Gracias por el afrodisiaco
Al salir de la radio Ryeowook y yo nos encontramos varias fans en la puerta, ese día teníamos prisa pues en la tarde teníamos un ensayo, pero por unos minutos logramos hablar con las fans. Una de ellas me miraba raro, no me brindaba mucha confianza pero todo cambio una vez me paso una caja de chocolates, todo se arregla con unos chocolates.
Le sonreí, por cortesía los abrí y le ofrecí pero ella negó rápidamente empujado la caja hacia mi indicándome que yo comiera, y aunque el manager nos tiene prohibido comer lo que nos dan las fans cogí uno y rápidamente me lo metí a la boca, era un sabor que jamás había probado, realmente era delicioso.
“¿Qué clase de chocolate es este?” Pregunte metiéndome otro chocolate a la boca.
“¿Te gustan oppa?” Pregunto sonriendo raramente, no sé con ¿Lujuria? Pero a mi realmente no me importó y me metí otro chocolate a la boca.
“SI” dije asintiendo “Dime de donde los sacaste…” Dije haciendo un puchero y metiéndome otro chocolate en la boca. Estaban realmente deliciosos, no podía dejar de comerlos, eran tan adictivos.
“Oppa los hice yo” Dijo acariciándome el brazo.
“Hmm” Dije mientras me metía otro dentro de la boca “¿Cómo los hiciste?”
“Es un secreto” Dijo imitando mi puchero.
“Vamos… Dime, no se lo contaré a nadie” Dije mientras me comía el ultimo chocolate de la caja.
En ese momento llego la camioneta por nosotros y el manager nos gritó porque íbamos tarde.
“¡Oppa, no te vayas! Yo tengo la receta ¡Ven!” Me dijo nerviosa jalándome del brazo.
“Lo siento, me tengo que ir. Mañana me la das ¿Si?” Dije soltándome de su agarre.
Comencé a caminar nervioso a la camioneta y antes de entrar escuche un grito de ella.
“¡TENIAN AFRODICIACO! ¡OPPA TENGO UN CUARTO QUE NOS ESPERA!” Gritó y corrió hacia mí, no le puse cuidado a sus palabras solo subí y cerré rápidamente la puerta de la camioneta, la cual no espero y arranco rápidamente.
Me senté, me puse mis audífonos y comencé a pensar en aquella fan loca, ¿Cuáles habían sido sus últimas palabras? ¿Tenían qué? ¿Afrodisiaco? ¿Qué rayos era eso? En mi cabeza no paraban las preguntas.
“¿Sungmin?” Me sacudió Ryewook preocupado.
“Wookie, ¿Qué es un afrodiciaco?” Le pregunté quitándome los audífonos.
“Es una droga” Dijo saliendo de la camioneta con una sonrisa.
“Y… Y ¿Qué hace?” Pregunté preocupado, deteniéndolo fuera de la camioneta.
“Es una droga que…” No término y estallo en risas.
“No juegues conmigo Ryeowook” Dije ya enojado, yo todo preocupado porque había consumido esa cosa, afrodisiaco y el burlándose de mí.
“…Excita” Dijo siguiendo su camino.
Ese tonto me hace esa clase de bromas aún sabiendo que soy su hyung y se va como si no pasara nada pero claro como él no fue el que comió los chocolates.
Luego de un rato de pensarlo no le preste mayor atención y fui al salón de prácticas al llegar encontré a Kyuhyun, Eunhyuk, Donghae y Ryeowook calentando mientras me esperaban, corrí y me les uní, pero al poco tiempo comencé a sentir calor por todo mi cuerpo en especial mi parte baja.
"Chicos ensayaremos la coreografía" dijo Eunhyuk mientras nos acomodábamos a la falta de miembros.
Mi cuerpo ardía con cada rose, choques eléctricos se paseaban por todo mi cuerpo. Pronto paramos a descansar un rato y yo jadeante y sudando me tire al piso, los demás miembros también se sentaron y comenzaron a hablar entre ellos, para mi mala suerte, Kyuhyun al verme solo se acercó a mí.
