~~*¤*~~Suddenly ~~*¤*~~
Kim Bo Kyung
Habían pasado casi dos meses desde que Madara y Sasori aparecieran en la vida de los hermanos Uchiha, así como el otro inquilino que acababa con la comida que se supone era para dos semana, en menos de una. Todas estas personas en la misma casa habían acabado con la paciencia de Sasuke, quien todos los días estaba malhumorado y azotaba cuanta puerta y objeto le pasará por enfrente. Naruto había intentado hacer contacto visual con él, pero cada vez que sus miradas se encontraban, Sasuke lo miraba con odio o al menos hacía parecer que lo único que quería hacer en ese momento era golpearlo.
Para la mala suerte de Naruto justo en esos días había comenzado a sentir esa ansiedad que sabía que solo la sangre de cierto malhumorado podía calmar.
-¿Sasuke?-le habló un día que lo vio sentado en sillón de la sala, leyendo un libro.
-Qué-le contestó molesto.
-Nada-respondió Naruto al ver la mirada cargada de odio. Volvió a su habitación y se recostó en la cama, esperando que el sueño lograra calmar su ansiedad, pero ni servía de mucho cuando solo pensaba en posibles situaciones con Sasuke.
-Sasuke-
-Qué-le respondía el moreno sin siquiera verlo.
-Necesito tu sangre-decía firmemente Naruto.
-Bien por ti, ¿acaso soy solo una bolsa de alimento para ti o qué?-le respondía aún más molesto que la última vez.
-Tú tienes en parte la culpa de la ansiedad que siento por tu sangre, así que dámela-Naruto se abalanzaba sobre Sasuke, quien acababa recostado en el sillón.
-¡Guardias!-gritaba Sasuke y un montón de guardias romanos salían de la nada y alejaban a Naruto de Sasuke.
-Debo dejar de ver tanta televisión-dijo Naruto así mismo, después de imaginar semejante escena.
Pasaron dos horas y solo daba vueltas sobre su cama, hartó se paró y bajo directo a la cocina, intentado no mirar hacia donde Sasuke estaba aún leyendo su libro. En cuanto entró abrió el refrigerador y sacó de nuevo una bolsa de sangre, ya quedaban pocas, ese maldito de Madara era una tragón, sabía perfectamente que él tenía problemas de ansiedad en ocasiones pero aún así le había importado muy poco.
Bebió la primera bolsa, la cual se tomó en cuestión de segundos, fue por otra y así fue su rutina hasta que se acabo por completo las bolsas del refrigerador, estaba seguro que Madara lo mataría en cuanto se diera cuenta. Dejó caer su cabeza sobre la mesa, sabía que su boca estaba completamente teñida de rojo y seguramente sus ropas tenían manchas, pero no le importaba, sabía que lo único que podía calmarlo era esa persona que estaba en sala. De nuevo fue al refrigerador ahora saco toda la comida que pudo y comenzó a devorarla, sabiendo que eso no calmaría nada, pero estaba seguro que Sasuke se negaría y seguramente el se iría sobre el cómo en su visión y para su mala suerte en ese momento Itachi como Sasori llegarían y creerían que estaría haciéndole daño a Sasuke lo cual haría que lo mataran.
Cuando se acabo la comida volvía a dejar caer su cabeza sobre la mesa, no supo cuanto tiempo estuvo así. De pronto oyó que alguien se sentaba a su lado y entonces un adictivo olor llegó a su nariz, cuando la cabeza se encontró con el brazo de Sasuke tendido en la mesa y con una cortada en él, por la cual salía sangre, no lo pensó dos veces, lo tomo entre sus manos y lo llevó a sus labios. Al cabo de un minuto se dio cuenta que no podía beber cuanto quisiera, abrió los ojos y despegó sus colmillos de la piel de Sasuke. Se limpió los labios con la manga de suéter, miró como Sasuke iba al fregadero para limpiarse la herida y se sintió basura al ver que nada de lo que había pensado era real.
