POV. SUHO.
Había decidí tomar el autobús, después de que se fuese Kris no había sido capaz de dormir dos horas seguidas. Así que me había dado por pensar en que había faltado mucho ya. Subí la cuesta despacio porque parecía que se me iba a caer la pierna del dolor, noté un brazo en mi cintura y pegué un brinco al ver a Kris.
-¿qué haces?-lo aparté de mí y me lleve la mano a la zona de la cadera donde me estallaba el dolor.
-¿qué haces tú?-fruncí el ceño, alzó el puño y retrocedí.-DEBERIAS ESTAR EN CAMA.
-pero me aburro y no puedo faltar más.-le di la espalda y comencé a subir.
-¿te duele?-asentí llegando a las escaleras-¿y vienes sabiendo que tendrás que estar sentado?
-Si
-muy bien, ¿quieres dolor?-me encogí del hombros no muy seguro de que pregunta era esa.-Vas a ver.
Pegué un grito cuando me cogió como un saco de patatas, su hombro presionaba mi cadera haciendo que me doliese horrores. Lo golpee en la espada y tironee de su vaquero. Gimotee dándome por vencido cuando vi que me llevaba hasta la clase.
-BAJAME-negó y me dejó en la silla, toda la clase me miraba, él golpeó la mesa con la mano y su rostro quedó cerca de mi cara.
-si quieres que te duela allá tú, pero luego no vegas echándome la culpa de que te hiciera el tatuaje-se apartó y me levanté.
-NO TE TIENE QUE IMPORTAR EL QUE ME DUELA O NO-se giró y gemir de dolor por haberme levantado rápido, sonrió con malicia y me senté.
Vi a uno de sus amigotes como se lo llevaba de la mano. Gimotee dejando caer la cabeza contra la mesa, no duró mucho mi calma ya que sentí un beso en la mejilla, al abrir los ojos distinguí a Carol con una sonrisa pícara.
-¿qué? ¿Nos duele mucho?-fruncido el ceño y me sonroje cuando entendí lo que creía.
-NO ME HE ACOSTADO CON NADIE-me tapó la boca, tiro de mí y acabe contra la esquina del aula, era más alto que ella pero me intimidaba.
-¿cómo que te gusta Kris?-me sonroje y asentí agachando la cabeza.-¿qué sientes?
-¿eh?-rió divertida.
-¿qué que sientes cuando estas cerca de él?-me puso las manos a ambos lados de la cabeza.
-pues... Pues...-sonreí cuando apareció por la puerta, me vio con Carol y negó antes de coger una navaja y dársela a un chico alto. Fruncí el ceño y vi unos dedos delante de mis ojos.
-¿tierra llamando a Suho?-asentí poniéndome como un tómate.
-siento envidia de sus amigos por poder estar con él todo el día... Es agradable conmigo... bueno, cuando estamos a solas y él está de buenas...-moví las manos buscando palabras.
-¿sientes que quieres abrazarlo o besarlo cada vez que lo ves?-asentí sonrojado.
-Bueno, no tanto... Es sólo que..-.suspire-¿y esto qué más da si él no quiere una relación conmigo?
-Pues importa y mucho-se apartó de mí y suspire-él sí que te quiere Suho...
-TÚ-pegué un respingo al oír la voz de Kris, tiró de mi brazo y me arrastró hasta la silla. Me senté y lo miré de reojo sonrojado.
POV. D.O.
-Vamos Kyung-negué, Baek andaba saltando mientras caminaba a mi clase-¡¡POR FAVOR!!!
-QUE NO VOY HA HACERTE EL TRABAJO-puso un puchero y bufe, al girar la esquina choque contra una mole enorme.
-Mira por...-el chico se calló cuando vio que era yo, me puse serio y pasé por su lado-MALDITO ENANO CON OREJAS, PPDRIAS PEDIR DISCULPAS
-no me da la gana-lo miré serio, él gruñó y siguió andando.
-emmm ¿y eso?-reí cuando dobló la esquina, Baek me miraba desconcertado.
-sabes que soy un pelín psicópata...-asintió y me aguanté la risa-pues lo tengo asustado como una niña...
-¿por lo del pircing?-asentí y mi amigo estalló en carcajadas.-sigue así DoDo.