"Hyung, ¿Qué te sucede hoy?” Dijo mirándome “Estas sudando muy fácil” Sonrió al verme.
“No es nada Kyu” Respondí jadeando.
“Hyung Te conozco…” Dijo y me acaricio el brazo. No puede evitarlo, un gemido salió de mi boca “Hyung…”
“Kyuhyun, dime una cosa” respondí jadeando “¿Qué es un afrodisiaco?”
“Hyung, es una droga que hacen que las personas tengan más apetito sexual” Respondio seriamente “No me digas…. ¿Quién te dio?” preguntó preocupado.
Yo no respondí, todo mi rostro ya estaba rojo.
“¿Donghae-hyung podemos parar el ensaño por hoy? creo que me siento mal” dijo tocándose la cabeza.
Donghae miro a Eunhyuk preguntándole con la mirada, este solo asintió “Claro. En ese caso nos retiramos” dijo Donghae levantándose.
En menos de cinco minutos los demás ya se había ido quedando nosotros dos solos.
“Déjame ayudarte” Dijiste mirándome seriamente a los ojos, haciendo que me avergüence por tus palabras ¿Acaso sabes lo que estás diciendo? ¿Sabes lo que significa que me brindes tu ayuda?
“Kyuhyun-ha ¿Acaso sabes lo que estás diciendo? No digas tonterías...” Dije jadeando y sin fuerzas. Realmente mi parte baja dolía, necesitaba tocarme y liberar la tención. Pero cómo hacerlo si seguías sin moverte mirándome fijamente.
“Sungmin Hyung… claro que se lo que estoy diciendo… si no liberas atención ahí abajo… dolerá… al menos debes correrte una vez” Dijiste sin una pizca de pudor. Sentí mi rostro arder y más cuando vi que te acercabas a mi gateando.
“Haa… haz lo que quieras…” Ni siquiera esperaste a que terminara la frase, pusiste tus manos sobre mi hombría. Gemí fuertemente y mi cuerpo tembló, necesitaba esas caricias en esa parte de mi cuerpo. Tu mano se metió por debajo de mis pantalones acariciándome más fuertemente.
“Ahhh… Ahhhh... Ahhh~~ Kyuhyun-haa~~”No gemía gritaba y mi cuerpo se movía con tus caricias buscando mas contacto, buscando mas placer. Sentí tu mano meterse por debajo de mi ropa interior y ya no podía mas, nunca me había sentido tan bien. Solo bastaron unas cuantas caricias más para que llegara al orgasmo.
“Eso fue rápido” Dijiste haciendo que me avergüence por tu comentario. Abrí los ojos que no sé en qué momento los cerré y vi como seguías viéndome, acercaste tu mano, que estaba sucia de mi esencia, a tu boca y empezaste a lamerla mientras tus ojos no dejaban de mirarme. Una corriente recorrió mi cuerpo era vergonzoso verte hacer eso pero a la vez excitante.
Bajaste la vista y te diste cuenta que mi hombría había vuelto a despertar, sonreíste de lado y te acercaste mas a mí.
“Veo que aun no se soluciona… debo hacer una mejor trabajo entonces…” Dijiste acercando tus manos a mi pantalón. Los bajaste hasta mis rodillas y acercaste tu cabeza, cerré los ojos sabiendo lo que vendría y por más que mi mente me decía que estaba mal, mi cuerpo lo deseaba demasiado.
Sentí tu lengua en la punta de mi hombría, jugueteabas delineándola y bajando a lamer toda la extensión. Mi cuerpo dejaba de estremecerse fuertemente y no podía parar los gemidos que nunca esperé escuchar salir de mis labios. Y de un momento a otro sentí toda la calidez de tu boca envolviéndome, subías y bajabas apretando de vez en cuando tus labios jugando conmigo, haciendo que mi cuerpo solo quieran más de ti. Y nuevamente me corrí por tus caricias.
Mi cuerpo aun ardía, aun sentía ese calor. Y nuevamente mi miembro se puso erecto. Tape mi cara con mis manos de la vergüenza.