-Sólo tenías que pedirlo-le dijo Sasuke, como si estuviera regañándolo, tal vez si lo estuviera haciéndolo.
-Has estado demasiado irritable estos días-
-Siempre estoy irritable, solo que ahora lo demuestro más-
-Lo siento-
No hubo respuesta por parte de Sasuke, ni la hubiera esperado, se paró de donde estaba y se puso justo a las espaldas del moreno, en cuento este volteó se topó con los ojos de Naruto sobre los de él.
-No me digas que quieres más-le dijo un poco enojado.
Pero Naruto no le respondió tan solo, se acercó al rostro de Sasuke y lo besó, hubiera pensando que este lo hubiera obligado a separase del él, pero al contrario, esto lo atrajo más hacia él, tomándolo de la nuca y profundizando el beso. Estuvieron así varios minutos hasta que oyeron la puerta abrirse. En cuanto se escuchó la voz de Itachi, Sasuke se quitó de encima a Naruto y corrió hacia donde estaba su hermano.
-Pensé que no llegarías-le reclamó Sasuke, ahora Naruto entendía que era lo que Sasuke hacía sentado en la sala tantas horas.
-Me quedé trabajando hasta tarde-
-Que conveniente-
-¿Qué dijiste?-le preguntó Itachi, al notar cierto tonó en el hablar de su hermano.
-Hueles a alcohol, obviamente estuviste bebiendo, seguramente con ese vampiro-
Había dicho con tanto despreció la palabra vampiro que Naruto se sintió como una basura, aunque tal vez solo lo estaba diciendo porque le caía mal Sasori, o al menos eso quería pensar Naruto.
-Si eso fuera cierto no es de tu incumbencia, al menos yo no tengo sexo con él en la casa-
Sasuke supo inmediatamente que Itachi había estado esperando el mejor momento para decirlo eso –Bien, pues espero que sigas poniendo el ejemplo-
-¿Me estas acaso regañando, Sasuke?-
-No, solo creo que al parecer mi hermano se está revolcando con un vampiro- fue claro que tal observación hizo molestar a Itachi.
-¡Tú también lo haces y no te digo nada!-
-¡Casi lo mataste cuando nos encontraste!-le reclamó Sasuke a su hermano.
Naruto comenzó a sentirse algo incómodo en esa charla, quería salir de ahí, lo cual podía hacer fácilmente, pero también quería seguir escuchando así que optó por quedarse en un rincón y continuar viendo la pelea.
-¡Estaba bebiendo de tu sangre!-
Sasuke cerró con fuerza sus puños, era obvio que no tenía argumento para lo que había dicho su hermano. Subió molesto las escaleras y se encerró en su cuarto. Itachi miró a Naruto cuando su hermano ya se había ido, sintió como un escalofrió recorría su espalda, si pensaba que Sasuke tenía una mirada fría en ese momento Itachi le ganaba.
Entró a su cuarto después de la pelea, se quedó mirando en techo como acostumbraba últimamente, sintió una ráfaga de viento proveniente de la ventana, pero no se movió. A los cuantos segundos sintió como si alguien lo estuviera vigilando, se enderezó en busca de alguien parado en la puerta o cerca del armario, pero no había nadie, miró hacia la ventaba abierta, pero lo único que pudo ver fue que la luz del vecino estaba encendida.
Cuando ya estaba quedándose dormido, escuchó unos pasos en su habitación, antes de que pudiera reaccionar para de quien se trataba, notó que alguien se metía entre las sábanas de su cama y se acostaba a su lado, pronto se dio cuenta de que era Sasuke.
*~*~*
Su madre la había a estado llevando a que le hicieran análisis de todo tipo, con el pretexto de que transformación estaba tardando demasiado, sin embargo después de lo que Gaara le había dicho ya no podía creer de todo en ella. Había conseguido del sótano de Naruto varias fotografías de cuando era pequeña, la verlas se sintió un poco mal por todas aquellas veces en que había insultado a Naruto y también por haberse empeñado con Sasuke.
