Capítulo 1:
-HimChaaaaaaaaaaaaan hyung!!!~ -Busca y buscaba con una gran y hermosa sonrisa en su rostro-.
-Hyuung~ hyuuuuuuuuung!!
-Himchannie!~ Hyuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuung!! Himchan!~ Himchannie hyung!!~ -Gritaba por los pasillos de la empresa, con un pequeño paquetito entre sus manos entrando a todas las salas que pillaba y preguntando por su hyung, con una amplia sonrisa, sintiéndose completamente feliz y dichoso, Entrando a la primera puerta que hayo, abriéndola –
- Hyung!!!... Oh perdón… Hyosung noona –Entro por complete a esa sala, que correspondía a la sala de ensayos de el cuarteto más sensual y único de las chicas de Secret- Mihanee….
-Mi Baby Zelo~… -se acerca corriendo al más alto, mostrando una gran sonrisa, esa sonrisa de encías perfectas, dirigiendo su vista de inmediato al paquetito que el conejo cargaba- Eso es para mi?.. no debiste molestarte gracias mi dongsaeng –río un poco llevando sus manos al paquetito, el cual estaba rodeado y decorado con una cinta roja a su alrededor-.
-Noonaaaaa!!! No es para usted… perdón… pero estoy buscando a himchan hyung, Lo ha visto por acá?
-Aigoo saeng… que es eso?, y no lo e visto, a lo mejor debe estar en la cafetería, se la pasa todo el tiempo allí…
-La cafetería~Oh gracias noona –hizo una pequeña venia para salir corriendo de esa sala, corriendo hacia la cafetería, que estaba a unos cuantos pasillos y bajar unos dos pisos por el ascensor.-
Estaba completamente nervioso, le iba a dar esa cajita a su hyung favorito, ese hyung que tenía unos labios y unos ojos oscuros y realmente hermosos. Se había pasado noches hablando dormido sobre el contenido de esa cajita, ese paquetito que tomaba tan feliz, horas y horas había pasando preparando ese regalo, seria el primer regalo que le daría a alguien por la razón que ahora sentía.
Se sentía raro, cada vez que pensaba en su hyung, toda la sangre que fluía por su cuerpo cada vez le ardía más al ver al mayor frente a él, su corazón se le iba a salir por la boca cada vez que le dirigía la mirada o alguna palabra, su corazón se sentía realmente feliz con solo recibir esa sonrisa por parte de el, aunque aquel mayor le regalaba aquella sonrisa a medio mundo, eso le causaba algo de celos, no podía dejar de pensar en aquel timbre de voz tan grave y hermosa de él, su hyung era realmente maravilloso y todo su corazón le pertenecia a él, le pertencia a Kim Him Chan… Ya habían pasado meses desde que ese sentimiento de amor y locura por su hyung estaba en él, pero ya era hora de decírselo, ya no podía aguantar más, quería tomarlo y gritarle en la cara todo lo que sentía por él, ya lloraba por las noches por retener todas esas palabras que tenia en su interior, quería besarlo, quería saber lo que se sentía besar a alguien, aunque nunca lo había hecho con otra persona se sentía preparado para darle muchos a su mayor, ya era tiempo de desahogarse y decirle todo a él. El mayor le había enviado muchas señales, siempre lo abrazaba, siempre lo tomaba y lo rodeaba por la cintura, siempre le decía cosas tiernas, y le preparaba todo lo que el quería y solamente a él lo consentía, podría decirse que Zelo era el conejo favorito de Himchan porque hacía y deshacía todo lo que el menor quisiera.
Apretó el botón para bajar por el ascensor, pero este se demoraba mucho, decidió tomar las escalera y bajar lo más rápido posible, haciendo aquello y encaminarse a la cafetería, llegando allí…lastima, himchan no estaba allí, dio un pequeño suspiro, había recorrido prácticamente todo el edificio buscándolo y no estaba, en el departamento tampoco, y en los lugares que sabia que recurría a menudo tampoco se encontraba allí… a lo mejor algo le quería decir que todavía no era la hora en decirle aquello, pero… era su deber de un chico enamorado, se lo iba a decir en la noche cuando todos estén en el departamento así estaría seguro de pillarlo allí para su disposición.
