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Colina melancólica por Tierna Kikyo

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Notas del capitulo:

Regalito de Halloween y Día de muertos~ Pásenla bien ;D

Se volvió con lentitud y lo encaró con esa misma expresión.

 

-Alec...cuanto tiempo...ya me di cuenta de que no acabaste siendo un fracasado como predijo mi padre...después de todo...- Lo rebasaba en altura por una cabeza entera y tenía la espalda más amplia, pero si se les miraba de cerca, los dos se parecían demasiado.

 

-No me digas Alec, imbécil...- Siseó, lo odió todavía más al recordar tan vivamente la imagen de su padre, viéndolo del mismo modo despectivo y llamándolo por su nombre como si del nombre de la creatura más repulsiva se tratara. -¿Qué mierda haces aquí? ¡Y encima con ella!-

 

-¿Yo?...lo que me viene en puta gana, como siempre... ¿Tienes acaso problemas con eso, Alec?...- Lo llamó así otra vez, sonriendo perverso, paladeándose la rabia del otro, sintió mucha nostalgia por esas riñas, hacía muchos años que nadie le hablaba así.

 

-Pendejo... ¡Estás pendejo si piensas que me voy a quedar de brazos cruzados! Eres la peor escoria que he conocido en mi vida, dime, ¿Ella lo sabe? ¿Sabe la basura que eres?...- Apretó los puños, sumamente encabronado, ahora entendía que había estado viendo a Noodle a sus espaldas y que seguramente la chica no sabía nada en absoluto.

 

-¡Jaja! Ay Murdoc, pero si tú nunca te haz quedado atrás, siempre quisiste seguirme, ser yo... ¡Y ahora mírate! lo hiciste mejor de lo que pensé...-

 

-¡Ya cállate! Cállate o voy a encargarme de que ya no puedas decir una sola puta cosa más en toda tu jodida vida...-

 

Hannibal no se amedrentaba ni un poco ante él, seguía rebosante de confianza con esa sonrisa burlona y autosuficiente -¡Venga hermanito! Demuéstramelo, a ver si ya dejaste de ser un enclenque debilucho...- Subió los puños sin importarle.

 

Murdoc tampoco lo pensó dos veces y le lanzó un golpe a la cara, el mismo que Hannibal esquivó y se lo regresó, volteándole el rostro con el impacto. Alec se tambaleó un poco pero pareció enojarse todavía más y no retrocedió, más bien volvió a tirarle otro golpe, Hannibal se lo bloqueó pero no predijo la siguiente patada que le dio en la boca del estómago. Pareció sacarle el aire levemente porque el mayor se encogió sobre si mismo un poco, lo que le dio oportunidad a Murdoc de volver a golpearlo en la cara, entonces Hannibal se molestó bastante y lo sujetó de las ropas con un brazo para intentar golpearlo con el otro, pero Murdoc estaba demasiado furioso y forcejeó con él con ambos brazos mientras le tiraba patadas y pisotones a las piernas hasta que lo tumbó. Todo pasó tan rápido que en cuestión de medio minuto Hannibal estaba sobre el piso y Murdoc sobre él, pero luego Hannibal lo pateó en el estómago y se lo quitó de encima, ahora siendo él quien se le subió y le siguió golpeando la cara, hasta que Alec le sujetó rabiosamente los puños y empezaron a forcejear de nuevo.

 

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2D había dicho las pocas líneas de aquella letra con un rostro perdido en la música, era delicioso verle tocar porque poéticamente era como si las melodías le hicieran el amor, lo perdían, lo embriagaban y era tan perfecto en el escenario que a cualquiera lo atraía bajando de allí. Pero la verdad la actitud de Noodle ya comenzaba a avergonzarlo y comenzó a sonrojarse, desviando la mirada como quien no quiere la cosa, al escuchar que debía llevarla a donde Hannibal entonces la tomó firme de la cintura y recogió sus piernas para cargarla abajo del escenario sentándola junto a Hannibal en la barra -Mucho gusto- Le dijo desviando la mirada, el sujeto que parecía ser la nueva entretención de Noodle era el hombre más apuesto que había visto nunca después de Murdoc, claro. Su corazón se agitó, algo en él se le había hecho familiar y no lo pudo ver a los ojos.

 

-Ah sí, Hannibal, él es... bueno era 2D- Le dijo observando como 2D se iba corriendo por ahí -En fin...- Comentó decaída tomando otra botella de tequila y abriéndola temerariamente con los dientes para comenzar a bebérsela, se había acabado la anterior por lo que ahora necesitaba otra, cuando comenzó a beber a boca de botella y llevaba más o menos la mitad Hannibal empezó de aburrido a molestar, se empezó a hacer a un lado con todo y botella abrazándola contra su pecho -Oee, oee ieee Hannibal-san... onegaaaih- Le dijo negando decaída pegando su cabeza contra la pared y suspirando mientras cerraba los ojos, de repente escuchó que Hannibal hablaba con alguien, ¿Murdoc? Comenzaba a perder la noción de lo que hacía. -¡Muddy ven! ¡Vamos a beber ¿Vale?!- Le dijo animada ignorando que se peleaban porque la música fuerte comenzaba a sonar en un triste pop indie en español, Noodle ya sabía varios idiomas y a veces se le cruzaban los cables, pero estaba segura de que esa canción se la sabía.

 

-¡Es raro el amor! ¡Que se te apareceee cuando menos piensaaas!- Comenzó a cantar recargada contra la pared abrazando su botella -Amor... deja de hablar con ese baka, ven... ven...- Le dijo de repente azotando la botella por ahí y levantándose a meterse en medio de esos dos para pegar su cuerpo menudito al de Murdoc confundiéndolo con Hannibal, claro. -Ya ¿vale?...- Le musitó acariciando los cabellos de su nuca y aferrándose a la pretilla de su pantalón porque apenas si podía andar -Estoy mareadah... no creo que eso sea bueno, mejor ya lárgate Muddy eresh... un ser despreciable...- Le dijo a Hannibal mientras restregaba su frente ligeramente contra el hombro de Murdoc.

 

Murdoc había logrado aventar a Hannibal un poco para atrás cuando Noodle fue a meterse entre ellos, sintió todo su cuerpo estremecerse cuando se le repegó así -...demonios, ¡Noodle! ¡Apártate!...- Hacía mucho tiempo atrás que alguna vez había fantaseado con la oriental y no entendía porque justo en ese momento se acordaba, quizá porque se avergonzó profundamente de si mismo, puesto que ya no era más ese hombre viciado sin ninguna especie de restricción a su retorcida perversión...ahora solamente la veía a Haru como su hija, como su niña que acababa de decirle "amor" a ese malnacido despreciable que estaba ante él, metiéndose a su fiesta, ¡Inmiscuyéndose en su vida una vez más! Como siempre, con el único devoto objetivo de joderla. Sujetó la cadera de la menor tratando de manetenerla alejada y luego subió la mirada a Hannibal, clavándole unos ojos de asesino en serie que daban miedo.

 

Alguien se dio cuenta de que peleaban y fue a avisar a la otra habitación, por lo que los guaruras de algunos de los representantes, llegaron corriendo y un par ayudó a levantarse a Murdoc y a Noodle mientras el resto se colocaba delante de ellos en barricada. -¡Saquen a este pendejo de aquí! Y que no regrese...- Les ordenó Murdoc en tono molesto, asiendo con fuerza a Noodle contra su cuerpo mientras fulminaba a Hannibal con la mirada y los guaruras iban a sujetarlo entre todos. ¡Maldita sea! Estaba tan furioso, le ardía la rabia en el estómago con intensidad.

 

Hannibal se sorprendió de que Murdoc hubiera podido darle buena pelea, todos esos años que no lo había visto al menos habían valido un poco la pena y ahora que tenía la nariz arreglada se parecía más a él, por mucho que le pesara. Cuando se debatió con tanta furia debajo de él que logró aventarlo hacia atrás, fue cuando Noodle se metió entre ellos y primero puso una cara de no dar crédito a lo que veía, hasta que entendió que lo estaba confundiendo.