-¿Eras a lo que te referías esa vez que Naruto y yo peleamos en la escuela?-le preguntó Sakura a Gaara, últimamente también pasaba mucho tiempo en ese apartamento, por suerte Hinata la cubría.
-Sí-
-¿Por qué tardaste tanto tiempo en decírmelo?-
-Ya te lo dije por tu madre- Gaara no cambiaba su posición mientras contestaba las preguntas, estaba en el sillón lanzo una pelota al aire y atrapándola una y otra vez.
-¿Me lo hubieras dicho, si hubiera obtenido a Sasuke al final de todo?-
-Es probable-
-Tal vez eres un poco cruel-
-¿Por qué lo dices?-Gaara por fin se enderezó cuando escuchó esa pregunta.
-Decirme la verdad, cuando ya hubiera destrozado la vida de mi hermano-
-Sí, tienes razón, soy un poco cruel-
Sakura se acercó y beso en los labios a Gaara –te he dicho que no hagas eso-le dijo Gaara mientras se besaban.
-No creo que alguien esté viéndonos-dijo Sakura y siguió besando al pelirrojo, quien en poco tiempo también se dejo llevar.
Cuando volvió a su casa, se encontró a su mamá y Orochimaru con ella, recientemente cada vez que veía ese hombre tenía un mal presentimiento.
-Sakura por fin llegas-le dijo su madre al verla entrar -¿Dónde estuviste todo el día?-
-Con Hinata-
-Últimamente pasas mucho tiempo con ella-
-Supongo-dijo Sakura sin darle importancia.
-Orochimaru ha venido a buscarte- le dijo Tsunade, haciendo que Sakura notará cierta maldad en lo que estaba diciéndole.
-¿Por?-Sakura sintió que debía de salir corriendo en ese momento, no le gustaba para nada el como la estaban mirando ambos adultos.
-Serás sometido a un procedimiento de inseminación artificial-dijo Tsunade como si eso fuera lo más normal del mundo.
-¡¿Qué?!-preguntó, creyendo que había oído mal, lo que su madre le había dicho hace unos momentos.
-Como sabes tú transformación es demasiado lenta y pensamos que podríamos sacar ventaja de eso, así que por eso te hicimos las pruebas necesarias para saber si al menos para eso eras apta-
Fue entonces cuando supo, que su madre era realmente la persona que Gaara le había descrito, si antes tenía dudas sobre lo que él le había contado sobre su madre, en ese momento todas se esfumaron.
-¡Estás loca, ¿y quién será el padre él?-dijo refiriéndose a Orochimaru – no pienso tener un hijo de esa persona-
-Descuida Sakura, el hijo no será de él, necesitamos alguien con buenos genes- volteó a ver a Orochimaru-no te ofendas-
-Descuida-le dijo Orochimaru sin rencor.
-Entonces ¿de quién será?-
-Pronto lo sabrás y estoy segura que te encantará la idea después de todo-
Ambos adultos parecía que miraban con codicia a Sakura, no entendía nada de lo que estaba pasando, que se supone que estaban tramando su madre como ese hombre, tal vez Gaara supiera, pero de haber sido así debía de haberla prevenido, tal vez después de todo Gaara solo había actuado para ayudar a ese par con sus planes.
*~*~*
Despertó y como era costumbre se encontró con un Sasuke totalmente malhumorado y un Madara como si nada sentados en la mesa de la cocina.
-Iré a tú sótano si no te importa-dijo Madara y se fue dejando a ambos chicos completamente solos.
-¿Sigues molestó por lo mismo?-se aventuró Naruto a preguntarle a Sasuke.
-Mi hermano y ese tipo, están saliendo-dijo lleno de irá Sasuke y apretando con fuerza los puños.
-¿Cómo lo sabes?-
-Los vi, besándose ayer en el cuarto de mi hermano-
Naruto entendió perfectamente el porqué Sasuke había acabado en su habitación la noche anterior, debió de haberse molestando mucho con su hermano, como para buscar su compañía.
