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Vanilla Twilight I por Miikel

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Notas del capitulo:

Buenas!!!!!!!!!!!!!

Miikel ha vuelto con capitulo nuevo n.n

se que me he tardado, lo siento, mi excusa es que ultimamente me he obsesionado con fics de los caballeros del zodiaco... asi es tengo mi lado otaku xD

me enncanta shun x hyoga, en realidad me encanta shun x todos Lol pobre conejo... en fin

en el capitulo anterior Alice tuvo una misterio vision, hoy veremos de que se trata.

ultimamente mi inspiracion  me ha estado violando constantemente asi que lo mas seguro que subire el capi 32 esta misma semana (no lo prometo) solo si me da tiempo de hacer las correciones correspondientes

Gabriel guapa, no pasa de veras jejeej es que yo lo habia aclarado en el primer capitulo, pense que lo habias olvidado o no se pues jejeje. en cuanto a tu pregunta te dire que honestamente no he leido fics de los vengadores, yo soy mas de los que lee originales (excepto ciertas parejas que son la excepcion)

por lo menos en mi caso me gusta: *Edcob*Sterek*Kogan(big time rush)*shyoga etc etc ya me excedi escribiendo cosas que ustedes lo mas seguro no les interesa jejeje sorry

 

–        Lo vi todo… – me dijo agarrando mi brazo de forma abrupta haciéndome dar un respingo del  susto, no por su extraño movimiento sino por el tono de voz tan oscuro que empleó.

–        Quiere morir…

–        ¿Qué?

–        El realmente quiere morir – dijo negando horrorizada

–        ¡Alice!,  ¿que fue lo que viste?

–        Es Edward Jacob, ¡va a suicidarse!

Aunque sus palabras me parecieron absurdas y sin sentido, su expresión de horror y preocupación me hicieron formular la pregunta en cuestión

–        ¿De qué estás hablando Alice?, ¿suicidarse cómo?, los vampiros no pueden morir, no a menos que…

En ese pequeño lapso de tiempo entre mis cavilaciones deduje  que no era un suicidio si no un homicidio, gire mi vista acusadoramente hacia Seth

–        ¿La manada piensa que Edward me asesino?,  por eso Edward se fue…  ¿quieren a Edward no es así? – recrimine acercándome a Seth, sin darle oportunidad válida para responder. De no haber sido por Alice quien me tomo del brazo rápidamente habría seguido sacando acusaciones, a mi punto de vista no era un secreto de que la manada no estaba feliz con la unión entre ambos clanes y de alguna forma querían fregar a los Cullen ya que no podían hacerlo directamente con la imprimación de Seth

–        No es  nada de eso Jacob, Edward ha decidido ir con los Vulturis para que le concedan su petición de suicidio

–        ¿petición de suicidio? – repetí  confundido

–        No hay tiempo, Edward no ha respondido mis mensajes y en estos momentos ya se ha marchado , debemos irnos ya, el esta decidido y nada de lo que yo diga le hará entrar en razón, debe verte en persona, ver que estas aquí, que estás bien – formulo con acelero

–        ¿ir a donde?

Alice me llevo a rastras hasta fuera de la casa directo a su auto, yo por mi parte me llene de consternación, justo cuando pensé que las cosas mejorarían todo se volteaba para mi, inevitablemente las palabras ‘suicido’, ‘muertes’ y ‘profecía’ venían a mi mente, la oráculo me lo había advertido claramente y ahora lo podía comprobar

–        “si te marchas le llevaras la muerte a quienes más amas”

Si algo le pasaba a Edward, yo no sabría qué haría

–        Jacob no tenemos tiempo, sube al auto ahora – me llamo Alice sacándome de mi mente

Di un inmenso suspiro maldiciendo internamente a la profecía que presuntamente empezaba a hacerse realidad. Camine hacia la puerta del copiloto deteniéndome a la mitad, mire a Seth y le llame silenciosamente

–        Quiero que vayas y le digas a mi papa que estoy vivo, voy a llamar a tu casa en cuanto pueda hacerlo para hablar con él, pero no le digas a donde voy, no quiero causarle más preocupaciones – le dije en cuanto se acerco