 

-Ah...descuida, eso era para mí- Le dijo poniendo esa pose irritante de ser el más deseado del mundo, cuando ella lo llamó "amor", luego se cruzó de brazos y se rió con sarcasmo a lo siguiente que dijo, "ser despreciable". -Ella tiene razón...- Convino con gracia, hasta que entraron esos gorilas a arruinar la diversión. Se le pusieron dos a cada lado y lo sujetaron de los brazos, no dejó de mirar a Alec con una sonrisa ladeada divertida y maliciosa, durante todo el trayecto en que los guaruras lo arrastraron fuera. -¡No vas a poder evitarlo, Alec!- Le gritó antes de que lo sacaran a empujones, digamos, que no era algo nuevo que lo echaran por la fuerza.

 

La chica escuchó que hacía que lo sacaran y por ebria que estuviera se dio cuenta de que había abrazado al equivocado, se volteó a la fuerza entre los brazos ajenos y miró que "apresaban"  a su Hannibal y se enfureció pisándole un pie a Murdoc para que le soltara y corriendo a impulsarse para caer sobre una mano y saltando en el aire maravillosamente atizándole una patada a uno de los sujetos, cayó algo torpe en el piso y se incorporó tumbando a uno con el puño y mirando amenzante al otro.

 

-Largo si no quieres perder la nariz, idiota- Le gruñó y el tipo se fue corriendo, faltaba uno que hizo ademán de sacar su arma por lo que Noodle reaccionando a su entrenamiento dio un golpe a su brazo quitándole la fuerza y después golpeando su nuca haciendo que cayera fulminado. -Al carajo, hijos de puta- Dijo mirándolos feo -Me largo- Le dijo a Murdoc quitándose el tacón que le quedaba y lanzándoselo sin atinarle -¡No te metas en mis asuntos ¿Oíste?!- Le gritó molesta caminando torpe y descalza por la acera hasta su motocicleta sacando las llaves de su pecho y abriendo la cajuelita de su motocicleta para sacar un short pequeño de mezclilla y ponerselo torpemente, tenía planeado subir a la motocicleta pero ni ebria iba a enseñar todo en el tráfico con ese pequeño vestido.

 

-¡Auch! ¡Regresa acá! ¡Noodle!- Trató de retenerla pero ya no pudo hacer nada por los pobres hombres que tenían sujeto a Hannibal y después el tacón de su zapato le pasó rozando por la mejilla de modo temible. -¡No seas estúpida, no sabes en lo que te estás metiendo!- Le gritó también, quedándose ahí trabado del coraje mientras la chica se iba de forma rebelde con su hermano, demonios, se le hizo ácido la boca al pensar eso "su hermano", hubiera preferido mil veces ser huérfano e indigente en su infancia, a tener que lidiar con el "legado Niccals" el resto de su vida.

 

Hannibal nada más levantó las manos en son de paz cuando la vio golpear a los sujetos y se rió divertido de que incluso ebria era toda una ninja digna de temerse. -Por eso me encantas...- Le dijo en tono bajo mientras después le lanzaba su zapato a Murdoc y se iba caminando. Vio que tenía planeado subirse a la motocicleta y fue a detenerla.

 

-¡Wow, no! Espérate tigresa...- Se burló de como ella le decía "tigre" cuando hacía cosas temerarias. La tomó de la cadera cuando se había subido al asiento con el short puesto y la jaló hacia atrás, para que le hiciera espacio, luego se subió al volante delante de ella. -Agárrate fuerte...- Le indicó, pasándole su casco y poniéndose el suyo, con toda la calma, pues adoraba ese modo en el que Murdoc estaba trinando de rabia, mirándolo mientras hacía eso. -¡Adiós hermanito!- Se despidió de él levantando una mano en el aire, mientras hacía rugir la moto con la otra y se levantaba sobre la llanta trasera algunos metros, antes de finalmente alejarse a toda prisa, dejando un rastro de humo y polvo detrás suyo.

 

-En fin...al carajo, es su problema...- Trató de engañarse a si mismo mientras se daba la media vuelta y planeaba largarse ya.

 

-Oh...¿Quién es ese hombre Murdoc? ¿Es peligroso? ¿Quieres que mande a que los sigan?...- Se acercó uno de los representantes a hablarle.

 

-No...es...un conocido, sólo tuvimos una leve riña, es todo...no hay problema...¿Por qué no vamos por otra copa, eh? La casa invita, aprovecha...- Le recomendó, guiñándole un ojo y esquivando a todos los que intentaron hablarle, hasta que llegaron a la barra.

 

-Dame otro...igualito al que te pedí, pero que sea triple...- Le dijo al barman, necesitaba relajarse y nada mejor que un whisky helado para ello.

 

El representante sí bebió un rato con él hasta que tuvo que marcharse, pues ya eran casi las 5am. Entonces, en ese momento en el que se quedó solo, fue cuando Timothy aprovechó para regresar a sentarse a su sitio a lado del mayor. -Y...entonces...¿No tuviste una buena noche, verdad?...-

 

Para entonces Murdoc ya no estaba muy sobrio, pero todavía aguantaba unas copas más. Le sonrió de modo burlón al rubio -¿Acaso te estás burlando, mocoso infeliz?...-

 

-No...de hecho, vine a hacerte compañía...¿Qué no puedo?...-

 

-Me importa un carajo, haz lo que quieras crío...- Le murmuró con la barbilla tirada sobre su brazo apoyado en la barra, a lado tenía la botella de Whisky casi vacía y su vaso enorme, el barman ya sólo se estaba limitando a reemplazarle los hielos.

 

Un brillo perverso centelleó en los ojos grises del muchacho.

 

-Vale, vale, conduce entonces... pero ¿En la esquina paramos? Creo que voy a vomitar- Le dijo haciéndole espacio con la expresión relajada y atontada que se cargaba, se puso el casco como pudo y se abrazó al otro tranquilamente con una mano para con la otra hacerle una seña obscena a Murdoc mientras se iban -¡WUU! ¡PÚDRETEE!- Le gritó manteniendo aquella seña hasta que lo perdieron de vista -Que se vaya al carajo el hijo de puta...- Le dijo a Hannibal frotando su casco contra la espalda ajena abrazándose bien a él -¿Sabes que voy a partirte la cara cuando esté sobria, cierto? Niccals...- Le musitó malignamente.

 

2D salió corriendo con el tacón que le faltaba a Noodle para ponérselo y pedirle que no peleara, justo a tiempo para cachar el otro tacón quedándose ahí estático mirando con cara de preocupación como se marchaba con Hannibal con ambos tacones abrazados, al mirar a un lado y notar que Murdoc estaba molesto dio la media vuelta haciéndose tonto y al notar que lo miraba se echó a correr dentro de la fiesta mezclándose entre la gente, no quería que se desquitara con él, guardaría los tacones de su chica entre sus cosas, más había tardado en ir a tomarse algo para la migraña que Murdoc en buscar problemas, no era tan raro pero lo que sí le sorprendió es que Noodle atacara a todos y se fuera así, ella le preocupaba pero al parecer ese chico tan apuesto que tenía por novio seguro que la cuidaba bien, ella era muy lista, no confiaría en alguien así porque sí.

 

Se le pintó una sonrisa divertida en el rostro mientras escuchaba a uno de los invitados narrar el cómo había golpeado a los guaruras bajando la cabeza para cubrirse la boca con la mano y que no se notara que le había dado gracia -Esa es mi chica- Musitó bajo caminando hacia donde estaban los productores poniendo los tacones en la mesa mirándoles divertido.

 

-Su chica favorita les dejó un regalo- Les comunicó sentándose sobre la mesa en medio de ellos que se rieron al unísono con él -¿Disfrutando la fiesta?- Les preguntó mientras se acomodaba bien en posición de mariposa sentado allí y comenzaba a conversar con ellos portándose de lo más agradable, ya algo ebrio y con el efecto relajante de la medicina era más sencillo actuar así...

Jamie jaló a Damon a donde vio que se iba 2D -Mira, mira, allá va- Le dijo riéndose como niño haciendo alguna buena travesura y tomando su trago caminó a donde estaba, además de molestarlo tenían que hacer méritos para agradar a esos sujetos y que cooperaran de una buena vez.

 

-Vamos...- Convino Damon riéndose también de la cara de travieso que ponía, era un bobo. Lo siguió hasta que llegaron a sentarse a la mesa donde estaban conversando -¡Oh! Son bonitos...quizá te queden Jamie...- Le dijo con una amplia sonrisa, disfrutando de su broma, ofreciéndole los tacones al dibujante.

