Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Amando de Nuevo por Serenamoon

[Reviews - 242]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Muuuuuuuuuuuuuy buenos días a todos mis queridos y abandonados lectores... ahora si es un capitulo, para que se emocionen tranquilos.

He conseguido colaboracion para continuar la historia y estoy muy feliz porque voy a poder continuar y terminar mi querida historia... siento que me estoy sacando un gran peso de encima. Porque con mi muy fuerte sentido de la responsabilidad me causa mucho estres dejar algo inconcluso. Soy un poquito obsesiva con mis obligaciones, sea la que sea.

En fin el tan esperado lemon ha llegado. Yo solo hice una parte la otra fue de una fiel lectora y ahora colaboradora la talentosa Beatriz, conocida por estos lados como:

 

SHINEPALB

Creo que el titulo dice mucho, asi que no voy a adelantar nada. 

 

 

CAPITULO XV

TORBELLINO DE PASION PARTE II

 

Mi kitsune estaba en el centro de la cama, luciendo tan condenadamente sexi que casi me muero desangrado solo mirándolo. Y si la lencería no fuera suficiente, la pose que tenia lo hacia lucir de infarto. Y yo que pensaba tomarlo con calma y amarlo suavemente. Mi control estaba yéndose por el caño. Una bestia primitiva y lujuriosa estaba comenzando a poseerme y no sabía si dejarla o luchar contra ella.

- ¿Vas a quedarte toda la noche ahí granadita? – me preguntó con burla. El muy descarado sabía lo que me estaba haciendo. Todo era a propósito. Él se lo había buscado. Que al día siguiente no se quejara si no podía caminar. Me lo estaba pidiendo a gritos. Así que le dije adiós al hombre frio y racional y le dije bienvenida a la bestia pasional y sexual que llevaba dormida bastante tiempo. Puede sonar loco que hable como si dentro mio habitaran dos seres, pero así me había sentido toda la vida. La parte racional dominaba casi todo el tiempo, pero cuando las emociones eran demasiado fuertes e intensas la bestia salía a flote y se hacia cargo. Y no me quejaba, era parte de mí y había aprendido a sobrellevarla y a no dejarme superar por cualquier tontería. Solo reaccionaba en situaciones límites. Y tener a mi amado doncel luciendo ropa interior azul y recostado como todo un cortesano, era una de las situaciones mas limites que había vivido. Le sonreí de medio lado y camine lentamente hacia la cama. Lo vi tragar duro. Ya se había dado cuenta lo que le esperaba.

- No sabia que estuvieras tan desesperado amor – susurre con mi voz ronca por el deseo. Él se estremeció mientras yo comenzaba a acercarme a él gateando. Ya no estaba tan decidido, pero no importaba. Me iba a encargar de sacarle todas las dudas y demostrarle lo maravilloso que era hacer el amor - ¿tienes idea de lo que has provocado con este jueguito? – le pregunte cuando lo tuve acorralado contra le colchón, sin tocarlo, pero tan cerca que sentía su calor. El negó con la cabeza lentamente. Sus ojitos azules brillaban expectantes. Se mordió el labio y mi erección se puso mas dura, aunque me parecía imposible – ahora te enteras – respondí y lo bese con todo el hambre que tenia por el. Ya no debía contenerme. No debía pensar que llegado cierto momento teníamos que parar. Lo deje sin aliento con mis labios. Recorrí su boca con mi lengua como si no lo hubiera hecho nunca – eres tan perfecto – le susurré contra los labios – estoy al borde de la locura.

- ¡No te contengas! – Me grito casi llorando – ya no te contengas – asentí y sin pensarlo ni medio segundo desgarré su ropa interior. Si era muy hermosa y sexi. Pero no tenía paciencia para quitársela como corresponde.

- Estoy al limite – le dije antes de besarlo de nuevo. Mis manos comenzaron a recorrer su maravillosa piel tostada. Era como la seda, y olía como el paraíso para mí. Naru jadeaba entre mis labios. Comenzamos a sudar. Como pude, me quite la ultima prenda que me cubría – tengo que prepararte, porque ya no aguanto mas.

- No hace falta – dijo sonrojado mirando hacia otro lado. Al principio no entendí, pero con una idea en la cabeza lleve mi mano entre sus nalguitas y sentí algo en su entrada. Lo presione y el gimió.

- Kitsune travieso – le dije al oído, para luego lamérselo y comenzar a marcarle el cuello. Con mi mano comencé a meter y sacar el juguete de su trasero. Era perfecto – ahora vas a tener algo mucho mejor – le dije jugando mientras deslizaba el consolador de su entrada. El jadeo y cerro los ojos. Estaba tan desesperado como yo y eso me encantaba.