POV. CAROL.
-Estate quieto…- dije con un quejido.
Estaba tumbada en el sofá, ocupándolo casi entero, estaba arropada con una manta, tenía un dolor de cabeza horrible y estaba intentando relajarme y dormir un rato.
Habían pasado unos días un poco caóticos, había habido muchos cambios en muy poco tiempo, como siempre. Me giré, intentando estar de costado, miré mi reloj de pulsera, las 15:15.
Le daba vueltas a todo. Ahora Nyle y yo éramos amigas, hemos empezado a salir más juntas, me he dado cuenta de que no es como yo pensaba, me había demostrado que era una gran persona. De repente, noté como tiraban de la manta y tiré yo de ella para recuperarla.
-Oliver…- el cachorro agarraba una esquina con la boca y movía su cabeza de un lado a otro para intentar quitármela. Terminé levantándome de golpe y con brusquedad, mirándole.- ¡Estate quieto!
Aquello me pasó factura, pues un dolor horrible en mi cabeza hizo que volviera a tumbarme despacio mientras me quejaba. Parecía que me estaban dando martillazos en la sien, el Karma había hecho su parte por haber gritado al pobre de Oliver. Le oí llorar y después, saltó al sofá. Pegué un respingo cuando aterrizó en mi tripa, después comenzó a andar hasta mi cara y lamer mi mejilla, comencé a acariciarle las orejas con ternura.
Mientras lo hacía, pensé en Suho y en aquel mensaje que me había mandado. Después en el comportamiento que había tenido Kris con él durante toda la mañana, como si lo protegiera de algo, no le dejaba moverse.
Algo va a pasar entre ellos y no sabía exactamente el que, pero esperaba que algún día… las cosas volvieran a ser como antes, cuando éramos unos niños, echaba de menos el poder estar los tres juntos, sin peleas, en el sofá, jugando videojuegos.
Mis pensamientos fueron cortados cuando oí abrirse la puerta de la calle. Era Kris, había ido a la farmacia a comprar medicamentos para mi maldita cabeza.
Cerró la puerta, se quitó la chaqueta de cuero y se sentó en el sofá, le hice un pequeño hueco. Dejó la bolsa encima de la mesa y Oliver se le echó encima. Le acaricio un poco por encima y le dejó en su regazo agarrándolo con una mano mientras que con la otra, me tocó la frente durante un momento. Noté su mano fría, o eso me pareció.
-No tienes fiebre.- dijo y después quitó la mano, la metió en la bolsa y sacó varias aspirinas. Me ofreció una y la cogí.- Voy a por algo de agua.
Dejó a Oliver en el otro lado del sofá y se levantó. Me incorporé despacio con la pastilla en la mano y me senté, mirando al perro. Se había hecho un ovillo en la manta, seguramente se quedaría dormido, y eso era un alivio.
Kris me trajo el vaso, me lo ofreció, lo cogí y tomé un trago con la pastilla, mientras me la tomaba, me miraba en silencio, sabía que mi estado le preocupaba.
-Kris, estoy bien. Solo es un dolor de cabeza.- le dije mientras sonreía, continuó mirándome igual.
-Voy a hacer la comida.- no dijo nada más y se fue a la cocina.
Suspiré levemente y volví a tumbarme en el sofá con cuidado de no molestar a Oliver, el cual se había quedado con la manta, lo había conseguido. Volví a suspirar mientras me enfrascaba nuevamente en mis pensamientos.
Había varios problemas importantes en mi cabeza y comencé a pensar que el dolor podría provenir de ellos.
Luhan, todo el rato me venía Luhan a la cabeza, me estaba empezando a gustar pero… mis sentimientos por Suga aún seguían frescos, no sabía que sentir, que hacer…
Suho y Kris… ¿Qué iba a hacer con ellos? El pequeño Bamie… me destrozó el alma verlo en ese estado… maldito YG, lo voy a matar. Pensé en ir más tarde a ver a mi pequeño, si el dolor se pasaba.
Y el resto de mis niños…cada uno con sus problemas y esos cabrones, sabía que los castigos habían sido a traición.
Recibí entonces un mensaje en mi teléfono. La mesa vibró como si hubiera un terremoto. Lo cogí y lo miré.
