Casa de Naomi Misora:
La chica había regresado del acuario, en el año que había estado en la ciudad, llego a enterarse que esa familia era muy unida, a tal grado de que todo debían celebrar el cumpleaños de los miembros de su familia, suspiro cerrando la puerta, muy a su pesar había tenido que confesar sus sentimientos antes de tiempo, su casa parecía normal pero en realidad no lo era, no había línea telefónica, al igual que no había televisión, ni ningún aparato electrodoméstico.
— ¿Cómo te fue hija? — su padre la sorprendió haciendo que diera un pequeño brinco.
—Bien, creo, no lo sé… — agacho su cabeza, no quería que su padre mencionara mas del asunto.
—Es lo mejor, solo busco lo mejor para ti — Naomi sabía que era verdad, pues ella no se había mudado porque en realidad quisiera hacerlo, si no porque fue obligada, desde hacía ya tres años que el caso estaba abierto y la policía londinense no había podido dar con el asesino.
—Lo sé, pero ¿Y si nos encuentra? … —no sonaba preocupada, ni si quiera alarmada.
—Tranquila, por ahora daremos por hecho que no lo hará… sin embargo siento que debes saber esto hija — su padre se sentó en la sala, Naomi fue con él, ella entendía en qué posición se encontraban ambos por ser blancos de un asesino.
—Encontraron el cuerpo de una chica, Misa Amane— dio un gran suspiro, ahora estaba nerviosa, desde hace unos años se reporto a la policía que un imitador estaba matando personas por todo el mundo, pero lo singular era que avisaba quienes eran las victimas y los pero del caso es que eso ya había pasado antes. — Según el informe, puede parecer suicido pero no estoy muy seguro de ello —afirmo.
—Igual que hace 50 años… el caso Kira ¿Volverá a abrirse por esto? — sus manos se sentían pesadas, al parecer no tenía ni idea del porque de pronto un asesino había tomado la iniciativa de buscar a quienes de alguna maneras se parecían a aquellos que una vez participaron en dicho caso.
—No lo sé, quedó inconcluso, nunca se hallaron pruebas de nada y el caso se cerro, incluso le prohibimos a uno de los profesores de la Universidad que si quiera volverá a mencionarlo — miro a su hija como es que el miedo se apoderaba de ella, pues según habían informado ella era uno de los blancos.
—Papá algo pronto pasara y no sé qué hacer — se sentía impotente, el caso en el que sin querer se había involucrado, no solo ella si no toda su familia, no estaría tranquila hasta poder estudiar mejor la situación , las cosas habían empeorado desde que supo que su amor no correspondido Ryuzaki se encontraba en el mismo lugar que ella.
Sumándole que recién se había enterado que ya tenía nada más y nada menos que un novio, el cual era aunque no lo pareciera un chico muy inteligente, de hecho la primera impresión que tuvo de él era que ni siquiera sobrevivirá la Universidad y era cierto no era el mejor de su clase, no siquiera destacaba, siempre se estaba riendo con alguien a su alrededor, su carácter le hacía vulnerable a cualquier ataque de cualquier tipo.
¿Cuál sería el siguiente paso?
Mientras tanto Mello ya se encontraba esperando a Near, por lo visto lo había convencido muy rápidamente, se sentía raro en esos momento, no sabía explicar cuál era el motivo pero había algo que no cuadraba en toda la situación que aun no podía entender, tomo rápidamente su teléfono, debía llamar a Matt… pero ¿Eso no sería un poco paranoico?, no, no él estaba bien en Canadá, con todos esos videojuegos y cosas que tanto le gustaban , debía calmarse , respirar como se lo había indicado su madre.
—Listo…—escucho que la puerta de la mansión se abría para dar a paso a Near quien al parecer no estaba resfriado.
—Vamos entonces…— dijo dándole un caso, el otro solo sintió— ¿Qué te pasa?— el notar que en su cara no había expresión en su cara le dio una gran curiosidad.