---

 

Timothy se había ocupado de que el bueno de Murdoc se acabara otras dos botellas antes de proponerle que fueran a un lugar más "privado" porque quería mostrarle una tonada que había compuesto para una de las canciones que le había estado dándole problemas al mencionado, con el pretexto de que había dejado el bajo allí. Para entonces Murdoc ya estaba muy dócil y muy mareado, también se molestó porque pensó que 2D apoyaba a Noodle con eso de que anduviera con ese hijo de la grandísima guarra.

 

-¿En...zzerio?...eres todo un listillo, muchacho...- Se estiró un poco antes de ceder -Bien, bien...vamos...pero trae eza- Le indicó, señalando la botella  -y quédate aquí, a mi lado...- Le pasó un brazo por los hombros y el rubio debió semi-cargarlo por el pasillo hasta que llegaron a la habitación. Era una especie de salita de estar, con una mesita de centro y un juego de tres sofás en tamaños descendentes. Lo dejó sentado en el sofá grande prácticamente aventándolo ahí y luego tuvo que acomodarse la espalda, la cual le tronó cómicamente -¡Demonios! Como pesas...¿2D no te ha dicho que subiste de peso?...-

 

Murdoc se rió con ganas ante su comentario -Oh...ezo no le importa, ya ves...es que yo no engordo...zzólo...me pongo más bueno...¡jajaja!- A esa altura ya ni sabía con certeza lo que estaba diciendo.

 

-Sí...claro...- Buscó dos copas que había dejado listas, esperándolos, junto con una grabadora en la que dejó un CD con música "sexy" para la ambientación. Dejó en la mesa la cristalería y sacó una champaña, digna de la ocasión, era una buena cosecha. -Sorpresa...- Canturreó, mostrándole la botella -Pensé que...yo no había celebrado contigo por el nuevo álbum...así que, hoy me pareció buena ocasión para hacerlo...- Le comentó mientras iba a sentarse a su lado. -¿Qué dices, la descorcho?...-

 

Murdoc lo miraba como con extrañeza, con los ojos entrecerrados, entendiendo el 50% de lo que decía.

 

-Ah zzí...al demonio...sirve y deja de hablar- Le ordenó al chiquillo, antes de tirar la nuca en el borde del sofá, se sentía más mareado de lo común, quizá había perdido práctica, hacia mucho tiempo que no bebía tanto.

 

-De acuerdo...como tú digas- Dijo, relamiéndose una sonrisa de satisfacción perversa en los labios, mientras descorchaba la champaña. Aprovechando que Murdoc había dejado caer la nuca en el borde del sofá y tenía los ojos cerrados, cubiertos con el revés de su mano, sacó del bolsillo de su saco un sobresito con un polvo blanco, casi transparente, era PCP, mejor conocido como polvo de ángel. Lo tiró tranquilamente en el fondo de la copa del mayor y se apresuró a llenar la copa hasta el tope, el polvo se disolvió de inmediato, imperceptible. -Aquí tienes...Alec-

 

-¡Qué no me digaz azzí! Carajo...¡Murdoc! ¡Soy Murdoc!- Le alegó sentándose bien de golpe para alegarle eso mirándolo con severidad, la máxima que podía estando tan ebrio y luego le arrebató la copa de la mano, para inclinar la cabeza y bebérsela de un sólo trago.

 

-Bien, bien...no te había molestado nunca eso...- Le dijo Timothy, mirándolo con ojos de sorpresa inocente, ante su agresión. Bebió la mitad de su copa, escondiendo una sonrisa triunfal detrás de ella.

-Sólo...'D'...me puede dezzir así...- Le aclaró mirándolo del mismo modo cómico, molesto, aunque con los ojos hechos unas rendijas.

 

-¿Qué tal, está buena?...-

 

-He probado mejores...está amarga...- Le comentó en el mismo tono agresivo, pero sólo lo evidenciaba por molestarlo, no porque se hubiera dado cuenta de su truco.

 

-¿En serio..?...qué pena...yo que la compré con la intención de que te gustara...- Le dijo en tono lastimero, ejercitando una de esas miradas manipuladoras, con esos bonitos ojos suyos.

 

Entonces Murdoc se suavizó un poco, esa mirada le recordó a la que ponía 2D cuando se asustaba con sus impulsos violentos. Apartó los ojos entonces y suspiró -Olvídalo...está buena...- Dijo ofreciéndole la copa -Deberíamos terminárnosla...- Le dijo, ladeando una sonrisa maliciosa, luciendo sus colmillos.

 

-Esa idea me gusta...- Coincidió Tim, sonriéndole también, pero esa sonrisa tenía un toque de malicia difícil de ocultar...

 

2D se sonreía muy simpático con los productores complementando perfecto las bromas de los torpes de Jamie y Damon haciendo un equipo maravilloso de chistes, porque ebrio D' era un poco más sarcástico e iba perfecto con el tipo de humor que debía utilizarse con el zoquete de Jamie, y mientras sonreía un recuerdo atravesó sus pensamientos como un flashazo, el rostro del dibujante "Y cuando nos vuélvamos a encontrar será tiempo de renovar o aniquilar el conjuro" Dijo en su mente iluminado por un par de velas, en una mesa redonda y pequeña...

 

FLASHBACK

Era un día terrible para 2D, su hermano estaba por encontrar su escondite con el dibujante y el vocalista de Blur, Stuart, el peliazul estaba muy asustado, necesitaba encontrar una opción a su problema, algo que lo dejara tener una vida normal por lo menos un rato, estaba cansado de huír de Demetri, lo peor era que le había llegado una carta al lugar diciendo "Si tardas más no podrás ver cómo mato a mamá"

 

-Jamie ¿Recuerdas la solución de la que me habías hablado?...-

 

Jamie estaba trabajando en unos bocetos para la reedición de su cómic Tank girl, despegó la mirada clara de su trabajo lentamente para mirarlo y pintó poco a poco una sonrisa en su rostro de niño travieso. -¿Seguro?...-

 

-¡Quiero intentarlo!-

 

-Perfecto-

 

(...) Esperaron a que fuera de noche, Jamie hizo unos cuantos rituales extraños con los que se comunicó con un tal "Boogieman", alguien que según él era muy buen amigo suyo en el más allá. Al contactarlo se supo de inmediato porque las velas de la salita del departamento se apagaron dejándolos a oscuras y una silueta roja brillante ocupó toda la altura de una de las paredes frente a ellos. Jamie le miró serio, el peliazul sabía qué hacer, sólo debía pedir lo que necesitaba y Boogieman lo concedería, a cambio claro de un precio a largo plazo. Un precio que ameritaba un sacrificio, al principio 2D pensó en ofrecer a su hermano gemelo Demetri como sacrificio, finalmente hacía un bien ¿cierto?...

 

-Mi deseo es que mi hermano Demetri olvide nuestro parentesco, borra los vínculos del pasado que tengo con toda la gente, quiero que se ignore el hecho de que somos gemelos, que se olvide la gente de mi nombre real, quiero que la gente de mi pasado no me recuerde...- Dijo decidido mirando aquella sombra curiosa.

 

"¿Qué más? Puedes pedirme lo que sea..." Le pareció escuchar el susurro de una voz extraña dentro de su cabeza -Quiero que Demetri sólo se obsesione conmigo, no quiero que meta a más gente en esto, que la gente a mi alrededor esté a salvo y que... por ahora no pueda encontrarme, dame el plazo suficiente como para haber podido llevar una vida normal antes de que me encuentre- Le pidió a Boogieman. Aquello era todo, comenzaba a darle mucho frío mientras pedía aquellas cosas, el miedo hacía que le temblaran hasta los huesos, aquella sombra se materializó en un ser extraño y oscuro del que 2D sólo era capaz de verle la silueta en la oscuridad, lo tomó de las ropas con su gran mano levantándolo hacia él, 2D debió perder el conocimiento pues lo único que sabe es que tuvo conciencia de escuchar y ver textualmente dentro de su mente el contrato que había hecho.