-No veo que tiene de malo-
-¡Es un vampiro!-
-¡Igual que yo!-le recordó Naruto.
-No es lo mismo-
-¿En que cambia?-
-No es lo mismo, y punto-
Solo consiguió que Sasuke se enojará aún más y de nuevo se fuera a encerrar a su cuarto, estaba más que claro que lo que Sasuke sentía en aquellos momentos eran celos, probablemente porque Itachi siempre había estado al pendiente de él y solo de él, ahora por lo visto tenía alguien más en su mente de quien preocuparse, y probablemente eso no le gusta a Sasuke.
Su celular sonó, era Gaara - ¿Hola?-dijo Naruto al auricular.
-Necesito que nos veamos, estoy en el parque frente a la avenida 501, es urgente- y colgó.
Naruto se apresuró a cambiarse, cuando estuvo listo, fue a tocar al cuarto de Sasuke, pero este nunca le abrió, así que le gritó para avisarle que saldría. Cuando iba bajando las escaleras escucho unos ruidos en el sótano, pero recordó que Madara estaba ahí así que salió sin preocupaciones.
Llegó a donde lo había citado Gaara, pero no lo veía en ninguna parte, se sentó en una de las bancas a esperar a que viera a su amigo, al no verlo, le marcó, pero no respondió, decidió que esperaría unos minutos más y se iría. De pronto sintió un pinchazo en su cuello, trato de voltear, pero su cuerpo no se movió, en tan poco tiempo su cuerpo se encontraba totalmente paralizado.
Alguien se sentó al lado de Naruto, era Gaara, quien en la mano traía consigo una jeringa, la que había pinchado a Naruto hace unos momentos.
-Lo siento-fue lo que dijo Gaara.
*~*~*
De la nada habían aparecido cinco vampiros en el sótano, grito el nombre de Naruto varias veces pero nadie le respondió, tuvo que luchar el solo contra ellos, cuando acabo con ellos, se sentía completamente exhausto, era claro que su edad no le estaba ayudando. Camino hacia las escaleras, pero su vista comenzó a fallarle aún así siguió. Al llegar a la puerta del sótano y abrirla se encontró con otros tres vampiros esperándolo, quienes le dieron una patada aventándolo de nuevo hacia abajo.
Sasuke escucho ruidos, desde hace rato que los oía, pero como traía unos audífonos puestos no le había prestado mucha atención. Salió de su cuarto en busca de Naruto para saber lo que este estaba haciendo, apenas había entrado cuando alguien por detrás de él, le puso un trapo en su boca y al poco tiempo cayó inconsciente.
*~*~*
El efecto de lo que le había inyectado Gaara empezó a acabarse después de unos minutos, comenzó a mover los dedos de la mano con dificultad, pero aún así no podía moverse por completo.
-Gaa…-
Gaara volteó sorprendido hacia Naruto, noto como movía los dedos de su mano, supo que el suero ya estaba dejando de surtir efecto.
-Naruto- dijo tomándolo por los hombros y zarandeándolo, estuvo así unos minutos, hasta que Naruto pudo mover con dificultad sus brazos y sus piernas. Gaara lo ayudo a levantarse y lo llevo a la parada de taxis –Naruto debes ir con Sasuke- le dijo mientras lo metía en el taxi y le decía la chofer a donde debía llevarlo.
No entendía nada de lo que estaba pasando, al parecer Gaara le había inyectado algo y ahora le pedía que fuera con Sasuke, abrió los ojos como platos, sintió un mal presentimiento, solo rogó porque nada le hubiera pasado a Sasuke en su ausencia, además Madara estaba con él, podría protegerlo.
Cuando llegó a la casa, su movilidad había vuelto casi por completo, aún se tropezaba al caminar, miró la casa antes de entrar, se veía como si nada, abrió la puerta, todo se veía normal excepto que la puerta del cuarto de Sasuke estaba abierta y no oía nada.
