No entendia que estaba pasando, no sabia porque me miraban todos con caras de sorprendidos. Empece a caminar un poco indiferente a las miradas de los demas. Robin se hacerco a mi y me empezo a hablar.
-Zoro, no creo que sepas en que situacion estas. No hables por favor. - Le mire con cara de intriga y asenti. - Ve a la cocina, te estan esperando.
Me separe de ella y subi las escaleras para ir a la cocina. Abri la puerta y vi a Sanji sentado en una silla, con el ruido de la puerta el cocinero salio de sus pensamientos y me observo. Queria hablar pero mi voz por alguna razon no salia de mi garganta.
Cuando por fin dejo de observarme como si fuera lo mas extraño del mundo, me hablo.
-¿¡Zoro!?
Como todavia no podia hablar solo asenti con la cabeza.
-¿Que te ha pasado?... esto es demasiado para mi.
Le miraba con cara de no entender sus palabras y con molestia por no obtener ninguna explicacion de lo que ocurria. Sanji parece que entendio eso en mi rostro.
-Ven conmigo, supongo que si te miras al espejo lo entenderas todo.
Me llevo al baño con los ojos tapados, y una vez llegamos me puso en frente al espejo y me destapo los ojos.
Cuando vi mi reflejo en el espejo lo unico que pude hacer fue gritar. Al escuchar mi grito, un grito agudo, grite mas todavia. Lo que mis ojos veian y lo que mis oidos oian no podia ser verdad.
Mi grito alerto a todos, que vinieron corriendo a ver que sucedia.
-¿¡Que pasa, Zoro!? - Nami.
-¿¡Como que qué pasa!? ¿Tu me has visto?
-Tu voz... no es la de Zoro ¿Seguro que eres tu? - Luffy.
-¡Claro que si idiota! Esto es demasiado para... mi. - Dije antes de desmayarme.
Desperte rato despues en la enfermeria, estaba totalmente sin energias, gire la cabeza y vi a Sanji a mi lado. Le sonrei sin pensarlo y el me devolvia la sonrisa.
-Te ves muy bien sonriendo, sobr todo ahora.
-No me lo recuerdes, por favor. Todavia no estoy bien, es mas estoy agotado.
-¿Quieres comer algo? - Me pregunto acariciando mi frente.
-No, no tengo hambre. Pero si que quiero que me hagas un favor - Le dije un poco sonrojado.
-Si, dime. Intentare complacerte.
-Esta noche... ven a dormir conmigo.
-¿En la enfermeria?
-La cama es bastante amplia.
-Esta bien, pero tendre que ir a hacer la cena en un rato.
-No hay problema, siempre y cuando vuelvas.
-Eso no lo dudes. Te traere algo de comer.
-Pero no tengo hambre... - Le dije en un puchero.
-Me da igual, por lo menos una sopa comeras.
-Esta bien. - Dije suspirando, me dio un beso y salio de la enfermeria.
Ese beso me parecio especial, ahora parecia una colegiala enamorada... lo que faltaba.
Me acomode un poci en la cama, era bastante comoda. Habia estado mas veces en la enfermeria pero no tumbado en la cama, solia traerme Chopper para curarme alguna herida pero poco mas. En ese momento entraron Robin y Nami seguramente a molestar.
-Hola Zoro ¿Como estas?
-Mejor supongo - Dije con cara de sorpresa, ¿Nami preocupada por mi? Esto era cada vez mas raro.
-¿Que te ha pasado para que esto este ocurriendo? - Pregunto Robin.
-No lo se. No he comido nada raro... comer, eso es. ¿Como se llamaba? ¿Rolat? ¿Ralyat? Rolyat, si asi era.
-¿Rolyat? ¿Que clase de nombre es ese?
-A mi no me preguntes usurera, solo se que se llama asi.
-¿¡Cuantas veces te he dicho que no me llames asi!? Te salvas solo porque no es buena situacion.
-¿Te acuerdas donde viste a Rolyat? - Robin.
-En una casa en mitad del bosque.
-Tendremos que solucionar este problema, supongo que esto no le hara gracia a un espadachin como tu. - Dijo Robin riendose por lo bajo.
-Si no quereis nada mas, me gustaria descansar. - Me acomode un poco en la cama y senti como se iban de la enfermeria.
Por fin un poco de tranquilidad, asi podia pensar un poco en lo sucedido y en lo que pasaria de ahora en adelante. Ahora seria el hazme reir de todo el mundo, me pregunto por que le tuvo que pasar a alguien como yo algo tan terrible.
Un ruido me saco de mis pensamientos, era la puerta otra vez. Ya estaba harto de tanta visita.
-¿Zoro te encuentras mejor? Sanji me ha dicho que te habias despertado.
-No te preocupes Chopper, estoy bien.
-Siempre dices lo mismo. - Dijo antes de destaparme. - ¿Enserio no te duele nada? Al sufrir tal cambio...
-No me duele nada enserio
-Da igual, de todas maneras no hagas mucho esfuerzo.
-Esta bien tampoco tengo muchos animos.
-Te dejare descansar, no dejare que nadie entre a esta habitacion.
-Chopper... - Le llame mientras me volvia a tapar con las mantas - Deja entrar solo a Sanji.
-¿A Sanji? - Asenti con la cabeza - E-Esta bien, como quieras.
Cuando salio el pequeño renito me tumbe bien en la cama y me quede dormido. No se cuanto tiempo estuve dormido, me desperte porque sentia que alguien me estaba observando. Mire a mi alrededor, no habia nadie. Un escalofrio recorrio mi cuerpo, mis sentidos nunca fallaban ¿Que pasaba ahora? Oh, claro... ya recuerdo...
Casi me caigo de la cama cuando escuche la puerta abrirse, mantuve el equilibrio como pude y mire a Sanji que habia entrado con una bandeja de comida.
-Zoro... ¿como estas?
-Bien, me has asustado - Dije poniendo morritos.
-No puedo con esto - Dijo dejando la bandeja - ... no se como tratarte ahora, mis palabras se contradicen en mi mente.
-Sanji... yo no queria esto. No se ni como ha pasado. - Dije un poco triste, sentia como no podia controlar mi cuerpo y unas lagrimas rebeldes caian por mis mejillas.
-No llores Zoro, no es tan malo.
-¿¡Que no!? ¡Yo no se... no me siento comodo!
-Me imagino... - Dijo con una sonrisa compadeciente.
-Yo no pedi esto... ¡No quiero ser UNA MUJER!