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Obseción por Riolu

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Notas del capitulo:

Muy bien les dire el motivo del tardarme mas de la cuenta, murio la pantalla de mi notebook y me tomara tiempo juntar plata para arreglarlo asi que tuve que escribir TODOS MIS FICS DENUEVO, es por ello que me tardare mas de la cuenta T_T, espero me sigan apoyando a pesar de todo y nyan cats para todos los que me dejaron review, les mando saludos

 

por cierto este cap es VanVen

Tener una pareja realmente es difícil, en especial si tu pareja es un rubio dependiente que siempre que una persona se acerca a ti lo amenaza con descuartizarlo vivo o lanzar sus genitales a algún animal rabioso, aun recuerdo lo mas inusual que fue cuando una compañera vino a devolverme un lápiz y me daba una sonrisa, Ven se enfado por ello y no alcanzo a amenazarla pues ella se fue muy tranquila, aun así el comenzó a acosarme a mi para que le dijera quien era…de hecho eso es lo que esta pasando ahora.

 

-Dime quien es, es obvio que le gustas-me exigió por enésima vez sin dejar de mirarme enfadado, agradecía que estuviéramos en la azotea almorzando y que nadie nos escuchara pues sus quejas parecían peores que una mujer con cierto día en su organismo…de acuerdo quizás exagere, Ventus es mil veces peor que eso.

 

-Quieres detenerte solo fue un lápiz, además no tengo por que andar dándote miles de excusas a ti-le regañe bastante molesto por su actitud tan infantil y el me miro con una cara de cachorro abandonado pero esta vez no caería en su truco, el también se dio cuenta de ello pues se levanto enfadado y me arrojo su botella de agua en la cabeza cosa que dolió, me miro por unos momentos y estoy seguro de que vi algo de remordimiento en su mirada, de “Infiel” me acuso y corrió hacia las escaleras sin molestarse en recoger sus cosas, apenas me quede solo me puse a meditar y llegue a esta conclusión, esa maldita actitud tiene que terminar y ya sabia como hacerlo.

 

En la siguiente hora nos tocaba juntos y fue el mejor momento para poner en marcha mi estrategia, al entrar a clases lo vi aun enfadado y se fue al rincón opuesto de mi asiento de siempre, a mi no me engaña quería que fuera a sentarme con el pues cuando alguien se acercaba el decía que ya estaba reservado, por mi parte que lo siga reservando pues no me importaba, su mirada de asombro lo valía en cuanto me senté con la chica que me había regresado el lápiz sin siquiera voltearme a verlo.

 

-Ahh eres el chico que me presto el lápiz… ¿Vanitas verdad?-cuestiono mirándome tranquilamente y debo admitir que eso me sorprendió bastante por que técnicamente soy un antisocial, la observe mejor, cabello corto y azul al igual que sus ojos, su figura no estaba mal pues estaba bien desarrollada y finalmente su rostro tenia por así decirlo un aire angelical, lo se no debería pensar esto cuando supuestamente tengo novio pero es la única manera de definirlo aunque sigo prefiriendo a Ven.

 

-Así es, tu eres Aqua la sabelotodo-me burle de ella y pareció ofenderse un poco pero sabia que estaba bromeando por lo cual se rio, disimuladamente voltee mi mirada y vi como Ventus nos miraba de un modo tan asesino que llegaba a incomodar, menos mal empezó la clase y el profesor nos ordeno hacer un trabajo en parejas, junto a Aqua resolvíamos todo rápidamente pues tenia un aire de profesora agradable y aun en contra de mi voluntad realmente aprendí este día.

 

Estoy seguro de que escuche un crack y resulto ser Ventus el cual había roto uno de sus bolígrafos mientras su compañero Terra intentaba calmarlo, ahora que lo recuerdo el y Aqua eran los mas agradables de la escuela y muchos dicen que están saliendo pero yo no estoy interesado en eso, simplemente quiero enseñarle a ese celoso que serlo en exceso era dañino y molesto para alguien como yo, lo que no esperaba es que cuando apenas Terra desviara la mirada le lanzara el bolígrafo roto a Aqua y ella molesta buscara al causante mientras el rubio fingía toda normalidad con su inocencia.