Estaba sumamente nervioso y necesitaba botar todo el nerviosismo, retrocediendo y yendo a la sala de ensayo que le correspondia a B.A.P, que estaba en el segundo piso de la empresa, llego hasta allí dejando el paquetito al lado de el equipo de música, encendiendo este y poniendo su ipod para poner a reproducir toda su música en modo aletorio, empezó un rap de Eminem, haciendo pasos random frente al gran espejo que rodeaba toda la habitación, soltando y votando toda su energía y sus ancias que gano cada vez que corria por los pasillos de la empresa en busca de su hyung, Movia su cintura de un lado a otro, armonizando con su cuerpo el ritmo de la música que iba cambiando, moviendo sus brazos y su cabeza, junto a su pecho y sus piernas, hasta que la radio se apagó de un rato a otro, se extrañó un poco por eso y se acercó al equipo para poner otra canción, a lo mejor era el problema de su ipod, tomando este y buscando una canción buen movida y buena, pero algo lo alejo de su pequeño trabajo unos pequeños gritos?...quejidos?...jadeos?...Aquel sonido era raro para él, nunca antes había escuchado ese tipo de quejidos, ni siquiera se escuchaban como si sufriera esa persona…espera…era más de una persona, se podían escuchar quejidos y pequeños gritos, unos agudos y otros bien graves, venían de los camarines que estaban a la esquina de la sala, acercándose a este y parándose fuera de la puerta, aquellos quejidos cada vez sonaban más fuertes y prolongados en el tiempo, es como si las personas en el interior la estuvieran gozando, en la mente del menor no podía ni imaginar que pasaba haya a dentro y menos a las personas que se iba a pillar en su interior, Abriendo la puerta totalmente….y lo vio…al fin pudo pillar a su hyung…
Se quedo pasmado, viendo aquella escena, abriendo los ojos totalmente y con la boca semi abierta, no podía creer lo que sus ojos estabn viendo, sintiendo como su corazón se rompia en mil pedasitos, y sin hacer nada allí, con la mano en la perilla viendo como su himchan hyung gemia de placer y nada más y nada menos por el rubio vocal, daehyun, Ambos gemían y se tocaban, totalmente desnudos frente a el, no podía ni musitar una palabra por lo que sus ojos veian, ni ellos se daban cuenta que el maknae los estaba viendo.-
-H-hyung….-pudo por fin pronunciar cuando las lágrimas salieron al fin de sus ojos y se deslizaban sobre sus mejillas. Sintiendo sus mejillas arder y el salado sabor de las lágrimas que cada vez empañaban más su vista- Him..Himchan…Hy-hyuung… -repito ahora más quebrado y llevándose las manos a la boca, cuando pudo ver a ambos gimiendo fuertemente, y ver como daehyun tenia en su mano el miembro del mayor y ambos gemían por el orgasmo que habían tenido frente al menor, hasta que aquel momento tan exitante fue interrumpido por esas palabras que había dicho el menor, el mayor de los tres vio al maknae frente a el, y el segundo más grande solo daba vuelta la cabeza para ver al pequeño pero alto conejo detrás de el, abriendo los ojos como plato al ser descubierto, sonriendo ladinamente cuando zelo salio corriendo-.
-Zeloooo!!!!!!!! –grito himchan, empujando a daehyun de su interior, dando un fuerte quejido por lo brusco que lo había sacado de allí, tomando su polera y su pantalon que estaban botados y poniéndoselos rápidamente, saliendo descanso, de allí en busca del maknae.- Juuun Hong!!!!!~ -Corría entre los pasillos, bajando al primer piso hacia la salida, buscando al menor, sin ver ni un rastro de él.-
…
Himchan y Daehyun ya habían llegado al departamento, paso una hora, pasaron dos horas, pasaron tres horas y rastro del makane, nada…
Zelo no contestaba su celular, y no daba señales por ninguna parte, himchan se paseaba por too el departamento, ya se había tomado como unas 7 tazas de café, más de lo normal, estaba intranquilo y con la mirada ensima del líder, el cerebro y el musculito del grupo.
