-Responde Jonghyun -lo miró con la ansiedad implantada en los ojos.
-Disculpa, la pregunta de nuevo -se rascó la parte trasera del cuello. El rubio rodó los ojos y lo miró a los ojos.
-Si no tuviera alguna de mis piernas, ¿seguirías amándome? -el mayor lo miró, tratando de no cagarla con sus palabras y buscando la respuesta correcta.
-Supongo que tendría que llevarte todos los días en mi espalda. - Kibum suspiró mientras dejaba caer sus párpados.
-¿Y si... no tuviera un brazo? -El castaño sonrió.
-Pues haría todas tus tareas, y no dejaría de abrazarte. -Key sonrió. Había pasado las dos pruebas. Tragó en seco y miró hacia un punto inexistente en la azotea.
-¿Y seguirías amándome aun si yo... estuviera... embarazado? -Lo había hecho. Lo había dicho. Alzó la cabeza tratando de descifrar los gestos de Jonghyun.
-¿Tu... en serio? ¿Esto...? -se rascó la cabeza y suspiró -¿me estás jodiendo cierto? -Kibum trató de no soltar las lágrimas y caerle a golpes. Negó cerrando los puños -¿Cómo pasó?
-Supongo que algún espíritu me preñó. -Se acercó amenazante y le propinó un duro golpe en la cabeza -¿No recuerdas aquella vez en tu casa? -A Jonghyun se le subieron los colores a la cara.
-¿Así a la primera?
En serio que el menor se aguantaba de no darle una severa paliza a su estúpido novio.
-Si idiota. Tu maldita calentura de perro me dejó en este estado. - Jonghyun lo abrazó y besó la mejilla sonrosada. -¿Que haremos?
-No lo se. Estás embarazado. Aún tengo 17 años. Yo... necesito pensarlo un poco -Deshizo el abrazo y sin decir otra palabra, bajó las escaleras en plena serenidad.
~**~
-Es un idiota -secó sus lágrimas y empujó la almohada con la imagen del mayor impresa en ella -Te odio tanto Jonghyun -elevó su mirada e intentó ahogar el gemido de dolor. Colgó el teléfono rosado con furia. Era ya la 7° vez que no le contestaba.
Había pasado ya una semana. Donde al parecer, Jonghyun evitaba todo contacto o cruzamiento a su persona.
-Si el no lo quiere, pues yo tampoco -sorbió su nariz y saliendo del cubículo se mojó la cara.
Estaba decidido.
~**~
-¡Aigoo Kibummie! -chilló su mejor amiga. -Eres un maldito suertudo. -Toda su clase se asomaba a la ventana, suspirando y envidiando a Kibum un poco más.
Por inercia, acercó su cabeza hacia la ventana, descubriendo el bonito mensaje escrito en la tierra.
"Kibum Te Amo"
Sonrió como tonto y lo perdonó.
~**~
-Lamento haber desaparecido. -tomó sus manos y besó su mejilla -pero no es que no quiera estar contigo. Sólo me di un tiempo para pensar en todo esto. Ni siquiera se a que me quiero dedicar. -Kibum lo miró con la tristeza en su rostro.
-Entiendo que no quieras esto que llevo dentro... pero yo -se aferró al pecho cálido y de nuevo las lágrimas surcaban su bonito rostro de porcelana -no puedo vivir sin ti. No podré comer sin ti, no volveré a bailar, a sonreír. Si me dejas moriré Jonggie -sollozó mojando la camiseta de uniforme. Sintió unos brazos apartarlo de su refugio y levantó su mentón para verlo directamente.
-No se a que me quiero dedicar, pero este tiempo decidí que es mi responsabilidad y buscaré algo para darles la vida que se merezcan. Quiero ver la felicidad siempre en tu linda cara -acunó entre sus manos las mejillas rosaditas y depositó un pequeño beso en el piquito que se levantaba coqueto y tierno. -Seré un buen hombre. Tu eres mi vida
-Tonto, me has hecho llorar toda esta semana, tendrás que recompensarme. Todo esto es tu responsabilidad.