“No te preocupes hyung… yo aun quiero seguir ayudándote” Dijiste tratando de sacar mis manos de mi rostro. Pero como no lo lograste bajaste tus manos por todo mi cuerpo tocando todo sin que quede lugar que no tenga tus caricias.
Nuevamente gemía, pero no quiera verte a la cara, ya no soportaría esta vergüenza. Sentí tus manos en mi pantalón y te deshiciste de ellos junto con mi ropa interior. Tus manos se acercaron a los bordes de mi camiseta y lentamente me la fuiste sacando. Haciendo que mis manos se alejaran de mi rostro y te vea directamente.
Me tenías completamente desnudo, cogiste mi brazo y me levantaste. Me sentaste y te pusiste atrás mío con las piernas abiertas, yo estaba adelante tuyo, mi espalda tocaba tu pecho y abriste mis piernas. Tu mano levanto mi mentón.
“Mira Hyung… Mira esa hermosa vista” Dijiste susurrando al lado de mi oído. Y al levantar la vista, me di cuenta que estábamos frente al espejo. Podía verme completamente desnudo sentado entre tus piernas, con mis piernas abiertas, mi miembro erecto y sucio con semen por los anteriores orgasmos. Tu atrás mío, tan cerca de mí y con tu mentón apoyado en mi hombro.
Tus manos bajaron a mi miembro y empezaste a masturbarme, mi cabeza la tira para atrás acomodándome entre tu hombro y tu cuello. Volteaste el rostro al verme así y me besaste, fue tan dulce y tierno el beso que me sorprendí.
“Kyuhyun-haa~~…. Kyuhyun-haa~~” Era lo único que salía de mis labios, y tu sonreías feliz al escucharme.
“Haa... Hyung estas tan caliente y tan duro~~… esa droga sí que es fuerte~~” Decías mientras mirabas fijamente mi miembro y nuestro reflejo en el espejo. Yo solo cerraba mis ojos por la vergüenza.
“Mira Hyung… como esta tan húmedo y pegajoso… hasta parece que brillara con la luz… no te pierdas esta hermosa vista Hyung… Sabes Hyung tu semen tiene un sabor tan dulce y delicioso” Dijiste la última frase susurrando en mi oído y besando m mejilla lentamente acercándote cada vez a mis labios. Volteé mi cabeza para hacerte más fácil el besarme. Me deje llevar en ese beso que cada vez era más apasionado, abrí mis ojos lentamente y pude ver que tú seguías viéndome intensamente, me perdí en tu mirada y aprovechaste para morder mi labio inferior y poder poseer mi boca, tu lengua recorría cada parte sin dejar nada a la imaginación.
Sentía que nuevamente iba a llegar al orgasmo por esas gloriosas caricias, pero dejaste de tocarme. Levante el rostro y por medio del espejo me di cuenta que te estabas deshaciendo de tus ropas, te alejaste un poco de mi para quitarte la camiseta y tu pantalón junto con tu ropa interior.
Seguí todos tus movimientos por el espejo, vi que estabas excitado, tu miembro estaba completamente erecto. Te volviste a acercar a mí para regresar a la posición anterior. Yo entre tus piernas al frente del espejo. Vise mi rostro medio sorprendido por tu excitación y te acercaste a mi oído
“¿Crees que puedo ayudarte y verte llegar al orgasmo dos veces sin excitarme?… no soy de piedra Hyung… aun que sabes Sungmin Hyung… solo me basta verte desnudo para ponerme así de duro” Susurraste mordiendo suavemente el lóbulo de mi oreja.
“Ahora… te haré disfrutar en otro lado… Minnie~” Tus palabras siempre sin pudor hacían que me excitara mas, hacia que pierda el control y dejarme sin palabras.
Con una mano acariciabas todo mi torso deteniéndote a jugar con los botones rozados que adornaban mi pecho. Tu otra mano bajaba lentamente y rozo mi entrada dando círculos, acariciándome.
De mis labios salían suspiros hasta que sentí un dedo tuyo entrar en mí. Tu otra mano cogió mi mentón y me obligo a ver por el espejo como tu dedo entraba y salía de mí.