—Nada… solo que he estado pensando ¿Tu… tienes novio cierto?...digo ese tal Matt— tenia la ligera sensación de que no debía preguntar esa clase de cosas pero, en el fondo no era del tipo de personas que se quedaban con la duda y menos cuando les interesaba.
—Si claro — no le daba importancia —pero está en una convención en Canadá sobre videojuegos, la más grande del mundo, la cual dura medio año, era un evento esperado… por todo el mundo —dijo comenzando a sentirse un poco solo.
— ¿Por qué no fuiste con él? — quería saber si se habían peleado por ese motivo, porque si él tuviera un pareja como él, lo seguiría hasta el fin del mundo… o eso creía.
—Hay cosas que se disfrutan mejor cuando estas solo, incluso si desidia acompañarlo… solo no quería que se diera cuenta que. — no sabía cómo explicar ese sentimiento de inconformidad, Matt siempre había apoyado a Mello en cualquier decisión que este tomara.
Cuando compro la motocicleta, cuando entraron a la universidad, cuando casi lo mata ese chihuahua al cual tenía por mascota, siempre mostraba interés por la cosas que a él le gustaban, pero enserio al rubio le molestaban los videojuegos, mas las personas que jugaban con ellos, y de imaginarse con toda esa gente con la misma fascinación de su amado solo podía significar una cosa.
Celos + Celos + platicas aburridas + posibles peleas + chicos que se hacían los tontos a cada minuto…. De solo pensarlo casi le da un infarto, no podría tolerarlo por seis meses.
— ¿Qué? — el pequeño se había quedado con la expectativa de esa palabra.
—No le ponía atención cuando me hablaba sobre ello…— enserio que solo lo había escuchado un par de veces, solo se prendió el nombre de los lugares a los que asistiera pero en realidad no se acordaba de nada más que este le hubiera mencionado antes.
—Bien vamos— ese chico era igual de raro que su hermano, pensó Mello arrancando la motocicleta debía darse prisa o no alcanzaría a la familia.
Aeropuerto de Canadá:
Un chico pelirrojo se encontraba en la sala de espera, su avión saldría en unos minutos, enserio que ya quería irse, se le había aburrido no estar con su novio, porque en el fondo sabia que sin incluso con las peleas no era divertido estar.
Dio un gran bostezo, pues el sueño lo estaba amenazando desde hacía ya un rato, pero sería más fuerte no se quedaría dormido, pero en el fondo no era la única razón por la que quería volver a su casa, sentía que lo estaban siguiendo, desde que llego incluso ahora en el aeropuerto, era extraño como esa sensación de ser perseguido lo estaba alentando a irse de inmediato.
Durante los tres meses que estuvo en ese lugar, había sucedió toda clase de accidentes, accidente que pudieron causarle muerte, algo hizo “Clic” en su cabeza dándole a entender que la víctima era él, pero ¿Por qué?, desde entonces no había podido divertirse lo mejor era estar seguro en casa y contarle lo que estaba pasando, por alguna razón Light le dijo que si algo sucedía regresara pronto a casa.
Flash Back
“—Matty, si te llegaras a sentir acosado por favor regresa a casa — sus palabras le tomaron por sorpresa, en pocas ocasiones Light le decía que no enfrentara algo que le incomodara, no, esta era la primera vez que parecía no estar jugando con el tema.
—Claro… además son solo seis meses, pero si me siento acosado volveré— en ese momento el castaño lo abrazo, ambos ya eran parte de una familia, por parte de Mello quien debido a su carácter impulsivo no había ido a verlo partir.
—Es enserio — su voz se torno amarga y con rudeza, eso lo tomo aun mas desprevenido.
—Si…— la ligera sensación de irritación lo hacía ver diferente.”