-Lo sé y lo recompensaré. Todo esto es por mi causa.
-Pues si porque nadie te manda a meter tu cosa dentro de mí.
-Bueno, tienes que admitir que para ser nuestra primera vez, fue muy placentero~ -acercó su estrecha cintura hasta topar su pelvis con la contraria
-Pervertido, seguimos en el colegio.
-Dame un beso y te dejo libre...
~**~
-Vayamos por Fideos de arroz -la cara de Kibum se iluminó.
-¡Si! Se me antojan demasiado -se colgó al brazo del mayor y sonrió. Comenzaron a caminar hasta el local que quedaba cerca del colegio.
-Dos órdenes de Fideos de arroz y una rebanada de pizza.
-¿Algo más oppa? -le sonrió coquetamente. Kibum puso cara de asco.
"zorra"
-Estamos bien así, gracias.
-Vaya, al parecer te diste cuenta -Jonghyun volteó a verlo mientras bebía de su jugo.
-¿de qué?
-De esa... es obvio que quiere conquistarte.
-¿Se Kyung noona? Debes estar de broma. Solo somos amigos.
-Pues vaya forma en que los "amigos" de ahora se miran -sonrió irónicamente mientras depreciaba el beso que Jonghyun quería darle.
-Vamos Bummie, no estés celoso.
-¿Ahora te pones de su lado? Esto es increíble Kim Jonghyun -lo señaló con el dedo acusatoriamente. Jonghyun besó el dedo índice y soltó unas pequeñas risitas. Eso si que le causaba gracia y ternura. Las mejillas del menor infladas y con un puchero irresistible adornando su linda boquita corazón.
-No es eso. Deja ese comportamiento que mi hijo puede aprender esa conducta. -Kibum se le quedó viendo y bajó la cabeza apenado -Te amo
~**~
-¿Que te ves tanto? Tienes el abdomen más plano que el mío -Kibum se volteó avergonzado tratando de cubrirse la desnudez.
Su hermana se burló de sus bóxers rosas y el sport blanco a medio subir.
-Esto no es de tu incumbencia Gwiboon, vete. - empujándola cerró la puerta y colocó el seguro.
-¡Omma! ¡Kibummie tiene la cintura y el abdomen de una chica! -comenzó a gritar mientras bajaba las escaleras. Kibum rodó los ojos y volvió a su vista en el espejo de cuerpo completo.
-No solo por fuera hermana -susurró tocando el vientre plano, con un par de lunares y ninguna anomalía de crecimiento. -Ya quiero verte bebé -sonrió como bobo y se tiró a su cama rosa, cerrando los ojos mientras recordaba.
~
-¡Chicas escuchen! -gritaba su loca compañera SunKyu -¡Hay alerta de chico guapo en el salón de al lado! -todas las chicas corrieron dejando a la maestra perpleja. Una chica de cabello castaño jaló el brazo de Kibum.
-Jessica no, no tengo interés en verlo.
-Vamos, ¿que tal si de verdad está bueno como gritan?
-Dijeron guapo no bueno.
-Da igual, mueve tu trasero -Salieron del salón, juntándose al tumulto de gente que se formaba en la ventana del salón.
-Mi nombre es Kim Jonghyun y vengo de Seúl. No tengo las mejores notas pero soy bueno en los deportes. -Mostró una sonrisa a todo el grupo y a los chismosos de la ventana.
"Deslumbrante y hermosa"
-¡Recuerden no pegarle muy duro a sus compañeros! -Gritó la profesora de Educación Física.
-Odio esta clase
-Vamos Bummie, al menos el chico lindo está con nosotros -quiso contestarle un "tienes razón" pero no. Si todos se morían por el nuevo, el sería la excepción.
Bueno, no lo admitiría públicamente.
Las pelotas volaban sobre su cabeza, el intentaba esquivarlas, saltar y hacer miles de marometas antes que lo tocaran.