 

Como entregamos el trabajo antes de tiempo nos pusimos a hablar y resulto ser mas agradable de lo que pensaba e incluso intercambiamos números de celular para llegar a salir algún día, por parte de Ven el intentaba causarme celos fingiendo ser adorable con Terra pero eso a mi no me afectaba en lo mas mínimo pues lo conozco demasiado bien, lo único malo fue que el castaño parecía corresponderle y disimuladamente preste algo de atención mientras me reía por como al rubio le salía “el tiro por la culata” y ahora intentaba alejarlo de el, cuando tocaron la campana ella se despidió de mi con un beso en la mejilla y parece que eso fue pasarse de la raya pues Ven al vernos salió corriendo de la clase y por suerte para el fue fácil perderse entre los que iban saliendo, ahora el remordimiento me comenzó a atacar y durante el recreo lo busque pero no pude encontrarlo, no tuve mas opción que entrar en la otra clase y ni aunque nos tocaba juntos otra vez lo vi en ella.

 

Estaba preocupado por lo que podría estar haciendo pero lo disimulaba bastante bien, para mi mala suerte miles de chicas y chicos aprovechando que el rubio no estaba cerca mío comenzaron a hostigarme para que aceptara sus cartas de amor, termine con casi una tonelada de cartas y uno que otro chocolate que algunas me quisieron regalar, prácticamente en 15 segundos fue como “el día de San Valentín para Vanitas”, comencé a preocuparme por mi novio y decidí pensar como el, finalmente sonreí sabiendo donde estaría por lo que me dirigí al gimnasio.

 

Debo tener una especie de sexto sentido para encontrarlo pues escuchaba como alguien lloraba en el armario de los útiles deportivos por lo cual entre, no me moleste en encender la luz pues una pequeña ventana me mostraba a un rubio en posición fetal mientras escondía su cara entre sus rodillas, simplemente sonreí antes de colocarme silenciosamente frente a el.

 

-¿Ya fue suficiente?-le pregunte mientras el se quedaba callado por unos momentos, tímidamente alzo su vista y vi que sus ojos estaban demasiado rojos por lo cual me sentí peor, intente tocarlo pero el se alejo un poco de mi y me dio la espalda, pensé que volvería a llorar y eso fue demasiado para mi paciencia, lo tome con fuerza y lo voltee para que me mirara y pude ver algo de miedo en sus ojos.

 

-¿Para que viniste?, deberías estar con esa maldita Aqua…al menos con ella te ves feliz-me reclamo pero yo vi claramente en sus ojos que no deseaba decir eso, le toque con cuidado sus mejillas y le di un suave beso en sus labios, parecía querer escapar pero en unos momentos se abrazaba a mi deseando hacer durar el momento, nos separamos y vi que su rostro estaba sonrojado pero muy feliz luego me miro con algo de arrepentimiento y finalmente se apego con fuerza a mi. Simplemente no me puedo enojar con el ahora, supongo que es normal en una pareja tener celos pero eso demostraba que era importante para el…demasiado importante diría yo pero supongo que es lo de menos, se abrazo un poco mas fuerte a mi y comenzó a decirme cosas empalagosas como “lo siento” o “te extrañaba mucho” y la mas dulce para algunos “te amo”.

 

-Prometo no volver a ser tan celoso…pero tu no te acercas a nadie mas ¿de acuerdo?- me propuso y yo lo mire con algo de enojo y el se rio nervioso, simplemente suspire y le dije que no prometía nada pues yo debía soportar sus berrinches y el justamente comenzó a hacer uno sobre eso, comenzó a zarandearme diciendo que yo le pertenecía y honestamente me estaba molestado de nueva cuenta con el, pareció darse cuenta a tiempo pues se comenzó a disculpar múltiples veces al tiempo que escuchaba la campana de inicio a clases.

