Mis recuerdos de ti por Secreto

Harry Potter, mejor dicho, Harry Malfoy, miró de reojo a su ahora marido Draco Malfoy, verle dando besitos a su segundo hijo Abraxas era divertido, y esa escena llevó a Harry a recordar cómo se fue enamorando de este hurón y cómo en sexto decidió declararse.
En el primer curso, Harry rechazó la mano que le extendió Draco, aunque se arrenpintió después, verle cómo pronunciaba su apellido por esa boca y esa sonrisa coqueta, decidió con toda su alma poder retroceder en el tiempo y estrecharle la mano.
En el segundo curso, se quedó embobado viendo la manera de montar en escoba de Draco, incluso se alegró de que el hechizo de Ron no le diera.
En el tercer curso, se sonrojó al verle tan cerca de él y qué decir cuando se le rompió el brazo a Draco la alma se le cayó al suelo y casi se cabreó cuando Hermione le dio ese puñetazo.
En el cuarto curso, se moría de vergüenza al estar tan cerca de él y casi se suicida al saber que ha sido tan estúpido por no haberle pedido que sea su acompañante del baile. Y cuando vio a Draco bailar con Pansy, quiso lanzarle un avada y gritarle:¡Draco Malfoy es mío!
En el quinto curso, se mostraba un poco celoso de Ron, ya que él puede ver más a menudo a Draco por ser prefecto y él no, para una vengüenza, decidió no protestar cuando éste le imponía un castigo. Y cuando le vio venir con esa sonrisa típica, creía que estuvo a punto de desmayarse.Y sorprendió a todo el mundo negando que haya visto a Lucius Malfoy en el ataque al ministerio y lo defendió. ¿Por qué? Porque está enamorado de su hijo Draco.
En el quinto curso, se quedaba satisfecho con verle preparar cualquier poción, verle con ese traje negro impecable que le ponía caliente durante noches sin sueños. Jamás creyó poder decir al Slytherin sus sentimientos, pero al verle llorar en el servicio, ya no pudo más, no soportaba verle llorar, nunca.
Sin darle tiempo a reaccionar, se le tiró encima, empezó a besarle con torpeza y se sorprendió que el rubio le respondiera.
Esa noche fue la mejor, tuvieron el mejor sexo salvaje y brutal de sus vidas, esa noche antes de dormirse le susurró al oído:'Te quiero, Draco'
A la mañana siguiente, todo era normal, ellos siguen siendo ellos, se sentía solo y frustrado, porque creía que Draco tomó su declaración como tonterías.
Hasta unos días, empezó a tener náuseas, vómitos y muchas, muchas ganas de comer chocolate, sus hormonas le afectaban tanto que decidió ir a la enfermería.
La noticia de su embarazo le dejó en shock, sabía que hubo casos de embarazos masculinos, pero que él estuviera embarazado, es un poco...De sorpresa no.
No sabía cómo decirle a Draco que estaba embarazado, pero por sopresa el rubio se lo tomó muy bien, empezaron a salir aquel día, con el permiso de Dumbledore se trasladó a Slytherin.
Todavía recordaba con gracia cuando se presentó ante todo Griffindor con cinco meses de embarazo y la cara que puso Ron al saber que los leones perderían a su buscador estrella.
Y qué decir del día que se casaron, estaba ya a punto de dar a luz, sin embargo Draco insistió, después de la ceremonia sentía fuertes contracciones en la barriga, agarró a Draco y le susurró que su hijo venía en camino.
El follón que se montó, Narcissa corriendo de un lado para otro, Lucius llamando a Severus para que atendiera a Harry, era para reírse, posteriormente, claro.
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-¿Qué estás pensando?-unos brazos le rodeó por la cintura y preguntó,
-Pensando cómo conquisté a uno de los príncipes más guapos y sexy de nuestro tiempo-Harry sonrió y le dedicó una mirada de amor.
Sí, esta sería el final más feliz, con su hijos Scorpius, Abraxas y su hija Lily, y Lucius y Narcissa felices a su lado, sí, es muy feliz con Draco.