–        De acuerdo – respondió

–        ¡Oh! y Seth, algo mas, necesito que me hagas un favor  ya que no tengo tiempo, necesito que vayas al bosque en donde fuimos el día que nos enfrentamos con ese vampiro y busques a un niño pequeño llamado Peter, es rubio y tiene unos 3 o 4 años, él estará muy solo y desconfiado así que no lo asustes, dile que yo te envié y ponlo a salvo – tras esas instrucciones cree una bola de luz inofensiva con la cual selle el cuerpo de Seth, de esa forma pudiese ser capaz de ver la entrada invisible y entrar por ella, ya que solo otras hadas podían entrar

–        ¿entendiste Seth?, esto es importante –  el asintió y yo le asentí de vuelta dándole las gracias, corrí hacia el auto y colocándome el cinturón Alice inicio la marcha parando de frenazo un minuto después y retrocediendo al punto inicial con una maestría tan propia de ella. Bajó la ventanilla asomando la cabeza

–        ¿Ahora qué? – inquirió Seth

–        Desnúdate guapo, necesitaremos tu ropa – pidió Alice. Seth la miro como si estuviera fumada. Ella le explico que era vital ocultar mi aroma  y que el único olor suficientemente fuerte para opacar el de un hada  que conocía era el de un lobo

En cuanto Seth nos entrego todo lo que llevaba puesto nos marchamos, no sin agradecerle nuevamente, él tendría mucho que explicar en nuestra ausencia.

La noche era negra, demasiado oscura y tétrica, la excesiva quietud en la calle daba un aire siniestro al pueblo, Alice aceleraba con fuerza a la máxima capacidad del Mercedes Benz en el que veníamos

Durante el trayecto mi mente fue bombardeada por un sinfín de preguntas y escenarios en los que me planteaba e imaginaba a un Edward siendo masacrado o muriendo de alguna forma, cada una de ellas peor que la anterior y eso solo me causaba aflicción y culpabilidad, me sentía responsable de todo este problema y en gran parte lo era

Le he causado tanto sufrimiento a Edward que me llena de temor pensar en que es eso posiblemente los frutos que siempre cosechamos de nuestra relación, era una cruda verdad, a Edward le causo más problemas que momentos gratos

El no merece sufrir más, el merece estar en paz, ser feliz

Me concentre en él y nada más que en el tratando de sentirlo, tratando de buscar alguna conexión que me permitiese anclarme a él y sentir lo que estuviese sintiendo, cosa que no dio resultado, lo cual me lleno de coraje puesto que con Derek si resultaba, incluso cuando no lo estaba intentando

Pose mi mirada en Alice, quien se encontraba concentrada únicamente en conducir, estaba callada y muy seria, podría decirse que perturbada o molesta, obviamente no era para menos con Edward queriendo suicidarse. En mi mente me preguntaba qué tan terribles podrían ser estas personas, bueno si es que eran personas, a las que Edward fue o está por ir a recurrir, si ponían a Alice así  de consternada me daban escalofríos de solo imaginármelo

Al cabo de lo que me pareció una hora llegamos al aeropuerto

–        ¿Jacob? – llamo ella a lo que la mire intrigado

–        ¿Qué sucede?

–        ¿puedes hacer los ojitos dorados para mí?

–        ¿te refieres a la magia?

–        Si eso, ¿puedes?

–        Depende, ¿para qué?

–        Vine apresurada y no pensé que había que traerte pasaporte

La mire con incredulidad jadeando una maldición, no conocía ningún hechizo para hacer que la gente hiciera lo que yo quisiera o algún variante

–        ¿sabes latín? – inquirí

–        No

–        Entonces estamos jodidos

Hiso un gesto de resignación y yo me hundí en mi asiento posando mi visión hacia la ventana sintiendo como la impotencia empezaba a ahogarme.