 

-Sera mejor que vayamos a clases, asegúrate de lavarte la cara antes de salir-le recomendé mientras el afirmaba con una sonrisa mas calmada, apenas tome mi bolso este se abrió por accidente y los montones de cartas de amor que me entregaron cayeron justo frente a el-“esto no será bueno”-pensé y tenia razón pues un aura de furia se presento alrededor de el.

 

-Dime querido Van, ¿Qué estabas haciendo en mi ausencia?-me pregunto apretando con fuerza una carta viéndome con una sonrisa que ocultaba toda su ira, iba a comenzar a explicarle pero el comenzó a gritarme varios insulto en los cuales algunos realmente dolieron, termino diciendo que yo solo lo veía como una entretención para mi y cuando me iba a dar un puñetazo pareció arrepentirse y termino como una fuerte bofetada, “maldito cornudo” me grito por ultima vez antes de recoger esas cartas y se fue corriendo del lugar.

 

Suspire con fuerza y di un grito de rabia antes de patear uno de los balones que se me regreso golpeándome la cabeza, en verdad este día no podía ir peor pero aun así me fui a mi clase, el problema fue que el maestro Vexen pensó que me había peleado con alguien por una marca roja en mi mejilla y me dejo parado en el salón, parece que no fui el único por que casualmente en el otro lado del pasillo vi a Ventus parado también, me iba a acercar para poder hablarle pero el me vio con un odio y resentimiento tan grande que decidí no arriesgarme mas.

 

Me puse a escuchar música para pasar el tiempo sin dejar de mirar al rubio que estaba escribiendo una nota, paso un momento y la convirtió en un avioncito de papel y me lo lanzo, al llegar hasta mi lo abrí y lo que leí me dejo de piedra “le daré caza a cada una de esas desgraciadas y a los malditos que te enviaron una carta y créeme que desearan no haberse metido con mi novio”…muy bien en verdad esto se parece a una loca película y estaba apunto de reclamarle por eso pero cuando voltee la vista el había desaparecido, esperando que nada malo pasara escuche un grito y corrí hacia el lugar, apenas llegue encontré a una de esas chicas que me entrego una carta bañada en alquitrán además de tener plumas pegadas a su cuerpo, busque con mi mirada y pude ver claramente una cabellera rubia alejándose del lugar.

 

Cuando llegaron los profesores pensé que me echarían la culpa pero se preocuparon mas por ella lógicamente, ella les explico que iba camino al baño cuando sintió tropezar con una cuerda y todo cayo encima de ella, lo único que escucho fue una risa y yo me retire para buscar a Ven pero para mi desgracia la campana de inicio al recreo sonó, todas las personas salieron de sus salones impidiéndome poder buscarlo con calma.

 

Una a una fueron cayendo múltiples personas en diversas bromas, a una le cayo pintura en el cabello, a otras las encerraron en el baño junto a bombas apestosas de las cuales tomo 20 minutos destrabar la puerta, a otro grupo les cayo polvo pica-pica y lo peor fue para las que me habían regalado chocolates, a ellas les cayo un balde de huevos podridos, comida para perro y globos con pegamento, todos en la escuela estaban asustados pero yo sabia que esto no podía ser mas que la obra de una persona y en estos momentos estoy llegando a sentir envidia por no ocurrírseme antes este tipo de bromas, rabia por que ese rubio celoso hubiera molestado y hecho llorar a personas que únicamente querían expresar sus sentimientos y finalmente…emoción por descubrir un lado oscuro de el inocente de Ventus que yo jamás creí conocer, lo admito estoy impresionado y esto solo hace que desee verlo con mas ganas.