Era un grupal del KakaoTalk, pronto, llegaros más mensajes.
Jimin: Hey! Alguien queda hoy? 15:43
V: ^-^ 15:44
Kookie: Hoy no. Tengo mucha tarea que hacer u_u 15:45
Jimin: Tranquilo cielo. V, eso es sí, o no? 15:46
V: Que si
Sonreí, me encantaba hablar con ellos por aquí, comencé a escribir.
Carol: Venías hoy a casa? Tengo un dolor de cabeza horrible. 15:47
Jimin: Oh Noona! Mejórate! 15:47
Kookie: Un abrazo fuerte! 15:48
V: D:
Mensajes rápidos sin duda. Me llamó la atención leer el siguiente. Me quedé un rato viéndolo…
+Luhan ha dejado el grupo+
¿Qué…? Los chicos también se sorprendieron.
Jimin: Eh! Lu se ha ido! :o 15:50
Baek: Hey pesados. Que me he perdido? 15:50
Baek: Coño, Luhan se ha ido? 15:50
V: :/
Jimin: Eso parece, pero porque? 15:51
Baek: Carol, que has hecho? 15:52
"¿Carol, que has hecho?" ¿Ahora la culpa era mía? Me reí con ironía y comencé a escribir, pero un mensaje se adelantó al mío, y otro y otro.
JR: Vaya! Seguro que es por aquella cosa! 15:53
Jimin: De que hablas JR??? 15:54
Baek: Ya tuvo que abrir la boca el cotilla!!! 15:54
Baek: JR, esa persona sigue en el grupo. 15:54
Ya está, ese último mensaje de Baek me había dejado claro algo.
Carol: Si, estoy aquí. Yo no he hecho nada, para empezar. 15:55
V: o_o 15:55
Baek: Ya, ¿entonces porque se ha ido? 15:57
Jimin: Me retiro. No quiero discusiones, si eso me avisáis. Besos! 15:57
Jimin: Tengo que recoger 15:57
No quería seguir leyendo. No quería que Baek me lo echara en cara. Pero, ¿Por qué él? Puse el grupo en silencio y tiré el móvil al sofá. Ahora lo daba vueltas y vueltas y vueltas. Sonó mi teléfono, un mensaje independiente de… ¿V?
V: Carol, Luhan está así por lo que siente por ti. Sé que lo sabes porque
Te lo ha demostrado. Pero no te sientas culpable por ello. 16:00
V: La culpa la tiene Baek, no sé qué le habrá dicho, pero ya sabes que,
A veces me entero de las cosas. 16:00
Vaya… eso no me lo esperaba. Fui a contestar cuando recibí otro mensaje suyo.
V: esta tarde quiero ir a tu casa, necesito hablarte de algo. Sobre las 5 estoy allí. 16:01
¿Qué estaba pasando? Luhan sale del grupo por culpa de la influencia de Baek. V quiere hablar ¿V? ¿Hablar? El mundo se estaba acabando, el dolor de cabeza se intensificó.
Joder… era un problema detrás de otro….
POV. V.
Ya no había vuelta atrás. Dejé el teléfono encima de mi cama y moví las orejas. A veces quisiera no ser tan callado ni tan invisible, seguro que si fuera más hablador y social, la gente se percataría de que no estaban solas cuando hablaban de ciertos temas íntimos.
Me puse la chaqueta vaquera encima de mi camisa de cuadros rojos y negros, metí las llaves en los pantalones vaqueros rotos y cogí la cartera y el teléfono.
Salí de mi casa y comencé a andar con las manos en los bolsillos, hacía algo de frío pero, me daba igual.
La casa de Carol no estaba muy lejos, a unas manzanas pero vivíamos en el mismo barrio, suspiré cuando paré en un semáforo en rojo. Vi que no venía ningún coche y crucé igualmente con mis orejas en guardia.
No paré ni un segundo hasta que llegué al porche de su casa. Me quedé quieto en la puerta, dudando en llamar al timbre durante un par de minutos. Al final cogí valor y llamé. No tardaron en abrirme la puerta, pero no era quien esperaba.
-Hola mudito.- Kris sonrió divertido, siempre me llamaba así.- ¿Qué quieres?
