CAPITULO 02:
Después De Vacaciones
Lloviznaba en Hyrule. El viento que soplaba era demasiado fuerte que hasta era capaz de llevarte. Pero era un hermoso día así todo.
-"Más hermoso hubiera sido si hubiera llovido durante las vacaciones de invierno" – pensó Vio mientras caminaba hacia su colegio – "Pero no, tuvo que hacer calor en esos días" – entró al colegio, había llegado unos minutos temprano. Antes de entrar a su salón oyó aquella voz que animaba su día.
-¡Vio! – volteó para mirar al dueño de la voz. Vaati lo había llamado, estaba levantando sus bracitos. Al parecer, estaba sentado en la escalera junto a Ghirahim ¿cómo es que no lo había visto al pasar?.
-¡Hola chicos! – saludó un feliz rubio hylian mientras se acercaba a los chicos de tercer año. Vaati le había dedicado un abrazo amistoso.
-Te extrañamos – sonrió apacible el minish, dichas palabras le hicieron brillar los ojitos al rubio.
-¿en… en serio? – cuestionó a lo que Ghirahim y Vaati asintieron – Aaaw… gracias
-Íbamos a invitarte a salir… pero no sabíamos tu dirección – habló el peli blanco aún sentado en los escalones – y no te veíamos conectado – añadió.
-Lo siento - se disculpó el rubio.
-Don´t Worry… cuando estés libre, avísanos y saldremos – dijo el oji rubí a lo que Vio asintió. En eso, observó un pequeño libro en manos de Ghirahim.
-¿Y ese libro? – cuestionó el rubio curioso.
-¿Mm? – el peli blanco echó una ojeada al libro - ¿Te acuerdas que antes de las vacaciones te pedimos que nos acompañes a la biblioteca?... Yo había elegido éste libro
-Ah cierto… ya lo recordé – asintió Vio. En ese momento, un profesor pasa al lado de los tres.
-Hola chicos… ¿Estudiando? – preguntó dicho mayor.
-Más o menos – respondió Vaati.
-A ver si apruebas ésa materia, Ghirahim – dijo sonriente mientras se alejaba. Vio le dedicó una mirada perpleja al peli blanco, Vaati, en cambio, le dedicó una mirada falible entre pícara y burla. Ghirahim clavó la vista en la espalda de aquél profesor, dibujó una sonrisa enamorada y suspiró.
-Ay… Profesor Demise… - comenzó hablar el peli blanco – si supiera cuánto deseo tenerlo a mi lado para, así, poder amarrarlo – comenzó a dibujar un rostro asesino – y apuñalarlo y pisotearlo demostrándole el odio que le tengo desde el fondo de mi corazón – Vaati comenzó a lanzar una carcajada.
-¿Odias a ese profesor? – preguntó Vio curioso.
-Con cuerpo y alma – sonrió sereno Ghirahim.
-¿Puedo saber el por qué? – volvió a inquirir el Link violeta.
-¡Porque siempre tengo su atención! – respondió un tanto molesto Ghirahim – siempre me pone tres o cuatro en los exámenes… y eso que estudio
-Tal vez no respondes adecuadamente a las preguntas – opinó el peli violeta.
-¡Claro que sí! – replicó su amigo – una vez le escribí seis hojas en un examen y me puso tres… no lo entiendo… - miró hacia la nada – no cabe duda de que ese profesor me odia – hizo un pause – digo… ¿no? Pero si realmente me odia… ¿no le conviene aprobarme? No me vería nunca más en su fucking vida
-Ya sabes cómo son los profesores – intentó animarlo Vaati mientras se le ocurría una idea – Oye Ghira… tengo una idea… vamos a probar si realmente te odia el profesor Demise.
-¿De qué se trata? – se interesó el mencionado.
-Dentro de tres semanas, el profesor Demise tomará un examen – comenzó a hablar el minish – hagamos esto… Yo voy a tu casa y vamos a estudiar el mismo libro… con las mismas palabras, puntos, comas, comillas de pie a cabeza y vamos a responder, exactamente, lo mismo
-Me parece una buena idea… - interrumpió Vio – pero… tengo una pregunta… ¿no pensará su profesor que se copiaron entre ustedes?