Mientras cavilaba en que otras posibilidades teníamos una lujosa limosina paso frente a mí, de lado de la ventanilla, le seguí con la mirada y al detenerse note como un uniformado conductor salió apresurado a abrir la puerta trasera, al hacer esto una mano cubierta con un guante oscuro y un anillo se extendió hacia el aire esperando a ser tomada, el hombre la tomo y ayudo a salir a una mujer la cual iba muy elegante, con solo verla era fácil deducir que era rica, altiva y ambiciosa, sacudió su ondulado cabello y con un gesto de superioridad empezó a cruzar la calle sin importarle nada

En cuanto ambos salieron de mi campo visual una idea llego a mí como posible solución

–        Alice… ¿recuerdas el día del centro comercial, cuando todas esas mujeres estaban viéndome? – inquirí ganándome una extraña mirada de su parte

–        Jacob, no veo en que nos pueda ayudar eso justo en este momento

–        Lo sé, tengo una idea  – le asegure bajándome con prisa y explicándole en el trayecto lo que se me había ocurrido

 

–        Así que… ¿vas a drogarla con tus feromonas para volverla loca de deseo y que quiera hacer lo que tú desees solo para complacerte? – pregunto en cuanto llegamos a fila para comprar los pasajes

–        Si algo así

–        ¿y funcionara?

–        Eso espero, si no solo le borro la memoria

Dejamos de hablar por un breve momento y yo inicie con la labor de llenar el aire con una gran cantidad de mi aroma ‘especial’

–        ¿Me veo bien así?  – pregunte de pronto. Alice pareció inspeccionarme de arriba abajo, me desabrocho la mitad de los botones de mi camisa en orden descendiente y revolvió un poco mi cabello

–        ¿Por qué estas rubio? – inquirió extrañada

–        ¿Se me ve mal? – le respondí con otra pregunta

–        No, es solo que no se, es raro

Le reste relevancia a su comentario y me enfoque únicamente a seguir esparciendo mis hormonas en todo el lugar, para cuando llego nuestro turno nos encontramos con una joven uniformada de hermosas facciones y entusiasmo desbordante

–        Bienvenidos al Aeropuerto Internacional Dulles, ¿Cómo puedo ayudarles? – dijo ella sonriéndonos amablemente, yo solo suplique entre mis adentros que todo diera resultado

–        Hola hermosa… – le solté enseguida dedicándole mi sonrisa más coqueta y atrevida. Note como ese gesto la cohibió pero lo disimulo demasiado bien

–        Ho-hola – respondió

Volví mi boca en un casi imperceptible puchero girando la posición de mi cabeza asegurándome de transpirar confianza y sensualidad

–        ¿sabes?, he estado observándote – le dije. Note como su rostro se incendio, ella estaba usando todo su esfuerzo para no reír nerviosamente

–        Y debo decir que eres toda una mujer, dime encanto ¿tienes novio? – la chica negó sonriendo

–        ¿en serio? ¿y se puede postular para el papel?, porque estoy muy, MUY interesado – mientras le hablaba me aseguraba de embriagarla con mis feromonas a no dar más, con la intensidad que estaba asechándola de seguro ella estaría mojando sus bragas en esos momentos. Ella solo reía y reía ante mis comentarios, era como si solo fuéramos ella y yo, como si los demás no existieran

Un pequeño comentario por allí, un halago por acá y la chica se acaloraba ante mis atenciones, acabo de casi cinco minutos seguíamos hablando, eso de ligar se me daba tan natural, lo cual me parecía extraño, tendría que ser por todo el asunto de ser hada porque no me consideraba un seductor en absoluto

–        Así que verónica, ¿Qué me dices?, ¿vamos por un trago?

–        Bueno me encantaría pero es que mi turno acaba en 40 minutos

–        ¡Oh!… es una pena, tendrás que compensarme eso preciosa – le solté enviándole una intensa ola de feromonas esta vez incluyendo ondas estimulantes a su cuerpo, ya la tenía justo donde quería

–        Yo haría lo que fuera por estar contigo muñeca ¿tu harías todo por mi? – ella pareció entrar en un trance pues su expresión se veía perdida. Asintió suavemente sin mover el gesto tan extraño que llevaba

–        Necesito que hagas algo por mi entonces – coloco mi mano sobre la suya de forma sugerente, tenía a la pobre chica a punto de explotar, estaba completamente sonrojada y esforzándose por mantener una expresión tranquila

–        Lo que quieras… – soltó ella sin decirme nada mas

–        Veras hermosa, necesito que me vendas dos vuelos a Italia sin pedirme ningún tipo de documento, ¿entiendes?

