Capitulo 7.
Pov Hibari.
Es de noche, es nuestra ultima noche en Irlanda, la ultima de la luna de miel y aun no me he entregado a él, recuerdo los sucesos de la tarde con algo de confusión, esas dudas que atreves y aun siento, son las 11 ya casi es un nuevo día, y no puedo dormir, él lleva una hora dormido, después de la cena dimos un paseo por los campos y tomamos unas ultimas fotos, al regresar a la cabaña, el miro un rato la tele y se fue a dormir , No menciono nada sobre el sexo como pensé que haría. Realmente me ha estado dando mi espacio y yo no puedo evitar preguntarme como seria realmente hacer el amor con el.
Compartimos cama eso si, el primer y segundo día no lo hicimos, el primero el durmió en el sofá, el segundo yo, pero desde el tercero ambos dormimos juntos, el no se propasa, me respeta y eso me gusta, a decir verdad me abrazo a él y recargo la cabeza en su pecho, duermo muy cómodo así.
Una vez metido en la cama le doy un suave beso en los labios antes de apagar la lamparita, el se despierta y me sonríe.
-Buenas noches amore.
-Eh si buenas noches haneuma.
-Me gusta ese sobrenombre que me has puesto.
-Fuiste tu quien me dijo que te llamara asi.
-¿en serio?
-Si en un sueño.
-Me alegra que sueñes conmigo.
-Lo hago a menudo.
-De verdad, eso me hace feliz, cuéntame que sueñas, ¿Qué hacemos juntos?
-Hablar, combatir y…
Me invade un fuerte sonrojo al pensar en lo otro que hacemos y desvio la mirada pero aunque en la oscuridad el no ha podido ver eso lo intuye.
-Ah, asi que hacemos eso, y dime que tal soy en la cama en tu sueño.
-Urusei.
-Vamos dime, dime.
Mi silencio es la respuesta, pero de pronto siento su mano acariciando mi espalda.
-Bueno, esta bien si quieres que sea tu erótico secreto, pero me pregunto si es algo así como esto.
Lo siento deslizar su mano por el yukata y acariciarme la piel del pecho y los hombros.
-Dino…
-Shhhh, no te hare nada malo, solo voy a acariciarte un poco, si quiera permíteme eso, vamos es el ultimo día de la luna de miel, solo unas caricias anda.
-Pero pocas no te propases mucho.
Me escucho a mi mismo decir eso y no puedo creerlo pero dado que él no me ha forzado no puedo evitar pensar que se merece una pequeña recompensa, además lo cierto es que me gusta el tacto de sus manos sobre mi cuerpo, escucho una leve risilla y siento como esas manos me acarician con cariño y sensualidad, me siento caliente de pronto, es como si mi cuerpo le respondiera de inmediato, como si le recordara de veces anteriores. El une sus labios a los mis y acepto el beso el cual profundiza introduciendo su lengua en mi boca y haciéndola danzar con la mía, su sabor es intoxicarte y disfruto plenamente este beso, me gusta esta cercanía, esas caricias, ese beso que me roba el aire y cuando el lo rompe para respirar siento su ausencia y me lamo los labios captando aun fragmentos de su exótico sabor.
-Ahhh Dino hummm…
-Asi comrazon déjate llevar solo disfruta.
Ahora sus manos recorren mis piernas, la piel se me eriza al contacto y siento como si se volviera mas suave y tibia cada que sus dedos reptan por ella, me levanta el yukata y llega a mis muslos no digo nada me quedo quieto recibiendo las caricias.
Sus labios encuentran un camino de mi rostro a mi cuello y a mis hombros los cuales ahora salen del semi abierto yukata , me besa tiernamente y por momentos me mordisquea siento sus dientes y su lengua, esos lametones y leves succiones, estoy embriagado de su boca e hipnotizado por sus manos maldito Haneuma me esta controlando y…
-Ahhh haaaaa
Mas gemidos se escapan de mi garganta al sentirlo tocar mis glúteos y acariciar con la palama abierta mi redondez casi apretándola peor es hasta que siento su dedo acariciar la línea entre mis nalgas que tiemblo asustado y cuando su dedo toca mi entrada le respondo con una fuerte patada.
-Te dije que no te propasaras, me voy al sillón.
-Noooo Nuvola por favor perdóname, no pude controlar el deseo que siento por ti, pero no he hecho anda que no permitieras.