Después de esa rara conversación, abordo sin ninguno contratiempo, pero sus palabras se quedaron rondando en su cabeza, todo el tiempo, estuvo alerta por si algo pasaba”
Ahora ya está seguro que a veces la intuición de Light era correcta, por ahora era mejor hacer caso a sus palabras no quería verse involucrado en ningún problema.
***Pasajeros con destino A Japón favor de abordar por la puerta F45…
Esa era su señal era hora de deshacerse de toda esa presión acumulado en los últimos días, tomo una pequeña maleta que iba con él.
Sin más que hacer abordo el avión.
***Regresando al Acuario***
La familia ya había terminado su comida por lo que seguía un paseo por todo el lugar, sin embargo algo estaba molesta a Light, algo no actuaba como debería, miraba atento todos lo peses del lugar, grandes, chiquitos, colorados, azules, verdes, mas azules… no le encontraba diversión al asunto y eso le molestaba, no quería pensar todo el tiempo en algo lógico eso le quitaba mucho encanto a las cosas.
—Yagami…— sintió un mano posarse n su hombre era de nuevo el.
— ¿Qué? — le miro irritado, ya no se sentía tan feliz, menos después de comer todo ese pescado.
—Vamos a llevar la fiesta en paz, no quiero arruinar la velada de tu familia — sonaba sincera, lo podía notar en su rostro.
—Está bien…— le sonrió con facilidad— ahora vamos— ya sin sentirse presionado le tomo de la mano, él otro ni replico, llegarían final de la velada sin intentar deshacerse el uno del otro, al menos por ahora.
Como se esperaba de esa extraña familia, el cumpleaños en el acuario fue muy divertido, cuando llego Near casi se desmaya nunca habían estado rodeado de tanta agua y comenzó a sentirse con pánico, Light solo molestaba Mello y Takada disfrutaba de toda la atención de sus padres y Sayu, porque su novio y hermanos ni se acordaban el por qué estaban en ese lugar en primer lugar.
El lugar cerraba las cinco por lo que esa tarde el pastel doria ser partido en casa, todo esperaban impacientes a que eso sucediera.
—Bien chicos, es hora de partir el pastel — anuncio la señora de la casa, Soichiro era el más sentimental pues no dejaba de felicitar a su hija, cantaron la canción de cumpleaños, como pudieron por qué no se ponían de acurdo de cómo iba en realidad la canción.
—Ahora linda pide un deseo — dijo su madre emocionada, las velas se veían hermosas en el pastel de fresas de tres pisos que estaba en la mesa central de la sala.
—Ahí voy — y soplo, se quedaron a obscuras por algún tiempo, todos aplaudieron y la abrazaron, para Near y Ryuzaki era algo que jamás habían experimentado, solo por eso se sentía muy bien.
Las rebanadas comenzaron a ir de un lado a otro, todos parecían disfrutar el pastel comprado en una de las mejor tiendas del lugar, agradecían que ninguno se ofreciera para hacer un pastel casero, el ambiente estaba inundado de risas y algunas discusiones que los hacían ser una familia muy unida.
Pero ese sentimiento so se iba.
La celebración término cerca de las 9 pm, era hora de retirarse y esta vez si debían irse a casa, les prestaron un auto que después devolverían.
—Fue divertido — después de esas palabras los hermanos se fueron dejando a Light solo en la entrada de su casa.
La ligera briza de la noche no le hacía ninguna gracia, Light miraba al cielo, quería decir que todo estaba bien pero algo se lo impedía… cuando menos lo sintió una voz lo alerto de algo no andaba del todo bien.
— ¡Light entra a la casa ahora!— grito Takada, al entrar noto la cara de espanto de toda la familia, pero él no podía creer lo que estaba viendo, eso no podía ser cierto… porque le dijo que volviera a casa en cuanto notara algo extraño.
De pronto el celular de Mello sonó, todos lo miran expectantes a q que contestara.
— ¿Bueno…? — Lo dudo un momento pero era.