 

"Tu verdadero nombre ya lo ha escogido Jamie, serás Damon Hewlett, ni tus padres te recordarán, Demetri pensará que eres su medio hermano pero eso sólo hará que te odie más, cuando logre encontrarte en un plazo de tiempo indeterminado puesto que te falta un lapso de tiempo para tener la vida que deseas, no podré hacer nada, mi pago será cualquiera de los dos, entre los dos deberá sobrevivir el más fuerte, deberás competir con él por tu vida, si quieres sobrevivir asesinalo y entrégamelo o él te entregará a ti... Él sólo te atacará para matarte, no lo sabe pero estará pagándome a mí. Tu nombre será uno de mis pagos por ahora... Stuart Pot... pero cuando el hechizo venza la realidad alterada se romperá y todo comenzará a volver a su lugar..."

 

2D quedó inconsciente una semana entera después de eso, Jamie jamás pensó que algo así sucedería, pero después de cuidar ese tiempo de él, el peliazul despertó y huyó de ahí aterrado de que algo malo pudiera ocurrirle si Demetri llegara a encontrarlo antes de tiempo, huyó de Inglaterra... lejos... muy pronto encontraría su destino y el modo de pagarlo... Sin embargo un día por alguna razón incluso ese recuerdo se había esfumado de su cabeza. ¿Porqué apenas volvía a recordar aquella petición? ¿Es que acaso su petición lo había hecho modificar sus propios recuerdos para creerse su propia falacia? Era un idiota... cuando había hecho ese pacto era joven e idiota... ¿Qué iba a hacer con Demetri? No era capaz de ofrendar a su hermano gemelo pese a que en un principio se sentía tan decidido. ¿Qué le había hecho cambiar de opinión? Ahora ni él mismo lo sabía pero no sería capaz de matar a Demetri.

"Oye idiota, ven para acá" Escuchó en su mente, pudo ver a Murdoc entre esa ráfaga de recuerdos, todo estaba volviendo a su mente.  "JAJA Te faltan dos dientes... ah, sin mencionar lo demás, te llamaré 2D ¿Te parece? Necesitas un pseudónimo artístico"...

-Fin del flashback-

 

--------------

2D se había quedado en su lugar mirando a la nada durante unos minutos, removiendo su trago por instinto mientras se acordaba de todo aquello, al despertar de ese golpe de realidad apretó la mano con fuerza sobre la copa y esta se hizo añicos en su mano cortándole la palma inmediatamente. Jamie y Damon habían estado hablando con los productores por lo que se dieron cuenta de que algo andaba mal en 2D hasta que estalló la copa en sus manos y el rojo carmín comenzaba a escurrir de su mano sin parar. El peliazul miraba la sangre como si no le estuviera ocurriendo a él, no podía sentir dolor de lo asustado que estaba, se había puesto helado y del color de una hoja de papel.

 

Jamie se precipitó a él levantando su mentón para obligarlo a que lo mirara -¡Hey D'! ¿Te sientes bien?- Le preguntó realmente preocupado pero al ver en sus ojos retrocedió un par de pasos, el mismo recuerdo del hechizo estaba volviendo a su mente, la realidad estaba volviendo a su lugar... Jamie no recordaba aquello hasta ahora pero probablemente por alguna de las estipulaciones en la petición de 2D a Boogieman. -¡D' Cúrate eso, por dios!- Exclamó tomando la botella de vodka de la mesa y dándole un largo trago -Demonios...- Gruñó dejando la botella en la mesa -Ah, aunque creo que no es tan grave- Mintió mirando al otro a los ojos para asegurarse de que estaba bien, era mejor no presionarlo demasiado, intentó no sonar preocupado por eso pero en realidad estaba impactado con lo que había visto.

 

De repente Damon se acercó con uno de los productores -Mira Daley, este es el peliazul estrella del que te hablé, él es D’...-

 

El rubio de cabello rizado en un corte interesante de moicana con el cabello esponjado y rizado en el centro de su cabeza colgando en un copete interesante, de lentes de pasta, piel blanca y ojos claros sonrió al ver a 2D -¡Stuart Pot!- Le quiso saludar emocionado pero el peliazul se apartó un par de pasos.

 

-¡Estoy bien!- Exclamó Dam e intentó calmar a los productores que revoloteaban preocupados a su alrededor -Lo siento ¿Me das permiso?- Le dijo a Daley casi cayendo fulminado allí al escuchar su nombre, el plazo estaba terminando, miró con una disculpa entre líneas a Damon -Ah debo ir a curarme... yo sólo, no sé qué me pasaba por la cabeza- "Ojalá eso fuese cierto" Se levantó de la mesa tirando los cristales al piso y vaciándose algo del alcohol de una de las copas en la mesa sobre su palma ahora sí sintiendo dolor haciendo una mueca, pero debía controlarse -Me parece que el servicio médico está allá atrás, no tardo- Dijo tomando un puño de servilletas y cubriendo su mano para caminar rápido entre la gente que estaba allí y llegar al pasillo detrás del escenario, estaba seguro que por ahí le habían señalado el servicio médico, los letreros eran muy confusos por lo que optó por abrir las puertas una por una, eran cinco así que no era como si fuera mucho trabajo hacer eso, además aún estaba muy shockeado al recordar esa deuda...

 

Damon lo miró irse con una preocupación callada en su mirada azul, tragó levemente cuando sus ojos se encontraron a continuación con los de Jamie, no le gustaba cuando el dibujante ponía esa cara, supo de inmediato que algo muy malo estaba pasando. -¡No importa, D! Tú corre...- Lo animó con una sonrisa que apenas le salió y luego se apresuró a cambiarles el tema a los representantes -Oh señores, ¿Ustedes ya conocían a mi buen amigo, Daley? Tiene un gran talento, se los aseguro...- Elogió el rubio de ese modo sincero, dejando que el chico se presentara solo. Después miró a Jamie con seria advertencia en la mirada, exigiéndole de esa forma que le explicara que había sucedido.

 

--

Cuando habían bebido otro par de copas y el chico tenía el bajo en las piernas dispuesto a enseñarle a Murdoc la tonada que le había prometido, el bajista trató de incorporarse levemente para alcanzar la copa que estaba en la mesa, pero apenas atinó a tocarla, porque ésta pareció moverse de su sitio. El delicado cristal se balanceó y cayó sobre la mesa, sin romperse y sin derramar nada, porque estaba vacía. Fue cuando se dio cuenta de que ya no podía coordinar bien sus movimientos y de que empezaba a tener muchísimo calor.

-Ughh...¿No te...ezztás cocinando?... Qué calor...- Trató de quitarse el saco pero sus movimientos torpes se lo impidieron, con una risa torpe se rindió sobre el sofá.

 

Los ojos de Tim centellearon de nuevo con la oportunidad brillando en ellos. -¿Te ayudo?...- Dejó el bajo en el piso y se acercó más a él, yendo a ayudarlo. Le quitó el saco con lentitud y lo tiró al sofá de a lado.

Luego se acercó más de un modo felino, mirándolo de cerca -Oye Murdoc...- Le habló muy cerca de su boca -¿En serio...tienes calor?...- Veía su boca de manera perdida y sus ojos, con sus intenciones reflejadas en su ansiosa mirada.

 

Murdoc lo miró acercarse y una muy leve sensación de alerta lo hizo apartarse por mero instinto, pero en el intento se cayó acostado sobre el sofá. Entonces al mirar arriba lo único que vio fueron esos ojos grises, antes de sentir la boca ajena pronunciarse sobre la suya, el contacto le hirvió la sangre y disparó una señal de alerta que se esparció por todo su cuerpo.

 

-Nh...¡Mgh!...- Subió las manos a aferrarlas a su cintura para tratar de apartarlo, pero se quedó sin fuerzas cuando el chico se acomodó encima suyo y empezó a frotar su cintura contra la suya, en movimientos muy lentos.

 

-Demonios...estoy tan feliz...al fin sólo vas a ser mío...- Le musitó Timothy cerca del oído en un tono lascivo y malévolo, antes de volver a besarlo, empujando su lengua dentro de la boca del bajista a la fuerza.

 

Alec no supo en que momento acabó correspondiéndole a ese contacto, aunque lo hacía de modo torpe al principio, después acabó devorándole la boca. Ese endemoniado calor empezó a provocarle una intensa taquicardia que terminó de aturdir sus pensamientos y sus sentidos, todos menos el tacto, porque sentía el roce del cuerpo ajeno como si incendiara su piel.