Ella abrió los ojos exaltándose, como si mis palabras la hubiesen hecho reaccionar, pero yo sin demoras le aplique todo un conjunto de hormonas a un nivel más extremista, despertando en ella una fijación o deseo obsesivo y enfermizo hacia mi persona, pude sentir lo excitada y dispuesta que se puso solo con verme

–        ¿me deseas? – le pregunte casi en un susurro provocador terminando de cortar la distancia hasta donde lo permitía la taquilla  entre nosotros. Ella siseo un “si” sofocado

–        De acuerdo, pero primero necesito tu ayuda – culmine en un tono más neutral

Al cabo de lo que fue un minuto o dos estábamos en espera, era sorprendente nuestra suerte al haber conseguido un vuelo internacional en prácticamente nada de tiempo

No tendríamos que aguardar mucho para el vuelo lo cual era bueno, pero sin embargo estaba poniéndome nervioso, rogaba por poder llegar a tiempo para detener a Edward

En ese momento que mi mente cavilaba sin descanso tome conciencia de lo que había dicho antes Alice cuando tuvo la visión

–        “los Vulturis”

¿Serian los mismos Vulturis que masacraron a las hadas?, según lo mencionado por Chris el primer ataque fue en Italia, ¿era coincidencia?

–        “no”

Un escalofrío me sacudió, no quería saberlo pero era necesario. Mire a Alice de reojo y estaba hablaba por teléfono, algo sobre venir buscar el auto en el aeropuerto. Recordé que había quedado en hablar con mi padre pero mi mente estaba hecha un desastre, había tanto en mi cabeza que no podía procesar nada, mejor le hablaría cuando ya me asegurase de que Edward estaba fuera de peligro

Suicidarse… dios… ¿Cómo se le ocurrió hacer eso?, siempre he visto el suicidio como un acto egoísta y cobarde pero supongo que para un vampiro debe ser liberador, a veces me olvidaba de que Edward no es un humano mas, de que él tiene un concepto bastante frívolo de sí mismo y se considera un demonio condenado hasta el grado de que me ve como lo único bueno en su existencia

¿Por qué tienen que ser tan extremistas los vampiros?

–        Jacob –  oí a Alice llamarme a lo que yo simplemente la mire sin mencionar nada

–        ¿estás bien?

Di un largo suspiro apoyando mi espalda en el soporte y mirando levemente hacia arriba di un largo suspiro para acabar negando suavemente con la cabeza

–        ¿si te dijera que esto es mi culpa?

–        Tú culpa… ¿Cómo podría esto ser tu culpa? – inquirió en un tono que denoto lo ridículo que le sonaba eso

–        Yo… hay una… olvídalo. Mejor cuéntame una cosa. Estos Vulturis que mencionaste antes, ¿Quiénes son?

Mi pregunta no la sorprendió, pero sin embargo pareció meditar que palabras decirme antes de contestar

–        Pues ellos, son probablemente el aquelarre más antiguo y poderoso de vampiros, son considerados como la realeza entre nosotros, ellos velan por que se cumplan las normas que nos rigen

–        ¿normas?, pensé que al ser vampiro hacían los que les viniera en gana

–        Bueno en realidad solo es una norma: pasar desapercibidos ante los humanos. Ya sabes, mantener nuestra existencia en secreto

–        Ya veo…

 

–        Es una regla muy simple y sin embargo muchos mueren por descuidados

–        ¿Qué quieres decir? – inquirí al no estar seguro de haber entendido

–        Cuando alguien no respeta esa regla, los Vulturis le dan muerte como castigo, no son de los que dan segundas oportunidades

–        Pero si es así, entonces no tienen razón para matar a Edward, no se ha expuesto ¿verdad?

–        Lo sé, pero Edward está realmente determinado, el insistirá, buscara la forma. Además los Vulturis no son precisamente tolerantes o comprensibles, son la personificación de lo que se supone que somos, la razón por la que se te pone el pelo de punta, pueden llegar a ser tremendamente aterradores si así lo desean, si bien están bien liderados y organizados también son crueles y despiadados. Si Edward decidió ir con ellos es porque realmente desea la muerte

Las palabras de Alice no  me dieron tranquilidad, yo continuaba rogando por poder detener y evitar lo peor. El tiempo pasó con rapidez y antes de que me diera cuenta ya estábamos abordando el vuelo, mi pecho oprimía con rudeza y la palabra ‘muerte’ no salía de mi cabeza

 

*Edward*

 

Desde el día que comprendí que estaba enamorado de Jacob, supe que sería un amor del cual jamás olvidaría, del tipo que perdura hasta el fin de los tiempos, por eso yo tome la tarea de protegerlo por siempre, de cuidarlo, de hacer desaparecer cualquier atisbo de dolor en su vida.

