ese chico.
-eh? Yo... Nada nadieee....nada aquí buscando las mejores flores para mi mama-dije con un tono de pena pero ella sabía a quién estaba mirando.
-Kibum! Deja de estar jugando con los girasoles que los vas a estropear- se vio tan lindo cuando la señora le grito, como un niño cuando lo encuentran haciendo una travesura, se quedó completamente quieto y cayó al suelo. Yo corrí a ayudarlo a levantarse.
- estas bien?- le pregunte, era más hermoso de cerca con sus mechones rubios en la frente un poco despeinado y con el gorro a medio caer, sonrojado y con esos ojos, esos ojos rasgados como de un gato pareciesen, pero a la vez esa mirada tan pero tan ingenua como si de un niño se tratase. Nos quedamos viendo los dos un rato con nuestras miradas tan penetrantes.
-hum? Sssiii... Gracias es que a veces soy un poco despistado y torpe- lo ayude a levantarse, hay note que era un poco más alto que yo pero mucho más flaco, su cuerpo era perfecto era bastante flaco pero aun así perfecto, note que le estaba sangrando el codo por su caída.
- Pero mira te está sangrando el codo, como vas a estar bien?- le dije, él se miró el codo como si fuera la cosa más simple del mundo.
- Ah? Aaa eso ... No te preocupes siempre me pasa es algo tan natural para mi ahora, pero dime en que te puedo ayudar?, ya que viniste en mi ayuda no te puedo dejar así como así, así que dime en que te puedo ayudar?- me dijo con una simpleza como si ya nos conociéramos y fuéramos tan cercanos, yo en ese momento le quise decir "vámonos a caminar, conocernos, es que desde que te vi me encantaste" pero no eso sonaba muy precipitado ahora.
- Yo? Eh estaba escogiendo unas flores, es que hoy es el cumpleaños de mi mama y quiero regalarle algo que no olvide nunca, pero como no se mucho de flores estoy un poco confundido- le dije con una mano en la cabeza rascándomela.
- Menos mal porque soy experto en flores vamos y te enseño, pero aun no me has dicho tu nombre, cómo te llamas?- me pregunto dándome la mano.
- Jonghyun... Kim Jonghyun, y tú?- aunque la señora Kim había dicho, no, gritado su nombre, yo me hice el tonto para así hacerle más platica mientas íbamos al invernadero.
- Mi nombre es Kim Kibum pero mis amigos de ciudad me llaman Key así que tú también me puedes decir así, aunque a mi abuela no le guste mucho ese apodo jejeje, a ella le encanta llamarme por mi nombre pero en fin en lo que estamos- quede un poco sorprendido, yo no sabía que la señora Kim tenía un nieto y menos que fuera tan lindo como él.
Entramos al invernadero el sol estaba en su máximo esplendor que le daba un ángulo perfecto en el rostro de Key, como me dijo que lo llamara, significaba que él ya me había tomado como una persona de confianza, la señora Kim no estaba, así que Key se tomó el trabajo de mostrarme la cantidad de flores que habían, habían de todos los tamaños y colores que te puedes imaginar y más, el sabia el significado de muchas.
- Así que no eres de por aquí?- él me estaba hablando de su vida, de que estaba de vacaciones aquí porque se Quería despejar un poco y le encanta la naturaleza , era tan abierto, encantador, despistado , era tan perfecto , cuando me fui a voltear a verle ya no estaba, voltee y hay estaba contemplando unas flores tan lindas con esa sonrisa tan encantadora en él.
- Que flores tan lindas como se llaman? Se ve que te gustan mucho- le dije, el me volteo a ver como sacándolo de sus más profundos pensamientos.
- eh? Aaa estas se llaman tulipanes rojos, mi flores favoritas significan el amor eterno- con el tono en que hablaba y las tocaba se veía tan entregado, sabía que un día no muy lejano se los regalaría.
- mira esas, haya, creo que son perfectas para que le hagamos un buen ramo a tu mama y sería un regalo muy lindo- dijo señalando unas flores eran tan lindas y seguro quedarían muy lindas en un ramo, unas eran blancas, unas color rosa y otras moradas.