-¡Kibum cuidado! -escuchó a Amber gritarle. Volteó el rostro al lado equivocado, recibiendo un pelotazo duro y certero.
-¿Estás bien? -el chico de la sonrisa bonita se acercó preocupado.
-Solo aléjate y no me toques -gruño sobándose la nariz.
-¡Corre oppa! -gritaban eufóricas las chicas, apoyando a Jonghyun en la carrera de relevos. Estaban ya en la última vuelta y de repente, la vista de Jonghyun se centró en aquel niño bonito de cabellos rubios quien bailaba una coreografía con otras tres chicas.
"Hermoso"
-¡Oppa! ¿te encuentras bien? -sintió el dolor en su frente y mejilla. Se había pegado contra un poste.
-Kibum llévalo a la enfermería -El rubio hizo una mueca.
-¿Y porque yo? No es mi culpa que el pobre sea un bobo -Pero las miradas acusatorias de sus compañeras le hicieron bajar la cabeza.
-¿Que no es obvio? Esto es por tu culpa. Por mirarte perdió su concentración - Las mejillas se le tiñeron rosas y asintiendo apenado, lo ayudó a caminar hacia la enfermería.
-Soy Kibum.
-Soy Jonghyun y me gustas.
~
Sonrió y abrazó la almohada con su rostro.
-Te amo.
~**~
-¿Bueno? -respondió con la voz ronca.
-Tengo antojo de algo frito y salado
-En un rato te lo llevo
~**~
-Ahjumma, ¿Podría ponerle otro pedazo?
-Vaya,a tu novia si que le debe gustar el hígado. ¿Está embarazada?
-Ajá
-Pues con esto que pide, lo más seguro es que sea un varón.
-¿Ah si? -sonrió feliz.
-Ábreme -susurró contra la bocina del celular.
-Voy~ - unos minutos más, se encontraba en el cuarto del menor. -¿Trajiste lo que quería?
-Sip, la Ahjumma dijo que con este antojo, lo más seguro es que sea varón.
-¿Oh si?
-Ajá.
~**~
-Uhm~ -gimió sobre el cuello del mayor.
-¿ Estás seguro Bummie? -preguntó con la voz ronca.
-Si. Ya estoy en cinta y necesito que me toques~ -ronroneó mientras depositaba besitos en todo su pecho.
-Tu dices y yo obedezco.
-Ámame Jonghyun, házmelo ahora ~ -susurró besando el lóbulo del castaño.
-Con gusto~ -gruñó mientras masajeaba el trasero suave y delicioso.
Los besos descendían sobre todos los rincones de sus cuerpos, deshaciéndose de sus ropas, sintiendo el calor recorrer su interior.
Sintiéndose necesitados del contacto ajeno, continuando las fricciones y los besos húmedos.
Auto completándose, siendo uno y el placer llenándolos por completo.
~**~
-Un hermanito no. Eso arruinaría mis planes y el árbol genealógico. Si siguen así, tendré que dormir con ustedes todas las noches.
-Está bien. Al fin que con un hijo necio nos basta -chilló su madre cruzándose de brazos.
-No lo tendremos entonces. Usaré protección, lo juro.
-¡Yah! ¿Como cuentas esas cosas? -gritó su madre avergonzada.
~**
-Ni omma ni appa lo saben -susurró mientras bebía de su cuarto licuado de fresas.
-La mía pensó que hablaba de una amiga y me dijo que me alejara de ella.
-Aun así, lo quiero tener.
-He empezado a repartir periódico y trabajar en un taller en las tardes. Tendrás una vida de princesa.
-Ajá. -se paró y tomando su mano, le sonrió -tengamos una cita.
-De acuerdo.
~**~
-¿No son adorables? -chilló Kibum mirando a los niños correr y jugar.
-Estoy viendo algo adorable y no son los niños jugando o el señor gordo de la rosquilla.
-Tonto ~ -suspiró atrapando sus labios en un beso tierno.
