- ¿Are?... Ah eso… ni me acordaba que lo tenía… pues es… - contestaba el rubio con una mano detrás de la nuca, mientras que con la otra portaba la toalla que posteriormente usaría para salir del lugar.
- ¿Es…?... – pregunto no solo curioso sino impaciente Kankuro mirando con insistencia ese lugar que tanto le llamaba la atención, ahora que podía verlo de cerca, su piel era sumamente cautivadora, parecía tersa al tacto, de un color muy bello a sus ojos, le recordaban vagamente aquella marioneta que un día hizo, pero fue cruelmente utilizada por Gaara para calentar su cuarto.
- Un regalo de Iruka-sensei… - comentaba feliz el rubio mientras que su mano se posaba en su cadera y acariciaba esa parte como si fuese algo muy preciado, sus ojos se volvieron melancólicos al igual que su sonrisa, esto no paso desapercibido para cierto Uchiha que por primera vez dejo de mirar las piernas contorneadas del rubio y miró a sus ojos cuando la voz surco el aire hasta llegar a sus oídos y eso no le gusto mucho, naruto se veía mejor cuando sonreía y mas si esa sonrisa era para él.
Lentamente se levanto del agua caliente, dirigiéndose sin siquiera tomar la molestia de cubrirse sus partes, hasta llegar al rubio y con sus brazos rodear su cintura desde la espalda, apoyando su cabeza en el hombro en un gesto de mostrar que esa mirada le causaba algo incomprensible en su interior.
Incorporo un tanto su cabeza para mirar a quien le daba esa extraña sensación de calidez, digo extraña porque recordemos que lo están abrazando desde la espalda, se encuentran desnudos y “esa” parte le esta tocando con mucha insistencia una parte no muy cómoda para el ojiazul, pero no podía decir nada, estaba mas concentrado en las manos que se entrelazaban mas debajo de su ombligo logrando que todo su cuerpo se tensara por el simple hecho de estar desnudos y que a él le daba vergüenza vamos, Naruto es un niño demasiado santo para pensar en algo mas.
- Naruto… ¿estás diciendo que Iruka te puso “eso” ahí?... – pregunto kakashi mientras con su dedo acusador apuntaba a “esa” zona del rubio que casi era tapada por las manos del joven que se aferraba a su espalda, juntando sus cuerpos más si era posible, logrando que con el último tironcito hacía el cuerpo de su espalda, Naruto se sonrojara por lo que sintió.
- ¿eh?... ¿Ah? Si… me lo puso porque siempre tenía problemas durante la noche… pero eso fue hace mucho Kakashi-sensei… - contesto a su sensei para después sentir unas caricias que le crisparon los nervios.
- Etto… me puedes soltar o por lo menos separarte un poco… no me gusta como se siente “eso”… dattebayo… - comentó nervioso mirando a su acosador, digo acosador porque no se como llamarle, ¿Cómo le dirían ustedes?... bueno luego me dicen, por cierto… ¿alguien ya adivino quien es?
Solo un bufido molesto se escuchó emanar de aquellos labios, el tener que separarse de esa agradable calidez y que digamos posición era algo que realmente le molestaba, el contacto con esa piel tostada por el sol, tan suave al tacto, con ese olor a limpio por el reciente baño, aun húmedo por la ducha era algo de lo que te embriagabas y quería seguir sintiendo.
Todo esto era observado, por todos cabe decir, pero especialmente unos orbes se posaron peligrosamente en las manos y sobre todo en esa cadera que se juntaba en “esa” parte a la que él quisiera estar pegado en ese preciso instante, lamentablemente para él, su pequeño amiguito ahora despierto era un gran impedimento, no quería verse de esa manera descubierto ante nadie, sobre todo con Naruto.
