Hibari después de escuchar las palabras de Mei, camina firmemente hacia en donde esta el cuerpo de Tsunayoshi siendo sostenido por su madre, se inclino a la altura del rostro de Tsuna y le sonrio a su madre para que le permitiera el tomar a su hijo cosa por la cual aquella triste mujer asintio dejandole a Hibari a solas con Tsuna usando una distancia prudente entre ellos, sin mas Hibari acerco al castaño a su rostro, el pelinegro suspiro y con voz suave comenzo a hablar...
-Sawada...sabes que...no soy alguien que hable mucho y tampoco se exprese como un hervivoro ya que no me parece nada prudente actuar asi sin embargo...-tomo la mano del menor y la coloco sobre el lado de su corazón- en estos momentos dejare mi seriedad a un lado solo para pedirte...no....para suplicarte que...por favor abras los ojos....todos aqui te necesitan pero sobre todo....yo te necesito ...Tsuna.....te amo y por ello mismo...desearia que me contestaras a una simple pregunta....que si decides aceptar....te convertira en mi esclavo y dueño de por vida....
Todos sabian que no era prudente interrumpir por ello simplemente no dijeron absolutamente nada, solo observaron como aquel chico de nombre Hibari Kyoyale habría su corazón no solo a su jefe...sino también al amor de su vida, la ansiedad se extendía por todo el lugar....solo una pregunta podia ponerlos a todos asi
-Sawada Tsunayoshi...tu....quieres casarte conmigo?
Después de aquello vieron como los labios de aquel joven pelinegro besaba suavemente los labios contrarios, pero al no recibir respuesta éste al instante creyo que en verdad Tsunayoshi habia dejado ese mundo provocando que una frágil lágrima saliera de sus ojos...
-si...
aquel pelinegro sonrio al haber escuchado limpiamente la respuesta del castaño provocandole una gran sonrisa mientras miraba a Sawada abrir lentamente sus ojos, escuchando las alabanzas de todos en el lugarmientras que la ahora nueva pareja festejaba dandose amor mutuamente devoandose entre besos sin llegar a nada mas intimo, aunque no fue necesario ya que, aquel joven llamado Sawada Tsunayoshi o mejor conocido como el Décimo habia obtenido la felicidad que tanto habia anhelado durante su vida y aunque descepcionados estaban algunos pretendientes eso no significaba que le fuesen a arruinar la felicidad a su querido amigo sin embargo alguien no compartio esa idea, ya que cierto bebe con un chupete color amarillo aparecio de golpe y literalmente golpeando la cabeza del castaño en el proceso...
-ITTEEEE!!!....oi Reborn!!! porque siempre tienes que hacer eso?!!!
Todos comenzaron a reír como locos ya que no se podia evitar la clásica escena de esos dos discutiendo por cualquier cosa, sin embargo ene sta ocasión fue poque el pequeño le pidio tanto a Hibari como a Tsunayoshi firmar una hoja que semanas después descubrierón que se trataba de un acta de matrimónio...no pudo el castaño reclamar nada, solo disfrutar la nueva vida que tenia ahora con el amor de su vida...
los meses pasaron después de largas semanas de reconstrucción y la despedida con las familias aliadas, era cansado pero no tanto como la sorpresa que Tsunayoshi le daria a Hibari apenas llegara a casa despues de la Universidad, ya que por fin Hibari había dejado Namimori chu por petición y extorsión de su pareja con unos inofensivos ojos de cachorrito apaleado y sobre todo con fetiches que le agradaba usar a Hibari para con el castaño a lo cual no le pudo poner peros en ello, ahora aquel pelinegro entraba a casa y el castaño lo recibio con un beso en los labios, lo llevo a una habitación vacía que al parecer el menor había estado decorando y sin mas volteo a ver a su pareja apenas notar que el decorado era de osos de felpa y una cigüeña al centro de la habitación...
-dime que esto no es una broma Tsunayoshi...
el menor nego con la cabeza y comenzo a acariciar su pequeño vientre, levantando su playera un poco para que notara su apenas abultado estomago, sonrojandose por ello y mirandolo espectante
-espero no...te moleste pero...vamos a tener un bebe
en cuanto Kyoya escucho aquello tomo a Tsuna entre sus brazos, besandolo de forma dulce solo para despues besar su frente y sonreirle con calidez (cosa que casi nunca hacía) sin despegarlo de sus brazos
-sin duda...me sigues haciendo el carnivoro mas feliz del mundo mientras pasan los días...mi hervívoro...mi Tsuna
Fin