DIA 4
Ah, ¿por dónde empezar a contarles? Hoy no fue un día muy productivo que digamos, ¿que se puede esperar de un lunes?
Aun así, la tortura empezó desde muy temprano en la mañana.
-Jongin, levántate – Sentí unas manos que me movían, yo no quería ni abrir los ojos, apenas y estaba despertando y su voz ya me estaba molestando mis oídos.
-Vete – le dije y me cubrí con la cobija para cubrirme de la luz que molestaba mis ojitos pues Kyungsoo había abierto por completo las cortinas dejando abierto el ventanal de mi recamara.
- apúrate, ya casi está el desayuno – Salió de mi habitación al fin, y yo me levante sentándome en la cama, no era tarde, era la hora justa, me talle los ojos y suspire, me levante de la cama y tome una toalla para meterme a bañar, necesitaba despertar por completo, tome una ducha de 10 minutos, siempre me hacía sentir mejor, Salí de la ducha más fresco y despierto, me enrede la toalla en la cintura y me observe en el espejo, era una costumbre que yo tenía, y sí, me miraba genial.
Salí del cuarto de baño y pegue un grito al ver a Kyungsoo en mi habitación, al parecer mi grito lo asusto, abriendo los ojos tan grandes.
-¡¿Qué haces aquí?! – le grite y me di cuenta de mi actual estado, intente cubrirme pero a lo único que medio atine fue a abrazar mi propio cuerpo.
- Venia a avisarte que ya está el desayuno y a cerciorarme de que te hubieras levantado – me dijo, su rostro se fue relajando poco a poco, su voz sonaba serena a pesar de la situación.
- ¿Por qué te cubres? ¿Qué tienes tú que no tenga o haya visto yo? – me dijo antes de salir de mi habitación, se marchó cerrando la puerta.
Yo me ofendí, obvio que me ofendí, ese enclenque “ ¿Que tienes tú, que no tenga yo? “ , hice un puchero, ¿Qué no es obvio? Digo, mis músculos están marcados, los de el no, mi piel es más sexy, mi cabello, mis labios, mis ojos, mi….ya saben, y aparte ¡yo SI soy alto! , Hasta su pregunta ofendía.
Me dirigí hacia mi armario y saque mi uniforme, me vestí como de costumbre, sabía que debíamos usar el uniforme correctamente, pero mi reputación de ser el Cool de la escuela no me permitía ir fajado como todos los ñoños en la escuela, No. Yo lo llevaba más relajado, la corbata un poco suelta, mi cabello lo peinaba hacia arriba, lo que me hiciera ver bien.
Baje las escaleras y de inmediato mi estómago empezó a retorcerse por el delicioso olor que invadía todo el piso, ese olor venia de la cocina, rápidamente me dirigí allí, en la barra de la cocina había dos platos servidos.
- Que bueno que bajas, siéntate, ya no tienes mucho tiempo para desayunar – me dijo Kyungsoo mientras servía 2 vasos de jugo.
- Te dije que no quería comer aquí, creo que habíamos quedado en eso – le mire molesto.
- Si quieres la mesa, la pondrás tú, pero te aconsejo que mejor comas aquí, ya no hay mucho tiempo y te tienes que ir. – me dijo mientras él se sentaba para comer, estaba esperando que yo me sentara para empezar.
-No, prefiero no desayunar, gracias, mejor comprare algo en la escuela – mi estómago me gritaba que me sentara y me devorara aquello que olía insoportablemente delicioso, pero mi orgullo no me lo permitía, esta vez no me iba a dejar ganar, así que Salí de la cocina y tome mi mochila, estaba molesto, tan temprano y ya estaba enojado, vi que Kyungsoo se acercó a mí y me tomo del brazo.
- Por favor, al menos toma un vaso de leche, no quiero que te vayas con el estómago vacío – suspire, al final de todo me convenció, no sé si fue su tono de voz o su expresión o algo en él que pudo más que yo, no me lo pregunten, ni yo lo sé. Culpare de nuevo a mi estómago hambriento.
Total que terminamos desayunando juntos en la cocina y como lo imagine la comida era sumamente deliciosa.
- Creo que nina ha estado inspirada estos últimos días, nunca le sale la comida tan sabrosa- Nina es la señora que cocina, está en esta casa desde que nací o antes, no sé.