Pero simplemente la visión de que “ese”… me apartare un poquito de la historia, no robo mas que unos cuantos segundos de lectura… se han fijado que este capitulo comenzó con muchos “ese” y “eso” XD… ahora yo me pregunto adorables lectores… porqué tanta chorrada con esos y ese, porque lo quieren ocultar… bueno para saberlo… hay que seguir leyendo… no interrumpo mas… gracias por su atención ^u^ hay me siento importante… bueno ya al fic… “ese” tocará lo que era suyo no le agrado, ya adivinaron quien es quien ^u^.
Se levanto enojado rumbo a ambos, claro que antes para cubrir su problema tomo uno de los botes de madera donde se encontraban los utensilios de limpieza y lo coloco en esa parte estratégica para que nadie de los pervertidos en el baño, siendo que solo están ellos y como pervertidos coloco a Kakashi y Kankuro que miraban como chocolate el cuerpo de naruto y a Gaara el papel de depravado.
- Aléjate raro sin cejas… - amenazó al momento de halar con una mano una del rubio para apartarlo de aquella postura que de solo imaginarse en ella le estaba calentando demasiado, pero lo atribuyo al agua caliente del baño, aunque claramente su problema no era por el agua caliente, sino por lo caliente que era estar en ella, alguien me entendió, porque yo no.
- Naruto… - llamo el sensei observando desde la comodidad del pequeño lago lleno de agua caliente que le relajaba y adornaba las mejillas de todos con un sonrojo apetecible para algunos y molesto para otros, ustedes decidan para que cada pensamiento.
- ¿nani?... – pregunto el rubio mirando a su sensei, sin percatarse de que la mano de Sasuke se encontraba en su cintura mientras que su cuerpo estaba de cara al pecho de su compañero que esta muy concentrado en la mirada asesina que le mandaba al pelirrojo por tocar sus cosas, no literalmente sus cosas si no a naruto que era de su propiedad aquello que dije antes sonó raro… se fijaron.
- Ven necesito ver de cerca “eso”… - inquirió el mayor restándole importancia a Sasuke, a Gaara y a cualquiera que quisiera tener en ese momento a Naruto en sus manos, “eso” recordaba vagamente que existía y el como hacerlo.
Se alejó del “abrazo protector” en que lo tenía preso el moreno y se dirigió hasta donde su sensei, al estar a su alcance el peliplateado lo tomo por la cintura y la colocó a la altura de su rostro provocando no solo las miradas ansiosas de los presentes, es decir de Kankuro que esperaba paciente a ver que hacía el peliplateado con “eso” tan cerca de su rostro, hacia movimientos con la boca, parecía pez, hablo de Kankuro ¬_¬, que espera acción pero ya, mientras que Gaara y Sasuke miraban listos para intervenir si al sensei se le ocurría hacer algo a su peluche de tranquilidad y a su esperanza para dormir y razón de vivir, desde, desde que a mi se me dio la gana y ya, Naruto mientras tanto miraba expectante y con miedo los movimientos de Kakashi con un marcado sonrojo en las mejillas provocado por el calor y la cercanía del mayor con esa zona.
- Ka… kakashi-sensei… ¿Qué pasa dattebayo?... – pregunto asustado mientras que observaba a todos con ojos suplicantes en busca ayuda, ayuda que como siempre, le negaron.
- Esto es… - murmuraba Kakashi acercándose más para ver si no se equivocaba, cuando su aliento choco con la cadera y su nariz se pego a la piel, provoco cosquillas en el pequeño y un fuerte estremecimiento de su parte.
- Kakashi… suéltelo de una vez… - soltó molesto Sasuke mientras que Kakashi salio del ensimismamiento en el que se había medito mirando “eso”.
- ¿Cuando te lo hizo Iruka-sensei?... – preguntaba el peliplateado mientras que sin soltar al rubio de las caderas lo alzó un poco y metió suavemente en el agua para momentos después mojarle el cabello y ponerle una toalla mojada con agua caliente en la cabeza.