Mi amor por él ha sido como una especie de compensación por nunca haberme enamorado antes, ni en mis años como humano fui capaz de hallar alguien así. Jacob era mi primer y único amor y lo que yo sentía por el solo podía ser comparado con el sol, que a pesar de no moverse, todos los días sale para llenar al mundo con su luz, así éramos él y yo, Jacob era mi sol, la razón por la que en mi pecho había calor, la razón por la cual mi oscuridad se hacía menos profunda, la razón por la cual me podía sentir como alguien normal, era la razón por la cual en mi nacían los sentimientos que me otorgaban una especie de humanidad más completa

Jacob llenaba todos los hoyos dentro de mí, con su luz era capaz de cubrir todas mis necesidades, el se había convertido el cuerpo principal de mi atención, mi deseo de protegerle era tan fuerte como el amor que le profese tantas veces

El era tan impresionante, tan capaz, tan intrépido que podía adaptarse y proporcionarme todo lo que yo requiriera, cuando estaba hambriento él era el brebaje ideal, cuando dentro de mi hubiese ira él era como una suave lluvia que apaciguaba con su roció cada brasa dentro de mi

Para un sujeto como yo no había manera de existir sin necesitar de Jacob, el sencillamente era obsesivo para mi, mi ángel, mi perfecta felicidad, mi amor eterno del cual sería incapaz de borrar de mi mente

Por eso es que con su muerte yo volví a morirme, con su ausencia volví a ser lo que era antes de conocerle, con su partida me quebré y desmorone quemándome hasta convertirme en cenizas para luego congelarme en un profundo dolor insoportable e irrevocable

¿Cómo podía yo existir sin mi Jacob?, ¿Cómo era si quiere posible seguir de pie sin él a mi lado?, la idea de vivir sin él era demasiado asquerosa, perturbadora, inmunda, inaguantable… pero eso ya era como pelear con el aire, o que un pez intentara vivir fuera del agua. Jacob era mi hábitat natural, ¿como esperaban que lograra sobrevivir en un mundo sin él?

¿Existir sin Jacob?

¿Qué clase de tortura cruel y despreciable era esa?, la locura consumiría mi cerebro antes de lograr algo como eso, nadie, NADIE jamás lograría llenarme como lo hacia él. Así que, ¿Qué caso tenia siquiera intentarlo?

Pero sin embargo, a pesar de mi dolor, yo intente hacer lo que hacían otros para superar la tragedia, intente recordar solo los buenos momentos que viví con mi amado Jacob, pero estos solo me causaban dolor, porque eran un recordatorio de que Jacob ya no era mío, que ahora pertenecía a un mundo en el que las almas descansaban después de la muerte

Sería ideal si yo pudiera ir a ese lugar con él, pero para mi desgracia mi muerte no me llevaría con él ni a ningún lado, ya que mi alma había sido condenada a otro destino el día en que me convertí en lo que soy.

Cuando las memorias y los recuerdos se tornaron pesados me marche de ese lugar, los abandone a todos sin dejarles explicaciones algunas, ¿Qué explicación? Ellos sabrían muy bien, conocían mis razones y motivos, estar en ese lugar me recordaba demasiado a Jacob y su recuerdo era como una rosa, que a pesar de ser increíblemente bella me hería con sus espinas

En el bosque, en los prados, en los lugares públicos, donde fuera que mis pies pisaran encontraba un lugar en el que compartí momentos con Jacob y eso era atormentador, desalentaba, se llevaba mi cordura lejos

No podía aguantarlo más, necesitaba morirme, necesitaba mi remedio de muerte, porque para mí ya era tarde y no había más caminos o respuestas

Donde antes había belleza ahora ante mis ojos solo queda un vacio frio y decepcionante, una destrucción que desbasto todo.