- Nina no cocino hoy – me contesto él y yo abrí los ojos, al juzgar por mi reacción el rápido se animó a seguir hablando.
- Yo lo hice, me alegro que te haya gustado, al igual que el desayuno y la cena de ayer – y me sonrió. Sentí que se me revolvió es estómago, no porque su sonrisa fuera fea, en realidad era muy linda, se contagiaba (¿Qué estoy diciendo?). Les decía que se me revolvió el estómago, me estaba haciendo ver débil ante él, así que quise aparentar que no me sentí asombrado por su comida.
- No está mal, claro que he probado mejores, pero…ahí está – le dije y cuando termine, me tome el jugo de un trago y salí a la sala para irme, ya se estaba haciendo tarde.
-Jongin…- escuche que me hablaba ¿ahora qué?.
- ¡¿Ahora que?! – justo eso le dije y vi que se me acercaba.
- No puedes ir por ahí con esas fachas de gangster – arreglo mi cabello, fajo mi camisa y ajusto mi corbata, no puede ser, mi cara de fastidio lo decía todo, a punto estaba de explotar cuando escuche el claxon del auto de Chanyeol, recordé que le había dicho que hoy pasara por mí. Le quería gritar a Kyungsoo que me dejara en paz, pero Chanyeol no dejaba de sonar la bocina desesperado, tome mi mochila y salí corriendo de mi casa, lo más lejos de Kyungsoo que pudiera, lo escuche que me gritaba mientras me alejaba.
- ¡No llegues tarde!
Me subí al auto de Chanyeol lo más rápido que pude y él se echó a reír en cuanto me vio, no me extraño, de seguro en este momento me veía realmente ridículo.
-¿Qué te paso? ¿Desde cuando tu…? Jajaja ahora eres todo un decente de la vida – se reía fuerte.
- ¡Cállate! Ese Kyungsoo, me hizo esto antes de salir – le dije justificándome mientras me despeinaba y desacomodaba mi uniforme mirándome en el mini espejo que traía en mi mochila.
- ¿así que ya se llevan bien? – me pregunto mientras conducía.
- Claro que no, solo le hago creer que le pongo atención y esas cosas, ya me las cobrare por todo lo que me ha hecho…aun creo que estoy castigado – le dije.
- ¿Estas castigado? – preguntó.
-Si, por el día que fuimos a jugar y no le avise que no llegaría, ¿puedes creerlo? Y me dijo que hoy tenía que llegar temprano, porque ahora si empezaremos con las tutorías – hice una mueca tras otra, el solo decirlo en voz alta me amargaba, sonaba tan aburrido.
- ¿O sea que él te va a ayudar con tus materias? Luego me explicas algo de cálculo, que yo tampoco entiendo nada.
- Chanyeol, tu nunca entiendes nada, eso no es raro. – le dije bromeando un poquito.
- ¡Ay! El inteligente te dicen a ti – me contesto irónico y riendo, cierto, yo no era muy inteligente, en cosas de la escuela, más bien era perezoso con eso de estudiar, pero había otras cosas para las que era bueno, MUY bueno.
Llegamos a la escuela justo a tiempo, por poco y nos cerraban la puerta en la nariz y nos ponían retardo.
Es misma mañana, me encontraba con Jongdae y Chanyeol en las mesas de la cafetería de la escuela, yo estaba examinando mi comida, no se miraba muy apetitosa que digamos.
- Jongin Oppa, ¿qué harás más tarde? – se acercó una chica bonita a preguntarme, estaba a punto de contestarle pero…
- Nada, está castigado, no puede salir – Le dijo Jongdae haciéndole una señal con la mano a la chica para que se marchara, ella bajo la mirada y se fue apenada.
- ¡Chen! ¿Qué estás haciendo? – casi lo ahorque.
- ¿Qué? Tú dijiste que estabas castigado.
- Ya se que lo dije, pero…Osh!! ¿Cómo sabes lo del castigo? – me le quede viendo y el no dijo nada, solo señalo a Chanyeol con su dedo índice y Chanyeol me miro con una sonrisa de oreja a oreja.
- Mal amigo, solo dije que CREÍA que estaba castigado, ¡ay! Eres horrible. – le reclame.