 

Su mente se quedó en blanco absoluto en cuanto el menor empezó a frotarse con más ímpetus sobre su erección. Se separó de su boca y se quitó el chaleco, desabotonándolo rápido, igual que su camisa. Tiró las prendas y se fue a la boca del bajista de nuevo, luego a su cuello, mordiéndolo posesivamente al ver con disgusto que tenía otras marcas. Luego siguió bajando por su abdomen hasta llegar a su dura erección. La libero del pantalón, sosteniéndola en sus pequeñas manos tal y como estaba gruesa e hinchada. Se la metió a la boca sin pensarlo, haciendo que Murdoc aferrara una mano a sus cabellos con un gruñido placentero y medio se arqueara sobre el sofá. -¡Ah-ggh..!...-  Maldita sea, algo estaba muy mal ahí pero ya no podía recordar el qué, ahora sólo quería seguir sintiendo esa boca y esa lengua acariciándose contra su duro miembro.

 

2D caminó por aquel pasillo y abrió la primer puerta en la que estaba un cuarto de limpieza o algo así, caminó sosteniéndose la mano y abrió la siguiente puerta dejando algo de sangre en la perilla de la puerta y entonces encontró una escena que no le gustó nada, su corazón pareció detenerse durante un segundo y jadeó violentamente dando un paso hacia atrás y tropezando cayendo de sentón sin poder dejar de mirar aquello, lo sabía, lo supo desde el primer momento que vio a ese mocoso... él deseó a Alec desde el primer momento, ¿Y si no era él? Aquello tenía que ser un error.

 

-...¿A-Alec?- Le llamó mientras sus ojos, por alguna razón que justo ahora no comprendía por el shock, se comenzaban a llenar de lágrimas. No podía decir palabra, plantó la mano herida en el piso dejando marcada su palma allí mientras se obligaba a reaccionar y poner los pies bien plantados en el piso para levantarse pero lo que veía estaba seguro que de alguna manera estaba hiriéndole el corazón, entonces recordó vívidamente cuando encontró a Paula con Murdoc, se había sentido exactamente igual de desconcertado. En cuanto esos recuerdos regresaron a su cabeza se dio la vuelta sobre sí violentamente y echó a correr al mirar su rostro, ni siquiera le importaba. -Hah...- Un sollozo escapó de su garganta, mientras corría lejos de allí, salió por la salida de emergencia tomando su celular para dejar un mensaje de voz a Russel obligándose a sonar normal -Lo siento Russ, no me siento bien, espero que puedas despedir a los productores, tengo que irme- Después marcó el celular de Jamie.

 

El dibujante platicaba divertido aún con una ligera alarma en su cabeza pero entonces al fin le llamó -¿Qué pasa?-

 

-¿Pu...edes llevarme a casah?...- Le dijo sin poder contener otro sollozo en el celular, su mundo se había desmoronado en menos de una hora de una manera que jamás pudo haber imaginado.

 

Jamie no dio alertas de que fuera algo apremiante pero sí que se sorprendió obligándose a guardar la calma -¿Ya estás afuera?-

 

-Ssí...-

 

-Voy D'- Tuvo que explicar a Damon que 2D no se sentía bien y que iba a llevarlo a su casa, a los productores les pintó un "Pobrecito le duele su mano, quiere ir a descansar, les manda disculpas" Después se levantó, recolectó las cosas de la guitarrista y D' lo más rápido que pudo y fue hacia allá encontrándolo sosteniendo su mano herida con la cabeza baja y una expresión desconcertada. Era claro que estaba en shock. -Vamonos- Se atrevió a musitarle mientras se acercaba a acariciar los cabellos azules y pedía su auto con una seña al ballet parking. -¿Te parece si primero te llevo a urgencias a que te curen esa mano?-

 

-Quiero ir-me... a casa... por favor...-

 

-Lo necesitas, eso se ve mal- Le insistió manteniendo un tono modulado.

 

-Está bien...- Aceptó finalmente atreviéndose a abrazarlo con fuerza mientras sollozaba más fuerte, al fin dejando ir ese sentimiento de frustración por no poder controlar sus emociones en ese momento, vaya ni siquiera podía interpretarlas.

 

Esa noche Jamie estuvo con él en la fila de urgencias, lo cubrió con su chaqueta mientras lo consolaba y de alguna manera le demostraba una ternura paternal que no era sencilla en el mayor, no perdió la cabeza en eso, se concentró en ser el apoyo que el peliazul necesitaba, incluso después de llevarlo a casa, D' se había quedado dormido en el asiento de copiloto por lo que lo cargó y abrió la puerta de la casa para llevarlo a su cama y arroparlo.

 

Después dejó sus cosas en su habitación y lo demás en la salita. Finalmente se retiró silencioso y preocupado de allí... sólo esperaba que Boogieman les diera algo más de tiempo, ahora se sentía con la obligación de ayudar a D', claramente se le veía desesperado y cuando él le había propuesto eso en ese tiempo era un vago zoquete peor que ahora, sus costumbres oscuras quizá las había abandonado sin darse cuenta, Damon lo había cambiado poco a poco, porque le gustaba convivir con él comenzó a olvidarse de todo, comenzó a seguirlo deslumbrado por el talento que destilaba el rubio. No había pensado en nada de eso seriamente hasta ese momento. Cerró la puerta de la casita y se fue en su auto pensativo en lo que podría hacer para ayudar a 2D.

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Noodle quizá vomitó por ahí en algún momento del camino, después al llegar a casa de Hannibal siguieron la fiesta con cartones de cerveza y la chica se fue desnudando por ahí hasta terminar sólo con sus pantaletas y una gran playera holgada propiedad del mayor, con sus piesecitos descalzos bailó por ahí con sus increíbles dotes para eso y se divirtió con el otro, riéndose y diciendo bobadas hasta que se le ocurrió sentarse en un sillón a "descansar los pies" y terminó quedándose profundamente dormida. Sus cosas quedaron tiradas en desorden por el departamento, incluso el casco de la motocicleta y las llaves de esta, la misma motocicleta había terminado dentro del pequeño departamento por alguna extraña razón como que Noodle estaba haciéndose pipí cuando llegaron o algo así... Entreabrió los ojos a la mitad de la noche dándose cuenta que el mayor dormía a su lado y eso la hizo abrazarse a él pegando su cuerpecito al del otro, besando su maxilar, estaba tan cansada, pero incluso así aún sintiéndose ebria y exhausta podía juzgar ese momento como mágico y delicioso. La había pasado increíble con el otro y ni siquiera hubo necesidad de pensar en sexo para ello, quizá ese era un buen indicio entre ellos...

 

Hannibal no se divirtió tanto cuando tuvo que sujetar su cabello para que vomitara en medio de la carretera, pero sí fue muy divertido verla bailando en paños menores y contándole esas historias en las que torturaba a Murdoc; era muy graciosa, valiente, ruda ¡Y hasta era guapa! Le parecía muy sexy, pero acostarse con ella no era lo único que quería, se había dado cuenta de eso desde que la había conocido.

 

Cuando al fin se cansó y se quedó dormida con los pies cruzados encima de la mesa, se dio cuenta de que traía una rajada detrás de la pantorrilla, exactamente igual a la que se había hecho el tal Neko. Examinó la cicatriz seriamente y después levantó el casco que estaba tirado, al agarrarlo accidentalmente oprimió algo dentro de él  y éste cambió de color. Al acercarlo más a sus ojos para comprobar que no había alucinado, escuchó un zumbido...era un micrófono. Se lo puso y habló, la voz sonó exactamente igual a la de ese irritante oriental. Se quitó el casco de un tirón sintiéndose el más imbécil del mundo. Se le quedó mirando a la chica mientras descansaba plácidamente -Siempre fuiste tú...- Murmuró incrédulo, con una sonrisa ladeada. -Me engañaste como a un criajo...eso nadie lo había hecho...impresionante- De pronto le cambió esa expresión molesta al decir eso último y se quedó embobado observándola. -Aghh...- Se sentó a su lado, cruzando de brazos, molesto consigo mismo por no poder molestarse con ella a pesar de todo. Gradualmente se durmió también, ya habría tiempo de reclamarle y quizá...de vengarse un poco, iba a ser divertido...

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Murdoc escuchó ese hilillo de voz quebrada llamándolo lejanamente, pero no llegó a procesarla porque estaba demasiado perdido. El que sí pudo verlo y regodearse en su victoria, fue Timothy, quien le clavó los ojos al menor, separándose de su labor para sonreírle con sucia satisfacción. Adoró verlo correr, había logrado su objetivo, pero aún no estaba satisfecho. Regresó a su labor con violencia hasta que obligó a correrse en su boca a Alec y bebió cada gota de su semen.

