Demonios, los odio
Mi nombre es Kim JongHyun, soy orgullosamente el hijo primogénito del segundo hijo del gran matrimonio Kim, los dueños de los corporativos mas importantes de corea, cualquiera pensaría que siendo un Kim me la pasaría de fiesta en fiesta, de antro en antro, pues no, después de todo los dueños de los corporativos eran mis abuelos no yo, sin contar que yo provengo del segundo hijo de este matrimonio no de la línea primogénita, por lo cual mis posibilidades de heredar el corporativo y convertirme en presidente es casi nula…
Mi padre había quedado en ruina hace poco, mi madre había huido con un amante y mi custodia paso a manos de mi tío, aunque yo ya era mayor de edad en el extranjero en corea aun era menor, por lo que tuve que mudarme a la casa de mi tío, dejar mi escuela, a mis amigo a mi novia y adaptarme a la vida que el me ofreciera, al menos hasta que fuera legalmente libre…
La mansión era hermosa sin lugar a dudas, era digna del presidente Kim, sinceramente el hombre nunca me había echo nada malo, pero lo odiaba como si hubiera sido quien arruino a mi padre, mi pobre padre siempre había sido la sombra de ese hombre, al igual que yo era la sombra de mi perfectos primo KiBum, al cual no tenia la dicha de conocer, personalmente…
-hola, hijo, ¿como has estado?-ciertamente el hombre me estaba dando la bienvenida a la su casa con los brazos abiertos
-bien, tío-conteste fingiendo alegría por estar aquí-¿como ha estado usted?
-bien…-su teléfono timbro- lo siento Jong, nos vemos luego-se despidió con la mano y salió apurado mientras seguía hablando por teléfono
-joven, por favor sígame-una empleada me lleve hasta una habitación, la cual yo suponía debía de ser mi nuevo refugio-con permiso-la sirvienta se despidió apresuradamente
Cuando entre a la habitación, pensé encontrarme con un lugar vacío como ahora lo era mi vida, sin embargo e encontré con un lugar totalmente extraño, de paredes rosadas, el techo azul y loza blanca, todo en esa habitación parecía a ver sido sacado de un cuento para niños pequeños, incluso la cama, si es que podía o debía de ser llamada como tal, ya que era un tipo de árbol o arbusto de flores rosadas que de alguna manera había obtenido esa forma, las cobijas eran blancas con pequeños botones azules, la repisa estaba llena de libros que parecían mas bien revistas, por lo pulidos y brillantes que estaban, había una mesita o mejor dio un tronco que se encontraba en el centro de la gran habitación lleno de pequeñas golosinas de colores, también había un tocador, que a diferencia de todo lo demás era completamente normal, como retando a los demás muebles con su rareza…no sabia donde estaba, pero esperaba que mi tío no quisiera que me quedara en este extraño lugar…
-¿quien eres tu?-me gire al escuchar una vos desconocida
¡Dios mio!, pero… ¿en que mundo estaba?, había un chico un poco mas alto que yo, con la piel blanca, su figura era delgada parecía no ejercitarse, su cabello era rubios sus labios tenían una forma rara como un corazón siendo succionado por la parte de abajo, el chico parecía uno de esos querubines por la extraña ropa blanca que llevaba, como si se tratara de un batón para dormir
-yo soy, Kim…-el chiquillo se acercó a mi haciéndome callar al instante con su mirada penetrante
-no, tu no eres Kim…-el chico me sonrió maliciosamente, tomo un mechón de mi cabeza entre sus delgados dedos, sonrió y se señalo con su mano derecha-yo soy Kim
-yoy..yo.yoyo-que demonios le pasaba a este chico como podía acercase tanto a mi y tocar mi cabello de esa forma descarada, me ponía nervioso-yo soy Kim JongHyun-dije soltando apresuradamente, alejándome de el de golpe
-¡oh!, enserio, yo también soy Kim-dijo como estuviera confesándome un gran secreto-de echo yo soy Kim y luego Ki sin la M y luego ¡Bum!-dijo simulando un arma siendo disparada con su mano derecha y haciendo los efectos especiales con sus labios rosados-yo soy Kim KiBum
Este bicho raro era mi primo, ahora me quedaba claro porque nunca lo mostraban en publico, lo cierto es que yo solo lo había visto una vez, bueno a una versión mas joven de él, él no había cambiado mucho, de echo parecía el mismo solo que ahora él era mas alto, incluso era mas alto que yo..