“Mira hyung… tu interior me pide más...” Y ni bien terminaste de hablar con una sonrisa en tus labios metiste dos dedos más dentro de mí. Era extraño pero solo sentía molestia no dolor. Sera porque estoy tan excitado que no siento el dolor.
“Hyung… tu interior succiona tanto mis dedos que ya quiero estar dentro de ti~~” Dijiste disminuyendo la velocidad de tus dedos para luego sacarlos. Cogiste mis caderas y me levantaste un poco cerrando un poco tus piernas y apoyándome en ellas. Tu miembro rozaba mi entrada y mi hombría.
Empezaste a moverte, a rozarte conmigo, me excite más al sentir la dureza de tu miembro contra el mío. Y la excitación aumentaba más al ver todo este roce de pieles a través del espejo. Podía ver como hacías movimientos con intenciones de entrar en mí pero solo rozabas la punta de tu hombría en mi entrada.
“Ahhh~~ Kyuhyun~~ Ahhh~~ entra en mi Kyuhyun~~~ entra en mi~~” Decía viéndote a los ojos atreves del espejo, tu sonrisa apareció y tu mirada me acariciaba por completo. Levantaste mis caderas y pusiste la punta de tu miembro en mi entrada.
“No te pierdas de este magnífico momento Hyung… porque a partir de ahora estaremos unidos por siempre” Dijiste haciéndome ver como entrabas lentamente en mi. Te tenía completamente dentro de mí. Era una sensación que me encantaba, dolía fuertemente, tanto que había perdido la excitación de momentos antes, pero me encantaba. Amaba el hecho de estar unido a ti.
“Ahhh~~ Minnie~~…. Tan caliente, me estas envolviendo por completo… tus paredes no me dejan salir de ti… estas tan estrecho… mira hyung te estás volviendo a poner duro por tenerme dentro de ti… y eso que todavía no me muevo… Minnie~~” Tu voz ronca, tu cuerpo caliente rodeándome por completo, tu miembro quemando mi interior y tus ojos viéndome directamente me hicieron sentir amado.
“Di mi nombre hyung… una y otra vez… hasta que ya no puedas hablar más...” susurraste roncamente y empezaste a embestirme más rápido y fuerte, tus gemidos roncos invadían mi ser como un afrodisiaco.
“Kyu~~~… Kyuhyun… Kyuuu~~~” Gemía tu nombre sin parar y veía en tu rostro como eso te gustaba. Tus ojos se cerraron y tus brazos me aferraron mas a ti haciendo las embestidas no tan profundas pero aun deliciosas.
Abriste tus ojos y me viste sonriendo, cogiste mi mano y hiciste que tocara mi miembro, tu mano encima de la mía me incitaba a masturbarme.
“Vamos hyung… mastúrbate para mi…” Y moviste tu mano rápidamente junto con la mía. No entiendo como no tienes vergüenza y puedes decir ese tipo de cosas. No entiendo cómo me dejo llevar por ti y hacer todo lo que me pides. No entiendo porque no puedo dejar de sentirme feliz y amado en este momento.
“Cambiemos de posición hyung… divirtámonos un poco mas antes de terminar...” Dijiste saliendo de mi haciendo que un gruñido se me escapara y un puchero se apoderada de mis labios.
“No te preocupes mi querido y amado hyung que ahorita vuelvo a entrar en ti” Sonreíste y besaste mis labios deshaciendo el puchero. Me arrodillaste en el piso aun frente al espejo por impulso puse mis manos en el piso para apoyarme quedando en una posición un tanto vergonzosa.
Te pusiste atrás mío y abriste mis piernas, te arrodillaste y cogiste mis caderas y de una sola embestida entraste fuertemente en mí. Tocaste algo dentro de mí que hizo que me sienta tan pero tan bien que llegue al orgasmo inmediatamente.
“Ohhh Mi Sungminniee aun esta tan exitadoo que se vinoo~~” Canturreaste en mi oído mientras empezabas a embestirme sin piedad, nuestros cuerpo se balanceaban y podía verte a través del espejo esa expresión de satisfacción total al tenerme totalmente sometido.