 

-¡AH! ¡Dam!- Gimoteó Alec, a esas alturas pensaba que estaba con él, con 2D, no tenía ni idea de toda la calamidad que estaba ocurriendo...de lo que se avecinaba...y que se pondría cada vez peor.

 

-Soy yo...- Le musitó de modo enfermizo Tim a Alec -Soy tu Dam...-   Le dijo viciadamente, subiendo a lamer sus labios mientras volvía a frotar sus caderas contra las suyas con empeño, sin darle tregua, seguía tan caliente que se endureció de nuevo con rapidez, haciendo que sonriera nuevamente y frotara su trasero, aún sobre su ropa, contra la dura erección. -Mnhh...- Echó la cabeza para atrás remordiéndose los labios, ese muchacho era un psicópata pero nadie podía negar su atractivo despampanante. Tenía una piel blanca sonrosada, las hebras de su cabello, rubias como el trigo, le rozaban el cuello delgado y fino; sus facciones angelicales hubieran pasado por las de una chica de no ser por la forma cuadrada de su rostro y por la maldad que las deformaba. -Sólo me podrás tener a mí...sólo a mí...- Sentenció el "asistente", mientras se ponía en pie para deshacerse de sus prendas inferiores, sin más ni más...

 

Noodle despertó con una resaca asesina esa mañana, le dolía todo y alguien había llegado a poner música muy alta lo que hizo que se retorciera como un gusano sumergiéndose en las cobijas -¡Piedad!...- Dijo adormilada, vio una siluetita bailando por ahí al asomarse, era el tonto de Geremy molestando. Se revolcó con gran dolor de cabeza y de cuerpo espantosos y se dio cuenta que si no corría al baño iba a orinarse. Se levantó corriendo al baño intentando y de paso desconectando el estéreo. Dejó entreabierta la puerta mientras orinaba de pie frente al escusado.

 

Geremy había llegado a molestar sospechando que Hannibal tenía resaca pero al ver a esa chica allí supuso cosas ¿Ya lo habría logrado? ¿Acostarse con ese monumento de mujer? No pudo evitar sonreír al verlos retorcerse y se acercó bailando -¡Levántense dormilones! ¡Son las dos de la tarde!- Les gritó pero la chica desconectó el estéreo -¡Aww! Nooo ¡Haruka!- Le dijo caminando como niño tras ella y al ver que dejaba la puerta entre abierta pensó en hacerle una mala broma pero al asomarse y verla orinando de pie se pegó contra la pared pensando con nerviosismo ¿¡Qué carajos?! ¿¡Era un chico?! Corrió hasta donde Hannibal -¡Oye hermano! ¡¡Hey hey!!- Le musitaba nervioso cuidándose de que Haruka saliera -Dime la verdad, ¿Tu chica no es chica?-

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2D despertó con resaca también, solo en casa, no había ruido... Se sentó con dificultad mirando a su alrededor obviamente no había llegado a dormir. Se levantó dando tumbos para buscar a los demás pero no parecía haber nadie, necesitaba ayuda, tenía que pagar su deuda ¿Pero cómo? Se sentó intentando reflexionar sobre la noche anterior, y al mirar su mano recordó todo lo demás, desvió la mirada en busca de respuestas y al mirarse en el espejo notó sus ojos negros como abismos, había olvidado cambiarlos de nuevo.

 

Tomó el pequeño control y sus ojos hicieron un sonido mecánico volviendo a ser azules y maravillosos como siempre. Suspiró dándose cuenta de que estaba muy molesto al tomar la pasta de dientes y exprimirla toda en su mano -Demonios!- Gruñó lanzándola a la basura y enjuagando su mano para sacar otra y lavarse los dientes sin poder dejar de pensar en esa escena de Murdoc y ese mocoso y peor aún la del conjuro... Se le heló la sangre pero a la vez estaba molesto porque no podía controlar nada de eso. Salió del baño hecho una furia y comenzó a recolectar todas las cosas de Murdoc del cuarto para echarlas en una caja, se la iba a ir a lanzar en la cara cuando pudiera, estaba muy enojado y 2D enojado era algo nuevo, se había molestado en veces anteriores pero jamás era "en serio" realmente ahora temblaba de coraje.

De repente dio un brinquito en su lugar y subió la cabeza bruscamente, algo se escuchaba abajo ¿Quién había llegado? Le dolió el estómago de pensar.

 

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Murdoc se despertó al siguiente día con un infernal dolor de cabeza, debido a una luz cegadora que se coló por los vitrales descubiertos del pequeño cuarto en el que se encontraba, estaba desnudo sobre el piso, cubierto con sólo una manta. Encima de su vientre sentía a alguien apoyado, durmiendo, tuvo un escalofrío que terminó de despertarlo, cuando al quitar la frazada descubrió a su asistente -Oh...mierda...- Se lamentó, cubriéndose  la cara  con una mano, negando repetidas veces. Trató de recordar como había acabado así pero la cabeza le dolió aún más, por lo que desistió. Después se quitó simplemente, dejando que se cayera el rubio.

 

La cabeza de Timothy se golpeó contra el piso, despertando al chico -¡Mnhh..!...oye...más delicadeza...- Se quejó con pereza en la voz, removiéndose en el piso.

 

-Mierda, mierda, ¡Mierda!...¿Tú?...¡Tú..! ¿Cómo chingados pasó esto?- Se quejó mientras andaba por todo el cuarto recolectando su ropa y metiéndosela a tirones, con algo de torpeza, pues aún seguía aturdido.

 

-Oh... ¿Ya no te acuerdas? me besaste...me dijiste que yo te ponía y que querías follarme...- Le mintió el ojigris en tono bajo, haciéndose el inocente, sentándose en el suelo,  sobando su cabeza con una mano, cubierto de la cintura para abajo con la manta.

 

Murdoc lo miró inquisitivo entonces, analizando sus palabras antes de decir -Yo note hubiera dicho mariqueras parecidas ni aunque realmente las pensara...- Le aclaró en tono gruñón, cuando ya tuvo los pantalones puestos.

 

-No me pareció que pensaras eso anoche...te gustó...tanto como a mí...- Le confesó fingiéndose apenado, con la mirada baja, pero lanzándole una mirada seductora

 

-No, No, ¡Cállate! Deja de hablar...siempre me acuerdo de los polvos, no importa qué tan ebrio esté, por lo que asumo que ayer no sólo estaba ebrio...- Se le quedó mirando con insinuación -¿Qué mierda fue?...- Preguntó directamente.

 

-¿Perdón? ¿Qué dices…?...¿Acaso crees que…?...- Puso una cara de indignación y ofensa muy creíbles, la verdad era buen actor.

 

-Lo que usaste, deja de jugar al niñato imbécil- Al fin lo mandó a la mierda, después de haberse metido los zapatos.

 

-¡Yo no hice nada Murdoc! ¡Tú querías esto!...por eso lo hice...yo creí que tú...que yo...te importaba...pero creo que sí fui un imbécil, al pensar algo así...- Le reclamó molesto, pero reflejándose herido en su mirada y en el tono de su voz.

 

-¿Sabes qué? olvídalo, tienes razón...a la mierda, es mejor que te quede claro desde ahora, tú no significas nada para mí, ¡Esto! no significa nada, ¿Oíste? No pasó, punto...si tienes problemas con eso dile a Larry que renuncias y lárgate...- le Aclaró con frialdad y crueldad el bajista, pues el chiquillo no podía esperarse menos luego de que la culpa, la resaca y una sensación extraña, como de haber sido violado, le estaba calando hondo; es que en serio le parecía muy raro no poder acordarse de nada y sentirse tan pésimo. -Y si no lo tienes...pues...tienes que actuar como si esto no hubiera pasado...¿Entiendes?- Suspiró un momento entonces, cuando ya hubo tomado todas sus cosas y estaba listo para irse. -Puede que nos llevemos bien, que tú me admires o lo que sea, pero no te equivoques...- Entonces se fue a la puerta -Me largo- Y sin decir nada más, salió y se fue.