- Y esas como se llaman?- le dije tomándolas en mis manos.
- Estas se llaman lisianthus son perfectas para una mujer, estas significan la adoración o admiración sincera- las tomo entre sus manos y fue a armar el ramo se veía tan lindo y con una grande dedicación en su trabajo, le quedo hermoso , las ato con unos lasos morados y rosados y las guardo en una caja rosado pastel.
Después de tanto charlar llego su abuela y se nos unió a la plática ofreciéndonos un poco de café con galletas, ya que yo tenía un poco de tiempo porque la fiesta de mama era por la noche, Iban a llegar una gran cantidad de invitados, familiares lejanos , gente que yo no sabía que existía, también estaba invitada la señora Kim, ella se fue a arreglar al salón de belleza del pueblo y por eso se marchó más temprano que yo, me quede un poco más charlando de cosas de nuestras vidas, nunca me había hecho cercano a una persona tan rápido como lo había hecho con él, y es que su personalidad era única, la forma como se expresaba, reía, hacia movimientos con sus manos era única, perfecta.
Después de tanto hablar ya era hora de irme pero era lo menos que quería hacer, yo me quede sentado donde estaba y él fue a un cajón saco un tarrito de pastillas y tomo dos pastillas y después las guardo en su bolsillo, se me hizo un poco extraño ya que él no era una persona que se veía enferma. Salimos y el me acompaño hasta mi camioneta que era ya un poco vieja.
- Un gusto haberte conocido, me caíste muy bien ojalá no te olvides de mí y vengas a visitarme...- se despidió de mi yo lo detuve, no quería dejarlo, así que se me ocurrió la gran idea de invitarlo a la fiesta, igual un invitado más o uno menos no iba a hacer la diferencia.
- Acompáñame...ven conmigo a la fiesta... Sé que no nos conocemos del todo pero quiero invitarte me caíste súper bien...di que siii, si?- le hice mi mejor cara de súplica, esas que le hacía a mi mama cada vez que quería algo cuando era pequeño.
- No sé... Es que mírame en estas fachas, se ve que va a ser una fiesta importante todos van a ir lindos y mírame yo todo desarreglado, no se- dijo con un tono de preocupación, para mí se veía perfecto y no me importaba como la otra gente lo viera, pero si él se sentía mal así no lo podía permitir.
- Déjame y vamos a tu casa te cambias y vamos a la fiesta si?-.
- bueno pero después me dejas recompensarte por tantas cosas que te puesto a hacer hoy listo?- me dijo y yo encantado, ya sabía cómo quería esa recompensa.
Nos subimos a la camioneta, iba mirando por la ventana, sacaba la mano y la revolvía junto con el aire, me parecía una persona tan pura y buena, yo de vez en cuando le daba miradas, me encantaba apreciarlo, y él me devolvía sonrisas tan bellas y cada vez que las mostraba mi corazón palpitaba más y más; llegamos a su casa que quedaba en el mismo sitio donde yo vivía, entramos el subió las escaleras a su cuarto yo me quede en la sala sentado en un sofá viendo la TV.
Sentí unos pasos bajar y después voltee a mirarlo, wow se veía tan lindo, no era una belleza recargada de maquillaje artificial, todo lo contrario, solo se había maquillado sus ojos, llevaba una camisón holgado blanco el cual dejaba ver uno de sus hombros en su cintura llevaba un cinturón que dividía el camisón en dos y unos jeans muy ajustados, es su cabeza llevaba una cinta de su mismo color de cabello amarrada en todo su cabello y frente, se veía tan hermoso.
- Si estoy presentable?- me dijo con un liguero sonrojo en sus mejillas, de un momento a otro me quede observando sus labios, tenían forma de corazón, y un poco de brillo labial en ellos, se veían tan besables.
- Jjong? Jjong! Me escuchas? Tan feo quede que ni sabes que decirme?- dijo con una cara de tristeza.
- Como puedes decir eso... Estas espectacular-cuando lo dije me regalo una de sus hermosas sonrisas esas que me dejaban embobado, hasta que un ruido me saco de mis pensamientos.
~Ring, ring ring~ era mi celular.