- Gaara, por favor – suplicó.

- Ya amor, ya – le bese la frente y lo acomode, abriendo bien sus piernas y levantándole la cadera – cielo, esto va a ser rápido y salvaje, después voy a hacerte el amor como corresponde – el asintió desesperado y de una sola estocada me enterré en su interior. Jadee fuerte, era increíblemente estrecho y cálido. La mejor sensación del universo - ¿estás bien?

- Voy a estarlo cuando comiences a moverte – dijo jadeando y comenzó a menear las caderas. Lo sujete y comencé a embestirlo, quise ser suave, de verdad lo intente. Pero su rostro, sus gritos y gemidos me lo hicieron imposible. El movimiento era violento, salvaje como le había dicho. Naru gritaba mi nombre como podía mientras me arañaba los brazos. Estaba enloquecido por el placer y la lujuria, lo mismo que yo. Habían sido meses deseándonos y por fin estábamos consumando nuestro amor - ¡mas, Gaara, mas! – me suplicaba, y como buen prometido, lo complací. Salí unos instantes de él pero antes de que se quejara lo deje boca abajo, levante sus caderas y volví a penetrarlo. De rodillas detrás suyo las embestidas se volvieron frenéticas. Naru no podía levantar la cabeza del colchón de lo fuerte que me movía. Mi agarre en su estrecha cintura era firme. Él ya no tenía voz. Pero lanzo un grito ahogado y supe que había tenido su primer orgasmo de la noche. Seguí en la misma posición y cuando sentí que me faltaba poco lo recosté, colocándome totalmente encima suyo. Si bien mi peso lo aplastaba, la posición nos daba mucha intimidad y el mayor contacto posible en nuestras pieles. Mis movimientos seguían constantes. Le mordí la nuca y le dije al oído lo mucho que lo amaba. El acabo de nuevo y yo lo seguí, llenándolo con mi esencia. Marcándolo como mio para siempre.

 

-Gaara- suspiro, hechizándome con sus hermosos ojos una vez mas, acerque mis labios a los suyos, mientras mis manos no podían mantenerse quietas, era simplemente perfecto, su cabello alborotado cubría como un delicado manto la almohada, enmarcando su jadeante rostro que me miraba, tal y como yo lo hacia, me amaba, eso era todo lo que necesitaba

Volví a profundizar el beso, sintiendo como sus manos recorrían mi espalda para una de ellas detenerse en mi nuca, la posición era un tanto incomoda, pase mis manos por sus costados obligándolo a sentarse en mi regazo sin romper el contacto de nuestra bocas.

 Pronto los gemidos y jadeos de ambos inundaban la habitación, nuestras erecciones se rozaban gracias a mi mano que daba movimientos acompasados, logrando que su espalda se arquee, brindándome una hermosa vista de su largo delicado cuello, en el cual algunas marcabas ya comenzaban a aparecer, recorrí con mi lengua saboreando su exquisito sabor.

Un ligero ronroneo me comprobó lo mucho que estaba disfrutando de mis atenciones, logrando que una sonrisa apareciera en mi rostro, pero así como vino se fue, al sentir como una pequeña mano acariciaba mi miembro, demasiado suave, mi pequeño me estaba torturando

Empujo con suavidad mis manos, para apoderarse del control sobre mi erección- Gaara- susurró, me había desconcertado dejándolo de lado

-Lo siento mi amor- el calor iba en aumento, nuestros cuerpos volvían a acelerarse mientras cada uno atendía al contrario tratando de contenerse lo mas posible

Su respiración se intensificó -Voy a....- tartamudeó, pero lo callé  uniendo por enésima vez nuestras bocas -Aún no – todavía no me acostumbraba a oír mi voz ligeramente mas ronca, ¿a quien engaño?, ni siquiera me podía acostumbrar a toda esta ola de placer que estaba viviendo.


Acaricié  su espalda descendiendo de apoco, -No más – gimió, apretando su agarre, como una suplica hacia mi,  tuve que esforzarme por mantener el control sobre mi mismo, debería ser un delito el ser tan provocador

Lo levanté ligeramente, sintiendo como me hundía en su interior, ambos suspiramos por la sensación, incluso más que la primera vez,  lo recosté poniendo una de sus acaneladas piernas en mi hombro, probándola con mi lengua, dejando marcas que aparecerían al día siguiente

Mis estocadas eran profundas y certeras, pero eran lentas, anhelando que aquel momento nunca acabase, el sonido indecente que resultaba, no hacia más que excitarme.