 

Timothy lo miró destrozado mientras le hablaba así, hasta que se fue. Cuando se quedó ahí solo, se le transformó el rostro y extendió una sonrisa victoriosa lentamente, relamiéndose el sabor del bajista que aún tenía en la boca…

 

Regresó al departamentito en un taxi, le pareció un milagro que hubiera conservado sus cosas intactas, como su teléfono, sus llaves y su cartera. Cuando entró todo estaba muy silencioso, sólo quería dormir más pero estaba preocupado por 2D, ¿Qué había pasado con él? Tenía una muy mala corazonada al respecto. Subió y cuando abrió el cuarto lo encontró arrojando sus cosas a una caja y entonces lo supo, si la noche anterior no los había visto personalmente, quizá alguien le había dicho. -...¿Qué haces?- preguntó como si no fuera obvio, en un tono bajo y frívolo, pues ya se esperaba lo que venía.

 

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Hannibal entreabrió los ojos de modo gracioso cuando Geremy puso el estéreo y se sujetó los oídos en un impulso, con un sonoro gruñido -¡Arrrgh! ¡Geremy! ¡Lárgate, idiota!- Le alegó, antes de que la chica saliera corriendo al baño. Cuando al fin quitó la música, volvió a tumbarse en la cama con el antebrazo sobre la frente -Mnhh...- Se frotó la cara con la otra mano mientras el bobo ojiverde regresaba a preguntare eso.

 

-¿Qué dices…? ...no seas imbécil G...- Pero se quedó pensativo, ¿Por qué le estaba haciendo esa pregunta? ¿No sería por lo de…? -¿Por qué preguntas tonto?...- Le susurró cauteloso, jalándolo hacia él de las ropas, reteniéndolo firmemente para que no tuviera otra opción más que decirle.

 

-Oye hermano, tu chica estaba orinando de pie- Le musitó divertido. -Debiste decirme tus gustos, no te hubiera juzgado- Le dijo riéndose un poco después, obviamente sólo bromeaba, era obvio que la chica... sí era una chica(?), algo rara para su gusto pero lo era. -Emm- Bajó un poco más la voz en lo siguiente -¿Qué tal la fiesta de ayer? ¿Al fin pasó algo interesante? ¿Cómo terminó en tu cama?- Levantó las cejas, el otro debería saber a qué iba esa pregunta.

 

Noodle había escuchado las tonterías de Geremy mientras se peinaba un poco, se lavaba los dientes con su pequeño cepillo de emergencias y se lavaba las manos, tal vez se puso un poco de brillo labial mientras fruncía el ceño, no podía evitar tener ese oído digno de los ninjas, aunque en realidad ya no pudo escuchar bien cuando el otro habló más bajo aún porque se estaba lavando los dientes en ese lapso y prefirió no espiar y controlarse.

 

Al salir del baño y verlo allí le hizo una seña obscena mientras lo alejaba de ella de un empujón al verlo venir revoloteando alegremente hacia ella. -Tengo la peor resaca de mi vida y no necesito que alguien me diga cómo debo orinar, las chicas también pueden hacer eso, torpe- Le dijo mientras caminaba hacia la cama y se tiraba de lado junto de Hannibal -Vuelve a espiarme orinando y voy a partirte la cabeza a la mitad como si fuera una sandía- Lo amenazó con un tono adormilado e irritado que sonaba cómico envolviéndose en la cobija de nuevo tapando a Hannibal también. -Me duele la cabeza...- Le dijo con su aliento mentolado al otro, chiqueándose y abrazándose a él pegando la frente a su espalda -Mucho...- Completó en tono lastimero después, aunque poco a poco escenas cortadas de la noche anterior venían a su cabeza. La principal pregunta era ¿Cómo terminó semidesnuda en su cama? ¡Por dios!

 

Hannibal extendió esa sonrisa colmilluda de forma divertida cuando le dijo que era por eso, respirando con más tranquilidad, ya que pensó que Geremy sí sabía (o había sospechado antes que él) sobre lo de Neko y se lo había estado ocultando, pero al parecer, sólo eran sus tonterías habituales - Por favor, no seas idiota...eso quisieras, que me apeteciera follarte alguna vez...- Le dijo con una leve risa burlona, malévola. -Una locura...aunque...fue divertido...golpeé a Murdoc y me echaron del lugar, pero Noodle lo mandó a la mierda y vino conmigo...¿No es fantástico? hubieras visto su cara...- Se reía con el rubio de eso -Pero...si insinúas alguna otra cosa...- Simplemente negó con la cabeza encogiéndose de hombros, sin tener que decir mucho al respecto, para que el ojiverde se desilusionara de una vez.

 

-Oh...¿en serio, cariño?- Le dijo eso en un tono burlón, agudo, como si fuera su mamá o algo así -Faltaría menos...ayer bebiste tanto que pensé que te daría una congestión...y eso que lo digo yo...-

 

Geremy estaba pálido ante la amenaza de la chica y tragó en seco ligeramente, no podía creer que los hubiera alcanzado a escuchar -L...Lo siento...no me rompas la cabeza por favor...- Rogó por su visa, antes de extender una sonrisa divertida y desbaratarse de risa junto con Hannibal, se reía porque no pensaba que ella pudiera hacer eso, pero el mayor se reía por la ingenuidad del rubio...a todas luces no conocía lo suficiente a su chica.

-Mejor haces lo que te dice idiotita...- Le recomendó a Geremy, golpeándole la frente con el índice.

 

-¡Jajaja! Oh sí claro... ¡Tengo tanto miedo!- Agregó el ojiverde, retorciéndose en la cama de la risa.

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Se levantó bruscamente de donde estaba y decidió que lo mejor era terminar de echar las cosas a la caja rápidamente, pero entonces escuchó la voz que menos hubiera deseado a sus espaldas, se incorporó lentamente mientras sus latidos se aceleraban, una punzada en su estómago le informó que iba a tener un ataque de ira muy pronto y eso le daba miedo, enojarse le daba miedo en sí, no le gustaba eso de perder el control y hacer daño a diestra y siniestra... pero finalmente la escena que había visto la noche anterior se repetía una y otra vez en su cabeza, pudo ver de nuevo esa sonrisa, ese dolor en su pecho cuando el otro ni se inmutó de lo que pasaba a su alrededor.

 

Un nudo se formó en su garganta y sólo atinó a bajar la cabeza comenzando a temblar de... impotencia quizá. "Vete al carajo Murdoc" Pensó molesto pero se obligó a escupir un par de palabras que intentaron sonar amables sin poder darse la media vuelta a mirarlo. -En serio, no quiero hablar contigo ahora, no es el momento- Musitó forzado llevándose una mano a la boca pensando internamente en controlarse ¡No podía perder el control, no debía!

 

-Oh, pero sí puedes lanzar mis cosas a una caja... ¿No? ¿Qué pretendes Damon? ¿Echarme?...- Insistió Murdoc, cruzándose de brazos, pues prefería que eso estallara de una buena vez, porque de todos modos eso iba a pasar, después cuando estuviera más calmado trataría de explicarle lo que había pasado, eso si accedía a a escucharlo, estaba consciente de que lo sucedido no era nada simple y que él estaría muchísimo peor de haber sido el peliazul quien lo hubiera hecho.

 

-Besé a Noodle y besé a Jamie mientras estaba contigo... Lo de Jamie fue anoche y lo de Noodle hace como un mes así que... supongo que de alguna manera tú y yo sabemos que esta relación ha tenido muchos altibajos, no quiero pedirte explicaciones porque me sentiría como un idiota... es claro que cualquiera que te conozca tan bien como yo sabe que... eso que vi ayer sólo era cuestión de tiempo y ¿Sabes? Sinceramente ya comenzabas a caerme mal, quiero que te largues de mi habitación... es todo lo que quiero, no te quiero pisando mi territorio ni intentando hablarme, sólo... vamos a hablar de negocios y quiero mi jodido dinero completo si no quieres que le pida a Noodle que te parta a la mitad...- Dijo en un severo tono aterrador mientras terminaba de lanzar todo lo que faltaba dentro y caminaba del otro lado de la caja con la cabeza baja pateando de repente la caja hacia él volteando a verlo enfurecido -¡Vete a la mierda! ¡No quiero escucharte sólo quiero que te largues!-

 

-¡¿Qué chingados?! ¡No me digas! ¡Qué fácil! Esto te concedió la oportunidad que estabas esperando para mandarme a la mierda ¿No? ¡Yo lo sabía! ¿Yo sabía que te gustaba ese pendejo, por eso se tomaba tantas confianzas contigo!- Fue Murdoc el que terminó estallando del coraje, como por lo general sucedía -¡Vete tú a la mierda! porque si tenías problemas conmigo pudiste habérmelo dicho, no hacer esto...¡No besarte con ese idiota a mis espaldas!...Sé que no quieres oírlo y que de seguro no me crees, ¡Pero yo no lo hice a propósito!...no quise hacerlo, Dam, en serio...¡Fue un error!- Le aclaró  tratando de hacer que lo mirara.