- No, yo pienso que soy guapo – me dijo muy tranquilo. Yo me puse la mano en la frente, a veces mi amigo podía ser un poco lento, solo un poco (mucho).
- ustedes, mañana no comen en mi mesa – les dije -
- No importa, Xiumin dijo que traería comida de su casa, sabes que su mama cocina delicioso, asi que comeremos en el jardín, Sin ti, ya que nos corriste de tu mesa – dijo Chen.
- Wooo, me encanta la comida de la mamá de Minseok – dijo Chanyeol super animado.
- Groseros- les dije y me cruce de brazos.
Las horas y las clases pasaron lentas, hasta que sonó la campana de salida, yo no sabía si sentirme feliz o triste o deprimido o enfermo, las clases habían terminado pero me seguía la tortura en casa con Kyungsoo, pero entonces tuve la mejor idea del día.
- Yeolieee – le hable con un tono medio aegyo.
- No – me contesto al suponer que yo quería algo por el tono en el que le estaba hablando.
- Ni si quiera sabes lo que te he pedido. – Le reclame.
- No me incluyas en tus planes siniestros.
- Solo quédate conmigo en casa hoy, si le digo a kyungsoo que viniste porque haremos un trabajo, se lo va a creer y no tendremos que estudiar. ¿Qué dices? – le mire con ojos de súplica.
- No lo sé Kai….tal vez sea bueno que estudies – dudaba.
- Te regalo el videojuego de Batalla ancestral III – le dije sin dudarlo.
- Hecho – Me dijo. Sabía que lo convencería con eso, además ese juego ya me había aburrido, me podía comprar otros mas.
Llegamos a mi casa, entramos y no había nadie, se me hizo un poco raro pero en fin, nos dirigíamos hacia el segundo piso, cuando subíamos las escaleras, nos encontramos con Kyungsoo quien venía bajando.
- Oh, hola – nos saludó a ambos.
- ¡Hola! – Le saludo chanyeol con esa felicidad que parecía nunca agotársele, yo solo moví la cabeza como saludando.
- Hoy no podemos estudiar, tenemos trabajos que hacer, por eso viene conmigo.
- Entiendo, mucho gusto, soy Kyungsoo.
- Chanyeol – le dijo mi amigo. Y Kyungsoo le sonrió, ¿Por qué se miraba más amigable cuando estaba con Chanyeol? Conmigo era un grosero.
- ¿No quieren comer? Ya casi..- decía pero yo le interrumpí.
-No, no queremos, comimos en la escuela antes de venir aquí, tenemos mucho trabajo, asi que no nos interrumpas.
Subimos a mi habitación y dejamos nuestras mochilas.
-Kai, yo si tenía hambre – me dijo Chanyeol mientras se tocaba el estómago-
- Hay algunos panecillos de chocolate en mi mini nevera, toma los que quieras – le dije.
- Sabes que el azúcar me pone mas hiperactivo – y tenía razón, eso siempre lo alocaba.
- En un rato te traigo algo – le dije y se quedó mas tranquilo.
- No es para nada como me lo imagine, al juzgar por tus descripciones pensaba que era un sujeto feo y gruñon, pero se ve bastante agradable. – me decía, obvio hablaba de Kyungsoo.
- No le creas nada, que no te engañe su apariencia, es malvado, se lo que te digo, yo pienso que es bipolar o algo - Me quite el saco del uniforme y lo avente por ahí, estaba harto de llevarlo puesto, ya no veía la hora de dejar de usar este uniforme del mal.
- ¿Qué quieres hacer? - Le pregunte.
- Mmm no lo sé, podemos navegar en internet o ver videos. – me sonrió y yo acepte.
- Pero saca tus libros, por si llega Kyungsoo, cerramos todo y hacemos como que estudiamos - Sacamos todo nuestro material según de estudio y lo pusimos sobre la mesa, abrí mi ordenador y nos pusimos a mirar videos musicales, nos gustaba intentar hacer algunos pasos que se miraban graciosos o a imitar gente en internet.
Alguien toco la puerta.
- ¡Rápido cierra todo! – cerramos todo a mega velocidad y pusimos los libros encima, me levante y fui a abrir la puerta, efectivamente, era Kyungsoo.
- ¿Qué quieres? – le pregunte, vi que traía unas botanas en las manos.
