Capítulo 28: La alianza ***************************
Apenas había llegado a la casa del desconocido que le mando a buscar, hasta cierto punto se sentía humillado de que alguien como Haruka le hubiera corrido como si nada, en su mente siempre había recorrido que el tenía más control sobre Rei que su pareja pero realmente estaba sumamente equivocado, claro que a nadie se lo diría.
El rubio bajo lentamente las escaleras hacia donde estaba el alto peliazul de cabello largo mirándole expectante.
Nagisa simplemente llegó hasta él y dio su mano a ser estrechada, Renjiro dudó pero al final igual estrechó su mano con la del rubio elegante y le siguió tras este haberse dado la vuelta y comenzar a caminar. Un hombre ya viejo los guió al comedor, un enorme comedor lleno de comidas variadas para que eligieran lo que gustasen comer. Renjiro se mantuvo sentado en silencio esperando el momento en que el rubio hablase pero ese no llegó tan pronto como esperaba, Nagisa se mantenía degustando sus platillos dulces mientras Renjiro comía las cosas picantes.
Cuando Nagisa acabó, miró al de pelo azul sonriendo algo enigmático y su mirada le decía que tenía un firme plan.
A puro silencio lo guió hacia su habitación y se sentó en la silla esperando a que el otro ocupara asiento en la cama.
Renjiro no lo hizo, quedo de pie con los brazos cruzados sobre su pecho con incertidumbre y desconfianza, si no hablaba pronto el rubio se marcharía del lugar, sí o sí.
-Bueno- Habló por fin Nagisa alzando la vista hacia el alto peliazul que lo miraba serio.
-¿Qué hago aquí?- Preguntó Renjiro yendo directamente al grano.
-Pues...observé lo que ocurrió en casa de Haruka y pues...te tengo una gran oferta-
-¿Oferta?...habla de una vez- Pidió, no, ordenó el Ryugazaki mayor.
-Bien, esto es lo que quiero hacer, quiero a Rei para mi, no me importa que pase con Haru, mi plan es separarlos, grabaré una cinta donde dos actores, uno vestido como Haru y una chica cualquiera se están besando, se lo mostraré a Rei y yo, como se supone que debía ser, me quedaré con él para consolarlo y viviremos felices para siempre ¡Sin el odioso de Haru!- Reveló.
-Muy bien, entiendo eso pero...¿Exactamente para qué me necesitas a mí?- Cuestiono Renjiro.
-Pensé que serías tan inteligente como mi Rei-chan pero veo que me equivoco, bien, no importa, te necesito para que me ayudes a que Rei se crea la mentira, si eso sucede caerá más rápido en mis brazos...- Respondió sonriendo de forma enigmática y tenebrosa.
Renjiro lo pensó, ¿Vendería a su hermano con un chico sumamente raro que él apenas y conocía?, bueno, era mejor que dejarlo con Haru pero ¿Qué pasaría con su sobrina Kaori? Momento, ¿Realmente le importaba lo que pasara con ellos? Entonces recordó sus verdaderas intensiones con Rei, a él no le importaba su sobrina aberrante, no le importaba lo que ocurriese con ese nadador de quinta que había conducido a su hermanito por mal camino, no, el quería regresar a sus viejos hábitos y si podía llegar a un acuerdo con ese pequeño rubio de lindos y afeminados rasgos para lograrlo entonces lo haría. El peliazul sonrió y sonrió con malicia, de forma poco amena y con doble intensión, una sonrisa que hizo feliz a Nagisa.
-Claro que obtendrás lo que gustes, yo puedo conseguirte lo que quieras, entonces...¿Aceptas la oferta?- Preguntó Nagisa sonriéndole y poniendo esos ojos carmín tan brillantes que tenía.
-Bien, pero el precio que pido es alto- Mencionó por fin Renjiro.
-Puedes pedir lo que quieras- Dijo Nagisa acercándose a el con algo de provocación.
Renjiro se sonrojó pero volteó la vista antes de cambiar de posición y tomar la mano del rubio para después darle una vuelta.
-Me halaga que creas que te voy a pedir algo así conmigo y que estés dispuesto a cumplirlo pero no, yo quiero algo...con Rei- Respondió a lo que Nagisa paró en seco y lo miró de forma gélida.
-Entonces ¿Por eso te tiene miedo?- Le preguntó -Lo haré pero quiero que me cuentes que le hiciste para que el no pueda ni mirarte sin intentar correr-.
El de cabello azul soltó una risa siniestra que le puso los pelos de punta al rubio sin embargo luego tomó asiento en la cama y esperó a que el rubio ojicarmín hiciera lo mismo.
-Bien, te lo diré, hace tiempo, cuando Rei apenas siquiera cumpliría 12 años yo...como decirlo sin que suene tan brutal...antes había estado en una fiesta y las cosas se salieron de control, me pasé de copas, mis padres habían viajado y yo recordaba haber dejado a Rei dormido -Relató mientras Nagisa lo miraba de la misma forma que antes, gélido -Cuando llegué Rei intentó reprenderme pero en el estado de ebriedad en el que me encontraba me fue irritante, no fui consciente de mis actos y terminé..."arruinando" la vida de mi pequeño hermano después de haber ...abusado de él- Terminó de decir, Nagisa frunció el ceño ante eso pero suspiró relajado, si quería que él estuviera a su servicio debía permitir que lo ocurrido antes volviera a ocurrir...sin poder evitarlo aunque podía hacer algo importante, podía hacer que use protección porque el único de ellos que podría tener un hijo con Rei iba a ser él, claro, descartando a Haruka y a la hija de éste, Kaori.
-Bien, acepto, es un trato- Respondió Nagisa extendiéndole la mano a Renjiro quien la tomó y con ello cerró el trato.
Ambos sonrieron a complot, uno muy peligroso para el pobre Rei Ryugazaki.