PDV Woohyun:
Mi vida siempre fue monótona, iba y venía de la universidad a veces salía al karaoke con mís amigos y luego a casa a descansar. Mis padres no me esperaban ni lo harían, murieron en un accidente cuando cumplí los 20 años, tuve suerte de ser casi mayor de edad, o eso creía yo hasta ahora.
Todos parecían observar al sujeto frente a la entrada, cubría sus ojos con unas gafas de sol color negro y lucía una camisa de leopardo con unos pantalones ceñidos color azul oscuro. No preste mucha atención a su presencia no como los otros por lo menos, hoy cumplía mis 21 y en lo único que pensaba era en salir de fiesta y beber todo el alcohol que pudiese.
Seguí caminando en dirección a mi casa y sentí que alguien me perseguía, me detuve y me giré, era aquel sujeto de antes y estaba frente a mi como sí nada. Heché a correr sin mirar a atrás y cuando lo hice choque con alguien, me golpeé con el frío y espero suelo.
-lo tenemos- dijo uno de los tres sujetos frente a mi yo sólo pensé en salir por patas de allí pero cuando quise darme cuenta me apuntaban con un arma, ¡que caño sucedía!. Levanté las manos en forma de rendición cuando algo muy rápido pasa a mi lado y atraviesa al sujeto que me apuntaba.
Volví a mirar a atrás y era el hombre sospechoso, me estaba comenzando a enfadar, no entendía nada de lo que sucedía y eso me ponía impaciente.
-de verdad, sabes cuanto duré esperándote y de repente sales corriendo de manera estúpida- me grito el hombre mientras se sacaba las gafas y dejaba al descubierto unos pequeños y amenazadores ojos.
Yo que estaba claro que no entendía nada me quedé lo más quieto que podía y casi ni movi los ojos intentando no poner tensos a los asechadores o lo que fueran.
-¡Ey ven aquí!- me exigió el hombre con cara de hamster.Yo no obedecí no podía confiarme de nadie y no lo haría.- ¿es que no escuchaste?, ven aquí, ¡rápido!-
Nada yo no iba a moverme ni de coña. El silencio se apoderado de la escena y tiempo después no se como pero, los dos tipos corrieron a por mi y el otro los mató sin pensarlo.
-¡oye sí digo que vegas es que vengas!¿eres tonto?- me pregunto mientras se acercaba a mi sin permiso y agarraba mi brazo para ver la herida que la navaja de uno de los fallecidos había provocado.
-babo, es que no sabes quién soy- dijo esta vez con una mirada más ¿normal?.Sentí que algo húmedo rozaba la herida y era la lengua de aquel hombre .
-¿que haces?- pregunté al mismo tiempo que me separaba rápido de aquel extraño
-te has herido y pensé que era algo muy profundo pero, sólo es una rallita- una sonrisa ladeada se dibujo en su rostro haciendo que sus ojos se hicieran más pequeños- ¿Duele?
-no
-que bien ahora vamos pueden venir más- el hamster agarró mi brazo y tiro de el hasta un todo terreno negro que esperaba en la curva de antes.
Yo no dije nada en el trayecto al coche pues por alguna razón sentía que necesitaba buscar protección.
Cuando subí al todo terreno observe mejor al hombre de mi lado, parecía de misma edad y aunque tenía una expresión sería y estricta no parecía serlo.
- ¿quién eres?- pregunté sin rodeos
- o lo siento de tanto movimiento no me presente, soy Kim Sungkyu
- ya veo... ¿y porque me secuestras?-
- ¿se secuestrarte?...- se pregunto a sí mismo rascándo con su índice la cabeza y mirando asíá arrivá- ¿un secuestrador te diría su nombre?
- bueno... depende de que secuestrador
El hombre se suelta a reír con descaró y eso me enfurecio a tal punto que abrí la puerta con la intención de irme pero me detuvo.
- soy alguien relacionado con tú familia, ¿eso te vale?
- no
- lo suponía pero, ahora no podemos hablar- me dijo antes de poner en marcha el coche a toda velocidad.
En todo el camino no paré de observarlo, tenía unos rasgos muy definidos y que a cualquier chica le gustaría, ¿que estaba haciendo describiendó a un tipo de esa manera?, llegué a pensar que sí el fuera una chica saldría con el sin poner peros, que estaba pensando agite la cabeza de lado a lado en mi mente tratando de volver a la realidad pero sólo salí de mis estúpidos pensamientos cuando el coche se detuvo en seco y la puerta del conducto se cerro después de que hombre se bajara.