-Ya Himchan, dime que carajo paso, porque mierda no aparece zelo? –Dijo el líder-
-Es que… YongGuk…no te lo puedo decir, pero es algo grave, hay que encontrarlo…
-Pero como mierda Zelo desaparece de esta manera Y tú Daehyun, sé que tú también estas metido en esto, algo me lo dice, Que mierda hicieron los dos –apunto al menor de los dos que estaba sobre el sofá recostado y más normal que nunca-
- Tengo hambre… Channie~ Cocíname algo –Agrego daehyun, super despreocupado y pensando solo en el mostrando una amplia sonrisa a la omma de los conejos-
-Dae… Como piensas en comida y zelo debe estar afuera, no seas tarado! – Dijo el comandante, tomando sus llaves y su abrigo para ir en busca del maknae.-
Himchan salio del departamento, empezando a correr por las calles mientras se ponía el abrigo y marcaba al teléfono del menor. Sonaba fuera de servicio, el maknae lo tenia apagado y no podía juzgarlo de porque lo tenia así, después de ver lo que había hecho el comandante y el vocal, debió haber sido algo traumante para el, algo le decía al conejo rosa que el menor no la estaba pasando nada de bien y nisiquiera sabia porque, pero se sentía culpable, sentía que el tenia toda la culpa y no daehyun, y que el maknae estaba mal por el no por el rubio bueno para comer.
El comandante se sentía totalmente culpable, hecho pedasos, ya no podía seguir corriendo, había corridos cuadras y cuadras, pasando por parques, pensando que el menor estaría montando su skate o patinando por allí, pero no, el menor no se encontraba en ninguna parte, había desaparecido, no quería llamar a la casa de los padres del maknae, ¿Qué pasaría si el no estuviera allí?, hay si que terminaría de hecharla a perder, meteria a los padres y estos llamarían a su manager y hasta allí llegaría B.A.P, Tenia que arreglar el problema como fuera… pero necesitaba encontrar al menor, se dio cuenta que estaba prácticamente a una cuadra de la empresa, caminando hasta ella, eran las 9:30 de la noche y gracias a dios no estaba cerrada, fue a la sala de ensayos donde había sido el ultimo lugar en que había visto al menor, viendo allí un pequeño paquete, una cajita que estaba rodeada con una cinta de color rojo y una rosa que sujetaba un pequeño papelito el cual decía ‘’ Para himchan hyung <3’’. Este tomo la puntita de la cinta y la deslizo, enrollando la cinta en su dedo índice, abriendo la cajita y encontrando allí una pequeña esfera, una de esas esferas de cristal que regalan especialmente en época navideña, agitándola un poco viendo como el polvito rodeaba a dos pequeños conejitos que estaban tomandos de la mano, un pequeño conejito azul y otro conejo rosa, aludiendo exactamente a los matokis, que sostenían ambos un pequeño cartel que decía ‘’ siempre juntos…’’ no pudo no recordar al maknae, apretando la esfera de cristal contra su pecho, sintiéndose ahora más que nunca culpable de que el menor saliera corriendo y haber desaparecido de todas partes, ¿Que era lo que significaba esa esfera de cristal?.
Marcando nuevamente el teléfono del menor mientras miraba melancólicamente la pelotita y agitándola reiteradas veces, el menor no contestaba pero ahora si podía escuchar el sonido del celular del otro, que provenía de los camarines, caminando a paso seguro hasta allá, por fin encontró al maknae, pensó himchan y una pequeña sonrisa se dibujó en su rostro, abriendo la puerta y viéndolo allí, hincado mientras abrazaba sus piernas y con la cabeza gacha apoyada en sus rodillas, el teléfono ya no sonaba pero el menor no hacia ningún movimiento en ese rincón
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