Me encontraba completamente tranquila mirando televisión esperando que fueran las 4:30 pm para poder verlo. Sonreí complacida al ver que había llegado y comenzaba hacer su labor en el jardín y así con sigilo me fui hacía la ventana para verlo mejor.
Estaba tan idiota mirándolo que no presencie la llegada de mi hermano mayor, restándole importancia puesto que él era un amargado.
Casi me da el infarto cuando se dio cuenta que lo miraba y con timidez me hice hacía un lado de la ventana causándole una pequeña risita, ¡DIOS! Qué pena conmigo. Volví asomarme con cautela y madre mía casi me da el infarto cuando lo veo sacándose la camisa.
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Al día siguiente mis mejores amigas, Hye Lim y Yoo Young, vinieron a la casa para darle el gusto bueno aquel chico de nombre SunWoo, pero creo que le decían Baro. No sé, me traía loca y por suerte estaba, se encontraba arreglando el auto de su padre (tan lindo El).
- No entiendo Yoon ¿Por qué ese tipo no te hace caso? Eres la más linda de tu callé.- Dijo mi amiga Hye Lim alías Lime-.
- Lime tiene razón, Yoon –Esta vez la que hablo fue mi pequeña mejor amiga, Yoo Young-. Para eso hice un plan…
Como si estuviera en su casa se puso a husmear en mi armario, sacando de el un short de mezclilla corto y una blusa de tirantes blancas. Me sorprendí un poco, por el hecho de que yo tuviera eso y ella lo supiera, bruscamente me tomo del brazo y me aventó la ropa encerrándome en el baño.
- ¡Y NO SALGAS HASTA QUE TE PONGAS ESO SHIN YOONJO! –Grito con entusiasmo mientras Lime solamente reía por la actitud tan infantil de YooYoung-.
En ese momento paso mi hermano mayor mirando extrañado a mis amigas solas en mi habitación, las cuales solo podían evitar su mirada puesto que a ellas se les hacía demasiado guapo, ¡QUE HORROR! Si parecía un Hippie…
Al poco rato ya me encontraba siendo empujada por mis amigas hacía el garaje donde estaba el auto de mi madre, el cual por casi obligación comencé a lavar de forma provocativa para llamar la atención de mi guapo vecino el cual, ni ponía atención.
Sin embargo mis mejillas se sonrojaron al verlo levantar su rostro entusiasmado con una tenue sonrisa en su rostro haciéndome resbalar del parabrisas del auto rodar por el cofre y caer al suelo dándome un golpe bastante fuerte en mi cabeza.
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Ahh~ SunWoo era todo un príncipe… La pareja ideal. Tan guapo y caballeroso y ¡TODO MÍO!
Amaba las miradas celosas de todas las chicas al mirarme del brazo de aquel chico. Pero algo no andaba bien, ¿Por qué no me hablaba? Solo se dedicaba a mirarme, abrazarme y besarme.
Escuche a Lime y a YooYoung preocupadas, llamándome…
YoonJo… YoonJo …¡Despierta! ¡Mira lo que has hecho Young!
Mire para todos lados y... ¡¿DÓNDE ESTABA SUN WOO?!
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- ¡¿SUN WOO?! –Desperté gritando y mis amigas me miraban divertidas y ese chico, SunWoo, pues apenado y ligeramente sonrojado. ¡NO! Que feo, quería morir… - ¿Qu-que paso? –Murmure nerviosa ante la atenta mirada de todos-.
Lime y Yoo Young contaron todo lo que sucedió, lo que me hizo querer que la tierra me tragara, mas aquel chico no salió huyendo por mis acosos, al contrarío se quedo con nosotras platicando toda la tarde, resulto ser un muchacho muy amable y tierno.
Lime se marcho primero, ya que había llegado a mi casa sin permiso y tuvo miedo que sus padres la regañaran. Al poco rato, el hermano mayor de YooYoung llego y entro a la casa, supuse que buscar a mi hermano. No duro mucho tiempo dentro ya que ambos salieron y riendo, no le tome importancia ya que estaba encantada con la plática de SunWoo. Jung Hwan se acerco a SunWoo y le susurro algo oído haciéndolo reír y sonrojarse, ¡QUE LINDO! Y extraño… Más solo alcancé a despedirme de YooYoung y su hermano, seguía embobada con MI SUNWOO.
Siguió la plática un rato más, hasta que la interrupción de mi hermano me hizo darme cuenta que ya era de noche y comenzaba a cae el sereno. Me disculpe con SunWoo y comencé ah ir a la entrada de la casa, cuando sentí un brazo tocarme el hombro.
- Um Yoonjo ¿Te puedo pedir algo? –Me miro con esos hermosos ojos que se cargaba y yo, yo solo asentí embobada, ¡se los juro! El chico era hermoso en todo aspecto de su persona-.
Mi mente comenzó a hacer de las suyas haciéndome fantasear las siguientes posibles escenas románticas de declaraciones de amor y besos. No entendía nada de lo que decía, estaba como estúpida mirando sus labios pensando a qué hora se le ocurrirá besarme y decirme que seamos novios.
De su pantalón saco un papel y anoto su número de teléfono en el. ¡AH! Qué bonito, quería que le llamara.
- ¿Quieres también el mío? –Sonreí amablemente por lo que el se soltó a reír, contagiándome un poco sin poder entender el motivo de su estruendosa risa-. ¿Eh?
- E-es… -Se sostuvo del estomago, ante mi mirada confundida- Es que no es para ti, para Dong Woo… Dáselo por favor ¿Si?...
- ¿Por qué? ¿TE HIZO ALGO? –Le mire molesta, estúpido hermano hippie-. Para que le diga a mamá y lo regañe.
- N-no, es que… es que tu hermano… Tu hermano me gusta.
No alcancé a decir nada solo se marcho y me dejo hay con la palabra en la boca. Entre a la casa azotando la puerta lo que hizo recibir unos reproches de mi madre.
Subí a mi habitación dándome cuenta de algo, cuando me caí al que vio de esa manera fue a …y entre a mi habitación encontrándome con el causante de mi disgusto amoroso, mi hermano estaba acostado en mi cama jugando con su teléfono, una vez que me vio entrar extendió su mano y me miro con una cálida y burlona sonrisa.
- Tú tienes algo para mí…
Le avente el mugroso papel y se levanto besándome la mejilla para luego despeinarme, ARGH odiaba a esa jirafa humana que tenía por hermano.
- Oye Jojo… ¿Por qué no lo intentas con el vecino de enfrente? Con el hijo del matrimonio Jung, así si procrean tendrán hijos con ojos de tamaño normal –Dijo burlonamente y salió corriendo antes de morir-.
¡ESTUPIDO SHIN DONG WOO!