El rubio sonrió complacido, se sentía tan bien que alguien se preocupara por tus cosas, como “eso” y que le hicieran mimos en una aldea, inclusive recordando el jutsu que Kakashi utilizo sobre Sasuke y el problema de Gaara que solo se componía con su cercanía se sintió feliz, era la primera vez que le necesitaban o traban con tanta amabilidad, claro cuando Gaara y Sasuke no se peleaban, relajado después de unos segundos en los que su sensei, estaba pensando en que hacer ahora mientras le acariciaba con cariño aquellas hermosas hebras doradas, recargó su cabeza en el pecho de su maestro mientras recibía los mimos, se había sentado entre las piernas del peliplateado cuando le bajo al agua.
Gaara y Sasuke entraron nuevamente al agua, intentando agarrar primero al rubio, cada uno al lado de Kakashi intentando tocar al rubio, uno para relajarse y el otro simplemente porque lo quería tocar y punto.
- Iruka-sensei estaba preocupado porque no podía conciliar el sueño por las noches… decía que era por la presión que sentía y lo uso para relajarme tebayo… - pronunciaba bajito el rubio mientras que era sumido en la relajación total a tal punto que en pocos segundos comenzó a dormir.
Kakashi paso una mano nuevamente por la cintura de Naruto bajando con cuidado, llegó hasta el ombligo y lo delineo divertido, el sello aun no había salido a la superficie lo que indicaba tranquilidad total, tanto en el control del chakra como en su estado mental, llegó a su cadera y delineo aquella zona un signo especial, un deseo transformado en palabra, “ansei” escrito con chakra en al lado del hueso de su cadera en línea recta al placer, palabras mencionadas y sacadas del nuevo icha icha paradise versión yaoi que en el último capitulo de ese tomo shiroi no ôkami el maestro de Runato había descubierto el secreto de Kairu el antiguo, sensei de este, le había hecho al rubio aprendiz, esto sería una gran ventaja para Ukesasu y un gran alivio para Araga y sus hermanos Rokanku y Materi quien no sabían como controlar sus instintos sexuales, hasta la llegada de Runato, creando un conflicto con el moreno compañero y su molesta amiga.
- Yosh… ya se que es lo que vamos a hacer… - murmuro el sensei mirando hacia el techo mientras sus manos se deslizaban por la piel bronceada del rubio mientras que las miradas de cierto azabache y cierto pelirrojo seguían hipnotizados con el movimiento y la visión del agua clara de la mano traviesa cerca de aquella zona que tanto les llamo la atención exactamente, en estos momentos.
Ningún sonido salía de sus bocas, todos, y me refiero con todos a Kankuro, Gaara y Sasuke, que juntos con el rubio y el peliplateado eran los únicos en el baño estaban anonadados en el movimiento tan diestro que hacía el sensei en la cadera del rubio sin percatarse que se acerbaza a zona peligrosa, haciendo que los espectadores tragaran saliva con dificultad, antes este sonido a la par de los tres, el peliplateado observo donde estaba su mano, para con algo de nervios moverla hacía otro lado, lo que provoco suspiros, unos de alivio y otros de desesperación, porque la acción no comenzaba y eso se le estaba haciendo dolorosamente atormentador, cierta marioneta sería severamente castigada esa noche por su aquellas acciones.
En el baño de las mujeres una pelirrosa aburrida junto con una castaña completamente abrumada esperaban a que los músculos de sus cuellos se relajaran un tanto, era estresante tener que lidiar con la frialdad del Uchiha, los desvaríos de su sensei y para colmo el dichoso jutsu que ataba a Sasuke a Naruto, eso significaba que si quería tener acción con el uchiha tendría que estar el rubio al lado y eso le estaba perturbando, no sabía que perversidades del podía llegar a hacer, si supiera u_u… ¿alguien se ofrece a decirle la verdad o la dejamos sufriendo y que se entere sola después?... personalmente creo que la única pervertida aparte del sensei y el uchiha es la pelirrosa… ¿ustedes no?... u_u… algo le pasa… tiene ese complejo de creerse la mas bonita de todas… si supiera que el corazón del moreno tiene dueño… pero bueno.