Me contuve para no contestarlo mal, cambié las manos de los bolsillos de adelante, a los de atrás. Oí entonces la voz de Carol preguntando quien era y la vi asomarse por encima del hombro de su hermano, poniéndose de puntillas. Al verme, sonrió, se colocó delante de Kris y agarró mi brazo, invitándome a entrar. Su hermano tuvo que apartarse para que pudiera pasar. Nuestras miradas se cruzaron y casi nos podíamos matar con ellas. Una vez entré, desapareció en la cocina.
Carol me arrastró hasta el sofá y me sentó en él. Me miró fijamente y se fue a la cocina. Resoplé y de repente, una pequeña bola peluda se me echó encima, era ese cachorro tan juguetón, le acaricié y sonreí.
No lo sobé mucho, no me gustaban mucho los perros. Carol llegó al rato con una bandeja y dos tazas grandes, una cafetera y unas galletas. Había traído té negro, mi favorito.
Se sentó a mi lado mientras dejaba la bandeja en la mesa. Entonces el perro se acercó a ella intentando coger las galletas, lo bajó al suelo. No podía subir al sofá por lo pequeño que aún era, así que estaría entretenido intentando conseguirlo.
-Bien, explícame esto.- Carol llamó mi atención y dijo aquellas palabras mientras me enseñaba su móvil.
-¿Qué quieres saber?.- dije mientras cogía la cafetera y servía té en las tazas. Carol parecía nerviosa y no me extrañaba.
-Luhan…- susurró, esa palabra fue suficiente.
-Mira Carol.- quería poder decir las palabras correctas.- Sabes que Luhan y yo somos como hermanos, pero Baek está por encima de mí. En el recreo de esta mañana, cuando estabas con esa chica, los tres fuimos a la biblioteca.
-Si… Me lo dijo Kookie.- asentí con la cabeza.
-Suelo sentarme en las mesas del fondo y ellos unas más adelante. Pensaron que me había ido, ya sabes que aunque esté, parezco no existir al no decir un triste hola.- logré sacarla una pequeña sonrisa.- El caso es que comenzaron a hablar de ti.
-¿De mi…?.- Carol abrió los ojos, parecía sorprendida por mis palabras.
-Solo digo que pocos saben sobre este tema, a no ser que a JR se le haya ido la lengua. Luhan…lleva mucho tiempo enamorado de ti. A Baek no le hizo gracia, ya sabes lo celoso que es con todo el mundo y ha empezado a aconsejarle que se olvide de ti porque tu no sientes lo mismo. Porque no lo sientes, ¿No?
Agachó la cabeza y noté que comenzaba a temblar levemente, mierda, conocía ese estado, se iba a poner a llorar.
-Carol, no…- la rodeé con un brazo y la obligué a que apoyara su cabeza en mi pecho.- Estás empezando a sentir algo, ¿verdad?
Asintió en mi pecho y se pegó a mí, no tuve otro remedio que abrazarla algo más fuerte.
Debía contárselo, no quería sé que comiera la cabeza todos los días pensando que le pasaba a Lu. Siento que sea mi amigo, pero Carol me importaba más.
En ese momento su hermano salió de la cocina y al vernos en ese estado, su radar de protección paternal se activó. Le miré, intentando explicarle con la mirada que ella estaba bien, más o menos. Se largó.
Carol se separó de mí frotándose los ojos, me miró y la sonreí, vi que se sonrojaba, me encantaba cuando lo hacía.
-Gracias TaeHyung…- susurró mi nombre, volé al cielo de una patada.- Te agradezco de verdad que me lo explicaras. Hablé con él hace unos días y aun así… ha estado tan distante…- parecía romper a llorar en cualquier momento.- Ahora lo entiendo todo…
Acaricié su mejilla despacio y después besé su frente con ternura.
-Sabes que haría lo que fuera por ti. Te debo una y bien gorda.- dije sonriendo, recordando el día que la conocí.- Cambiando de tema…
Ella se incorporó y asintió. Sabía que no solo había ido a verla para contarle lo de Luhan.
-He de hablarte de algo un poco… serio.
-¿De qué se trata…?- su voz sonaba preocupada. Cogí aire y lo eché con calma.
-Me voy de la ciudad.