Subió las escaleras con la rapidez de una persona normal, entró al cuarto de Sasuke y no había señales de él, bajo al sótano en busca de Madara. Prendió la luz cuando estuvo ahí, busco a Madara con la mirada, pero no lo veía, además de que el lugar era un desastre. Comenzó a sentir una gran desesperación, de pronto oyó un quejido y se tranquilizó un poco. Madara estaba de varias cajas.
Madara se veía completamente abatido, era claro que había recibido una gran paliza.
-¿Dónde está Sasuke?-le preguntó con desesperación, pero Madara estaba un tanto inconsciente, que no podía ni hablar.
Tomó su celular y le marcó a Sasuke, subió las escaleras esperando que le contestará, pero solo seguía sonando, sitió que el mundo se le caía encima, cuando el sonido del celular de Sasuke salía del cuarto de este.
Salió corriendo de la casa, y buscó en los alrededores una señal del moreno, pero no encontró nada, desesperado llamó a Itachi. El Uchiha mayor llegó bastante rápido al parecer de Naruto, venía acompañado de Sasori, quien se podía observar estaba en alerta.
-¡¿Qué ha sucedido, como que Sasuke ha desaparecido?!-le preguntó Naruto, después de que Sasori fuera en busca de Madara al sótano.
-Salí y cuando regresé ya no estaba-
Itachi le plantó un puñetazo a Naruto en la cara, Naruto supo que había tenido ganas de hacer eso desde hace tiempo, notaba como lo miraba cuando estaba cerca de Sasuke.
Lo tomó por el cuello de la camisa -¡se supone que por eso deje que te quedarás aquí, para que protegieras a Sasuke!-lo aventó, Naruto cayó de sentón en el suelo y a pesar de que era un Vampiro y sabía que era mucho más fuerte que Itachi, le tuvo miedo -¡Seguramente le dijiste a Orochimaru como llegar a mi hermano, después de todo tu trabajabas para él-
Naruto no entendía nada, nunca le habían dicho que tenía que proteger a Sasuke, creía que la única razón por la que estaba en esa casa, era por su conexión con Sasuke y evitar que él se metiera a hurtadillas y bebiera la sangre de Sasuke. Sabía que Itachi no dejaba salir a su hermano, pero creía que era por la situación de Orochimaru con Sasuke, después de todo una vez lo había mandado matar, además si alguien debía de proteger a alguien en todo caso, era Madara, quien se supone era fuerte, tanto, que el dicho Concejo lo había convertido a él, para controlarlo. Itachi lo golpeo de nuevo, tal vez lo hizo varias veces más, pero se detuvo hasta que Sasori lo calmo un poco, estaba claro que Itachi no estaba en sus cabales.
-Tranquilízate-le había pedido Sasori a Itachi.
-¡Me dijeron que lo tuviera bajo mi techo, porque protegería a mi hermano!-
-Y también te dijimos que debías de decirle la situación a Naruto-le recordó Sasori.
-¡No confiaba ni confió en él!-
Naruto sintió enseguida el despreció de Itachi, y no podía culparlo de nada, aunque también se dio cuenta en ese momento que tanto Itachi como Sasuke no eran tan diferentes después de todo.
-Si no confiabas en él, no debiste dejarle a tu hermano-
-Madara también estaba aquí-le contestó Itachi desesperado.
-Sabías que no era muy fuerte, si no confiabas en Naruto, debiste de haber buscado otra manera de proteger a tu hermano-
Tocaron a la puerta, todos se callaron, Itachi corrió abrirla esperando que su hermano apareciera detrás del marco, pero se equivoco un chico pelirrojo con la cara manchada de sangre fue lo que apareció frente a él.
-¿Gaara?-se apresuró a decir Naruto y caminar hacia él.
-Orochimaru, tiene a Sasuke, lo siento-
Naruto no entendía nada, porque Orochimaru querría a Sasuke, volteó para buscar respuestas, pero solo pude ver como Itachi se apresuraba a salir y encendía el carro para luego irse.