Mientras que divagaba en la forma de que el moreno la hiciera parte de la familia y que no interviniera el rubio en esto, Temari por su parte trataba de descansar un poco, hacía días que Gaara comienzo con esos arrebatos por su nuevo trabajo que no podía relajarse, era increíble como las cosas habían cambiado solo por la presencia del rubio, tendrían que ir a Konoha por algunos papeles para que el rubio tuviera una estadía completa en Suna, por el resto de sus vidas o mientras que Gaara se cansaba de ser Kazekage, cosa que era poco probable.
Una risita pervertida que sonaba más o menos así “kukukuku” se escuchaba en un tono muy bajo junto con un murmullo que decía “información… recopilar información”, alertó a las kunoichi que enseguida tomaron una toalla, se envolvieron con ella y comenzaron a inspeccionar la zona en busca de posibles enemigos.
Buscaron con la mirada, pero parecía ser que era un experto en camuflaje, intentaron nuevamente localizarlo pero esta vez mediante el chakra, nada, hasta que el pequeño sonido que hace un calzado de madera las alertó de la posición del pervertido que según ellas las espiaba, ¿alguien sabe a quien espiaba?... o mejor aun… ¿adivinaron quien es?... seguro que si.
Caminaron en silencio tratando de no ser detectadas por el individuo pero un estrepitoso sonido alarmante junto con un sollozo en tono agonizante les hizo perder la pista del sospechoso que se escabullo con el sonido, al parecer no era un pervertido cualquiera, no saben lo cierto que están.
Mientras en los baños de al lado, un pequeño Naruto tirado boca abajo con el trasero levantado al aire semi inconciente y todo rojo, con la respiración agitada y un pequeño hilo de saliva escurriendo por la comisura de sus labios, dejaba a los demás con una gran gota de confusión y unas miradas lujuriosas por parte de un castaño domador de las marionetas además del superviviente del clan Uchiha mientras que con sus manos cerca de la nariz intentaban impedir que todos sus eritrocitos salieran de su cuerpo, pero esa postura, esa visión, esa piel, ese trasero, esa cara, esa respiración, en fin todo naruto en ese momento, clamaba por ser pinchado como carne para las brazas de una barbacoa, perdón por la comparación pero están calientes, y puedo asegurarles que si te les acercas, te quemas.
- ¿Naruto te encuentras bien?... – pregunto alarmado el sensei mientras se acercaba con la toalla previamente amarrada en su cintura. - Eso creo tebayo… - comentaba con gran esfuerzo de no caer en la inconciencia, el quedar desnudo en un baño público e inconciente a pesar de ser que era un baño para hombres no implicaba nada seguro, su sensei le tomo en brazos mientras tomaba la toalla en el suelo y le cubría.
- ¿Me puedes explicar como rayos te caíste así?... – comentaba entre divertido y molesto el peliplateado, puedo haberse lastimado su alumno.
- No lo comprendo… cuando me desperté… iba a salir para poder ir al ramen de nuevo tebayo, me dio hambre otra vez… - pronunciaba el rubio medio recuperado por el golpe en la cara aunque con la clara evidencia del golpe en forma de una gran marca roja en su rostro y sobre todo, un gran chichón en su cabeza.
- Cuando salí, pise algo tebayo y después sentí como alguien me tocaba el tobillo y lo jalaba tebayo, por eso caí en una pirueta invertida hacia atrás con salto triple mortal incluido tebayo… - mientras que Kakashi observaba a Gaara con la mano en forma de un sello mientras que la arena regresaba como si de un perro regañado se tratara de nueva cuenta a la calabaza del pelirrojo y Sasuke estaba silbando una melodía que ni se conocía, mirando hacía otro lado.
