-Escucho el ruido de la cafetera y no me asombra que Rosé se me quede viendo intentando averiguar algo de mí con solo sus ojos.- Es mejor preguntar a hacerse ideas erróneas.
Rosé: ¿Cuántos años tienes?
JK: Los mismos que tú.
Rosé: ¿De dónde conoces a V baby?
JK: De un centro psiquiátrico.
Rosé: ¿Por qué estabas en un centro Psiquiátrico, JK?
No puedo evitar reír terminando de hacer lo que quedaba de masa.- ¿Error?
Rosé: ¿Cómo es que V baby te trata tan bien? Él es una persona que no considera a nadie humano –Escucho un suspiro melancólico en ella- Ni siquiera a mi padre y a mí nos consideraba algo humano. ¿Por qué tú eres diferente?
JK: Porque le enseñe a amarme a su manera –veo como la joven arquea sus cejas por el enojo.-
Rosé: V baby no conoce muy bien el amor. –Ella dirige su atención a V hyung y este solo está perdido en sus pensamientos con un semblante serio.-
JK: Lo sé.
Rosé: Pero por lo que veo tu sí.- Rosé toma algunos platos sirviendo panques acompañados de huevos y tocino. Sale con ellos de la cocina empezando a repartirlos entre los clientes.-
JK: Olvide que las mujeres tienen un sexto sentido- Siento un leve escalofrió haciendo que mirara a la persona que me lo había provocado- Si ya voy, V hyung.- Su ojos y manos demuestran ansiedad. En cuanto salgo de la cocina y me siento a su lado lo primero que hace es tomar mi mano. Olfatea levemente haciendo que ese sentimiento disminuya poco a poco.-
V: Comamos- Sleepy, Rosé y V hyung empiezan a probar lo que habíamos preparado mientras yo seguía observando mi comida- ¿no lo comerás?- Asiento con la cabeza partiendo un poco de mis panques, probando aquel sabor dulce que hace dos años no había probado, llevándome al momento de la primera vez que los había cocinado con mi hermano-
Años atrás…
Jin: déjame remangar primero tu suéter de lo contrario lo batirás de harina- Mi hermano con gentileza hace un dobladillo en cada manga mientras me sonríe con dulzura- Lo estas batiendo muy bien. Quedaran muy esponjosos gracias a ti.
JK: aremos solo para nosotros, o papá y mamá también comerán.
Jin: Hoy solo seremos tu y yo- Mi hermano acaricia cortamente mi cabello mientras toma la sartén para preparar los panques.-
Presente…
No puedo evitar sonreír y comer más de mi desayuno- Mis dulce 8 años. –V hyung jala mi barbilla y me mira con enojo haciendo que mi sonrisa se borrara por volver a la realidad. Con su dedo índice limpia la miel que había en la comisura de mi labio para después chupar su dedo y seguir desayunando.
Al terminar, me levanto dejando mis cubiertos en la cocina siguiéndome el paso V hyung- Iré a organizar un poco arriba.
V: Voy contigo –Escucho sus pasos detrás de mí y como cierra la puerta después de que pasamos ambos. Sus manos rodean mi cintura y su boca deja besos húmedos en mi cuello haciéndome sentir extraño. Su tacto es delicado con sensación a resistencia.
Cierro mis ojos y es cuando todo se viene a la basura. Me falta el aire y mi cabeza me empieza a dar vueltas- Mis…pastillas- Caigo al piso mientras veo levemente como V hyung busca en mi bolsa mi medicamento. Lo mete a mi boca haciéndomelo pasar con una botella de agua que había en la cómoda de la cama.
Me levanta sin complicación y me deja en la cama. Su cara es una obra de arte. Sus ojos se encuentran en aguas y su respiración es entrecortada-Estoy bien hyung, contigo siempre estaré bien.
V: JK, dime la verdad, ¿Por qué estabas en el centro psiquiátrico?
Cierro mis ojos y junto mis manos entrecruzando mis dedos- Ya te lo dije, conté la verdad de mi familia.
V: solo se una parte. Dímelo todo.- Escucho como se sienta en el suelo mientras jala mi mano derecha llevándola junto con él mientras la acaricia con su cara.- Dime mi pequeño, ¿qué es lo que te tiene así?
JK: te había dicho que no preguntaras más de la cuenta.
V: Tengo que hacerlo si quiero protegerte de todo y todos.
-Suspiro profundo y sostengo mi vista en el feo techo dañado y desquebrajado- Fui internado por mi padre.
Cuando mi hermano entro en coma mi familia no fue la misma. Mi padre empezó a llegar tarde a casa y mi madre siendo una puritana se quedaba callada esperando siempre por su regreso, no importaba la hora que fuera. Hasta que una noche…
JK: Madre vete a dormir él no volverá hoy.
Madre: como una buena esposa tengo que esperar su regreso y ver si no me ocupa.
JK: Hace tiempo que dejo de ocuparte y lo sabes. Su ropa, su olor, todo de él demuestra que tiene una amante.
Madre: ¡Cállate J…...K…! Tú padre nunca haría eso.
JK: ¿Y si te lo demuestro?- Veo como mi madre se levanta del sillón, me da una leve caricia en mi cabeza y se va a su habitación- ¿Porque todos quieren cerrar sus ojos y no ver la realidad?