Solo cuando estuve lejos, pude encontrar un poco de calma, solo un poco. Mi familia quería ayudarme pero ellos no lograban comprender que yo estaba roto, demasiado roto que ya era imposible repararme, Jacob era lo único capaz de lograr restaurar todo de mi, pero ya era imposible, ya todo para mí era imposible

El dolor de lo que ahora era mi vida era mucho peor de cualquier dolor al que fui sometido en cualquier momento de mi pasado y eso no era para menos pues Jacob había acaparado un lugar tan vital en mi vida que ya yo no era capaz de imaginar un futuro sin el

El había llegado para hacerme olvidar mi pasado, cambiar mi presente e imaginar un futuro. Pero en un acto tan injusto lo perdí a él, lo perdí todo

Pasaban los días y todo era igual, el mundo seguía su curso y mi dolor en lugar de disminuir crecía con furia, no lograba comprender como tanto sufrimiento cabía en mi cuerpo, si mis sentimientos tuvieran forma física de seguro mi cuerpo por muy duro y resistente que fuese habría explotado en pedazos

–        “Jacob te necesito demasiado” – era lo único que mi mente lograba formular, porque el resto de mis pensamientos eran recuerdos y mas recuerdos de él y yo juntos

Llevaba tanto tiempo sin moverme que podría decir que con el tiempo terminaría convirtiéndome en una estatua, incluso podía sentir en mis labios como estos comenzaban a pegarse definitivamente

El dolor que ocasionaba su ausencia era demasiado, paralizante, era como si mi necesidad de él fuera  capaz de prohibirme cualquier tipo de movimiento, era tan abrumadoramente indescriptible.

Me hice creer que él estaba allí a mi lado un sinfín de veces y aun así no daba resultado. Ya no quería continuar así, yo sabía que si el lograra verme en ese momento el me alentaría a que siguiera intentándolo, que  siguiera tratando de seguir a delante y vivir sin él, por eso fue que me dispuse intentarlo, pero ya no podía hacerlo mas

Mi dolor parecía imposible de superar, parecía poderosamente ilimitado y al comprender eso termine tomando la decisión de que debía morir, suicidarme, acabar con el dolor aun cuando Jacob seguramente quisiera lo contrario para mí

Fue entonces que en el primer de estos intentos hice un impresionante descubrimiento, cada vez que intentaba ponerle fin a mi existencia yo volvía a verlo, a mi Jacob, mi hermoso Jacob, se me aparecía pidiéndome que no lo hiciera, que por favor siguiera adelante y entonces yo desistía, me detenía porque mi Jacob me lo pedía. Verlo así, allí parado ante mi me llenaba de una alegría tan intensa que dolía, me embargaba por un breve lapso de tiempo en la misma felicidad de antes, la única que conseguí en realidad, la única que me llenaba completamente, pero esto no duraba lo suficiente porque luego el desaparecía, se desvanecía como si nada y volvía a dejarme en la oscura tristeza

Con cada vez que yo lo intentaba él se materializaba ante mí, como si fuera un fantasma o mi conciencia, lo cual me llevo a comprender que eso no era real, no era saludable, eso era mi mente dándome alguien con quien hablar en medio de mi soledad, era mi mente tratando de aplacar el dolor de alguna forma

¿Estaba finalmente enloqueciendo y por eso podía ver a Jacob?, si lo meditaba con detenimiento estar sin él me dejaba con dos opciones, una era la muerte y la otra la locura

Pero a estas alturas ya no me importaba nada porque al final de todas formas una de las dos terminaría siendo mi ruta. En la muerte no quedaría nada, solo ausencia, en la locura era incierto, si mis sospechas eran ciertas y estaba volviéndome loco, era bastante probable que en medio de mi locura pudiese continuar viendo a Jacob

Era impresionante la capacidad que tienen nuestras mentes para mostrarnos algo que queremos ver, pero también era cruel e insano vivir de esa manera, auto engañándose, alimentado esperanzas y deseos que jamás serian realizados, haciéndose creer a uno mismo que todo está bien cuando no lo está.

