Prólogo:

Lo más extraño, es que no lo conocí toda mi vida, mejor dicho es como si lo conociera de toda la vida pero no es así, solo lo conocí por casualidad, un encuentro….

Solamente un encuentro que pudo cambiar por completo mi vida, consolamente el haber tocado su piel deseaba saber más de el, al ver sus ojos, esos ojos grises como la niebla que parecían no tener un solo sentimiento, deseaba hasta verle la ultima lagrima derramada ya que siempre en su mirar se veía la tristeza y soledad que lo rodeaba pero no demostraba, el solamente tener esos pensamientos me decía a mi mismo: “Quiero ser la persona más cercana a el”.

Somos de mundos totalmente opuestos, el no era un simple hombre, ¿Dónde trabajaba? –No lo se- ¿Dónde vivía? – No lo se -, ¿Qué edad tiene? –No lo se -, ¿Qué pesares y que vida lleva? –No lo se-…. -Lo quiero conocer a como de lugar, el es a quien e deseado conocer toda mi vida…o…¿No?-.