 

Cuando finalmente terminaron todas las clases me quede mas tarde en el establecimiento hasta que pude ver una pequeña señal de humo salir por la azotea y me dirigí a ese lugar, al llegar en efecto estaban quemando algo y eran las cartas que las victimas me entregaron, vi como el rubio se sorprendió por mi presencia pero ni aun así detuvo su acto, por ultimo lanzo unos guantes que llevaba a la fogata y vio lentamente como todo se iba quemando como si eso lo aliviara de alguna manera, no tuve nada mas que decir pues no sabia que podría en estos momentos así que me di la vuelta para retirarme.

 

Lo siguiente fue que alguien me abrazo por la espalda pero no con cariño sino como un modo de pedir perdón, me voltee levemente y en efecto era Ventus el que me abrazaba solamente que lo veía con una mirada de arrepentimiento y felicidad, me solté de sus brazos y lo mire con decepción por todo lo que había hecho y eso lo deprimió bastante, tímidamente tomo mi mano y comenzó a jalarme para que nos fuéramos de ese lugar y acepte eso, caminamos hacia el centro comercial pero el no hablaba en ningún momento hasta que esa situación me harto y lo jale con fuerza para que se detuviera, ninguno se movió ni nada por lo cual intente liberar mi mano pero el se arrojo a mis brazos ocultando su mirada de la mía.

 

-Lo siento…pero…tengo miedo de que quieras a alguien mas-susurro con mucho nerviosismo a lo cual entendí parte de ello, sin embargo no sigue siendo una excusa para maltratar a mas de 10 personas y eso se lo recrimine de manera dura en la cual el bajaba la cabeza bastante arrepentido, se podría decir que tengo experiencia para dar regaños pues vivo con dos personas muy alborotadas que siempre me sacaban de quicio por lo que si  puedo soportarlos a ellos puedo con el rubio, decidimos continuar dando un paseo pero el no se me acercaba por estar deprimido casi al borde el llanto y eso bien podría ser mi culpa.

 

Voltee hacia los lados buscando un modo de consolarlo y la respuesta me llego en cuanto vi a Aqua y a Terra en un negocio, le dije que iría por algo y el se sentó en una banca a esperarme, fui hasta ese lugar y les di un corto saludo pues no deseaba hacerlo esperar sobre todo con los ánimos que el andaba, cuando volví el me miraba algo molesto pero no pregunto por nada, era un avance supongo aunque cuando le pedí que cerrara los ojos debió pensar que iba a besarlo pues se sonrojo un poco y extendió sus labios pero lo único que coloque en ellos fue su helado favorito, un helado de sal marina.

 

El se quedo sorprendido y algo decepcionado pero al igual que un niño pequeño me agradeció con una sonrisa mientras devoraba con ansias el helado, no entendía como algo tan simple podía hacerlo feliz y decidió probarlo por si mismo descubriendo un curioso sabor que realmente era agradable, como lo esperaba el rubio se había relajado con el helado y ahora se encontraba apoyado en mi hombro sin importarle que la gente nos viera.

 

-Oye Van, ¿e-esto…es…una c-c-cita?-me pregunto bastante tartamudo y me di cuenta que los colores se le fueron a la cabeza llegando a pensar que se desmayaría como de costumbre, simplemente agarre su cintura y lo bese con suavidad mientras el helado se escapaba de sus manos cayendo al suelo por la sorpresa, movió sus labios con algo de timidez y yo decidí torturarlo mas y lo bese con mas brusquedad llegando a introducir mi lengua en su boca, saborearlo a el junto a su helado favorito parecía no tener precio pues en verdad era delicioso, cuando nos separamos el se abofeteo a si mismo para mantenerse despierto cosa de la cual me reí al igual que cuando el lloriqueo por como su helado se había caído supuestamente por mi culpa, le ofrecí lo que quedaba del mío y nos pusimos camino a su casa solamente que el pidió que fuéramos por un camino largo pues su hermano lo llamo para que lo dejara a solas con Sora, parece que Ven volvió a la normalidad ya que en ningún momento se despego de mi brazo mientras se comía el helado con una enorme sonrisa de niño de 5 años.