Hubo un silencio y un ambiente incómodo de golpe. Carol se quedó petrificada mirándome. Pobre…le daba una mala noticia tras otra. Pero debía hacerlo.
-¿Qué…? Pero… ¿Por qué…?- estaba confundida.
-Mis padres se están divorciando. Mi hermana y yo iremos con mi madre a la capital.
-¿A la capital? Esto está a varias horas de aquí…- me agarró las manos, notaba como temblaban las suyas.- No, no te vayas. Quédate en casa, tenemos una habitación más, hablaré con Kris…
-No Carol.- acaricié sus manos y las apreté.- No voy a dejar sola a mi hermana con tanto tío salido suelto, y mi madre necesitará apoyo, tienes que entender-…
Me abrazó de golpe. Justo en ese momento el inoportuno de Kris volvió a pasar, volviendo a mirarme. Si las miradas matasen… se separó mi amiga entonces y me miró.
¿Cuándo te marchas…?- susurró.
-En un par de días. Aún estamos tramitando los papeles del apartamento.
Carol agachó la cabeza. Cogí la taza del té y le di un sorbo, ya estaba algo frío.
-¿Lo sabe alguien más…?.- me preguntó y negué con la cabeza.
-Y no quiero que digas nada.- Carol me miró en silencio y asintió despacio.
Me alegró que entendiera que no quería despedirme de nadie. Odiaba esas cosas y no quería causar problemas. Me quité un peso de encima que llevaba cargando varios meses. Mis padres llevaban con problemas ya casi un año, no quería contarlo, no merecía la pena.
Carol me pidió que me quedara el resto de la tarde con ella. Y así estuvimos los dos, sentados en el sofá, abrazados, viendo la tele.
En realidad, había otra cosa que yo quería decirla… ¿sería capaz de declararme antes de irme a la capital?
POV. BAMBAM.
No me apetecía nada seguir tumbado, pero las costillas me mataban cada vez que me movía. Jackson apareció por la puerta con la merienda y sonreí al ver que eran galletas de chocolate con batido de vainilla.
-gracias-me puso la bandeja en las piernas y me miró fijamente, deje la galleta que iba a comer para entrecerrar los ojos.-¿qué pasa?
-Tu amigo Mark-asentí despacio-me besó el otro día.
-¿MARK? Eso es imposible, no se atrevería... ¿fuiste tú?-negó haciéndose el indignado.
-el caso es que quiero alejarlo de mi ¿qué hago?
-ya tienes tus métodos-rió.
-lo sé pero no quiero utilizar mis métodos-pasó un dedo por mi mejilla y me aparte haciendo un gesto de dolor-lerdo...Por cierto Yun está aquí, intenta no tener un orgasmo porque te toque.
-IMBÉCIL-me sonroje porque no solía hablar así, rió y comí una galleta enfurruñado.
Sonreí al ver a YG por la puerta, vestido como era él y con el pelo violeta. Cerró la puerta y vino hasta mi cama para robarme una galleta. Acarició mis orejas y acabe ronroneando con las piernas encogidas.
-¿qué tal?-pregunté frotando la oreja contra sus dedos.
-bien... En clase...-sonrió cuando aparte la bandeja y me puse a cuatro patas por sus caricias. Vi que ponía la bandeja en el suelo, cogí su mano y la puse en mi oreja de nuevo. Rió mientras volvía a ronronear.-¿te gusta?
-Si...-se apartó de mi e hice un puchero, él sonrió ampliamente.
-túmbate que te vas a hacer daño.-cogió mi mochila y saco un papel de su pantalón.-tu amiga Carol me ha dado las tareas... ¿qué... Estas mejor?
-poco a poco, ahora sólo me duele si me doblo o algo así-me senté alisando las mantas.
-¿el sábado te dan el alta?-asentí con una sonrisa-tienes una buena enfermera, a mí me cuido bien...
-¿cuándo? ¿Por qué?-lo miré curioso, sonreía como si viera algo adorable.
-hace un año... Por una pelea que tuvimos...-hice un puchero por imaginarme la escena.-oye, el domingo hay un concierto de un grupo que me gusta mucho... No es nada "horrible" pero creo que te puede gustas.
-¿quieres que vaya contigo? Pero si soy un neko...-sonrió pícaro.