-Yo tengo otra pregunta – interrumpió Ghirahim abriendo sus ojos de par en par a la vez que Vaati le negaba con la cabeza a Vio - ¿Habrá examen dentro de tres semanas? – dicha pregunta molestó al minish.
-Ghira ¿Qué rayos escuchas cuando los profesores hablan?
-No recuerdo haberlo escuchado decir eso – El timbre sonó. Vio se despidió de sus amigos antes de irse a sus salones correspondientes.
-Nos veremos en el recreo, Vio – sonrió apacible Vaati dándole un apretón de manos.
-Sí, suerte en el examen – les sonrió el rubio.
-Gracias – dijo Vaati comenzando a caminar hacia su salón junto con Ghirahim.
Vuelve a sonar el timbre de recreo, el primer recreo. Vio salió para encaminarse hacia el baño, en cuanto salió encontró a Ghirahim y a Vaati sentados en la escalera.
-Hola Chicos – saludó Vio acercándose a ellos.
-¿Dónde estabas? – inquirió Vaati curioso.
-En el baño – respondió el rubio - ¿Qué tal el examen?
-Saqué seis y por un pelo – respondió Ghirahim.
-¡Yo saqué nueve! – respondió juguetón Vaati – ¡Y la profesora me puso un sticker! – añadió.
-¿La profesora de Tercer año no es la misma de Segundo? – preguntó curioso el rubio a lo que Ghirahim y Vaati le negaron con la cabeza.
-No, es otra – comenzó a hablar Vaati sonriendo apaciblemente – y la adoro… ¡es un amor!
-Yo la odio – se interpuso el peli blanco mientras se cruzaba de brazos – no acabamos de terminar un examen y ya nos encaja otro libro para leer
-Entonces, la adoraré – rió Vio. Vaati se levantó de su asiento.
-¿Nos acompañas a la biblioteca? – preguntó a lo que Vio asintió, Ghirahim se levantó de su asiento, los tres se encaminaron hacia el salón de Tercer año. Como Vaati estaba en el medio, no tuvo mejor idea que empujar al peli blanco con el fin de hacerlo caer, acto seguido, agarró la mano de Vio y corrieron hacia el salón de tercer año.
-¿What the hell? – farfulló Ghirahim perplejo mientras tomaba asiento.
-Por favor, tenga más cuidado – dijo una voz femenina, la cual, Ghirahim conocía muy bien. Volteó lentamente encontrándose con Fi, al parecer, la había empujado ya que estaba tomando asiento mientras dibujaba una mueca de dolor. El chico pálido se enrojeció como un tomate, miles de sentimientos le invadieron por dentro poniéndolo nervioso.
-Lo… lo siento – se disculpó poniéndose de pie, a la vez, ayudando a Fi a levantarla. Amaba a esa chica más que a nadie mas, como todo al mundo le pasa, confesar tus sentimientos no es fácil si ves a esa persona todos los días. Al menos, Ghirahim pensaba esperar a la hora de decirle a Fi lo que sentía por ella – Mi estúpido amigo me empujó – agregó nervioso. ¡Maldita sea! El tacto del cuerpo ajeno al ayudarla a ponerla de pie le provocaban unas fuertes ganas de abrazarla, solo abrazarla y decirle cuánto la ama - tendré más cuidado la próxima vez – farfulló alejándose de su compañera lo más rápido posible. Al entrar a su salón, lo primero que hizo fue darle un coscorrón al peli violeta.
-Al menos te hice un favor – le dedicó una mirada pícara al chico pálido mientras se sobaba la cabeza.
-Te odié pero a la vez te amé – sonrió travieso Ghirahim. El timbre sonó, ya era hora de entrar al salón.
-Ooow… no podremos devolver el libro – comentó Vaati apenado mirando a Vio.
-No importa – sonrió sereno el rubio.
-¿A qué hora sales, Vio? – inquirió Ghirahim curioso.
-Dentro de media hora – respondió el mencionado mientras se levantaba de su asiento.
-O sea… ¿Qué no hay segundo recreo para verte? – habló el minish haciendo puchero, causándole un cierto cariño en el corazón de Vio.
-Jeje… Al parecer, no... Nos veremos mañana – se saludaron y volvieron a sus salones.