 

-¡Ohh no! jaja ¡Ahora resulta que eres tú el que reclama! Es curioso ¿sabes? ¡Cuando justo anoche vi cómo te chupaban la pija! Pero descuida, el criminal aquí soy yo, porque es peor besar a alguien en un momento de desesperación que cogerme a alguien conocido y cuando entres yo no me inmute ni un poco ¡Aún puedo ver la puta sonrisa de ese mocoso asqueroso! ¡Vete al carajo! ¡Al puto carajo!- Se acercó furioso al otro empujándolo intentando que saliera del cuarto -¡Quiero que te largues! ¡No quiero verte! ¡No quiero hablar más de esto! ¡¡Ojalá te duela por lo menos un poco de lo mucho que me duele a mi ahora!!... ¡Saber que me gustó mucho besar a otras personas pero que a diferencia de ti jamás me hubiera acostado con nadie más! ¡Nunca! ¡Mucho menos sabiendo que tú estás cerca!- Lo tomó con fuerza de las ropas para que pudiera mirarlo a los ojos con rabia en ellos.

 

-¡Pero descuida comprendo que también tengas quejas! ¡Rechacé a tantas personas...!- Lo soltó con brusquedad a la vez que lo empujaba hacia atrás -Tanta gente que me quería de verdad, que valía la pena... pero yo te pertenezcoh...- No pudo evitar sollozar dándose la media vuelta y cubriéndose el rostro con ambas manos, tenía tantas ganas de herirlo por lo menos un poco, porque según su teoría mental para Murdoc Niccals lo único importante era Murdoc Niccals, saber que le dolía un ápice de que menos el terminar aquella relación -Sé perfectamente lo que... le hiciste después... y lo comprendo... por lo menos no tiene migrañas... es más joven... y, y... no tiene problemas contigo ahora...- Intentaba comprenderlo, comprender porqué sucedía, también sabía que era obvio que tenían muchos problemas últimamente, pero siempre terminaban resolviéndolos en la cama... y ahora que había estado con alguien más las posibilidades de "resolver" se habían terminado. Pensó mil cosas mientras sollozaba dándole la espalda, ni siquiera su deuda con Boogieman tenía importancia ahora. Estaba tan jodidamente molesto como nunca en su vida.

 

Murdoc lo miraba anonadado de lo que decía - Damon...¡No estás entendiendo! dije que no lo hice a propósito porque no estaba en mí ayer, no sólo estaba borracho, muy borracho...¡Sino que hubo algo más! no me drogué yo mismo, alguien me drogó, esa es la verdad y creo que fue él, Timothy...pero no creo que eso te importe, lo que trato de decir es que no quise engañarte, no me gusta ese mocoso, ¡Es él! tiene una especie de puta obsesión conmigo, ¡Lo juro!...escúchame Dam- Le dijo disminuyendo su tono cuando el otro empezó a llorar -Tú eres lo único que me importa, ¡No pienses que no me duele!...sé que no soy de lo mejor, que quizá tengas razón... que quizá haya alguien mejor para ti...pero lo lamento...Dam...no llores...- Le pidió, sujetando sus hombros con delicadeza.

 

2D avanzó unos pasos y se apartó de él -No me toques...- Le musitó bajo, después se volteó apartándolo brusco de nuevo.

 

-¡Te dije que no! ¡Déjameh!- Le dijo alejándose del todo -¡Estoy… muy molesto contigo! ¡Te odio por hacerme esto!... ¡Hacer-nos esto!- Sus ojos enormes no se dejaban de llenar de lágrimas y escurrían por sus blancas mejillas. -...Lo siento mucho, Alec- Dijo finalmente mientras se intentaba escabullir de él deslizándose por la pared a un lado. -Ya no quiero hablar de esto...- Le dijo bajando una mirada muy triste.

 

-¡Damon!...Damon, basta...- Trataba de sujetarlo mientras el otro se resistía y cuando lo empujó por enésima vez avanzó hacia él tercamente y aferró sus manos a sus hombros finos, que recordaban a los de una chica -No te disculpes...yo soy aquí quien...la cagó, ¡Lo sé! soy el responsable de que esta relación nos haga daño a los dos...siempre...soy yo...lo sé...- Reconoció de un modo cabizbajo, vulnerable, que no era común en él; pero realmente temía que el peliazul fuera a dejarlo, no quería que lo hiciera -Pero no pienso perderte tan fácilmente...lo que siento por ti es lo único contra lo que no puedo pelear...ni controlar...tú...eres el único al que deseo en mi cama...- Le musitó de un modo lascivo entre sus forcejeos y los del menor; besándolo a la fuerza a pesar de la resistencia que le oponía.

 

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Noodle golpeó a Hannibal en un costado cuando se comenzó a reír -No le veo gracia- Le dijo seria -Si no vas a ayudar por lo menos no molestes- Le advirtió después tomando una almohada y lanzándosela a Geremy mientras se sentaba en la cama acomodando otro par de almohadas -Siento mucho el show de anoche yo... jamás había tomado tanto alcohol en mi vida fue... una estupidez- Le dijo desviando la mirada -Verán... yo... creo que la banda cada día es más difícil de unificar, es muy complicado salvarlos de sí mismos... bueno creo que tú y yo tenemos un conocido allí ¿cierto? Supongo que tu amigo lo sabe- Le dijo mientras miraba a la ventana entrelazando sus cabellos violetas entre sus dedos y con la otra mano “caminando” un par de dedos por el hombro ajeno -¿Crees que sería tan torpe?... ¿Qué no me iba a dar cuenta de su parecido?...- Le dijo volteando a mirarlo con ese aire seductor y misterioso tan característico de ella -Bueno... no es que me moleste tanto eso de que Murdoc te sea cercano, lamentablemente yo también lo debo frecuentar pero lo que sí es molesto es que no me lo dijeras- Le comentó sonriéndole después algo amenazante -En fin, voy a partirle la cara a Murdoc si intenta meterse en mis cosas, y te la partiré a ti si buscas problemas o si vuelves a mentirme...- Le advirtió acercándose a besar su mejilla después.

 

-Oh tú...no se lo habías dicho...¿Hann?- Preguntó el ojiverde con cara de estar escuchando un buen chisme, ganándose que el mayor lo fulminara con la mirada, lo que lo hizo sonreírse con malicia divertida.

 

-Está bien, está bien, suficiente...Ger, largo de aquí...danos un minuto...- Ahuyentó al rubio con un gesto de su mano, como si de la servidumbre se tratara.

 

-ah, pero más vale que sólo sea uno... porque si se convierten en 30 me largaré para no hacer mal tercio...- Canturreó para seguir molestando, yéndose rápido como chiquillo travieso.

 

-¡Pero ya lo estás haciendo, idiota!- Le recordó Hannibal lanzándole una almohada que chocó contra la puerta que cerró el ojiverde detrás de él.

 

Después volvió a mirara a Haru, de modo inquisidor mientras una sonrisa ladeada iba extendiéndose en su boca, pensando que no sólo él había guardado secretos, después de todo -No quiero problemas- Le aseguró, mirando también hacia la ventana, fingiéndose distraído -no soy yo quien los tiene, es Murdoc el que no me soporta...siempre me ha odiado...porque bueno...hay muchas cosas que sucedieron en el pasado entre nosotros...al grado de que pensé que jamás volvería a verlo y mucho menos así...que tuviera que ver contigo, eso lo lamento...porque según lo que me dices, al parecer mi hermanito no ha cambiado ni un poco...¿Cierto?...sigue siendo un Niccals...aunque siempre le he pesado...- Le relató a la chica, sumido en imágenes de sus recuerdos, la penosa infancia que pasó el menor, Hannibal siempre fue el protegido de su padre, en cambio Alec...

Notas finales:

¿Reviews o truco? >w<


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