Fue por eso que pensarlo bien por varios días tome la decisión, la muerte rehuía de mí así que no podía suicidarme, sin embargo yo emprendería mi propio viaje para ir con aquellos que si podían darme la muerte

Si lo pensaba bien de todas formas terminaría haciéndolo un día puesto que eventualmente Jacob envejecería y moriría, pero de todas formas nunca pensé que llegaría a ser tan pronto

Mire con nostalgia el cielo mientras escuchaba conversaciones y voces de todas partes, muchos saliendo a sus trabajos y otros simplemente a hacer sus quehaceres, la gente vivía muy ajetreada y ocupada que no se daban cuenta que la vida es nada, es solo un momento, como polvo al viento, hasta para alguien inmortal como yo.

Mis pasos eran calmados, no tenía prisa alguna, si total ya había aguantado tanto tiempo nada me iba a pasar por tardarme un poco mas

Mientras mis pasos me guiaban a mi destino, mi mente se embargaba una vez más en los amargos recuerdos, eran tan hermosos que hacían que la ausencia de Jacob dolería aun mas, he de admitir que no siempre todo fue hermoso, sin embargo siempre nos tuvimos el uno al otro

Era de temprano todavía, si aceleraba un poco el paso llegaría antes del amanecer. Cruce una carretera y luego me adentre a los campos para cortar camino, me sentía un poco mejor ahora que ya mi muerte estaba cerca, sabía que luego de lograr mi cometido yo me hundiría en una oscuridad, no había cielo o infierno para mi, solo ausencia, pero en fin cualquier cosa me serviría

Una vida sin Jacob era muy dolorosa, intente llevarla pero no pude resistir, era demasiado para mi, por eso la muerte seria liberadora

Mis pies me arrastraban automáticamente, era como si mi cuerpo estuviera ayudándome a morir más rápido, era como si todo mi ser lo supiera, que la muerte me liberaría del dolor

Mire la luna mañanera ya casi imperceptible por la luz del día la cual aun era muy poca para hacerme brillar

–        Es un hermoso día para morir – solté con ironía para mi mismo

Seguí caminando, esta vez entre una extensión de arboles altos

–        No lo hagas – dijo una voz muy conocida para mi, en cuestión de segundos el falso Jacob que mi mente inventaba para hacerme sentir mejor apareció ante mis ojos

–        Vaya… esta vez te tardaste un poco mas – solté inútilmente, pues ese ente nunca desistía

¿Hablar con esa cosa me hacia entrar en la categoría de lunático?, la verdad ya no lo sabía, ni me importaba, si estaba loco o no ya faltaba poco para darle un punto final a todo

–        Por favor Edward, no lo hagas – insistió a lo que yo simplemente lo ignore

Cada vez que lo rebasaba su cuerpo volvía a materializarse frente a mí, era como una tinta regándose en el agua, como una enorme mancha que tenia la habilidad de adoptar la apariencia de mi Jacob

–        Por favor, Por mi…

Tras oír esa corta frase me detuve, solo por un momento, me detuve porque algo en mi pecho me impidió seguir caminando, algo cambio y se sintió tan real que hiso que mis pies frenaran

¿Qué era esa sensación?

–        Estoy vivo, soy real – dijo él a lo que yo abrí grande los ojos

–        Te amo Edward, detente

Le obedecí un poco descolocado, ese espectro nunca me había dicho tales palabras antes, siempre se limitaba únicamente a pedirme que me detuviera

Le mire y analicé con la mirada por unos instantes, con la ilusión y la esperanza volviendo a latir, ¿sería posible?

–        Detén esta locura mientras puedas Edward, regresa a mi lado, te necesito – me dijo

Si antes me había descolocado ahora estaba completamente asombrado, ¿sería verdad lo que decía?

No tenía intenciones de cambiar mi opinión, sin embargo con este suceso ahora me sentía indeciso. Mientras mi mente empezaba a llenarse de confusión el sol empezaba a hacerse más notorio y yo estaba allí parado con nuevas dudas estando tan solo a unos pasos de entrar a Volterra.

¿Ahora que hare?

Notas finales:

recuerden chicos, la barra de los reviews no muerde, asi que a comentar GO GO GO

olvide mencionarlo antes: gracias a Gabriel por ser tan fiel en sus comentarios, un beso guapa

y a ti sam te doy la bienvenida e.e

no olviden que en mi facebook esta el material adicional, por si los links de aca estan tan rotos 


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