“Ohh Minnie mira tengo una hermosa vista puedo ver como entro y salgo de ti y a la vez ver tu hermoso rostro sonrojado y jadeante. Creo que esta posición me gusta mucho, tenerte en cuatro recibiéndome tan fácilmente” Solo podía verte y ver el movimiento de nuestros cuerpos unidos moviéndose sin cesar.
Tu mirada era tan penetrante que no podía evitar estremecerme, esos ojos me decían que me amaban y los míos te besaban. Cogí una de tus manos que estaban en mi cadera y la puse sobre mi miembro haciendo que acaricies mi intimidad. Sonreíste y me diste placer moviendo tu mano al ritmo de las estocadas.
Una y otra vez entrabas y salías de mí, me sentía en una nube de placer y amor. No quería parar nunca pero sabía que era imposible mi cuerpo me decía que pronto llegaría al final.
“Kyu~~ ya… no... Puedo más ~~” Dije con las pocas fuerzas que me quedaban. Apretaste fuertemente mi miembro para que me duela y pueda aguantar un poco más.
“Todavía no hyung espera un poco mas… lleguemos juntos al orgasmo” Intente aguantar todo el placer, pero tu aun seguías acariciándome, embistiéndome a una velocidad increíble. Me era imposible.
“Noo Kyuu~~ ya no puedo~~” Me levantaste y quedamos los dos arrodillados. Tus manos en mis caderas hicieron que me des unas fuertes y muy profundas embestidas. Sentí mi interior contraerse y envolverte. Tu miembro palpitaba dentro de mí. Llegue al orgasmo y delicioso y exquisito orgasmo. Basto un segundo para sentir en mi interior tu caliente esencia marcarme por completo.
Tus brazos me abrazaron para sostener mi cuerpo sin fuerza alguna. Disfrutamos el post orgasmo, unidos, esperando que nuestras respiraciones se normalicen. Cogiste mis caderas con tus manos y saliste dentro de mí. Pude sentir como un líquido caliente se escurría por mis piernas.
“jejej mira hyung te ves tan sensual y erótico así” Dijiste mostrándome la imagen en el espejo. Mi cuerpo desnudo derramando tu semen de mis piernas y el mío pegado por todo mi torso. La vergüenza que había perdido desde hace rato volvió a mí y me tape los ojos con las manos.
Separaste mis manos de mi rostro y me volteaste para que te vea, me besaste tierna y dulcemente saboreando mis labios y dejando que yo saboree los tuyos.
“Kyu… tu… ¿Me amas?” Dije cuando terminamos de besarnos mientras te veía fijamente y mi rostro se ruborizaba cada vez más
“jeje Sungmin hyung eres un poquito lento jejej Pensé que te habías dado cuenta que te amo desde que te pedí ayudarte con tu problemita jajaja” Me besaste nuevamente acariciando con tus manos mis mejillas.
“Te amo Kyuhyun” Solté sin más lo que mi corazón me decía. Sonreíste y besaste mi frente, mi mejilla y volviste a besar mis labios.
“Mi Sungmin, te amo” Cantaste para mi tu declaración, mi corazón se emocionó y unas lagrimas recorrieron mis mejillas.
Me ayudaste a limpiarme y a vestirme. Me dejaste recostado en el piso mientras tú terminabas de limpiarte y cambiarte. Me ayudaste y salimos del salón de prácticas.
Paraste un taxi y mientras este se cuadraba escuchamos la voz de una chica gritar mi nombre, era que le que dio el afrodisiaco. Se acerco a nosotros corriendo.
“Ella... ella me dio esa droga” Dije por lo bajo. Volteaste a verme y sonreíste mientras me metías al taxi.
La chica se acerco corriendo, agitada. Antes de que ella pudiera hablar te adelantaste y dijiste aquellas palabras que la dejaron helada y a mí con un sonrojo y una sonrisa en los labios. Para luego subir al taxi e irnos a nuestro hogar.
“Gracias por el afrodisiaco que le diste a mi hyung, realmente lo disfrute”
FIN