-Vamos, debe haber un bote cerca de aquí -caminaron un poco más hasta encontrar el pequeño muelle del lago, subiéndose con cuidado al bote rojo.
-Subámonos en esa plataforma -apuntó el menor hacia la pequeña plataforma con enredaderas y pequeñas flores.
Se bajaron y sin haber atado el bote, que en unos segundos se alejó de ellos.
-Tengo que nadar.
-Ni loco, piensa en el bebé
-Cierto, mi bebé -suspiró rascándose la nuca.
Habían pasado más de dos horas y no hallaban alguna persona que pasara por la orilla.
-¡Mira! ¡Pidamos ayuda! -gritó Kibum, alzando las manos y saltando.
-¡Oigaaaan! -Gritaba Jonghyun, pero los viejitos de la lancha, tenían auriculares puestos. Como última opción, decidió lanzar su celular, pero en vez de haber caído en el bote, cayó al agua, haciéndole fruncir el ceño.
-Que desperdicio. - se sentó frustrado y de inmediato sintió unos brazos rodearlo.
-Hay que tener paciencia.
-Contigo, esperaría hasta el fin del mundo.
-Cursi~
Había caído la noche y decidieron tomar una pequeña siesta. Ni se habían dado cuenta, y Kibum ya estaba siendo bajado por un señor de cara amable en su casa. Su madre iba a matarlo.
-Descuida, lo llevaré a casa -comentó el señor, refirendose a Jonghyun.
~**~
-Kibummie~ - susurró Gwiboon sobre la puerta, pero su boca se abrió más al ver el vientre de su hermano.
-¡noona! ¿Como entras sin tocar antes? -preguntó nervioso.
-Tu...¿Por que estás gordo? -Las mejillas de Kibum se tornaron rosas y su labio comenzó a temblar. -¿Estás comiendo de más o...? ¿Es que tu...?
-Noona yo...
-¡¿QUE TU QUE?! -el grito de su madre lo hizo saltar de su lugar.
-Señora, todo esto es mi culpa... yo...
-¡No! También es mi culpa omma, el y yo decidimos tenerlo
-Dime que es una broma Kibum, tu no puedes, esto... -su madre suspiró cansada y se retiró dejándolos solos.
~**~
-Jamás había visto un embarazo tan sano y en buen estado. Muchas Felicidades. -El doctor se retiró dejándolos solos. La madre de Kibum se levantó y el menor fue jalado por su hermana.
-Al auto ahora -sentenció su madre con la cara seria.
-Te llamaré Jonghyun
-Te amo~ -susurró.
Una bofetada le hizo voltear la cara. Su madre se alejó de el furiosa.
~**~
-omma, ¿te acuerdas de mi novio Kibum?
-omo, el bello presidente estudiantil. Tan lindo y cariñoso. ¿Que pasa con el? -preguntó revolviendo la pasta y la soja.
-El.. pues yo...
-¿Si?
-Lo he dejado embarazado.
~**~
-¿Que les sucede a estos niños en la actualidad? Queriendo jugar a los adultos -su padre suspiró molesto -esto es tu culpa, tu debiste encargarte de su educación - su madre lo miró incrédula.
-No me haré responsable de sus actos. Tiene que cumplir con sus obligaciones. -la madre de Kibum asintió.
-Yo jamás dije que no lo haría -Contestó molesto. El rubio lo abrazó. El padre de Kibum se levantó de la silla, intimidando a los presentes.
-Tienes que responder por esto -apuntó el vientre notorio de 5 meses.
-lo haré. Si me permite, quisiera casarme con su hijo. -Kibum se sorprendió ante las palabras del mayor y sonrió feliz.
-Vaya, pensé que de nuevo iba a ser asunto suyo. -bufó con ironía y se metió a la cocina.
-Tenemos que planear la boda cuanto antes. Este niño tiene que nacer bajo santo matrimonio.
~**~
-No quiero casarme ahora.