- Vine a traerles algo para que se animaran en el estudio, además pensé que podían tener hambre – me dijo y yo lo mire arqueando una ceja.
- Uhh botanas, que rico, me encantan estos – dijo Chanyeol asomando la cabeza por la puerta.
- Gracias – le dije un poco desganado a Kyungsoo y tome la comida, para que se fuera rápido.
- ¿No ocupan ayuda? Pueden preguntarme, les puedo asesorar en lo que necesiten – se ofreció.
- No, no te necesitamos. Vete. – le hice señal para que se fuera.
- Esta bien, estudien mucho – nos dijo con una sonrisa antes de irse. Pobre Babo, pero al menos me libre del estudio de hoy, y pensaba siempre encontrar una excusa con tal de no pasar horas extra de clases con él.
La tarde se pasó mas rápido de lo que pensaba.
-Kai, ya me tengo que ir, le prometí a mi hermana que llegaría para antes de la cena – me dijo después de que terminamos de jugar videojuegos.
- Si, no te preocupes, ya cumpliste tu misión, puedes irte, te acompaño a la puerta. – le sonreí y el hizo lo mismo conmigo.
- Gracias por invitarme, me divertí hoy – me abrazo antes de salir por la puerta principal.
- No es nada, si vinimos solo a estudiar Yeolie – le dije para que captara que tenía que seguir fingiendo pues Kyungsoo aún estaba ahí.
- Ah sí, estudiamos mucho. – sonrió mirando a Kyungsoo. – muchas gracias por todo, las botanas estuvieron deliciosas – y Chanyeol abrazo también a Kyungsoo, luego salió, se subió a su auto y desapareció.
Yo suspire, mi única distracción se había ido, aun así estaba feliz de que mi tarde no fue aburrida, me di la vuelta y me topé con la cara seria de Kyungsoo. La sonrisa se me borró al instante
- ¿Te divertiste hoy? – me preguntó.
- ¿Qué? ¿De qué hablas? Estábamos estudiando. – Le dije abriendo los ojos.
- ¿Crees que me voy a creer eso Jongin?, ¿porque se te sigue olvidando que soy más grande que tú?, puede ser que no lo parezca pero yo me doy cuenta de muchas cosas. – me dijo con un tono muy serio, no les voy a mentir, sentí miedo de ver sus ojos.
-Realmente pensaba en no ponerte un castigo, pero creo que tú lo has pedido a gritos – me seguía diciendo.
- ¿Ah sí? ¿Qué piensas hacerme? No tengo miedo de ti – le conteste haciéndome el valiente, mala idea.
- A partir de hoy, harás todo por ti mismo. – me dijo y yo abrí los ojos pero le mire extrañado, él supo que no comprendí lo que me decía así que me aclaro.
- Sé que estás acostumbrado a que la servidumbre te haga todo, lave tu ropa, haga tu comida, planche, la limpieza etc. incluso yo he sido demasiado bueno contigo y hago muchas cosas por ti, pero desde ahora ya harás todo eso por ti mismo. Si no tienes ropa limpia será porque tú no la lavaste, si tu cuarto está sucio será porque no lo limpiaste etc. le hare informar a todos de tu situación. – dijo severo y obviamente yo tenía que reclamar eso.
- ¿Qué estás diciendo? Te volviste loco ¿verdad? Para eso les pago, para que hagan todas esas cosas, si piensas que yo hare eso, estas muy muy equivocado.
- Ya te dije Jongin y no cambiare de opinión, no te estoy pidiendo que limpies toda la casa, o que laves todos los baños y cuartos, simplemente harás lo que afecte a tu persona, como tu habitación, tu ropa o el plato donde comes, levantare tu castigo hasta que decidas cambiar tu actitud. Entonces podremos discutirlo. – Se dio la vuelta marchándose.
Aun no puedo creer que yo tendré que hacer todas esas cosas a partir de mañana…
primero: no tengo ni idea de cómo hacer cualquiera de esas actividades.
Segundo: odio hacer ese tipo de actividades.
Tercero: odio a Kyungsoo.
Solo ha venido a arruinar mi vida y mi felicidad, que ¿acaso no me puede dejar en paz? A penas que nos estábamos llevando bien, ayer que trabajamos juntos todo estuvo divertido, ese Kyungsoo me gustaba, no el mandón.