- Jonghyun dónde estás? todos te están preguntando tu mama ya se está poniendo nerviosa- era minho mi mejor amigo y compañero de universidad, a él le contaba todo y vivíamos en el mismo edificio cerca de la universidad en Seúl , mi mama lo invito porque lo apreciaba demasiado, y él ni perezoso no se negó.
- Ya voy para haya, diles que estoy bien y que llevo a alguien si? Bye.
En ese momento key me tomo de la mano y me llevo hasta la camioneta, eran tan suaves y encajában perfecto como si de dos piezas de rompecabezas se tratasen, pero algo se me hacía muy raro una persona no puede ser tan perfecta, pero parecía que el sí lo era, era impresionante.
Bajamos y entramos, esa casa estaba llenísima, había demasiada gente, menos mal teníamos un jardín grande en el cual Iba a ser la fiesta, en el centro había una gran pista de baile, alrededor mesas y sillas y con una decoración de flores y luces como las de Navidad por todas partes.
Por el primero que fui recibido fue por minho llego corriendo a jalarme pero se detuvo al notar la presencia de key, es que quien no, se veía hermoso.
- Jonghyun! Por fin llegaste tú mama pensaba que te habías escapado yyy.... Oye quien es el?- lo último lo dijo en un susurro, a veces podría llegar a ser tan torpe.
- Mucho gusto Kim Kibum, soy amigo de jonghyun- él se presentó con esa hermosa sonrisa.
- Mucho gusto Minho, el mejor amigo de Jonghyun, bueno jjong tenemos que entrar ya le van a partir el pastel a tu mama, rápido tenemos que buscar las velas.
- Ve entrando a la casa yo te alcanzo y no te me vayas a perder si?- le dije el asintió.
- si pero vuelve pronto no quiero que mi abuela me vea solo, se podría poner furiosa - me dijo con sierra timidez.
Entro y nosotros subimos a buscar las velas después Minho no paraba de preguntarme sobre Key, que donde lo había conocido, que porque me metía con extraños, agg me tenía arto, sabiendo que yo nunca le pregunto por sus romances, bajamos y le cantamos el feliz cumpleaños a mama, ella soplo las velas, se veía tan feliz, después se puso más alegre la fiesta todos se pararon a bailar, yo seguía aquí sentado buscando a key ya que no lo había visto por ningún lado, creo que hasta se fue.
- Vamos a bailar!-por fin lo vi me jalo del brazo hasta la pista de baile, se veía tan alegre.
Estaban tocando una de esas canciones alegres de mi pueblo, la música de allí era el country así que todos salieron a bailar él estaba feliz bailando conmigo y yo no cabía de la alegría, nunca me había fijado en un chico, siempre eran mujeres de una noche, la única que había durado más fue como por dos o tres meses, pero siempre había ese vacío en mí, nunca llegue a pensar que un chico como él me iba hacer sentir tan completo, tan lleno.
Después de tanto baile alegre, tocaron una canción más lenta, pensé que key no quería bailar conmigo ese tipo de canciones así que me fui alejando de la pista de baile pero él me tomo de la mano y me miro como diciéndome, "quédate, bailemos esta", yo con todo gusto acepte, lo acerque a mí de la cintura y el paso sus brazos por mi cuello y me miraba, después se fue acomodando en mi pecho, sentía su respiración, era como una caricia para mí, su piel era tan suave, y su olor, el desprendía cierto olor a fresas, ese olor me traía loco.
- Hueles muy rico- dijo el con una cara de embobadito, estábamos tan cerca.
- Gracias, tú también hueles delicioso- dije acomodándole uno de sus mechones en su frente. Todo me parecía que estuviera pasando tan rápido, pero así era el amor, no?.
- Kim Kibum!!! Que haces aquí?- su abuela lo había encontrado y nos estaba haciendo una escenita.
- Nnaaddaaa abuela solo quería salir a divertirme un poco- el de una vez se separó de mí, estaba temblando. Su abuela lo jalo y lo alejo un poco pero yo podría seguir escuchando lo que decían.
- Ya sabes las condiciones de tus papas para que te puedas quedar, además sabes que puede pasar en cualquier momento, si te tomaste las medicinas por lo menos?.