-Ha, y ahora es mi culpa.
-No corazón no quise decir eso, Kyo por favor quédate conmigo en la cama, solo te abrazare, ya no voy a tocarte mas lo prometo.
Dudo un poco y el me abraza acepto el abrazo y trato de acomodarme como siempre hago pero entonces mis caderas chocan con su….
Rojo como un tomate lo aparto y corro al sofá jalando una manta.
--Me quedo aquí…volveré a la cama cuando te duermas.
-Perdón il mío amore, pero no puedo controlar las reacciones de mi cuerpo, tu realmente me pones gigante.
Un almohadón le es lanzado a la cara y no vuelvo a pronunciar palabra alguna pero fiel a lo dicho cuando el vuelve a quedarse dormido subo ala cama y me acurruco en sus brazos entonces sin siquiera planearlo vuelvo al campo mágico de mis sueños.
Con Mukuro.
Dos semanas han pasado desde que Hibari se caso con ese hombre, y de igual forma dos desde que ese supuesto ancestro mío se me apareció, lo cierto es que el tipo inspira miedo, se ve que tiene un aura terrible y además se le nota algo loco.
Lo que me dijo me puso a pensar, ciertamente que quiero a Hibari para mi pero no soy tan tonto como para entregar mi alma y caer en su juego, esa clase de contratos siempre tiene vicios ocultos.
Ademas si realmente el capo ese tiene los días contados es mejor esperar, por supuesto que hubiera querido ser el primero en poseer a Hibari pero eso ya no puede cambiarse aun cuando aceptara el trato él no puede darme ya la virginidad de mi amado pues a estas alturas el ya debe ser del rubio ese. Sin duda el italiano lo tomo en la noche de bodas y ya debe haberlo hecho suyo muchas veces durante la luna de miel, solo pensar en eso hace que me hierva la sangre de rabia y envidia, debería ser yo quien desvirginara a la alondra, yo quien le hiciera madre, yo no ese.
Si es probable que mi amor ya este preñado. Maldito Cavallone. Pero tu morirás y yo podre quedarme con mi Hibari de nuevo y entonces le hare pagar el no haberse rebelado, el haberte aceptado por que ahora no es solo amor lo que siento por el.
Pensaba poseerte con absoluto amor pero ahora no vas a tener eso, te hare mío y tu tendrás que agradecerme aceptarte con todo y el vástago que tengas, y…
No aunque ese hombre muera es un líder de la mafia, tu tendrás el futuro asegurado, dinero y posición, tus hijos serán los herederos de Cavallone.
No es como si quedases solo y desamparado. Tendré que secuestrarte para tenerte conmigo.
-bueno pequeño tatara nietecillo has tomado tu decisión.
De pronto veo a Damon mirarme con malicia desde una especie de burbuja exótica. Se ve raro.
-Si la respuesta es no hare todo a mi manera.
-Pero vaya que tú desperdicias la oportunidad de cumplir tus sueños.
-Kufufu no soy tan tonto como para cambiarme de lugar contigo, unos días de cielo y una eternidad en el infierno, yo paso búscate otro pendejo.
-Hibari no ha sido tocado por su esposo.
-No te creo.
-No le ha permitido hacerlo.
-Puede que el se resistiera pero dudo que el marido lo permitiese.
-Él dijo no y el marido no le violo, lo ama igual que tu, tu tampoco lo habrías violado Mukuro.
-Tú que sabes.
-Puedes ser el primero, puedes ser quien ponga su semilla en el y le haga hijos.
Damon me ofrecía un tentador contrato y la pluma.
-Solo tienes que firmar.
Con squalo y Yamamoto.
En el dojo estaban dos formidables contendientes luchando con grandes habilidades, las espadas de madera chocaban con fiereza hasta casi astillarse pero finalmente el de cabellos largos logro someter a su oponente lanzándolo al suelo y posicionando la punta de su boo sobre la garganta del rival.
-Ríndete ya pequeño aprendiz.
-Ma, maaa no seas tan violento Squalo sensei, tu ganas.
El peliblanco libero a su alumno y le ayudo a levantarse.
-Cada vez mejoras mas Yamamoto, pronto podrás ir a las nacionales y estoy seguro que ganaras el campeonato.
-Gracias todas es por usted sensei.