- Pero Naruto… con solo resbalarte no haces tantos destrozos… - explicaba el sensei pues era cierto, Naruto exagero, simplemente se resbalo con la arena y se iba a ir hacia atrás cuando alguien le sujeto por el tobillo y lo halo intentando llevarlo de nueva cuenta al agua, cosa que por lo que vimos, mejor dicho leímos no resulto, lo único que hizo es que el rubio se fuera hacía adelante, demasiado adormilado y hambriento como para pensar con claridad, en consecuencia se cayó de cara al suelo sin siquiera meter las manos.
Resignados y con un rubio hambriento, golpeado pero feliz y sobre todo libre de pegajosa soda salieron al encuentro de la pelirrosa y la castaña, las caras largas de Kankuro y Sasuke no se hicieron esperar, claro que en Sasuke las caras largas o serias no tienen ni diferencia ni son extrañas.
Gaara por su parte tomo la mano del rubio para volver a sentir la calidez que emanaba, recibiendo una mirada completamente enojada por parte del azabache que tenía que soportar que Sakura se le había vuelto a pegar al brazo como si no estuviera ahí se le caería en cualquier momento y del otro lado a Temari quien le guiñaba a cada rato el ojo de modo coqueto, suspiro resignado, miraba al rubio, mientras este solo le sonreía feliz al pelirrojo contándole cuanta cosa se le ocurriera.
- Kazekage-sama ya tengo una solución para su problema aunque no se si realmente le sea de utilidad… - mencionaba el peliplateado hacía el pelirrojo desviando la mirada a su pupilo de cabellos negros, quien sonrió prepotentemente, por fin se libraría del estorbo de Gaara, en otras palabras el rubio solito para él, de esta manera tal vez pueda decirle lo que siente si es que hallaba la forma adecuada, el momento indicado y sobre todo el ambiente propicio sin interrupciones, tal vez y solo tal vez podría darle su primer beso despierto y por voluntas y quizás después otras cosas, su mente se comenzó a llenar de escenas donde ambos cuerpos bailaban entre las sabanas.
Tan ensimismado y perdido en sus perversiones estaba que no se fijo cuando pararon en un local de comida a petición del rubio y choco con este, pareciera que sus cuerpos fueron hechos el uno para el otro ya que encajaron a la perfección, Naruto no pudo contener el equilibrio cuando Sasuke le empujo y termino cayendo de bruces al suelo con Sasuke siguiéndolo, sus caderas se juntaron provocando que Naruto sintiera algo que no le agrado, pensó que era un kunai lo que sentía tan duro haciendo fricción en su trasero, se tensó al instante tenía miedo quizás si se movía esa cosa le cortaría, queridas lectoras y lectores, ¿Quién quiere explicarle a nuestro encantador rubio que el porta shuriken de sasuke esta en su espalda y no en su pelvis?.
- Sasuke-teme ten más cuidado dattebayo… - refunfuñada levantando levemente la cabeza y girándola para ver a su opresor.
- Avisa cuando te vayas a detener dobe… - pronuncio algo molesto sasuke, aunque por dentro estaba más que gustoso de tener de esa forma al rubio bajo su cuerpo, sus manos estaba apoyadas a ambos lados de la cabeza del rubio y eso provocaba un encantador roce de su cadera con el trasero de Naruto.
- Esta bien… cálmense… hay que solucionar el problema del Kazekage después de comer y antes de dormir… ¿les parece?... – propuso Kakashi mientras Sasuke se levantaba del rubio quien suspiro aliviado al no sentir su vida o mejor dicho su trasero en peligro, si supiera ¬_¬.
Se encaminaron hacía el local de comida, mientras que todos iban perdidos en sus pensamientos, Naruto no le quitaba la vista al azabache, este se percato de eso, se sentía sumamente feliz, tal vez ahora si Naruto le correspondería y esa noche misma se le entregaría.
- Oe Sasuke… tengo algo que preguntarte tebayo… - comento el rubio haciendo que el corazón del azabache saltara dentro de su pecho con gran emoción, finalmente Naruto se le declararía.