-aaa, es un gusto-dije retrocediendo lentamente ya que el bicho raro se acercaba mas a mi-¿estas es tu habitación? –pregunte intentando distraerlo
-no y si-el bicho raro estaba lo bástate cerca como para poder sentir su respiración sobre mi cara, luego se alejó rápidamente-no porque tu dormirás aquí y si porque yo también
¡No!, dios ¡no!, ese chico raro no dormiría conmigo, prefería dormir en el pasillo o en la calle, siempre había odiado a su desconocido primo, el perfecto Kim KiBum
El chiquillo tomo mi maleta y sacar mis cosas desenfrenadamente
-¿que es esto?-me pregunto mientras sostenía una de mis revistas “personales”
-¿no sabe lo que es?, dios ¿cuantos años tienes?-pregunte tan sorprendido como horrorizado, ahora entendía porque ese niño era tan extraño ¿que hombre podría ser normal a esa edad sin porno?
-yo tengo 17-tomo la revista y la empezó a ojear-¿que es esto?-el chiquillo señalo una de la tetas de la imagen
-es una teta-dije en blanco desconcertado por una pregunta tan estúpida y obvia, ¿como demonios no podía saber que era una teta? incluso un bebe lo sabría…
-¿teta?-volvió a preguntar a un curioso, como si no lograra comprenderlo
-si una teta, buby, pecho como quieras llamarlo-dije molesto, ahora estaba casi seguro de que me estaba jugando una broma, ¡enserio!, como no podría saber lo que era
-yo tengo…pero no están así, los míos son planos, ¿eso es normal?-me pregunto mientras se jalaba la camisa que traía, lo suficiente como para que yo pudiera ver sus pequeños pezones rosados
Este bicho raro me la estaba jugando una mala broma o de verdad tenia una grabe enfermedad mental…
-tu eres un hombre-el chiquillo me miro extraño como si le acabara de decir que era un pájaro o una cigarra-los hombres no tenemos los pechos tan…rellenos-¡dios! jamás me imagine explicándole algo así a mi primo el perfecto KiBum, este chico debía de tener un defecto mental-solo las mujeres, tienen los pechos así-el chico dirigió confuso una ultima mirada a su pecho plano
-¡ah!, entonces como dices que soy un hombre, es normal-el chiquillo se soltó la polera y volvió a dirigir su atención a la revista, cambio unas cuantas veces las paginas y luego me miro intrigado-¿porque el hombre se come el pezón relleno de esa mujer?-él se incorporo y se acercó a mi grácilmente
-yo, el esta…-no sabia que contestarle, como es que él podía estarme haciendo estas clases de preguntas vergonzosas-es porque están teniendo sexo-dije apresuradamente sin pensar
-¿sexo?-el chico viro la cara unos segundos y luego hiso un puchero-porque el otro Kim solo me dice palabras extrañas que no conozco…¿que es sexo?-me pegunto mientras me señalaba y me miraba con los ojos entrecerrados, recriminándome su confusión
Quería tirarme por un acantilado y desangrarme lentamente, como demonios llegue a obtener este papel, ¿!porque me estaba preguntando esto a mi?!
-ah, no es…nada importante-dije sonriente-es algo horrible solo las personas feas y tristes lo hacen-miente JongHyun, no corrompas mas la mente de tu extraño primo
-ah-el chiquillo se dirigió de nuevo a donde estaban las revistas
No quería que tener que contestar otra de sus preguntas extrañas así que apresure ha tomar las revistas
-tu eres muy bonito, así que no deberías de ver esto-dije excusándome por mi prese pitada acción
El chico me miro extraño, se incorporo, y se acercó lentamente a mi, viéndome directamente a los ojos, sin saber como, quede acorralado entre el bicho raro y la cama/árbol, el chico me aventó a la cama y luego se encimo lentamente en mi, cruzo sus piernas entre las mías y se echo sobre mi pecho, luego me miro desde abajo, demonios podía sentir su reparación entrecortada en mi mentón haciendome sentir un incomodo cosquilleo
-tu también eres muy bonito-el chico se fue impulsando lentamente hacia arriba, restregándose por todo mi cuerpo, una de sus piernas toco mi entrepierna, enviando presión a mi cerebro-pero en este momento me gustaría que fuéramos personas feas y tristes-el chico me sonrió dulcemente y beso mis labios
No sabia como responder a esto, quería moverme, aventar al chico y correr lo mas rápido posible, pero el bicho raro me tenia apresado entre sus labios, uno largo uno corto y de nuevo uno largo sus besos eran extraños y dulces como el, mientras sus brazos se paseaban acariciando traviesamente mi pecho, el chico restregaba su pecho y caderas contra mi…
Mmm…Espera un maldito segundo, me esta besando un hombre…que es… mi primo, de mi familia, de mi mismo sexo…de mi familia…mi primo KiBum me esta besando apasionadamente.
¿! Mi primo KiBum Me esta besando ¡?