Anteriormente.
Ignoré las lágrimas que salían de los ojos de Ai y seguimos caminando hasta que llegamos frente a casa de Haruka, tocamos el timbre y frente a mí apareció la cara de Haru.
- Bienvenidos, pasen. – Me quedé perdido en sus ojos azules… ¿Hasta cuándo podría deshacerme de estos estúpidos sentimientos?.
Rin pov.
Entramos, saludé a Makoto y a Nagisa, mismo que nos saludó con efusividad.
Ai intentaba actuar normal, pero yo sabía que le dolía el ver a Momo pegado con el enano idiota. Mi mirada se desvió buscando a mi bella mariposa, pero no estaba ahí. Saqué mi celular apunto de mandarle un mensaje cuando el timbre sonó y salí detrás de Haruka a abrir la puerta esperando que fuera Rei, pero en el umbral de la entrada estaba Sousuke; fingí una sonrisa mientras él le entregaba una bolsa con un par de botellas de vino a nuestro anfitrión, antes de que pudiera reaccionar, mis labios fueron atrapados por los suyos y me tomó de la cintura para entrar.
Al igual que el resto, nos sentamos alrededor de la mesa y tenía a Sousuke demasiado pegado a mí como para poder escribir un mensaje sin que pudiera leerlo. Estaba alterado, deseaba saber qué sucedía con Rei y por qué se había retrasado. Mi ansiedad era evidente, tanto que hasta Makoto se atrevió a preguntarme qué sucedía, respuesta que evadí diciendo que solo estaba algo cansado.
Pasaron 2 horas y mi mente seguía en otro lugar mientras el resto, hasta Ai se divertían y conversaban armoniosamente. No podía más, me levanté, me dirigí al baño y escribí un mensaje.
- Rei, estoy en casa de Haru, ¿dónde estás? ¿estás bien? ¿por qué no estás aquí?
Era normal que me preocupara por mi alumno y ahora “amigo”, ¿cierto?
Pasaron algunos minutos durante los cuales no apartaba mi vista de la pantalla deseando una pronta contestación hasta que por fin me apareció el tan ansiado “escribiendo…”
- No sé de qué hablas, estoy justo aquí.
En eso, sonó el timbre y casi caigo de rodillas debido al repentino aumento de los latidos de mi corazón. A lo lejos escuché la voz de Rei y por fin salí del baño. Caminé hacia el recibidor y saludé a mi alumno lo más normal que pude. Tomé asiento junto a Sousuke, pero un poco más lejos de él y a mi lado se sentó Rei quedando frente al enano idiota quien nos dedicó una sonrisa traviesa.
La reunión me resultó más amena hasta que sacaron las botellas de vino. Nagisa tuvo la brillante idea de que jugaramos “verdad o reto” para que bebiéramos como si no hubiese un mañana y así sucedió.
Las preguntas eran bastante idiotas y otras me resultaban un poco fuera de lugar.
Nagisa: -Es mi turno de preguntar y mi víctima será… Rin.
¡Maldición! Mentiría si dijera que mis manos no comenzaron a sudar, mi mente me presentó todas las posibles preguntas que podría hacerme y las posibles respuestas que podría darme. Tomé un sorbo de mi vaso para fingir que estaba bien y lo miré desafiante.
Rin: -Adelante, pregunta lo que quieras. –El enano esbozó una sonrisa maligna.
Nagisa: -¿Con quién fue tu primera vez y cómo estuvo?
Esa pregunta era tan idiota como él; no tenía caso que la hiciera, hasta Makoto conocía la respuesta y por supuesto Sousuke, pero entonces… ¡Oh, maldito enano! Había una persona presente que no lo sabía y ese era justamente Rei.
Rin: -Con Haruka y… Éramos bastante torpes, para ambos fue nuestra primera vez así que… Digamos que fue un encuentro un poco accidentado. –Intenté responder con la mayor tranquilidad del mundo y sin titubear. –No es como si no lo supieras… -Tomé un sorbo de mi vaso y contraataqué. –Bien, Nagisa, mi turno… Misma pregunta.
Me regodeé mirando al enano idiota nervioso.
Makoto: -¡Es cierto! Nunca nos has dicho con quién fue tu primera vez, Nagisa. Es hora de que reveles el secreto.
Todo el tiempo había evitado observar a Rei para no verme tan obvio, pero cuando lo hice, lo encontré con la cabeza gacha ¿por qué? Después tendría que hablar con él.
Nagisa: -Este… Prefiero reto.
Haruka: -No seas cobarde, Nagisa; ya es hora de que nos digas con quién fue, nadie lo sabe.
Nagisa: -Yo lo sé y esa persona también, con eso es suficiente.
Todos estábamos expectantes a que Nagisa nos dijera su secreto; lo presionábamos para que respondiera. Yo estaba bastante divertido, era una buena venganza por haber hecho que mi mariposa hiciera esa expresión cuyo significado desconocía, pero en ese momento me encontré con un intercambio de miradas con algo de significado ¿con Sousuke? ¿en serio?.