Vi como sus manos se encajaban en las cobijas, sus ojos estaban cerrados, un pequeño rastro de saliva se vislumbraba con la delicada luminosidad de la habitación.

No supe cuando nuestros ojos se habían conectado, pero nuestros labios imitaron su acción al igual que nuestras lenguas envolviéndose en una sola, sin poder apartar la vista del contrario.

Finalmente y por falta de aire nos separamos pero aquel vaivén no cesaba, mis caderas chocaban tratando de ir mas profundo, aun sabiendo que no se podía, el solo ver y escuchar toda la situación me enloquecía, estaba actuando como un pervertido uno que nunca imagine ser ni en el mas lujurioso de mis pensamientos. Pero Naruto era especial, logrando cambiarme por completo, y deseando mejorar solo por el y para el; quería verlo feliz, con su hermosa sonrisa brillante y en momentos como estos verlo jadeante demostrándome que me amaba con ese peculiar brillo en sus radiantes ojos azules.

Mi miembro se sentía aprisionado mucho mas que al principio  sacándome un par de vergonzosos gemidos, me faltaba el aire, pero al verlo me di cuenta que ambos nos sentíamos así, calurosos, agitados. Las estocadas empezaron a ser frenéticas, descontroladas, no podía aguantar mas, logrando correrme con un fuerte gemido de satisfacción.

Caí agotado a lado de mi kitsune, ambos nos habíamos venido juntos, y todo el trabajo físico nos pasaba factura.

- Te amo Gaara – susurro en mi oído, y supe que no habría momento mas perfecto que  ese.

 -Yo también te amo Naru- rocé nuestros labios en un delicado beso, que pronto comenzó a ser mas profundo, sus manos se apoyaron en mis hombros queriendo separarme, hasta que con un tirón de cabello lo consiguió.

- ¿Quieres ahogarme? - pregunto con el seño fruncido sin embargo sus ojos no dejaban  completar su pose de enojado.  Solo pude sonreír, volviendo a besarlo. Estaba muy confundido si pensaba que con dos rondas estaría satisfecho. Puede que mi cuerpo haya estado agotado, y mi respiración lo demostraba, pero mi mente seguía excitada al igual que mi miembro, demostrando los meses de abstinencia  que para mi fueron décadas, definitivamente esa noche ninguno de los dos dormiría. Y no me importaba no llegar al trabajo al día siguiente. Estaba seguro de que varios, por no decir todos, se imaginaban que no saldríamos mucho de la cama en las siguientes horas. No tenía muy en claro como mi vida personal había pasado a ser de público conocimiento entre mis empleados. Tenía la leve sospecha de que Sasori tenía mucho que ver. Pero honestamente no me importaba. Mientras los comentarios fueran sin malicia o envidia y no se le faltara el respeto a mi pequeño rubio, podían decir lo que quisieran. Si nuestra relación era como la novela de la tarde para todos esos chismosos, me daba igual. Tomaría cartas en el asunto si bajaban su rendimiento, o nos ofendían de alguna manera. De lo contrario que siguieran hablando. Yo estaba concentrado en mi rubio y mis hijos. Lo demás era irrelevante al lado de mi maravillosa y nueva familia.

Notas finales:

Yo lei el lemon y me sonroje un poco, creo que estuvo "very hot", pero ya sabiamos como seria de fogosa nuestra parejita asi que todos lo imaginabamos asi de picante.

Quiero agradecerles su INFINITA PACIENCIA y el APOYO INCONDICIONAL que me dan. A todos aquellos que me enviaron correos con ideas y sugerencias se los agradezco de ♥ y cuando use algo de ustedes voy a mencionarlo y si no lo hago, es porque me olvide y tienen todo el derecho de reclamar. Estoy totalmente en contra del robo de ideas, me parece de lo ultimo.

Con Beatriz hemos pensado que esta en nuestras posibilidades actualizar cada 15 dias, asi podemos escribir nuestras ideas, unirlas y editarlas.

Otro punto, mil disculpas por no responder los comentarios, lo leo a todos, pero estoy con poco tiempo, y los veo en el telefono y no se porque no puedo responder desde ahi. A lo mejor soy yo, a lo mejor el telefono, ya sabemos que la tecnologia no es lo mio.

Para no seguir aburriendolos me despido.

Besos y abrazos para todos, desde mi querida Argentina :)


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).