-Claro tienes al mejor maestro, al amo de la espada por tutor así que mas te vale ganar esa medalla y el trofeo para decorar el dojo.
-Jajajaja esta bien sensei, bueno este…tanto entrenamiento me ha dado hambre.
-Eres un niño.
-Anda sensei vamos a comer algo.
Squalo sonrió al chico el era su mejor estudiante y era un muchacho muy amable que tendría mas o menos la edad de su hijo. La verdad el siempre quiso un seme así para su hijo amable y guapo, además de fuerte, cuando Hibari le presento a Mukuro le agrado puesto que era fuerte y muy guapo pero le pareció que no tenia la suficiente amabilidad esa piña era mas bien sensual pero había un algo que no le hacia fiarme del todo de el aun así lo acepto por kyoya, no quería que le odiase y no es como si le hubiese visto algo malo al novio que se notaba lo quería. Pero el destino actuó de otra forma y su chico termino casado con ese rubio que si bien era un mafioso debía reconocer que como dijo su estúpido seme el capo Cavallone era bastante guapo y educado, muy amable y se notaba que era fuerte, tenia una esencia muy poderosa parecía tonto a simple vista pero un guerrero puede reconocer el aura de otro guerrero.
-Tierra llamando a squalo san. Hey squalo san me escucha.
-Ah perdón me distraje.
-Squalo san se ve tan bonito cuando esta pensativo.
-Heee urusai.
-Je jeje pero Squalo san se ve mucho mas hermoso cuando se sonroja.
-Silencio haz cien flexiones ahora.
-Haaaa moooo sensei vamos a por unos suchis.
-No te burles de mi y entrena.
-No es burla yo invito, mi viejo hace el mejor suchi del mundo.
Su sonrisa lo hizo sonrojarse un poco y desvió la mirada.
-Esta bien vamos, ah pero primero tomare una ducha haz lo mismo ambos apestamos.
-Podemos bañarnos juntos sensei.
-Voiiii que ridiculeces dices.
Un golpe impacto la cabeza del moreno pues squalo le pego con su espada de madera.
-Auch yo no mas decía por ahorrar agua.
-Si claro, vete a la ducha luego ire yo.
-Esta bien sensei de verdad se ve sumamente hermoso cuando se sonroja y cuando se enoja.
El chico corrió alas duchas escapando de un siguiente golpe.
Sueño de Hibari.
Todo esta en calma y me acerco al claro del bosque donde siempre nos encontramos. Noto que el ya ha tendido un mantel de cuadros rojos y blancos. De esos típicos para un picnic. Y sobre el ha dispuesto toda clase de viandas, un plato con frutas, otro con pastelillos, n par de guisos con carne y galletas, también ha colocado un termo con café, una jarra con zumo de naranja y una botella de agua.
-Ven cariño desayuna conmigo.
-Haneuma….
-Llámame Dino ya te he dicho mi nombre.
-Humm los niños.
-Los gemelos duermen, están al cuidado de tu tío Fon.
-Ah…
-¿te noto raro pasa algo cielo?
-Estoy confundido… ¿Por qué decidiste que era hora de decirme tu nombre?
-Por que ahora soy real, ya te conocí en el mundo real?
-¿Quién es el tu que conozco aquí?
-Un reflejo de tu actual marido, digamos que soy su alter ego.
-Entonces eres otro.
-Si y no soy el mismo, soy la esencia de su subconsciente, su yo real, todo aquello que el siempre quiso ser, yo soy su potencial, yo soy su ser ideal, y el es el yo real, ese que tiene que actuar a veces como el mundo dicta, aquel que ha tenido que doblar las alas, aquel que no logro todo cuanto soñaba. El es humano y yo soy una fantasía. Yo soy lo que el seria si el mundo fuera perfecto, si pudiéramos llegar a lo que deseamos solo con eso con soñarlo.
-No estoy seguro de entender todo.
-Pero lo harás.
-¿los bebes son solo sueños?
-Son lo que puede llegar a ser si lo dejas ser?
-¿Qué quieres decir?
-Ellos nacerán en este mundo si tú lo quieres, todo depende de ti.
-Si dejo que mi marido me preñe tendrá a Ítalo y Alesso.
-Eso tendrás que descubrirlo por ti mismo.
Y el caballero beso al moreno que se despertó al acto.
-Oh por la nube ahora estoy más confundido que nunca.