 

Apenas llegamos a su casa recordé que Sora debería estar cuidándolo aun si es que ese desgraciado no se había sobrepasado con el, entramos y la encontramos en un extraño silencio por lo cual yo me preocupe, decidimos no molestar y le pedí un vaso con agua a lo cual el fue a la cocina y volvió pero regreso con unas extrañas píldoras y el bolso de mi hermano, me los entrego pensando que debería estar arriba con su gemelo pero algo me decía que esas píldoras no eran comunes por lo cual las guarde enseguida, escuchamos unos pasos y me prepare para reclamarle al castaño pero únicamente bajo Roxas el cual tenia los ojos rojos lo cual nos preocupo.

 

-Son ustedes… ¿Cómo les fue?-nos pregunto intentando hacer una sonrisa sin lograrlo, tanto Ventus como yo nos asombramos ya que normalmente a mi me echaría de su casa y a su gemelo lo enviaría a su habitación, pregunte por mi hermano y el se tenso por unos momentos y dijo que se había ido hace una hora.

 

-Roxas ¿estas bien?-pregunto Ventus preocupado al ver como sus ojos se llenaron de una profunda tristeza y amenazaban con llorar, intento acercarse pero el se excuso diciendo que aun se sentía mal y comenzó a subir escaleras arriba, vi a mi novio y el supo que algo malo ocurría por esa actitud, le dije que iría a mi casa a preguntarle a Sora lo ocurrido y el afirmo diciendo que también investigaría, me acerque a darle un  beso de despedida pero unos pasos bajando la escalera nos dejaron en medio camino.

 

-Ven… ¿que harías tu si Van te hiciera algo que tu no deseas pero al final terminas disfrutando?-nos cuestiono Roxas y entonces los dos nos quedamos confundidos, el en verdad estaba enfermo ya que no nos había gritado por estar así de cerca el uno del otro o le había ocurrido algo tan fuerte que su homofobia se había ido a otro lugar de su mente.

 

-Pues supongo que pediría una explicación o hablaríamos del tema para llegar a un punto en que los dos seamos felices-respondió aun confundido mientras me abrazaba sin pena, “mentiroso” pensé yo y el pareció leer mi mente pues me dio un pellizco disimulado para que le afirmara y eso tuve que hacer, nos dio las gracias y finalmente regreso a su habitación, nos miramos el uno al otro y el me prometió que haría lo que dijo a partir de ahora, basto para que lo perdonara y le di un beso de despedida para retirarme a mi hogar.

 

Apenas llegue supe que algo andaba mal, mucho silencio, las luces apagadas por lo cual me puse alerta y comencé a subir hacia las habitaciones, busque en la de Iris y ella no estaba ahí, en la mía tampoco había nadie y cuando entre en la de Sora sentí una enorme tristeza en el aire, el estaba dormido en el regazo de mi prima pero en su rostro aun se veían los rastros de varias lagrimas, en su brazo observe una venda lo cual me hizo imaginar algo que no deseaba, mire a Iris y ella acostó bien al castaño antes de darle un beso en la frente para que descansara, salimos de la habitación y ella me conto todo lo que ocurrió entre el y Roxas pero a cada palabra no deseaba ni imaginarme mas, le pregunte como lo había descubierto y ella se quedo callada unos momentos.

 

-Supongo que es porque tengo experiencia en el tema-me explico dejándome ver su marca y yo me asombre pero eso era normal para mi, ella siempre tuvo un extraño don de sentir la tristeza de sus seres cercanos y por ello la habían tachado de loca, solo yo y mis padres sabíamos esta historia pues la verdad no nos pidieron cuidar de ella, a mi prima la abandonaron sus padres después de que la apuñalaron en la escuela…y ese golpe también fue planeado por sus padres, ella suele tener pesadillas en que la llaman como ellos la veían…una bruja.

Notas finales:

Iris: Te odiamos como no tienes idea, apoyenos y ayudenme a castrar a este idiota

Yo: WAAA basta, degenerada

Iris: miren quien habla, saludos


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