-¿Te arrepientes de hacerlo conmigo? -se acercó abrazándolo por detrás.
-No, claro que no. Es solo que, la panza no me hará lucir bien de blanco.
-Tu te verás hermoso aun si estuvieras de nueve meses. -lo tomó de las caderas, empujándolo contras las frazadas rosadas.
-Jonggie, estamos en mi casa y no precisamente solos - el mayor se posicionó encima de el, mordisqueando su cuello
-Eso no me detuvo la segunda vez~ -acariciaba con su nariz el blanco cuello.
-Entonces hazlo~ -finalizaron la charla con un suave beso.
~**~
-¿Tenemos que hacerte un Baby Shower? -Preguntó emocionada la castaña.
-No es necesario, estoy bien - las demás chicas a su alrededor chillaron emocionadas.
-Aigoo Kibummie, eres tan afortunado. Primero se hacen novios, te embaraza y ahora se casarán -las demás chicas asintieron y el solo pudo sentirse más feliz.
Era todo lo que deseaba.
~**~
-Quiero algo picante -el castaño lo tomó de las caderas mientras suspiraba en su cuello -hablo de comida, no de sexo Jonghyun -reprendió al otro que ya había bajado sus manos hasta su trasero.
-No puedes comer condimentos amor -"amor". Que lindo sonaba eso.
-Dilo de nuevo
-Amor -ambos sonrieron y siguieron caminando, tomados de la mano.
De pronto un fuerte dolor le hizo curvar la espalda.
-
¡Bummie! ¿te encuentras bien?- Jonghyun no cabía en la preocupación.
-¡AH! -otro desgarrador gemido salió de su garganta, haciéndole temblar las piernas. -¡Jonghyun, ya quiere nacer! - el mayor se hundió en nerviosismo, tratando de tomarlo en brazos.
-Pero aun falta un mes.
-¡Y la boda es pasado mañana! -chilló adolorido. -¡No bebe! ¡No me hagas esto! -las lágrimas corrían de sus ojos, lastimándole el cuerpo y sintiéndose morir.
-¡Vamos al Hospital! -tomaron un taxi pidiendo al conductor que acelerara. Los gemidos de dolor incrementaban, al igual que el nerviosismo y el miedo en Jonghyun.
-¿Suegra? -oyó un murmullo, pero no le dio tiempo a contestar -Vaya al hospital general, ¡Kibum está a punto de dar a luz! -colgó de inmediato y se dedicó a hacerle pequeñas caricias al vientre ya redondo.
~**~
Cuatro interminables horas, que se le hacían días. Los doctores iban y venían pero nadie se paraba a explicarles el estado de Kibum.
-Dios, ya quiero ver a mi sobrino
-O sobrina ¿que es Jjong? -el mencionado volteó y negó.
-Queríamos que fuese sorpresa.
~**~
-Felicidades, es una hermosa niña. -La sonrisa de Jonghyun parecía iluminar el lugar.
-Mi dulce princesa -se acercó hasta la cama donde reposaba Kibum y el pequeño bulto rosa.
-Nuestra bebé.
-Al menos a ella no le falta una pierna.
-Y si lo hiciera, tu la cargarías.
-Junghee~ - Kibum asintió conmovido. Todo era tan perfecto.
~**~
-Kim Jonghyun ¿aceptas a Kim Kibum como esposo, para serle fiel por la eternidad, en la salud y en la pobreza, en la dicha y la tristeza?
-Acepto.
-Kim Kibum¿aceptas a...?
-Por supuesto -sin darle tiempo al sacerdote, se lanzó a sus labios, procurando no lastimar la herida de su vientre.
Se veían tan bonito, aun con la bata del hospital. Tan radiante y perfecto.
-Te amo.
-Gracias por no huir de mi.
-¿Bromeas? Tu y mi princesa son lo mejor de mi vida.
-Te amo -sellaron sus palabras con un beso tierno.
-Hagamos otro~ -susurró en el oído perforado, Recibiendo un golpe de inmediato.
Tonto~