Esa misma noche mi padre llego a casa, peleo con mi madre y lo último que pude ver de ella fue tristeza en su rostro mientras caía por las escaleras al ser empujada por mi padre.
Volví silenciosamente a mi habitación y cerré los ojos esperando que lo que había visto no fuera cierto.
Escuche el grito de mi padre haciéndome salir de nuevo. Ahí estaba él, sosteniendo el cuerpo de mi madre gritándome con lágrimas que se había caído. Era mentira.
Vuelvo a mi habitación y me encierro. Intento borrar lo que vi pero no puedo.
Veo mi rostro en el espejo y no hay rastros de que quiera llorar, mucho menos de dolor. Es el mismo rostro de siempre.
Escucho el ruido de la puerta y la abro viendo a mi vecina. Preguntaba si estaba bien. Me dijo que mi madre fue llevada al hospital y mi padre le pidió que se quedara conmigo- Mi padre la empujo- Veo como la vecina agranda sus ojos y me deja ahí para salir corriendo a buscar al oficial que estaba a punto de irse-
Policía: ¿Qué fue lo que le dijiste a esta mujer, muchacho?
JK: Vi como mi padre empujo a mi madre porque ella descubrió que él tenía una amante.
Policía: ¿Estás seguro? Tu padre nos dijo que ella estaba bajando las escaleras y cayo.
-Me río sínicamente haciendo que ambos se quedaran extrañados de aquel acto- Ese hombre ya no es mi padre.- Veo cómo sale el oficial de la casa y la vecina me abraza intentando consolarme, pero siendo sincero no necesitaba consuelo. La única persona que lo necesitaba era mi madre, la cual, a la mañana siguiente falleció. No sin antes hacer una carta donde decía que amaba a mi padre y que no tenía la culpa de nada. Astuto fue aquel hombre de limpiar su nombre antes de ver morir a la mujer que ya no necesitaba.
Después del entierro de mi madre solo quedamos nosotros dos.
Padre: Olvidaré lo que le dijiste a las autoridades si tu olvidas lo que paso con tu madre- Aquel hombre le temblaban las manos y no dejaba de pasar su lengua por sus labios secos. Estaba irritado conmigo.-
JK: Esta bien- No soy estúpido, sé que no tengo otra opción, soy menor de edad y no tengo a donde ir.-
Pasaron dos meses y mi padre no tardo en traer a su amante a vivir con nosotros. Era 10 años menor que él y se notaba a leguas que no lo quería para nada, mucho menos a mí.
Padre: Ella es ahora mi esposa.- Veo como mi padre pasa su mano en el abdomen de la mujer mientras una sonrisa se forma en la cara de ambos.- Y está esperando a tu hermano.
No digo nada. Me voy a mi habitación a terminar de leer los libros que mi madre me había dejado.
Una noche que padre llego tarde a casa pude escuchar el cuchicheo que aquella mujer.
Mujer: El tipo es muy estúpido, piensa que es su hijo. No te preocupes cariño, en cuanto tenga las cuentas de su banco le quitare todo el dinero y nos iremos lejos de aquí junto con nuestro pequeño.- Era demasiado obvio que no era de mi padre.-
Regreso a mi habitación y abro mi laptop entrando a las cuentas de banco de mi padre jaqueando sus contraseñas y cambiando todo su dinero a la cuenta de mi madre que nos dejó a Jin y a mí. Hago unas cuantas llamadas y algunos cambios de manera que mi padre pueda acceder a cierta cantidad de dinero. Esto no iba a ser fácil para ninguno de los dos al hacerme pasar por mi hermano mayor. Si querían obtener el dinero tendrían que esperar hasta que Jin despertara.
Cuando mi padre regreso hable con él y le conté todo lo que había escuchado de aquella mujer. Como lo pensé, no me creyó. En cambio recibí fuertes golpes de su parte al punto de caer al piso y se me dificultara respirar. Puedo ver como aquella mujer sonríe y como mi padre sigue pateando mi cuerpo. Me levanta y mete al auto. Mis zapatos cayeron cuando forcejeo por el dolor de ser arrastrado por el piso.
Mi padre me aventó al asiento trasero y con su cinturón y corbata me ato las manos y me cubrió los ojos. Solo escucho como enciende el motor.
Aún con todo esto sigo sin tener absolutamente nada de miedo.
Después de unas horas me quita tanto la corbata como el cinturón y me jala a aquel centro donde me avienta en la entrada.
Padre: ¡Alguien que lo sostenga! ¡Es peligroso! –Dos hombres me toman de mis brazos y acompañan a mi padre hasta la oficina de Hoseok donde lo veo por unos segundos saludando a mi padre y mandándolo con otro tipo y una mujer.-
-Me quedo afuera viendo como mi padre se da cuenta que su cuenta ha sido cambiada. Me mira con desaprobación e ira. Hace su cabello hacia atrás y vacía el dinero que le quedaba, dejándome en aquel lugar sin mirarme por última vez- Eres un hombre egoísta. Juro que me las pagaras…
JK: Es por eso que estaba encerrado, V hyung. Conté todo y esas fueron las consecuencias- Besa mi mano y se levanta acostándose aún lado de mí mientras me jala y me abraza completamente. Su aroma a chocolate inunda mi nariz haciendo que relaje mi cuerpo y cerrara mis ojos.-
V: Yo are que ese hombre pague todo lo que te hizo.