-por eso el sábado te tendrías que venir de compras conmigo.-lo miré sorprendido y él rió, simplemente no podía creer que quisiera que volvieran conmigo.
-¿mi hermano...?-rió y se sentó en el borde de mi cama.
-ya está todo...aclarado-pasé el dedo por su mejilla y él lo agarró con los dientes en un rápido movimiento.
-¿te ha hecho el ese pequeño corte?-asintió suspirando, cogí aire para gritar pero me tapó la boca.
-tu hermano y yo... Teníamos sesiones de sexo y se pensaba que te quería para eso.-me sonroje sólo de imaginarme desnudo delante de él-me golpeó contra la mesa y ya está, ahora todo está bien...
-pefo-apartó la mano y por diversión moví mi cola ya curada hasta su pierna para hacerle cosquillas.
-Bam-alce la cabeza, agarró mi cola y la acarició haciendo que me estremeciera-no juegues a algo que no podrás controlar.
-¿eh?-lo miré desconcertado, vi como lamia la punta de mi cola, aparte la mirada sonrojado por el calor que se situó entre las piernas.
-¿vendrás?-lo miré aún sonrojado-¿al concierto?
-si...-sonrió y se subió a la cama para situar sus piernas a ambos lados de las mías, no rozaba mi cuerpo para nada pero notaba su calor. Acarició mi mejilla tras poner una mano en el cabecero.
-Bamie...-su aliento rozó mi rostro antes de que uniera nuestros labios en un gesto delicado. Me dejé resbalar un poco hacia abajo y él siguió mi movimiento hasta que quedé tumbado. Él había variado su posición poniendo una pierna con la rodilla en el colchón y la otra con el pie, a ambos lados de mis piernas, su mano izquierda estaba apoyando su peso para no caer encima.
Me aparte de sus labios por la falta de aire, sonrió y supe porque cuando noté mi cola enroscada en su pierna, la aparte rápido. Rió acariciando mi mejilla, volvió a besarme y agarré su camiseta con mis manos, me sobresalte al notar algo húmedo acariciando mis labios.
-Yun...-puso su dedo en mis dientes inferiores, lo miré a los ojos y vi el brillo de algo desconocido en ellos.
Cerré los ojos de nuevo cuando volvió a besarme pero me tensé al notar algo metálico en mis colmillos, su lengua estaba en mi boca y no sabía qué hacer. Aparto el dedo de mis dientes. Bajó su mano por mi brazo hasta encontrar mis dedos, los entrelazados con los suyos y puso mi mano a un lado de mi cabeza.
Su lengua movía la mía enseñándome movimientos que me hicieron sonrojar, se apartó y beso mi comisura, bajó dando pequeños besos hasta mi cuello. Solté un gemido cuando noté sus dientes mordiéndome de una forma que se sentía bien. Rió cuando empecé a ronronear y volvió a besarme metiendo su músculo en mi boca, tímidamente probé a meter mi lengua en su boca. Imité los movimientos que había hecho pero me aparte de sus labios sonrojado, me miró y vi un hilillo de saliva que unía nuestros labios.
-eres demasiado bueno...-no entendía sus palabras, sonrió enseñando las encías y pasó el pulgar por mis labios, apartó el cuello de mi camiseta dejando expuesta mi piel en el cuello y parte de mi hombro.
Besó mi cuello de nuevo, noté sus dientes mordisqueando y su pircing cuando subía dando una lamida. Cerré los ojos disfrutando de esa extraña sensación, su mano acarició mi costado pero subió lentamente por mi abdomen, abrí los ojos nervioso y sujeté su mano con fuerza.
-yun... ¿qué...?-gemir cuando mordió un trozo de piel más amplía, fruncí el ceño y se apartó despacio de mi cuerpo.
-cuídate, mañana vengo-señaló la puerta con el pulgar y vi un bulto grande en sus pantalones.-yo...
-ummm... ¿adiós?-asintió y salió de la habitación rápido.
Pegué un gritito contento cuando se fue ¡me había besado de nuevo! ¡Teníamos una cita! por qué era una cita... ¿no? Me sonroje, agarré mi cola y vi la punta húmeda. Me tapé la boca y patalee pero me arrepentí al soltar un buen gemido de dolor.