- ¿que haces? bajate- dijo el hombre
Bajé preparado para cualquier cosa y seguí al sujeto.
Pasamos por varios largos pasillos hasta una enorme sala donde estaban mis padres, el tal Sungkyu nos dejó a solas. Estaba paralizado por la escena, ¿como era posibles que mis padres estuvieran aún vivos?, era cierto que sólo había pasado un año desde aquello y que nadie investigó a fondo el accidente cosa extraña para mi pero lo había dejado pasar.
- ¿que sucede aquí?- pregunté impresionado
- Woohyun- grito de la felicidad mi madre antes de lanzarse a abrazarme- me alegro de que estés bien, fue un gran honor que el hijo del superior te fuera a buscar
- espera, espera ¿el hijo del superior?¿que sucede?- pregunté perplejo y es que lo estaba como me podían hacer todo esto, primero se mueren a ahora aparecen...
- es algo largo de explicar así que toma asiento- me dijo mi padre con esa típica expresión frío y distante.
PDV de Sungkyu:
Aún seguía molesto por tener que haber ido a buscar a una simple herramienta, sí tan sólo los otros no hubieran salido a una de esas estúpida emboscadas a los otras bandas yo hubiera podido quedarme a practicar toda la tarde.
Necesitaba sentarme a respirar un poco después de todo había sido más difícil de lo que me lo esperaba aquel chiquillo no sabía nada sobre el y claro lo de su otra vida, prepararlo iba a ser una misión casi imposible ya que para mi no había nada imposible.
Cerré lentamente los ojos para pensar mejor en lo que tenía que hacer con aquel pequeño. No salté ni me movi, sólo mire al hijo de aquellos desdichado a los que tuve que ayudar por culpa de mi padre que aún muerto me hace la vida imposible
- ¿que quieres?- pregunté volviendo a cerrar los ojos
- ¿porque tenéis prisioneros a mis padres?- grito muy enfadado el mocoso que invadio mi oficina sin mi permiso
- ¿prisioneros?- repetí para mi, odiaba escuchar aquel tipo de estupideces y que me gritaran.
- sí eso mismo
- no son prisioneros pero, sí eso fue lo que te dijeron para no quedar mal por abandonarte debido a ciertos asuntos con mi clan, está bien.
- ¿a que te refieres?- cada vez que lo miraba me parecía más ilusó.
- que eres un babo- me hacia gracias pero no podía mostrar ninguna sonrisa.
- ¡oye!
- quiero que hablen con su hijo y le cuenten la verdad- indique a sus padres que estaban en la puerta con unas expresiones muy preocupadas.
Giré mi silla de ruedas en dirección a la ventana donde estaba L, serio y silencioso, muy pocos se daban cuenta de que el llegaba y se iba de todos modos para ello se había entrenado, el mejor espía de mi grupo. Ofrecí una leve sonrisa de aceptación y el se acerco para entregarme el sobre amarillo de sus manos.
- fue rápido- indique al menor
- era fácil, tener contactos me ayuda
- ¿donde está Yeol?- pregunté algo preocupado por el pequeño y de que myungsoo no perdiera la cabeza preocupándose todo el día distraído porque le sucediera a su tesoro.
- sigue a lo suyo, por mucho que le tengo vigilado logra escaparse y ponerme ansioso
- en serio me van a volver loco, dejen de hacer tonterias y estén a lo suyo- exprese extresado antes de indicarle que se podía ir.
Acaricié con delicadeza mi cien y apoye la cabeza sobre el respaldo de la silla giratoria, estaba claro que estábamos cada vez bajo más problemas y con la llegada del nuevo o se arreglaban o simplemente empeorabamos como la enfermedad.
PDV Woohyun:
no podía creer lo que estaba sucediendo mis padres no eran mis padres sí no unos guardaespaldas contratados por mis padres biológicos antes de morir para que no me pasará nada y pudiera cuidar del grupo Nam
, mis padres eran mafiosos y por lo tanto yo también ahora tenía que cuidar de uno de los grupos más peligros de Seul encargado de ser la mano derecha del superior de los grupos el clan Kim, en conclusión, tenía que ser la mano derecha del ese tal Sungkyu, aunque me diera igual que lo mataron.